Tiffany dio un largo suspiro al entrar a sí edificio y camino por el vestíbulo hasta llegar a los ascensores.

Había tenido un día maravilloso, por fin había podido trabajar con su fotógrafa favorita. Llevaba tiempo luchando por ello, pero no se sentía preparada para hacerlo, sabía que en algún momento su oportunidad llegaría.

La firma “Kim” era muy famosa en ese medio, las modelos que ella tenía eran guapísimas, tenía listas y listas de mujeres que querían trabajar con ella y Tiffany sabía que si era la mejor en su trabajo tarde o temprano la firma de Taeyeon la buscaría.

Temprano llego la invitación.

Salió del ascensor y se acercó a la puerta número 514. Revolvió entre su bolso en busca de la pequeña llave.

Sabía que Alexander aún no estaba en casa porque estaría en una cirugía de corazón abierto como parte de sus clases. Lo conocía desde que los dos tenían 11 años y habían sido grandes amigos, hasta que a los 17 comenzaron una relación que les había resultado de maravilla. Alexander le había propuesto matrimonio un mes atrás, cuando se mudaron a su nuevo departamento.

Tiffany encontró la llave y entro a su departamento. Dejo caer su maleta en el piso y avanzo hasta la ventana que estaba cubierta por una cortina blanca.

Abajo frente al edificio aún estaba el automóvil de Taeyeon.

La modelo observo el auto inmóvil por unos segundos. Saco su celular de su bolso y busco el número de la Taeyeon entre sus contactos. Habían intercambiado números en la cena, lo cual ahora era maravilloso.

"Hey." Escucho la voz de Taeyeon a través del celular

"¿Estás bien?" Le pregunto Tiffany sin saludar "¿Quieres subir?"

Tiffany esperaba que Taeyeon le respondiera que sí, así tendrían más tiempo para platicar y divertirse como lo habían hecho en la cena.

"Estoy bien." Le respondió la fotógrafa "Sólo quería asegurarme de que llegarás bien a tu casa."

La modelo cerró los ojos e hizo una mueca.

"Que descanses Tiffany, nos vemos el Lunes." Le dijo Taeyeon y colgó la llamada.

Tiffany observo por la ventana como el automóvil i8 se ponía en marcha hasta desaparecer doblando en la esquina.

Sí, su día había sido maravilloso pero no sólo por haber cumplido su sueño de trabaje con la firma Kim, su día había sido maravilloso porque pudo conocer un poco más de cerca a la fotógrafa más prometedora del país en esos momentos, porque pudo divertirse a su lado y ahorasabía que no sólo era una talentosa artista, sino una buena amiga, sabía que podía entablar una hermosa amistad con ella.

Tiffany se desvistió lentamente frente al espejo y se quedó observando su reflejo antes de estirar su mano para abrir la llave de la regadera.

Su rostro demostraba la gran felicidad que sentía en cada parte de su cuerpo. Se sentía realizada.

Tomo una ducha con agua helada, cortesía del calor que hacía esa noche en San Diego. Relajo sus músculos lentamente hasta que poco a poco sintió como sus párpados comenzaban a cerrarse.

Cerró la llave y fue hasta su habitación, donde se puso su pijama veraniega color rosa y se acostó en la cama con su iPhone en las manos. Tenía un mensaje y rápidamente lo abrió una sonrisa se dibujó en su rostro al leer el contenido del mensaje.

"Hable con el guardia del estudio, tu automóvil estará bien hasta que yo aprenda un poco de mecánica y te pueda ayudar a sacarlo de ahí. Taeyeon."

Tiffany comenzó a teclear con r