-…[..]… Y luego comencé a trabajar en el NYD, luego vino el programa en la radio, hice un post-título de periodismo literario y ahora mismo estoy en medio de un libro.

-Oh, vaya Srta. Hwang, parece ser que es una persona bastante ocupada

Taeyeon y Tiffany iban caminando por la vereda en dirección a sus edificios. Cuando salieron del supermercado, se despidieron y comenzaron a volver a sus departamentos, pero entonces, se dieron cuenta que iban caminando hacia la misma dirección. Con una risa tonta comenzaron a caminar juntas con las bolsas en sus manos. La productora de Taeyeon le había alquilado un sitio en un edificio cerca de Tiffany, exactamente cinco cuadras más hacia el este.

                -¿Qué dijimos sobre el “Srta. Hwang”? –La castaña la miró con la ceja alzada-

                -Lo siento, pero me es difícil tutearle. –Contestó tímida Taeyeon – ¿Quizás más adelante?

                -Vale, pero que sea pronto –Tiffany rodeó los ojos – Oye, y.. uh.. ¿por cuánto te quedas?

                -Bueno todo lo que duren las grabaciones, luego viene la promoción, entrevistas y todo eso… creo que será una larga temporada

                -Supongo que ya has conocido a tus compañeros de trabajo

                -Uhmm sólo al protagonista masculino, el que será mi pareja en la ficción –La cantante se encogió de hombros – La verdad es que no he leído el guión

                -¿Has aceptado ser parte de una serie de televisión sin saber la historia siquiera? –Tiffany la miró con la ceja alzada –

                -¿Supongo..?

                -Bueno, para que te vayas enterando –Rió Tiffany – Una de tus compañeras de elenco es mi compañera de piso

                -¿De verdad? –Su boca formó una mueca que le pareció adorable a Tiffany – Debe ser agradable… Si es su compañera de piso, ¿supongo que son amigas?

                -Jessica Jung, una chica de mi porte, pelo castaño claro, mirada matadora y buen sentido del humor. Y sí, mi mejor amiga. Casi hermana.

                -Parece ser una chica amable –Taeyeon sonrió –

Siguieron caminando por la vereda hacia los edificios que comenzaban a acercarse. La entrada de un gran edificio rojo con blanco, con un ambiente muy familiar, hizo parar a Tiffany.

                -Bueno, creo que aquí llego yo. Aquí vivo –Apuntó con su cabeza hacia la residencia – ¿Tú vives cerca de por aquí?

                -Uh, sí, debo caminar algo más –Taeyeon levantó el dedo hacia la vereda – Ha sido bueno verla Srta. Hwang.

                -Demonios Taeyeon, dime Tiffany. –La chica gruñó fastidiada – No estamos trabajando –Sonrió –

                -Tiffany, una vez más lo intentaré –Taeyeon asintió y luego miró sus pies – Bueno, supongo que nos veremos por ahí ..

                -Emm... ¿no quieres pasar? Digo, he comprado la cena y de todas formas Jessica no estará… y no podré con tanta comida –Soltó una risa al final y Taeyeon miró sus bolsas y luego hizo una mueca con los labios pensando –

                -Bueno… creo..creo que podría ser, pero hoy me resulta imposible –La cantante medio sonrió tímida– Es tarde y necesito seguir ordenando mi departamento si quiero dormir sobre una cama hoy.

                -Oh, está bien… Supongo que nos veremos luego. –Tiffany se despidió con la mano de la cantante y caminó hacia su edificio.

Taeyeon se la quedó mirando hasta que se perdió dentro. Suspiró y luego se maldijo internamente. “¡¿Por qué rechacé la idea?!.. ¿¡Y por qué la sigo mirando?! Date la vuelta Taeyeon, camina hacia tu casa, eso es, así, un pie y luego el otro… ¿Por qué me siento tan idiota?”

Para cuando llegó a su edificio dejó la comida congelada en el microondas para cocerla mientras seguía ordenando sus cajas. El departamento era bastante amplio para una sola persona. Poseía cocina, comedor y una amplia sala. Luego le seguía un corredor que se dividía en tres piezas y dos baños.

Cuando tuvo su comida lista, se sentó sobre el suelo en la sala con el portátil frente a ella. Casi al instante le entró una llamada al computador.

                -Yuri –Contestó con la boca llena – ¿¡Qué mierda haces despierta tan temprano?!

                -Estoy alistándome para una reunión con la agencia, ayer con la bomba que soltaste por internet dejaste un poquito la cagada –La miró con reproche – ¿Por qué no me avisaste? ¿Y por qué no me contestaste ninguna de las llamadas al celular?

Taeyeon rodeó los ojos y suspiró tragando otra cucharada de lasaña.

                -Lo siento, pero fue un impulso. Me di cuenta que necesitaba emitir alguna declaración por mis fans. ¿Está muy la cagada en la agencia?

                -Es un jodido caos, los superiores me mandaron a esta reunión para discutir tu asunto

                -¿¡Mi asunto?! –Taeyeon abrió los ojos como plato – ¿Tú…tú crees..?

                -No, no te van a expulsar. No lo permitiré.

                -Eso no me tranquiliza, sabes que si ellos quieren pueden dar por terminado el contrato

                -No lo permitiré –Repitió la morena a través de la pantalla– Escucha, me alegro de que hayas hecho el comunicado, pero deberías haber encendido tu celular. Estaba preocupada, ni supe si habías llegado bien a Estados Unidos.

                -Lo siento, he llegado hace unas horas atrás y olvidé que había apagado mi celular, además que me hizo bien. Pude estar tranquila por unas horas.

                -¿Prometes hablar conmigo cuando quieras hacer algo con tu imagen pública? De verdad Tae, me tuviste hasta tarde con llamadas telefónicas desde programas y de la agencia. Se supone que has quebrantado un punto del contrato.

                -Ya estoy en el infierno –Contestó encogiéndose de hombros Taeyeon – Además, probablemente me retire de la música ¿quién sabe?

                -¿¡Cómo?!

                -No lo sé, quizás no fue buena idea salir del armario.

                -Wow, wow, wow, para ahí –La interrumpió – Si algo de bueno hay en todo esto, es que al fin te has aclarado. ¿Qué importa lo que suceda?

                -Bueno, partiendo, me pueden echar.

                -No lo harán. ¿Qué no he dicho que yo no lo permitiré?

                -A veces, no se puede hacer nada Yul –La Rubia la miró sonriente y se mordió el labio dejando el plato de comida a un costado – Mira, es sólo una idea que se me viene rondando en la cabeza, quizás sólo sea eso, una idea. No te preocupes y ya vete

                -Espero que no sigas pensando así –Por la pantalla se vio a Yuri recoger su bolso y chaqueta – Me voy, te escribiré un correo apenas termine la reunión y sepa con certeza el ambiente que está por acá. Tú disfruta y relájate ¿si?

                -Eso definitivamente haré.

Cortaron la llamada y Taeyeon se levantó a lavar su plato. Durante el resto de la noche terminó de ordenar y cuando el sueño no le pudo más se tiró a la cama. La conversación con Yuri le quedó en la cabeza. Debería estar ardiendo en las mentes de los superiores y Yuri debería estar con un dolor de cabeza insoportable. “No fue buena idea, claro que no… ahora lo perderás todo”

La idea de que probablemente ahora venía el fin de su carrera le atemorizaba mucho, la pesadilla principal de su vida estaba a punto de hacerse realidad y por ello, había pensado retirarse antes y con el mentón en alto. Sin esperar a que ellos comenzaran a rechazarte y a apuntarte con el dedo. Quería una salida tranquila, triunfal, y todavía, con el éxito.

Durante el fin de semana lo aprovechó para adaptarse al cambio de horario y de sueño, para leer el guión y de terminar de ordenar su hogar temporal. Las grabaciones de la serie comenzaban en una semana más, por lo que tenía siete días para conocer el estudio de grabación, aprenderse el guión y alquilar un auto con gps.

Cuando terminó de ordenar sus cosas en el departamento y parecía un poco más “hogar” que refugio de vagabundo, comenzó a leer las cuatrocientas siete páginas del guión. Gimió en frustración cuando abanicó el cuadernillo.

El martes, Taeyeon se sentía más con más tiempo libre y decidió conocer el estudio de grabación en su nuevo coche alquilado, un mini cooper cabrio. Pensó que era ideal para andar en la ciudad, sin techo fijo y pequeño para ella.

Ingresó al recinto y se autentificó ganándose el sonrojo del portero. Le sonrió y éste le abrió la barrera de contención dejándola entrar. El lugar era grande, con muchos galpones edificados unos al lado del otro hacia al final, sólo había un edificio distinto de mayor magnitud y cristalizado entero. Supuso que aquél era el edificio central.

Estacionó el auto y salió de él caminando hacia el interior del edificio.

~*~

Tiffany estaba estresada sobre su silla de la oficina, uno de sus encargados de un artículo se equivocó en el título y no hallaba como arreglarlo. Se calentó la cabeza toda la mañana intentando arreglar el desastre de su empleado y hasta que al fin consiguió dejarlo bien.

Al volver de almorzar, Josh le dijo de camino que le esperaba un nuevo trabajo sobre su escritorio. Tiffany se apresuró a llegar a su oficina e intentar terminar el nuevo trabajo de Josh y así poder irse luego a la radio.

                -¿Una exclusiva de Kim Taeyeon?

Tiffany arrugó la frente e infló los cachetes. El trabajo trataba sobre el nuevo comunicado que Taeyeon había lanzado el viernes pasado, era una entrevista a la cantante preguntándole sobre sus aclaraciones acerca de su homoualidad. Tiffany volvió a hacer una mueca cuando terminó de leer el informe.

“Esto no me gusta..” Vio la fecha límite y tenía hasta la próxima semana para entregar la entrevista. “Diablos”. Miró la hora en el ordenador y supo que podía retirarse por el día de hoy, sin embargo, se llevó el informe a la casa para leerlo con mayor determinación y pensar en la manera de poder hablar con Taeyeon.

“Estoy pasándome los límites, esto es ir directamente a su privacidad, ¿por qué Josh quiere este tipo de noticias en el diario? No lo pensaba de ambicioso-chismoso..” Sus pensamientos la invadían mientras se dirigía a la radio. “Aunque Taeyeon haya firmado exclusividad con NYD, no quiere decir que vaya a soltar la sopa con nosotros de una. Tampoco podría obligarle… Ella se veía bien el otro día..” Tiffany sonrió ante el recuerdo de Taeyeon en el supermercado vestida de “Brenda”. “Estaba tan relajada, parecía otra persona. Casi la persona que conocí aquél día en el evento… Si llego un día y le suelto: ‘Oh, oye que… bueno ¿qué se siente ser lesbiana abierta?’, probablemente vuelva a ser la perra bruja…Si lo fue con lo de fumar hierba, probablemente lo sea con esto..”

Taeyeon volvía de su visita al estudio de grabación contenta. Había quedado conforme con los productores y los set de grabación. Prendió la radio y recordó que era martes. “El programa de Tiffany..” Sonrió cuando lo encontró y la voz de Tiffany salía de sus parlantes. En un semáforo en rojo, se relajó sintiendo la voz de la chica cerrando sus ojos, pero de pronto abrió los ojos alerta y se enderezó. “¿Qué demonios estoy haciendo?...”

                -Estás enamorada…

                -¡¿Eh?! –Gritó la rubia mirando hacia la radio –

                -¿Tú..tú crees Tiffany?

                -¡¡Claro!! Piensas todo el día en él, te gusta saber de él, estás pendiente de lo que hace, y digamos que no es sólo de un par de días, llevas así hace meses.

                -Pero esto no puede ser Tiffany, lo nuestro no debe ser.

                -¿Por qué no?

                -Él es mi alumno, soy su profesora de matemáticas..

                -Ohh… la voladita.         

Taeyeon alzó la ceja y abrió su boca, casi igual de impactada que Tiffany.

                -Sí, yo no sé qué hacer…pero ya no puedo parar lo que siento

                -¡Que te pasa por caliente! –Gritó Taeyeon a la radio mientras doblaba en otro semáforo –

                -¿Y él lo sabe?

                -Sí, él fue el primero en decir que me amaba, pero lo rechacé y ahora me siento terrible, pero por otro lado no puedo salir detrás de él porque podría perder mi trabajo..

                -Insisto, caliente…

                -Bueno, si esto sucede desde hace tiempo… creo que sería bueno que ustedes hablaran de esta situación..Mmm soy partidaria de que mientras exista amor puro entre dos persona, no puede haber nada malo en eso. ¿El amor es lo que hace el mundo girar, no? Un abrazo amiga, y aquí te dejamos un tema: The cure – Love song ¡Mis mejores deseos para ustedes!

Taeyeon bajó un poco el volumen de la radio cuando los acordes de la guitarra comenzaron a tocar, le gustó el pensamiento sobre el amor puro de Tiffany. Cambió la canción asqueada al escuchar la letra. “Amor..amor..amor.. ew”.

Pasó a un centro de comida rápida por una cena rápida y siguió por la avenida central hacia su departamento. Una figura luchando por encontrar taxi en medio del crepúsculo le llamó la atención.

                -¿Srta. Hwang? –Gritó desacelerando el auto frente a Tiffany –

Tiffany la miró como si fuera extraterrestre y pestañeó para despegar y asentir.

                -¡Suba! El tráfico está lleno a esta hora y no encontrará un taxi vacío hasta en horas –Le abrió la puerta de copiloto –

La castaña vaciló unos segundos y luego entró al carro, tímida. Se acomodó en el asiento colocando su cartera en el regazo y se puso el cinturón.

                -Gracias –Contestó una vez que Taeyeon reanudaba la marcha – Oh.. qué es ese olor –Comentó sintiendo un aroma familiar a pollo –

                -Uh… la cena –La rubia sonrió al ver los ojos cerrados de Tiffany – ¿No has comido?

                -Desde las doce… y creo que se me hará un agujero en el estómago en cualquier momento. –Tiffany se mordió el labio. –

                -Si quieres podemos comerlo juntas, tengo bastante. –Taeyeon sonrió y luego quitó la sonrisa al ver a Tiffany abriendo los ojos sorprendida – Digo, podemos comerlo juntas y Jessica, ¿Jessica era verdad? Eh.. hay suficiente..yo…um...

Tiffany soltó una risa adorable y Taeyeon se volvió de rojo entera. Se maldijo internamente por haber balbuceado tanto en una frase, ni en primaria le sucedió cuando debía leer frente a la clase.

                -Me has tuteado –Tiffany habló mirándola con una sonrisa de oreja a oreja –

                -¿Eh? –Taeyeon repasó sus palabras en la mente y sonrió – Oh, es cierto.

                -No he tenido que esperar tanto –Contestó la castaña triunfal y se cruzó de piernas. Taeyeon no pasó desapercibido el movimiento – ¿Ves que no es difícil?

                -¿Qué? –Taeyeon se sentía mareada por lo idiota que estaba –

Tiffany volvió a reír.

                -Que me tutees –Recordó la castaña divertida – Y sí, vamos a mi casa a cenar. Jessica estará encantada de conocerte.

                -Creo que me vendría bien conocer un poco más a mis compañeros de elenco –Taeyeon respondió más relajada –

                -Oh, ¿osea que sólo me utilizas para llegar a Jessica? –Tiffany frunció el ceño y Taeyeon casi hace mal el cambio –

                -¡Dios! ¡No! –Se apresuró la rubia – No, claro que no, esto.. yo… conocer a Jessica está bien, pero digo, quiero conocerte un poco más a ti también

                -¿Así? –La castaña miró al frente con un ligero sonrojo –

                -Sí, digo, quiero que me conozcas también, quiero que sepas que no soy el ogro que piensas

                -Oh.. Tae…Yeon..Taeyeon –Carraspeó – No pienso que eres un ogro, me lo dejaste claro el otro día en el supermercado..

                -Bueno, de igual forma quiero compensarte de alguna manera mi actitud.

                -No tienes que compensar nada, es más, te diría que no quiero cenar contigo si ése va a ser el objetivo, pero me has tentado demasiado con la bolsa de pollo en el asiento trasero –Tiffany se cruzó de brazos – Pero que sepas que no debes sentirte en deuda

                -Bueno, entonces será sólo para conocerte..las… conocerlas –Repitió Taeyeon dándose una paliza mental –

Momentos después llegaron al edifico de Tiffany y aparcaron al frente. Taeyeon se bajó con la bolsa en la mano y caminó con la reportera hacia el departamento.

Tiffany gruñó al sentir a todo volumen la voz de Bon Jovi en el pasillo y Taeyeon la miró divertida.

                -Estás a punto de conocer a Jessica, punto uno: Fanática de Bon Jovi.  –Dijo la castaña antes de abrir la puerta –

Taeyeon entró y dejó que la reportera la guiara por el departamento. “Definitivamente más acogedor que el mío…” Llegaron a la sala y Tiffany bajó el volumen considerablemente de Livin’ On A Prayer, a los segundos se escuchó los reclamos provenientes de la cocina.

                -¡¡Oye!! –Gritó – ¡¡Estoy cocinando con esa.- Su voz se calló al momento de ver a la acompañante de su amiga –

                -Jessica, tenemos visitas –Comentó Tiffany reprimiendo una risa –

                -Mierda –Soltó la castaña clara y se quitó el paño del hombro, el delantal de corazones y se acercó sonrientemente roja – Lo siento, hola, hola… hola

                -Hola –Contestó Taeyeon educadamente y estrechó manos con Jessica – Un gusto soy..

                -Kim Taeyeon, lo sé –Interrumpió Jessica – Wow, tú realmente estás aquí, oh.. vaya.. es como un sueño hecho realidad, osea, te admiro, eres realmente fantástica, tu voz es.. wuoah

                -Jessica… -Advirtió Tiffany – Esto no es un meet&greet. ¿De acuerdo? Taeyeon, se quedará a cenar y trajo pollo. Así que deja de destrozar la cocina y trae los platos.

                -Oh, oh, ¿es verdad? –Jessica miró a Taeyeon quién asintió – ¡Está bien! Iré por los cubiertos y platos, por cierto, ¡¡Es realmente un placer!!

                -Perdón –Le comentó Tiffany a Taeyeon y apuntó su cartera – Puedes dejarla sobre el perchero, ven.

Taeyeon siguió a Tiffany hacia la entrada donde colgó la cartera. Se fijó en la decoración de las paredes del departamento, fotos de Tiffany y Jessica colgaban haciendo figuras geométricas bastante monas, sonrió al ver una foto donde Tiffany debiese tener nueve años. La castaña notó lo que Taeyeon miraba y rió.

                -Esa vez fue navidad, me habían regalado mi primera Barbie. Jessica insiste que nunca me he visto más adorable que en esa foto y me obligó a colocarla

                -Bueno, tiene algo de razón –Sonrió Taeyeon volviendo a mirar la foto –

                -Ven, te enseñaré el resto del departamento

Tiffany le mostró todos los rincones del departamento, Taeyeon descubrió que el piso era amplio y acogedor. Era de estos tipos de departamentos en los cuáles te recuerdan a tu época universitaria donde el orden no era prioridad, pero tampoco era un desorden exagerado. El lugar describía exactamente a dos chicas adultas jóvenes que están en plena soltería.

Volvieron a la isla de la cocina donde Jessica terminaba de colocar los cubiertos. Taeyeon sacó el pollo de la bolsa y lo preparó con manos hábiles, pidió un par de condimentos para darle un sabor final, mientras era observada por dos pares de ojos curiosos y asombrados por ver las habilidades culinarias de la cantante.

                -No puedo creer que esté aquí –Susurró Jessica mientras Taeyeon seguía metida en su aliño en el pollo – ¿Dónde te la encontraste? ¿Cómo ha pasado esto?

                -Luego te cuento –La calló Tiffany con el ceño fruncido – Sólo compórtate como una chica de veintiséis, ¿de acuerdo?

                -Intentaré con el tema de conversación de vacaciones en el lago

                -No, Jessica, no arruines la cena así

                -¿Qué? ¡A todo el mundo le gusta esa anécdota!

                -Porque me dejas en ridículo –Contestó alzando un poco la voz y Taeyeon volteó la cabeza–

                -Aburrida –Jessica rodeó los ojos y miró a Taeyeon sonriente – ¿Qué le haces al pollo?

                -Le doy un poco más de sabor, si bien, en la tienda te lo venden listo, pero prefiero agregarle un par de condimentos y verán que le cambia el sabor a uno más suave y deliciosos –Contestó animada y se volteó con la fuente entre sus manos – Está listo

                -¡¡A comer!! –Gritó con entusiasmo Jessica –

La cena transcurrió, con conversaciones triviales sobre lo que era ser cantante para Taeyeon y preguntas fanáticas de Jessica hacia la cantante. Taeyeon reía con los comentarios de Jessica al escuchar la sarta de rumores que le llegaban y lo que pensaba de ella. Tiffany sólo sonreía de vez en cuando y la cantante lo notó.

                -¿Y tú Tiffany? –Le preguntó Taeyeon y Tiffany la miró – ¿Cómo te fue en el programa de hoy?

                -¿Programa? –Siguió la reportera con extrañeza-

                -¿No es martes hoy? –Preguntó Taeyeon – ¿No tienes un programa de radio?

                -Oh, ¡Eso! –Contestó – Uh, sí, hoy tuve programa… estuvo.. uh… como siempre –Sonrió torpemente –

                -Lo he escuchado camino a casa, ¿es posible que las historias que te cuentan son reales? –Preguntó Jessica – A la chica no le creí una pizca de su enamoramiento con el alumno

                -Bueno, ellos tienen la libertad de llamar y contar sus dramas, de eso trata el programa –Se encogió de hombros – De ahí a que sea verdad, sólo lo saben ellos

                -¿Cuál es la historia más rara que te han contado? –Preguntó Taeyeon interesada –

                -Uhmm… creo que hubo una vez, donde me llamó una chica y que tuvo una experiencia con el suegro –Tiffany hizo una mueca de asco – Relató todo lo que probó con un señor de cincuenta años, digamos que fue bizarro y para nada agradable

                -¿La del dragón? –Recordó Jessica con una sonrisa –

                -Ugh, sí y cállate que estamos comiendo –Le regañó –

                -¡Esa fue muy buena! –Comentó sin hacerle caso –

                -¿Puedo oírla? –Preguntó Taeyeon –

                -Es muy bizarra, no creo que te guste escucharla mientras tragas el pollo –Habló Tiffany –

                -Estoy terminando –Contestó la rubia terminando de tragar el último trozo –

                -Yo también –Siguió Jessica sonriente– y tú también –Le apuntó–

                -Bueno –Rodeó los ojos– Cuéntalo tú –La instó a hablar a Jessica –

                -Eh.. una chica llamó a la radio –Comenzó mirando a Taeyeon – Y contó que tuvo una aventura con el suegro y le hizo algo medio asqueroso –Arrugó la frente – “El dragón”

                -¿El qué? –Preguntó Taeyeon –

                -De acuerdo, no creo que Taeyeon le guste este tipo de conversación –Interrumpió Tiffany –

                -No, por favor, estoy curiosa ahora –Insistió la cantante – ¿Qué es el dragón?

                -Uhmm –Sonrió Jessica y miró a Tiffany quién se encogió de hombros – Eh, bueno, es cuando estás haciéndole un.. uh.. bueno, le estás mamando la polla al tío, y éste acaba en tu boca y tú lo expulsas por la nariz… el

                -Oh… -La cara de Taeyeon se volvió en una mueca de disgusto y Tiffany no pudo evitar reírse –  

                -¿Ves? ¡Te dije que era asqueroso! –Siguió riéndose la reportera –

                -¿Y eso fue de verdad? –Preguntó la cantante – Digo, ¿la chica realmente hizo eso con el suegro?

                -Oh sí –Siguió Jessica – Y eso no es todo, a los minutos llamó el novio enojado –rió recordando – Aquél programa fue realmente bueno

                -Para mí no lo fue, tuve que lidiar con la pelea en vivo y en directo. El novio la amenazaba con golpearla hasta la muerte cuando llegara a la casa –Tiffany miró a Taeyeon – ¿Te imaginas eso?

                -¿Cómo supo el novio? ¿Y por qué la chica no dio su nombre? –Preguntó la rubia –

                -No lo sé, supongo que la mala suerte –La castaña se encogió de hombros –

                -Por eso digo, eso puede haber sido arreglado

                -Bueno, mentira o verdad, hace que mi programa tenga una sintonía bastante buena –Sonrió Tiffany –

Taeyeon estuvo en el departamento hasta que vio la hora. Se disculpó con las chicas y dijo que tenía que marcharse. Tiffany la acompañó hasta la puerta y sintió el aire fresco de la noche. Estaba perfecta para caminar, y como si Taeyeon le hubiese leído la mente le pidió una vuelta hacia la plazuela que había al frente. Tiffany pensó con maldad.

                -Uh, tengo hierba –La miró pícara y Taeyeon soltó una risa – Digo, sólo si quieres.

                -Está bien, me hará dormir bien

                -Ya vengo, espérame aquí.

Tiffany entró al departamento yendo a buscar la hierba y volvió en un segundo al lado de la cantante. Caminaron hacia el frente y agradecieron a que no andaba ningún alma por el sector. Entre risas y bromas sin sentido terminaron el porro y se quedaron acostadas en el pasto mirando al cielo. El efecto relajante de la hierba comenzaba a dar fruto, dándoles un relajo completo de pies a cabeza. Tiffany, por primera vez se sentía en paz al lado de la cantante, sin estar haciendo malabares con sus frases para que se entendieran bien. “Debería fumar marihuana más a seguido al lado de Taeyeon, se siente bien…déjalo, estás volada”.

Taeyeon, en cambio, luchaba con el impulso de agarrarle la mano, intentaba pensar en los árboles, luces, edificios, la luna…la jodida mano de Tiffany. “Demonios, cálmate.” Intentó jugar con sus manos para calmar las ansias de tocarla. El efecto de la marihuana había hecho crecer un pequeño deseo que tenía sobre la reportera. Mientras Tiffany hablaba, Taeyeon se fijó en los detalles de los gestos faciales que hacía al hablar, su voz era mortalmente hermosa y sus ojos eran malditamente perfectos. “Ha sido el jodido porro, a ti no te gusta Tiffany, es la marihuana quién habla…no tú… ¡¡oh demonios huele tan bien!!”

                -Me gustaría que mañana no fuese lunes. Odio los lunes.

Tiffany habló apartando los pensamientos indebidos de Taeyeon y ésta se aclaró la garganta intentando despejar el tono grave.

                -Todos odiamos los lunes, pero ¿qué podemos hacer? Tenemos una rutina que cumplir y rentas que pagar. –Contestó intentando modular bien –

                -Claro, a ti mucha falta te hace el dinero ¿no? –Ironizó Tiffany –

                -¿Piensas que soy multimillonaria? –Rió Taeyeon – ¡Claro que no! ¡Dios! ¿Por qué todos piensan que si uno es famosa de pronto tiene millones?

                -Porque eso sucede cuando eres famoso –Se encogió de hombros – Supongo que no sufres con las cuentas a fin de mes..

                -Uhm nop –Contestó tranquilamente – Pero no quiere decir que derroche dinero, quizás tengo un poco más que el promedio, pero es gracias a un montón de esfuerzo y sacrificio que hice en el pasado. ¿Crees que la serie la tomé sólo por diversión? ¿Los comerciales? ¿Y todo lo anexo al canto? Es para ahorrar dinero.

                -¿Para qué quieres ahorrar? Yo que tú, utilizo el dinero para darme un gran gusto – Tiffany se mordió el labio – Un jacuzzi, una casa de tres pisos, un viaje al caribe, oh…comer en Italia..

Taeyeon la miró con ternura y rio entre dientes. “Es la jodida marihuana”

                -Una chica con sueños ¿eh? –Tiffany asintió – Bueno, yo tengo e hice eso Fany… ahora estoy en una etapa donde tengo que ahorrar, para después.

                -¿Para después? –La castaña frunció el entrecejo –

                -Pretendo alejarme de los escenarios por un tiempo –Tiffany abrió los ojos como plato y Taeyeon volvió a reír – Hey, parece que te acaban de decir que estás despedida

                -¿Te vas a retirar?

                -Por un tiempo, necesito descansar –Taeyeon se metió las manos en los bolsillos encogiéndose de hombros – Además, ya no soy una niña de dieciocho años que encantaba al público con su inocencia y voz… -sonrió con melancolía – Estoy algo vieja.

                -¿¡Vieja?! ¡Dios! ¡Tienes veintisiete años! –Exclamó la reportera enderezándose – Eres una mujer muy talentosa Tae que aún tiene mucho que dar y deslumbrar. ¿Por qué dejarlo?

                -Uhmm no lo entenderías –La pelinegra la miró con cierto temor que Tiffany no lo pasó desapercibido y se enderezó – Pero tengo mis motivos, y necesito vivir un poco mi vida.

                -¿Y? ¿No la puedes vivir siendo Kim Taeyeon, la exitosa cantante de la historia?

El comentario de Tiffany hizo que Taeyeon explotara en una risa y palmeara el hombro de su amiga.

                -Oh Fany, ¿de la historia? Seguro hay mejores que yo. Creo que sigues tocada por la marihuana…

                -¿¡Bromeas?! ¿¡Aún no te das cuenta del número de seguidores que tienes?! ¡Estás en la cima de tu éxito! Sería de tonto retirarte en este minuto

                -Quizás, pero tampoco es una decisión ya tomada. –Taeyeon suspiró y rodeó los ojos – ¿Por qué no mejor disfrutar del paseíto por la plazuela? ¿Y dejamos de hablar de mí? … ¿Qué hay de ti? ¿Hace cuánto que son amigas con Jessica?

                -Uh… no lo recuerdo, supongo que..de toda la vida, la verdad es que nos conocemos desde hace mucho –La castaña sonrió – Como te dije, es la hermana que nunca tuve

                -¿Eres hija única?

                -Síp, y de padre único. Somos sólo él y yo, aunque ahora el pobre está viejito y convive con Greta, la vecina que quedó viuda igual que él. Supongo que le viene bien la compañía. –Se volvió a tirar al pasto –

Taeyeon la miró e imitó su pose, mirándola de lado.

                -¿Tu madre falleció? –Tiffany asintió – Lo siento

                -Oh no lo sientas, murió cuando tenía seis. Realmente no me acuerdo de ella. ¿Y tú? Bueno, sé que tienes un padre, madre, una hermana pequeña y un hermano mayor –Tiffany rio con culpabilidad – Lo siento, Google está al alcance de todos .

                -Uhmm.. Srta. Hwang, ¿su trabajo lo saca de Google? ¿no es un poco escolar?

Tiffany se sonrojó al escuchar de esa manera a Taeyeon y bajó la cabeza ahogando una risa.

                -Lo siento, pero la urgencia de tener lo básico de ti me hizo leerte en Wikipedia.

                -¿Así fuiste a la entrevista? ¿Sólo con Wikipedia?

                -Oh no, leí otros reportajes, informes, fotografías, libros, comentarios de fanáticos en foros oficiales. Digamos que fui fanática de corazón por un día.

                -Eso es halagador y para nada psicópata

                -Supéralo –Tiffany rodeó los ojos – ¿Y bien? ¿Cómo te llevas con tu familia?

                -Excelente la verdad, a pesar de no verlos a menudo, cada vez que nos juntamos somos como la familia ejemplar de Corea. –Taeyeon sonrió negando la cabeza – La pequeña Hwayeon es un encanto.

                -Lo debe ser –Susurró Tiffany mirándola con un brillo en los ojos – ¿Se parece a ti?

                -Uhmm algo, sí –Le contestó mirándola de la misma manera –

Taeyeon se fijó en los detalles del rostro de la castaña, realmente era una chica hermosa y mezclado con el perfume peculiar de la reportera, era un sueño hecho realidad. Se mordió el labio quitando las ganas enormes que tenía de besar el rostro entero de Tiffany, pero al mirar de esa manera a la castaña, se dio cuenta que la mirada le era devuelta de la misma manera e incluso más intensamente. Enarcó una ceja acercándose de apoco a su rostro, cerró los ojos sintiendo su estómago temblar y la corriente eléctrica por todo el cuerpo haciéndole levantar todos los vellos corporales.

-¿Tiffany?

                -¿Sí? –La voz se sintió ronca –

Abrió los ojos y vio las pupilas dilatadas de Tiffany y sonrió.

                -Estoy muy colocada con la hierba –Explotó en una risa contagiando a Tiffany –