Storyteller

Jessica, Seohyun, Yoona, Natalie y Naomi se marchaban esa tarde. Nana en cambio había salido la noche anterior.

Taeyeon había pasado despierta casi toda la noche pensando en lo que la rubia le había dicho. Sabía que sentía algo por Tiffany, sabía que algo era diferente pero sola una vez llego a pensar que la amaba, y luego todo fue turbio entre ambas así que se había forzado a olvidar esos sentimientos, o al menos a intentar ahogarlos con alcohol.

Nana había dado en el punto, y aunque parecía decepcionada porque no había sido ella la elegida, Taeyeon sabía que la modelo estaba tomando las cosas con calma. No había ido a golpear a Tiffany como lo imagino o hizo un escándalo en el hotel como solía hacerlo, se había marchado dejándola sola con sus pensamientos. Tal vez esa era la forma de Nana de vengarse, dejándola sola sabiendo que Tiffany no le correspondía sus sentimientos.

Taeyeon despertó después de dormir sólo 3 horas que habían parecido 5 minutos. El libro que había intentado leer toda la noche estaba sobre su pecho abierto en una página cualquiera y su celular seguía apagado. Dio gracias al cielo que era su día de descanso y podría quedarse en su habitación de hotel tanto como quisiera, o salir a pasear por la ciudad antes de volverse loca gracias a sus pensamientos.

Taeyeon Tomo una corta lucha y salió de ahí tan rápido como sus pensamientos con respecto a Tiffany habían aparecido en su mente. Ni siquiera volteo a ver la puerta de la modelo al salir.

Las calles de New York estaban llenas y Taeyeon no pudo estar más feliz de que los fotógrafos no son celebridades realmente, porque así la gente no sabía quién era ella, solamente era una mujer más en esa enorme ciudad.

Encontró un Starbucks en medio de su camino a la nada, sonrió agradecida de haber llevado su libro con ella. Entro en la cafetería que sorprendentemente no estaba tan llena como ella lo imagino. Después de pedir su habitual café frío, Taeyeon ocupo una de las mesas exteriores. Saco su cajetilla de cigarros, un encendedor y su libro de su mochila negra. Podrían haber sido horas las que estuvo ahí leyendo tranquilamente mientras tomaba tanto café como fuera posible. Después del tercer café, levantó la vista cuando alguien movió la silla de madera de su mesa y se sentó frente a ella con un vaso de café frío en sus manos.

Taeyeon sonrió al reconocer de inmediato a la persona que había llegado. Cerró su libro.

"New York es muy pequeño al parecer." Dijo Sebastián Green.

"Lo es." Contesto Taeyeon "¿Qué estás haciendo en la gran manzana?"

Sebastián le sonrió cálidamente, el chico había sido linda con ella y habían conversado muy bien la primera y única vez que habían conversado.

"Estoy trabajando aquí." Contesto el chico bastante orgulloso y emocionado de hablar de él mismo "¿No te lo dijo Heechul?"

Taeyeon negó con la cabeza y le dio un pequeño trago a su café "He estado algo distante las últimas semanas.

"Bueno, tuve una filmación aquí." Dijo él con tranquilidad "Y Hee consiguió a alguien más."

"Oh." Dijo Taeyeon no sabiendo que más decir con respecto a eso.

Llevaba semanas sin hablar con sus amigos de lo que pasaba con ellos, ni siquiera sabía lo que sucedía con ella misma.

"Pero no pongas esa cara." Siguió el chico y le dio un trago a su café

"Somos amigos, seguro se alegrará de que no hayamos encontrado."

"Me alegró." Dijo Taeyeon con una sonrisa sincera.

Sebastián era en realidad uno de los pocos chicos que le agradaba, era divertido e interesante, a puesto por supuesto y bastante amable. Ella hubiera fraseado que las cosas entre él y su mejor amigo hubieran funcionado realmente.

"Creo que debería irme." Dijo Sebastián después de unos minutos "Oh, un amigo va a iniciar una película en algunos meses, si te interesa podría recomendarte, así tal vez te adentres en la industria del cine."

Taeyeon asintió con la cabeza entusiasmada por la idea, tal vez ese era su más grande sueño en la vida y ahora tenía una pequeña oportunidad ahí "Me