Wheein y Hwasa se encontraban en su dormitorio sin energía y con la moral por los suelos, como de costumbre la una se recargaba en la espalda de la otra, nada les estaba resultando como habían planeado.

 

Momentos atrás se dirigían hacia el cuarto de la monja para vigilarla cuando de la nada apareció un cambiaformas en el pasillo, por las acciones de este era evidente que no estaba ahí buscando a la monja si no a ellas, en cuanto sus miradas se cruzaron los brillantes ojos del sujeto vieron con odio a Hwasa quien la noche anterior había asesinado a sangre fría a un licántropo. 

 

El estado de alerta en el que se encontraban desde la noche anterior las ayudo ya que en cuanto pronunciaron las palabras umbra videtur una de sus sombras apareció, tacleo al sujeto y lo persiguió por el pasillo, para su mala suerte este se dirigió exactamente hacia el cuarto de Solar, justo cuando esté saltaba por el balcón la monja salió de su cuarto logrando ver todo el espectáculo, no les quedó de otra más que inventar una patética historia de cómo habían llegado ahí para que les creyera y aparentemente había funcionado pudiendo regresar a su cuarto sin mayor cuestionamientos. 

 

No podían permitir que algo así volviera a ocurrir, colocar sellos al rededor de la puerta al igual que en los pasillos que permitían accesar al cuarto era la única solución temporal que encontraron, se encargarían de eso la mañana siguiente ya que por ese día dudaban que alguien más se atreviera a atacar sin arriesgarse a ser descubierto.

De igual manera les estaba pareciendo inconveniente que la madre las mirara con recelo, como si sospechara de ellas. Ahora que debían vigilarla más de cerca era lo que menos necesitaban, eso y los 2 días de descanso que tendrían a mitad de semana. Parecía que el mundo se estaba empeñando en hacerles la vida difícil, si no cumplían la tarea de sus padres les habían ordenado perderían acceso a muchas de sus comodidades y privilegios. 

 

La única ventaja que tenían si Solar decidía salir ese par de días era que tener bastante tiempo como para planear alguna manera de atraer al demonio que buscaban y si su suerte mejoraba acabar con ella.

 

***

 

El día transcurrió rápidamente y sin novedad alguna Moonbyul prácticamente no tuvo tiempo de cruzar palabras con el dúo lo que no le importó demasiado ya que su mente estaba en otro lado.

 

Eran las 7 de noche en punto y Byul seguía postergando el ir a la habitación de la monja estaba sumamente nerviosa porque planeaba proponerle pasar juntas los 2 días libres que tendrían. Había preparado todo con antelación, hizo reservaciones y hablo con Wheein y Hwasa sobre su ausencia ese par de días, les habría dicho a donde planeaba ir pero no podía arriesgarse a que las describieran por lo que prefirió decir que visitaría a sus padres, esperaba con todo su corazón que Solar aceptara.

 

Como de costumbre Byul entró por la ventana, la monja se encontraba durmiendo pacíficamente en la cama, no pudo evitar acercarse y acariciarle el rostro mientras sonreía estúpidamente, Solar era lo más hermoso y puro que tenía en la vida y apreciaba cada pequeño momento como ese. 

Desde que había entrado al cuarto la joven sentía algo diferente como si un aura distinta lo rodeara, se levantó de la cama tratando de no despertar a la monja y comenzó a caminar lentamente hacia la puerta, cuando estaba a punto de tocarla Solar la llamó desde su cama, se tallaba los ojos y le sonreía tiernamente, definitivamente una de las imágenes más tiernas que había visto en su vida pronto se olvidó de la puerta y se aventó en la cama, empezó a abrazar y a hacerle cosquillas a la monja hasta que está la tiró, cuando logró levantarse sacudió su ropa tomó a Solar de la nuca y la besó con una gran sonrisa. En cuanto sus labios se separaron se miraron como si no existiese nada más en el mundo, Moonbyul se sentía en las nubes y las palabras salieron de su boca sin darse cuenta.

 

"¿Qué opinas de Kioto?"

 

"¿Kioto?... Es una cuidad hermosa, llena de historia y paisajes hermosos, definitivamente está en mi lista de lugares por visitar algún día. ¿Por qué la pregunta?"

 

"¿Qué contestarías si te digo que tengo 2 boletos para mañana temprano con destino a Japón.  Aceptarías acompañarme a un lugar hermoso donde nadie nos conoce?"

 

Solar estaba sin palabras, Byul estaba sentada junto a ella tomándola de las manos haciéndole una de las propuestas más románticas que había escuchado en su vida pero le parecía prácticamente imposible aceptar. Era un gesto excesivo económicamente hablando y Solar aún no contada con el capital ni para pagar un cuarto de lo que costaría el viaje, ademas el ir a un viaje así hacía más real su estatus de pareja del cual de ninguna manera se arrepentía pero la hacía sentir como una completa hipócrita.

 

"No lo sé Moonbyul, no estaría bien. No tengo el dinero para pagarte y sabes que lo que estamos haciendo está mal"

 

"Te hice una promesa, no va a pasar nada que no quieras entre nosotras es un viaje como cualquiera y por el dinero no te preocupes algún día podrás pagarme invitándome a algún lugar. Te lo suplico. Di que sí, ya está todo listo vayamos o no no recuperaré mi dinero" Moonbyul la miraba con ojos de de cachorro triste, Solar quería negarse pero le era imposible con las palabras y miradas de la joven.

 

Después de varias súplicas Solar terminó aceptado la propuesta de su alumna, acordaron irse en coches separados y verse en el aeropuerto. Debido a lo inesperado de su salida tuvo que hablar con la madre superiora y solicitar un chofer que la llevara muy temprano hasta la cuidad, en cuestión de un par de horas logró arreglar todo. Cuando regresó a su cuarto encontró a Moonbyul dormida, la miró por unos segundos y suspiro profundamente, activó la alarma de su celular y se recostó a lado de la joven sin despertarla. La paz y el amor que sentía con el simple hecho de tenerla cerca la hacía demasiado feliz, probablemente era ridículo sentirse así en tan poco tiempo pero desde que sus mirabas se cruzaron supo que Moonbyul era el amor de su vida, escuchando los latidos de la joven cerro los ojos y se quedó profundamente dormida.  

 

***

 

La mañana había llegado y ambas se preparaban para le viaje, estaba sumamente emocionadas por poder pasar un par de días juntas sin tener que preocuparse de quienes las rodeaba, llegaron al aeropuerto individualmente y se encontraron dentro del avión, no podían evitar sonreír como niñas que salen de vacaciones por primera vez. El vuelo tomó aproximadamente 3 horas en llegar a Tokio ambas cargaban una simple maleta de mano y vestían abrigadas, después de desayunar tomaron el tren bala hasta Kioto lo que les tomo casi el mismo tiempo que el viaje en avión.

 

Solar había tenido dudas durante el viaje, sobre si todo estaría bien o si alguien las reconocería, sabía que todas sus dudas eran infundadas y que probablemente pasaría un par de días hermosos con su joven pareja pero la culpa era su constante persecutor.

En cuanto bajaron del tren y llegaron hasta la cuidad todos sus pensamientos negativos se desvanecieron, la cuidad era más hermosa de lo que aparecía en los libros árboles de cerezo retoñaban por todos lados, el color rosa llenaba la cuidad y cada respiro llenaba su corazón de felicidad. Solar jamás imaginó llegar a ver con sus propios ojos algo así el ser abandona desde pequeña hizo que sus esperanzas se limitaran a sobrellevar la vida y esperar lo mínimo de ella, sin darse cuenta sus ojos se llenaron de lágrimas, cuando sintió que la mano de Moonbyul tomaba la suya fluyeron aún más lágrimas, su mirada era borrosa y lo único que logró hacer fue abrazar a la joven, en ese momento más que en todos los anteriores se dio cuenta de lo fácil que le era respirar desde que Moonbyul había llegado a su vida, de lo vacía que se había sentido antes, dando pasos por la vida sin sentir realmente. Los brazos de la joven la rodeaban y la abrazaban cada vez más fuerte, como si entendiera la sobrecarga de emociones que estaba teniendo, como si no necesitara de palabras para saber lo que le afligía.

 

Permanecieron así un par de minutos hasta que Solar recuperó la compostura, miró un poco a su alrededor y vio un árbol de cerezo enorme a unos metros jalo a la joven y ambas empezaron a correr hacia el, miro a su alrededor y cuando se aseguró que nadie pasaba empujó a Moonbyul contra el árbol y la besó, sus maletas cayeron al suelo y la joven la tomo fuertemente de su abrigo, las hojas de cerezo caía a su alrededor, cada que se separaban para respirar podían ver su agitado aliento por el frío, cada roce de sus labios, cada caricia, cada segundo era perfecto y único, ambas deseaban poder estar así por siempre. Moonbyul detuvo el beso y colocó su frente contra la de la monja "me gustaría seguir así por un par de minutos... o siglos mas pero perderemos nuestra reservación en el hotel si no llegamos en 15 minutos" Solar la miró y la besó rápidamente una vez más, recogieron sus maletas y se dirigieron al hotel,  después de todo aún tenían un día completo para seguir disfrutando de la hermosa vista y de la compañía de la otra.

 

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Quería actualizar desde el lunes pero moría de gripa. Disculpen la falta de acentos pero da mucha flojera ponerlos cuando escribes en iPad 😓😓

 

Si, si, si sé que es probablemente es algo exagerado pero si fuera rica haría ese tipo de cosas jajajja y Moonbyul siendo una mujer sensual y caballerosa también jajaja

 

Este y el siguiente capítulo será puro fluff porque las relaciones de manitas sudadas son lo mío 😂😂😂 el llegara eventualmente Jajajaja no olviden que mi historia no está en la sección [M].

 

Y por último a veces investigando para esta historia acabo teniendo pesadillas ajjaja espero que aprecien lo que incluye cosas de magia y demonios 😭, porque dios sabe que las páginas de internet te llevan a páginas perturbadoras Jajajaja.

 

En fin sigan comentando lo aprecio mucho, son lindas y motivadoras las adoro 😘