Herido

Las leyendas de EXO [español]

Con mis gritos, Chen y Lay se despertaron y bajaron corriendo hasta donde estaba yo. Al ver a su hermano en esas condiciones se quedaron en estado de shock.

-¡Ayudadme a llevarlo hasta el sofá!-dije desesperada.

Entre los tres fue fácil levantarlo, lo que me preocupó muchísimo. Era muy ligero porque había adelgazado un montón. Cuando yo lo había cargado cuando llegaron el primer día pesaba muchísimo más.

-¡Baekhyun! ¡¡Baekhyun!!-gritó Chen. Pero no servía de nada. Baekhyun no se despertaba.

-Debemos curarle lo que podamos. Tal y como está le deberíamos llevar a un hospital, pero no me puedo arriesgar, porque no sé si por dentro también sois como los humanos. Si por alguna razón le tienen que operar y descubren que tiene dos corazones o algún órgano que los humanos no tienen, se lo llevarían para experimentar con él, y entonces sí que lo dejarían morir.

Cogí el botiquín y le curé todas las heridas superficiales. Sin embargo, había cosas que necesitaban puntos, y yo ahí no podía hacer nada. Le limpié toda la sangre que tenía y vendé todo lo que pareciera estar roto.

Chen y Lay estaban devastados. No sabían qué hacer, y lo único que hacían era limitarse a quedarse petrificados mientras yo iba de un lado a otro con vendas, toallas, etc. ¿Qué le habían hecho para que hubiera quedado así?

Después de un buen rato, dejé el botiquín a un lado, ya que yo no era capaz de hacer nada más. Intentamos que Baekhyun se despertara por todos los medios, pero era imposible.

-Cuando vea a Muerte o a alguna de sus hermanas…-dijo Chen sacando pequeños rayos de las manos.

-Tengo miedo. Si Baekhyun está así, ¿el resto estará bien?-dije con lágrimas en los ojos. Si uno más venía en las condiciones de Baekhyun no sé cómo podría aguantarlo…

-Ojalá hubiera algo que pudiéramos hacer…-dijo Lay.

-De momento lo único que podemos hacer es esperar. Ayudadme a subirlo al piso de arriba para acostarlo sobre una cama.

Después de tumbarlo en su cama, le encendí un par de lámparas y se las puse al lado. No estaba segura de si eso funcionaría, pero ya que el poder de Baekhyun era la luz quería hacer algo por él. Ya que era lo único que estaba en mis manos.

Chen podía controlar los rayos, por lo que podía luchar. Lay todavía no había descubierto su poder, pero cuando lo hiciera también ayudaría. Yo, en cambio, era una simple humana. ¿Qué podía hacer yo? Nada.

Miré impotente a Baekhyun. ¿Y si no se despertaba? ¿Qué podía hacer?

Cansada y triste por todo lo que había sucedido, fui hasta el salón a quitar las sábanas que protegían el sofá para lavarlas y quitarles la sangre. Desde que habían llegado los chicos había tenido que ponerlas porque si no me ponían el sillón perdido. Pero nunca habían tenido semejante cantidad de sangre.

Después de poner la lavadora, me senté sobre el sofá y cerré los ojos, intentando evadirme de la realidad. Quería volver al momento donde todos trabajábamos en el restaurante, Chanyeol me quemaba la cocina, Suho me casi-chocaba el coche, Sehun y Kai no dejaban de pelearse…

-Esto… Sarang, sé que no es el momento de preguntar esto, pero nunca he hablado con ningún humano y bueno… Quería saber cosas.

No pude evitar que los ojos se me llenaran de lágrimas. Baekhyun siempre quería saber más de humanos. No era extraño el día en el que se me acercaba mientras yo estaba leyendo un libro o viendo un dorama para preguntarme cosas de todo tipo. Me sequé las lágrimas con la manga y miré hacia Lay. Si me podía a llorar sólo complicaría las cosas para los dos de EXO-M.

-Dime.

-¿Los humanos tienen poderes como nosotros?

Le di unas palmaditas al sitio que estaba al lado mío en el sofá para indicarle a Lay que se sentara.

-Los humanos no tenemos tanta resistencia como vosotros, ni habilidades para controlar los elementos. Sin embargo, sí que podemos luchar, tal y como hacen Tao y… Baekhyun...-cada vez que decía su nombre sentía cómo algo se clavaba en mi pecho.- Y a lo mejor hay muchas cosas de los humanos que te sorprenderían.

-Mm… Entiendo. Es que estaba viendo unas imágenes que había en el pasillo de la casa, y aparecían humanos controlando el agua, y animales muy extraños que no había visto antes.

-Una de nuestras armas más poderosas es la imaginación. Así, aunque nosotros seamos simples humanos, nos imaginamos historias de gente con poderes, como vosotros. También inventamos seres mágicos y misteriosos, como las sirenas, mitad mujer mitad pez, las cuales tienen un canto al que no puedes resistirte. O los ángeles, seres alados los cuales sólo conocen la bondad. Y los animales no se quedan por fuera. Dragones, pegasos, grifos, fénix… Y cada uno le da el poder que quiera, ya que al no existir dejan un abanico muy amplio. Por ejemplo, se suele decir que los unicornios tienen poderes curativos.

-Oh… Ahora lo entiendo.-dijo Lay sonriendo.- Gracias Sarang. Y otra cosa. Gracias por habernos acogido. A todos.

-Lo sé, soy una humana muy rara. Me encuentro con unos chicos que han caído del cielo en forma de meteorito y en vez de llamar a alguien, decido cuidarlos. Y cuando me meto en medio de una pelea que podría acabar con mi vida… ¿Por qué no?

Mi comentario hizo que Lay dejara salir una carcajada, algo que en estos momentos hacía falta. Pero que mucha falta.

Tras hablar con Lay me dejé dormir en el sofá, echándome hacia atrás y abandonándome al sueño. Cuando volví a abrir los ojos, vi a la reina Vida.

-¿Qué ha pasado?-dijo muy preocupada.

Y podía entender por qué. Detrás de ella se encontraba aquel árbol que habíamos visto en nuestros sueños. Y se notaba que había recaído, porque las ramas estaban hacia abajo, secas, con unas hojas sin color. El viento iba arrancando las pocas hojas que quedaban, y poco a poco el árbol iba quedando desnudo.

Además, eso no era todo. En aquel lugar parecía que la luz había bajado. Como si unas nubes muy oscuras hubieran tapado el sol.

-¿Están todos bien?

-Sí, sí… Bueno, Baekhyun no tanto.-dije mirando al suelo. Era incapaz de levantar la vista y mirar a esa reina a los ojos.

-¿Baekhyun? No…-dijo la reina sin voz.

Ahora entendía lo que quería decir la reina con que el árbol dependía de ellos. Baekhyun, el cual podía controlar la luz, al estar tan herido había hecho que se apagara la luz en este sitio.

-¿Hay algo que yo pueda hacer? ¡Por más que lo llamamos no se despierta! ¡¡Por favor!!

Después de quedarse pensativa por un rato, la reina me miró con sus ojos brillantes a través de la máscara. Juraría que estaba más débil, porque su piel no brillaba como antes, y su pelo tenía un color mate.

-Cuando veas que esté curado pero no se despierta, quizás si le cantas esta canción se despierte. Sé que Baekhyun la compuso pensando en la Tierra y en sus habitantes.

Así que la reina empezó a tararearla con una voz que derretiría al corazón de la persona más fría. ¿No le estaba hablando de sirenas yo antes a Lay? Esto era algo muy parecido.

La melodía de la canción subía y bajaba rápido, y aunque era algo complicada, tras haberla oído una vez había logrado memorizarla.

Tras un rato, la reina se sentó sobre el suelo cubierto por las hojas caídas del árbol y miró al frente. En sus ojos se podía apreciar soledad y tristeza, pero sobre todo preocupación, al mismo tiempo que brillaban con frustración y arrepentimiento. Sin embargo, no me atreví a decirle nada, pues la figura brillante me intimidaba a la vez que hacía que me daba lástima.

-Debes irte. Aunque Baekhyun esté mal, tienes que cuidar del resto. ¿Cuántos hay en tu mundo? Estoy muy preocupada, ya que no consigo contactar con ellos.

-Chen y Lay, aparte de Baekhyun claro. El resto… No lo sé. Ni siquiera sé si han salido de aquella cárcel. A lo mejor están durmiendo en otro planeta donde no hay nada, con frío…

-Tranquila. Si eso fuera así, aquí se manifestaría. Por ejemplo, si Chanyeol estuviera sufriendo empezaría a hacer frío.

Suspiré de alivió y esperé que todos estuviera bien. Iba a seguir hablando con la reina cuando la imagen se volvió borrosa, cada vez más borrosa. La reina se despidió de mí diciendo mi nombre, y cuando la imagen se fue volviendo nítida otra vez, oí también cómo me llamaban por mi nombre. Sin embargo, no era la voz de la reina…

-¡Sarang! ¡¡Sarang!!

Cuando abrí los ojos y enfoqué, me encontré a Chen llamándome a voces, y Lay detrás de él casi llorando.

-¡Ven, tienes que venir!-dijo Chen cogiéndome por la muñeca y arrastrándome hasta el piso de arriba. Allí lo que me esperaba era demasiado para mí.

Baekhyun se estaba retorciendo de dolor, ya que lo estaban atormentando en su pesadilla. No dejaba de pedir que, fuera lo que fuera lo que le estuviera atacando, que por favor parara. Cada grito que salía por su boca desgarraba mi pecho, y los tres podíamos notar su sufrimiento.  

-¡Baekhyun!-gritó Chen mientras corría hacia su lado junto con Lay.

Yo también corrí hasta él y lo agarré para que dejara de moverse, al tiempo que gritaba su nombre. Todo estaba ocurriendo a cámara lenta. Notaba como mi garganta se tensaba de gritar, y mis alrededores se veían borrosos. Lo único en lo que podía concentrarme era en la cara de sufrimiento de Baekhyun.

-¡¡BAEHYUN!! ¡¡DESPIERTA, POR FAVOR!!

De repente, Baekhyun dejó de moverse y abrió los ojos de golpe, quedándose a escasos centímetros de mí. Sus ojos, que normalmente brillaban con alegría, ahora estaban llenos de lágrimas, y en ellos se podía ver el miedo, el terror.

-Baekhyun…-dije con un sollozo.

Y tan rápido como despertó, volvió a cerrar los ojos, y dejó caer su cabeza sobre mi regazo. Sin embargo, esta vez ya no tenía una expresión de angustia, sino de calma total. Chen y Lay gritaban su nombre, pero seguía sin responder.

-Una pregunta: ¿tenéis el sueño igual de pesado que los de EXO-K?

Chen y Lay asintieron lentamente, como si tuvieran miedo de mi reacción.

-Pues entonces si Baekhyun tiene otra pesadilla pero no grita lo suficiente como para despertaros, no lo oiréis. Y en caso de que se despertara, tampoco os enteraríais…

-¡No pasa nada! ¡Yo me quedaré toda la noche despierto!-dijo Lay con su acento chino.

-No, os necesito descansados. En cambio, yo sí que tengo un sueño muy ligero. Ayudadme a cambiar a Baekhyun de cama.

Chen y Lay me miraron sin entender mucho, pero cogieron a Baekhyun y lo transportaron con suavidad hasta mi cama, la cual era una cama doble del tamaño más grande que puedas imaginar.

-Aquí estará más cómodo. Y si se despierta o le pasa algo me despertará a mí.

Podía ver que tanto Chen y Lay estaban cansados. La tarde se nos había pasado volando, y los tres teníamos hambre. En menos de una hora estábamos todos cenados, duchados y listos para ir a la cama. Les di las buenas noches a Chen y a Lay y entré a mi cuarto, dispuesta a apuntar todo lo que había pasado hoy en la libreta.

Desde el escritorio le echaba cada cierto tiempo un ojo a Baekhyun, el cual dormía plácidamente. Estaba muy preocupada por el hecho de que hacía días que no comía, y si seguía sin despertarse no tendría más remedio que llevarlo a un hospital, ya que se moriría de hambre.

De repente, un ligero gemido de dolor rompió el silencio de mi habitación. Baekhyun se estaba intentando mover, pero entre las heridas y seguramente los huesos rotos que tenía, cada vez que se cambiaba de posición era todo un martirio para él.

-Baekhyun, por favor, despierta pronto…

Me acerqué a él y le ayudé a darse la vuelta. Luego me quedé mirándolo fijamente. Me costaba creer que el chico que tenía delante normalmente solía ser muy alegre. Cada vez que sonreía iluminaba todo lo que estaba a su alrededor, y no porque controlara la luz, sino porque desprendía un aura de felicidad. Ahora, sin él revoloteando, la casa estaba triste.

Decidí cogerle la mano y empezar a tararear la canción que me había dicho la reina, para ver si tenía algún efecto sobre él. Y al principio pensé que lo estaba haciendo mal, porque Baekhyun no parecía reaccionar. Pero entonces pasó algo que me devolvió las esperanzas. Me apretó la mano.

Le miré fijamente y le llamé varias veces por su nombre, a ver si lograba algo. Pero era imposible, estaba profundamente dormido.

Con tristeza, pero a la vez esperanza porque me había respondido me metí en las sábanas y apagué la luz. Después, me quedé mirando fijamente a Baekhyun a la luz de las estrellas. Aún con su cara llena de cicatrices y moratones, seguía siendo guapo. Acerqué la mano hasta su fleco y se lo aparté de delante, porque le estaba tapando media cara y parecía molesto.

Su pelo, aunque estaba despeinado, era suave y aterciopelado. Nunca había tocado un pelo que resultara tan agradable para acariciar, ni siquiera en animales. También era verdad que ellos eran extraterrestres. Era tan mullido como el pelo de un conejito.

Después de eso me quedé profundamente dormida. Baekhyun no tuvo pesadillas, y desafortunadamente tampoco se despertó. Así que cerré los ojos, y poco tiempo después, al abrirlos me encontré que la luz del amanecer inundaba la habitación.

Baekhyun no tenía buen aspecto. Las magulladuras y moratones se extendían por todo su cuerpo, y se notaba que el simple hecho de estar acostado le hacía daño.

-¿Qué te han hecho?-dije deseando que pudiera responderme.

Decidí bajar a preparar el desayuno al resto de los chicos que había en la casa, pero me encontré que según bajaba la escalera se iba colando por mis fosas nasales un olor a tortitas. Un olor delicioso, si nos ponemos a concretar.

Al entrar a la cocina vi a Chen con el libro de cocina, y a Lay terminando de dar la vuelta a las últimas tortitas.

-El desayuno está servido.-dijo Chen.

-¿Qué-? ¿Cómo-?-sólo era capaz de titubear.

-Simplemente hemos seguido las instrucciones que pone aquí. Yo le he traducido la receta a Lay y él lo ha hecho prácticamente todo.

Miré a Lay con los ojos como platos. La capacidad de aprendizaje de estos chicos era increíble, casi sobrehumana. Oh, claro…

-¡Fantástico! Yo… ¡Quiero probarlo!-dije cuando por fin pude articular una palabra.

Me senté en la mesa y me serví un par de tortitas. Guao.

-Vosotros me estáis mintiendo. Lay ya ha cocinado antes, ¿no?

-He visto a los humanos. Yo imito.-dijo Lay en su no muy fluido coreano.

De repente, Lay se quedó mirando a un punto fijo, fuera de la casa. Me giré para ver lo que estaba mirando, pero sólo había hierba y árboles.

-¿Hay algo ahí fuera?

-Había… Aquello… No importa.-dijo con un suspiro.

Tras desayunar les expliqué a los chicos de EXO-M lo que tenían que saber de la vida humana. No es lo mismo verlo desde fuera que te lo cuente alguien humano, según me había dicho Baekhyun. Y por cierto, me fijé que Lay estaba con la mirada perdida todo el tiempo.

-Lay, ¿pasa algo?

Lay me miró y pareció que volvió en sí, porque se dio cuenta de que le estaba hablando y me pidió perdón por no haber estado escuchando.

-Va en serio, ¿qué pasa?

-Es que he visto algo… No, déjalo, no pasa nada.-dijo sonriendo.

-Lay, la última vez que alguien pensó eso fue cuando Sehun tuvo un sueño, y al final resultó que era algo más que un sueño. Venga, desembucha…

Lay miró a Chen, como buscando alguna manera que su amigo lo ayudara, pero él tenía las mismas ganas que yo de saber qué era lo que estaba distrayendo a Lay.

-Acabo de ver un caballo blanco fuera.

Extrañada salí de la casa para ver si el supuesto animal seguía por allí. Pero no, el exterior de la casa estaba vacío.

-¡Por eso no quería decirte nada!-dijo Lay nervioso.

-No pasa nada, Lay. Quizás más tarde lo vemos, y si resulta que no era real pues tampoco importa mucho.-dije con una sonrisa intentando tranquilizar al chico.

Aunque no estábamos haciendo nada en particular las horas pasaron rápidamente, y cuando me quise dar cuenta ya estaba anocheciendo. Si pasaban muchos días y Baekhyun no se despertaba, ¿qué sería de él?

Triste por ser incapaz de hacer nada decidí dar una vuelta por el paseo marítimo de mi pueblo y despejarme un poco la mente. Le dije a Chen y a Lay que se quedaran en la casa y que no le abrieran la puerta a nadie, y cogí el coche para ir hasta la costa. Aparqué en el primer sitio que vi y me bajé, cogiendo una chaqueta ya que empezaba a refrescar.

La brisa que soplaba por aquí era muy agradable. Era fresca, pero no lo suficientemente fría para hacerme tiritar, y traía el aroma de las olas que rompían a pocos metros en la orilla. Cerca de aquí había unos barcos que regresaban de faenar y se dirigían hacia el puerto en el pueblo que estaba al lado.

Al apartar la vista del mar, vi que a un par de metros de mí venía caminando por el paseo un chico alto y rubio con cara de haberse perdido.

-Can I help you? You seem to be lost…-le dije esperando que no hablara ningún idioma de los países del norte de Europa o algún otro idioma raro.

-Sí, si me hablas en coreano nos entenderemos mejor.

Hablaba un coreano perfecto, y sin embargo no parecía coreano. A diferencia de mí, él no tenía rasgos asiáticos, sino caucásicos totales.

-Es que te veo medio perdido…-le dije ladeando la cabeza.

-Medio no, totalmente perdido. Hace poco que me mudé aquí, y estoy buscando la calle de la casa que alquilé, pero no hay manera… ¿Eres de por aquí?

Asentí esperando conocer la calle, ya que vivir a las afueras del pueblo tenía algún que otro efecto secundario, como no saber el nombre de las últimas calles que se construyeron, o no conocer calles que sean muy pequeñitas. Aún así, tuve suerte y era una de las calles principales del pueblo, así que le guié hasta su casa.

-¿De qué país eres?

-Mi padre es inglés, y mi madre es alemana, así que muy coreano no parezco. Sin embargo, yo nací en Corea, y mi carnet de identidad dice que soy coreano. Nunca he visitado ni Inglaterra ni Alemania.

-Oh… Tranquilo, no me estaba quejando… Simplemente tenía curiosidad…-dije murmurando.

-Yo… Lo siento. Es que cada vez que la gente me dice eso siempre viene con algún comentario ingenioso o algo por el estilo. Lo siento…-dijo pasándose una mano por el pelo.

-No pasa nada. Yo también sé lo que es que te digan que vuelvas a tu país aunque hayas nacido aquí.

-Pero tú sí que eres asiática, ¿no?

-No completamente: coreana y española. ¿Tú crees que es normal que tenga el pelo de este color y los ojos verdes?

El chico se rió ante mi comentario y dejó la maleta delante de la puerta de su nueva casa.

-Me llamo Lee Michael. Llámame Mike. ¿Quieres pasar?-dijo haciendo un gesto con la mano para invitarme a entrar.

-Oh, no, gracias. Se está haciendo tarde y tengo que volver a mi casa. Yo soy Park Sarang. Un placer conocerte, Mike.

Mike suspiró con decepción y me miró. Sus ojos no eran tan grandes como los de D.O o Chanyeol, pero sí que transmitían bastante. Brillaban tanto que prácticamente podía verme en ellos. En ellos se podía ver que este chico tenía carisma, y desprendían una sensación de amabilidad… También me pareció ver otra emoción en ellos, pero no estaba muy segura

-Bueno, entonces otro día será. ¿Te veré por aquí a menudo?

-Depende. No vivo en el pueblo, sino a un par de kilómetros. Aunque sí que trabajo aquí, en el restaurante que está dos calles más allá.-dije señalando el camino.- El problema es que ahora está cerrado, pero ven dentro de una semana.

-Allí me verás. ¡Nos vemos!

-¡Adiós!-dije despidiéndome con la mano mientras me daba la vuelta para empezar a caminar en mi coche.

Rectifico, en mi otra vida debí ser la reencarnación de un santo que a su vez se convirtió en santo. ¡Tanta suerte no es normal! Durante todos mis años de instituto fui acosada por Yoonseul, así que no tuve ni un solo amigo. A la gente le daba miedo acercarse a mí no fuera a ser que luego Yoonseul se la cogiera con ellos. Y ahora de repente empiezo a descubrir que mis habilidades sociales son más buenas de lo que yo creía. Y que tanto chico guapo decida hablar conmigo tiene que ser obra de alguna divinidad.

E igual que el aire frío de la playa me golpeó al salir del callejón y caminar por el paseo marítimo, me di cuenta de que probablemente no habría sido una santa. Y si lo fui, algo muy malo tuve que haber hecho. Habían raptado a todo EXO, y sólo tenía a tres conmigo. Y uno de ellos herido de gravedad.

Tenía ganas de echarme a llorar, de frotar una lámpara y pedirle a un genio que volviera a atrás en el tiempo. Desearía que Maldad, sus hijas y sus secuaces nunca hubieran existido.

Al llegar a mi casa Chen y Lay me recibieron cual perritos al abrir la puerta principal.

-¡Bienvenida!-gritaron los dos al unísono.

De repente, la cara de Lay cambió radicalmente. Su sonrisa infantil y alegre se le borró de la cara y fue reemplazada por una expresión de perplejidad total. Estaba mirando algo a través del hueco de la puerta, y me giré para buscar la razón por la que Lay se había quedado en Babia, pero no vi nada.

-Ahí… Había un caballo blanco. ¡Sé que lo vi!-dijo Lay casi gritando.

-Cálmate Lay…-dijo Chen preocupado por su amigo.

-Pero… Era raro… Tenía un… Eh… ¿Cómo se dice?-dijo Lay diciéndole la palabra que estaba buscando a Chen en chino.

-Un cuerno. Supongo… ¿Estás seguro?-dijo Chen.

-¡Sí! ¡Era un caballo blanco con un cuerno!

-Pero los caballos no tienen cuernos…-dijo Chen confundido.

-Hombre… No sé si esto de dirá algo, pero eso tiene nombre. ¿Tenía un cuello en medio de la frente?

Lay asintió con mucha energía, yo diría incluso que demasiada.

-Eso es un unicornio.

Tras decir eso, los ojos de Lay se abrieron como platos y echó a correr para el primer piso. Chen y yo lo seguimos corriendo tras él sin entender nada, y cuando llegamos hasta él lo vimos que estaba al lado de Baekhyun, intentando hacer… Bueno, ni idea.

-Eh… Esto… ¿Qué haces?-dije yo.

-Creo que sé cuál es mi poder. Pero no sé utilizarlo. Chen, ¿cómo haces rayos?

-Eh… No sé, es algo que sale solo. Es como… Si la energía fluyera en tu interior, y se acumulara en tus palmas. No te sabría decir una descripción con más detalle porque no sé cómo funciona.

Lay puso sus manos encima de Baekhyun, en el aire. Después, cerró los ojos y se concentró todo lo que pudo. Pensábamos que no iba a pasar nada cuando de repente alrededor de Baekhyun empezaron a salir unos pequeños destellos, y pudimos observar que sus heridas se iban curando lentamente. Tras unos minutos, Baekhyun no tenía ni heridas ni cicatrices.

-¿Cómo…?-dije sin poder creérmelo.

-Cuando dijiste lo del unicornio me acordé de que habías dicho algo de poderes. Me alegro de haber podido ayudar.

Sin embargo, por más que llamamos a Baekhyun, no respondió. Y no tenía sentido, porque ya no parecía tan débil y frágil como antes. Simplemente descansaba tranquilamente sobre mi cama, con los ojos cerrados y una expresión serena en la cara. Además, Lay se las había arreglado para hacer que no estuviera tan delgado, así que ya no parecía que estuviera al borde de la desnutrición.

Con el mal sabor de boca de haber sido capaz de curar a Baekhyun pero no despertarlo, los tres cenamos en silencio, incapaces de decir una palabra. El ambiente se notaba bastante tenso, y ni siquiera sabíamos por qué.

-Yo… Me voy a duchar.-dijo Chen levantándose de la mesa.

Chen fregó sus platos y cubiertos en el fregadero y se dirigió al baño. Yo me quedé en la mesa con Lay, buscando la manera de iniciar una conversación.

-No te preocupes. Has hecho lo que has podido. Ya se despertará.-le dije intentando tranquilizarlo.

-Pero… No hay nada más que pueda hacer. Ya está curado, ¿por qué no se despierta?-dijo Lay agarrando su cabeza con las manos.

-A veces no tiene nada que ver con estar herido o no. A lo mejor Baekhyun no se despierta porque la razón de su coma no es física, sino emocional.

Lay me miró con cara de no haber entendido nada, y me acordé que aunque hablara coreano, seguía siendo chino y si decía cosas muy complicadas no las entendería.

-Es probable que esté dormido no porque está herido, sino porque ha sufrido un shock.

-Cuando vea a Muerte o a sus hermanas, las mataré…-dijo Lay clavando su cuchillo sobre la mesa.

-Sí, sí, mátalas a ellas, pero mi mesa no te ha hecho nada.

Lay se dio cuenta de lo que estaba haciendo y dejó el cuchillo tumbado, pidiéndome perdón por haber rayado la mesa, aunque al final no fue nada.

-Voy a usar el baño de arriba para ducharme. Cuando se duche Chen entra tú.-dije levantándome para fregar mis platos.

Después de ducharme y ponerme el pijama, volví a apuntar todo lo ocurrido en el día en la libreta, incluido lo de mi encuentro con Mike. No sé, quizás en algún futuro podría ser útil.

Cuando terminé de escribir todo me acosté en la cama y apagué la luz con el pie. Sin embargo, mis ojos no querían cerrarse. Aunque estuviera increíblemente cansada no me hacían caso, y seguían mirando fijamente la cara de Baekhyun. Los cerré y me concentré en dejar la mente en blanco para poder dormirme. Pero claro, soy una chica. Venga chicas, decidme, ¿alguna vez habéis intentado dejar la mente en blanco? Efectivamente, nosotras no podemos. Cuanto más pensaba en dejar la mente en blanco, más colorines aparecían.

No recuerdo haber soñado nada, y cuando abrí los ojos de nuevo me encontré que todavía era de noche. Pulsé el botón de la luz del despertador que se encontraba en la mesita de noche a mi lado, y me sorprendí de que éste marcara las tres de la mañana. ¿Tan poco había dormido?

Cerré los ojos de nuevo e intenté dormirme, pero esta vez sí que no hubo forma. Cualquier ruido que hubiera en la habitación me molestaba, y los grillos que estaban fuera de mi cuarto me hacían volver en mí cuando lograba desconectar. Para conciliar el sueño me puse a tararear la canción que me había cantado la reina. Tenía una melodía muy bonita, y me hubiese gustado oír la letra.

Estaba a punto de dormirme cuando noté cómo algo se movía a mi lado. Abrí los ojos de golpe y dejé de tararear la canción para poder escuchar mejor. Pero tan pronto como dejé de cantar, el sonido cesó. Probé a tararear la canción otra vez, y con la poca luz que me proporcionaba la luna vi como Baekhyun se movía.

Esperando que pasara algo, me acerqué a él para que oyera la canción más alto, y empezó a mover las manos como buscando algo. Justo cuando terminé la canción, los ojos de Baekhyun se abrieron, mostrando a un Baekhyun que parecía que había luchado para llegar hasta aquí. Aunque no entendía por qué, si siempre había estado en mi casa, tumbado en la cama.

-Sarang…-dijo con una voz quebrada, a punto de llorar.

No sé qué arrebato le dio pero aprovechando que estaba cerca, Baekhyun pasó ambos brazos por mis lados y me abrazó como si tuviera miedo. Podía notar que estaba temblando, y estaba empezando a sollozar. No sabía muy bien cómo reaccionar, pero decidí corresponder el abrazo para intentar tranquilizarlo.

-Ya está, estás aquí. No pasa nada…-no sé me ocurría qué más podía decir.

Tras casi media hora de sollozos, Baekhyun paró y empezó a respirar con normalidad. Sin embargo, no me había soltado…

-Baekhyun, déjame encender la luz para ver si estás bien…

-¡No, no, no!

Eso me sorprendió. ¿Baekhyun le había dicho que no a la luz?

-Sarang, ¿podemos quedarnos así? Por favor…

-¿Qué te ha pasado?

Baekhyun cerró los ojos y suspiró, apoyando su cabeza en mi pecho. Aunque se supone que en teoría normalmente esta posición tendría que ser incómoda, sentía que en vez de estar abrazando a un chico que probablemente sería mayor que yo, estaba abrazando a un niño asustado de su peor pesadilla.

-Intentaron quitarme mis poderes. Todos los aparatos eran tan dolorosos… Perdí la consciencia, así que no sé cómo escapé de allí. Pero al volver a abrir los ojos no estaba en la Tierra, sino en un sitio con el suelo gris, y los alrededores negros. No había paredes, y por más que corría siempre parecía estar en el mismo sitio. Sin embargo, no sentía que fuera mi yo real. Me sentía muy ligero y no tenía ninguna herida, ni me dolía nada. Y entonces me di cuenta de que no estaba ahí realmente. Era una ilusión.

Baekhyun tuvo que parar para secarse las lágrimas que se habían empezado a formar en sus ojos. Luego cogió aire y continuó:

-O eso creía yo. Muerte, Ira y Furia vinieron a esa habitación, y me dijeron que nunca saldría de ahí. Me enseñaron un portal como el que había hecho yo en EXO, y en él se veía la imagen de mi cuerpo, casi sin vida, cayendo sobre la superficie de la Tierra. Pero a diferencia de lo que ellas pensaban, sí que podía comunicarme con el exterior. Bueno, más o menos. Oí todo lo que decíais, y yo lo único que podía hacer era estar en ese lugar de pie, impotente, sin poder hacer nada. Empezaba a perder la esperanza, cuando te oí cantando. Según iba oyendo la canción noté cómo mis pies se despegaban del suelo y empezaba a flotar. Las hijas de Maldad intentaron hacer que me quedara, pero había una especie de campo de fuerza a mi alrededor. Yo... Pensé que nunca volvería a ver a mis hermanos. Que nunca volvería a verte a ti.

Tuve que apartar una mano de Baekhyun y llevármela a la cara para poderme secar las lágrimas, porque el daño que reflejaba su voz cada vez que hablaba decía lo mucho que había sufrido.

-Ahora estás aquí. No pasa nada.

-Sarang… ¿Podemos dormir así? Hace mucho que no duermo… Mi cuerpo puede que haya dormido mucho, pero yo he estado todo este rato despierto.

No sabía si decirle que sí o que no, porque temía que si le dejaba dormir se volvería a ir. Pero Baekhyun me miraba con una cara que reflejaba tal tristeza y miedo que fui incapaz de decirle que no.

-Pero te quiero despierto por la mañana. No me valen excusas de que las hijas de Maldad te han vuelto a secuestrar…

Conseguí sacarle una sonrisa a Baekhyun, que desapareció tan pronto  como había venido cuando cerró los ojos y se quedó dormido, todo en menos de cinco minutos. Debía estar muy cansado.

Bueno, ahora podía decir que tenía a tres de EXO conmigo. El árbol de mi sueño (y el sueño de todos los demás) seguramente se habría mejorado, y ahora sus hojas multicolores estarían brillando con todo su esplendor.

Lo que me recordó que tenía que actualizar la lista. Mucho.

 

Poderes

 

Xiumin: desconocido

Luhan: desconocido

Kris: desconocido

Suho: desconocido

Lay: curación

Baekhyun: luz

Chen: rayos

Chanyeol: ser muy infantil  fuego

D.O: desconocido

Tao: desconocido

Kai: teletransporte

Sehun: desconocido

 

Bueno, ya casi la mitad de EXO había descubierto sus poderes. Baekhyun se había despertado. Ahora sólo faltaba que el resto de EXO volviera. Y con eso sí que no podíamos hacer nada, salvo esperar.

 

Veis? Lo dicho, subí otro capítulo hoy ^^ A que soy guay? 

Me apetecía usar ese gif...

 

Bueno, ya os quité el susto, ¿no? Nuestro Baekhyun está vivito y coleando.

 

Y aunque me gustaría decir más cosas, no puedo. Me muero de hambre, necesito ir a comer ya.

Ay que mono...

 

Un chu para todos!!

Bueno, no tengo más gifs de chus... Os vale aegyo?

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Thank you!
Yoake3
Que sepáis q no me he olvidado! He estado súper ocupada y con el ordenador roto... T.T El capitulo está en camino!!!

Comments

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miraik #1
me eh enamorado de este finc porfa siguielo.... es muy entretenido y explicable que lindo es¡¡¡¡
elpotodesungmin #2
Chapter 18: Ehmm... Holi ¿? Pasaba por aquí a decirte que tu historia es exTREMADAMENTE BUENA, IMPRESIONANTE, ME HA CAUTIVADO A MI Y A MIS MARES DE EMOCIONES EN CADA CASO Y CIRCUNSTANCIA.
Así que venía a pedirte de la manera más linda posible que por favor ACTUALÍCES PORQUE SI NO LO HACES YOAKE, VAS A SER LA CULPABLE DE MI MUERTE. ¿quieres que muera? Si muero no sabré como acaba esto, pero si no lo sé ahora también moriré.
POR FAVOR, FAVORCITO, ACTUALIZA, ANDA QUE LE HARÁS UN BIEN AL MUNDO.
Mil besos... <3
JungSooSoo
#3
Hey..!me preguntaba si subirás otro capítulo.
No te estoy presionando, pero si acaso ese es el fin me gustaria que lo dijeras.

Te envio muchos besos y abrazos.FIGHTING......!♡♡♡♡☆☆☆☆
JungSooSoo
#4
Chapter 18: Estos últimos días me la he pasado leyendo este fic.Este fic me ha sorprendido gratamente y me ha hecho sentir triztesa,emocion,desesperación,enojo, alegría y hasta me ha hecho rubirizar las escenas románticas(o por lo menos las son para mi).Gracias por esta historia y espero que pronto puedas actualizar.

Te envío un beso y un abrazo y ¡fighting!♥
ZBabyz
#5
Chapter 18: *llora como Tao* HAS ACTUALIZADO AL FIN. OH DEÓH MIO VOY A MORIR, te extrañé mujer. Cada día (y que se sepa que no estoy mintiendo), revisaba mis suscripciones en cuanto veía las letras fosfo naranjas y reaccionaba con un: «¡¿pero donde Chanyeols está mi Yoake?!» porque tu historia me encanta, y me ha gustado más ahora porque metiste a Renata y Ambrosio (sobrenombres especialmente creados como muestra de amor) en la historia. Yo no hubiera gritado, no, no. YO HUBIERA SECUESTRADO A REN DE INMEDIATO. Y A LUHAN, DE UNA VEZ TAMBIÉN. Eh, mentira, que yo no soy sasaeng (¿o sí? *risa de Izma*) Bueno, bueno. A lo que vamos, niños: este capítulo me ha encantado, con todo y las respuestas tan cariñosas (nótese el sarcasmo) que se daban los miembros. Vale, yo creo que soy como ellos, porque me río como hiena por cualquier cosilla. O tal vez me dedique a ser Chen de hoy en adelante. Bueno, ya después continúo con el comentario, y te digo todo lo que me ha gustado.
LA PREGUNTA DE LUHAN POR DIOS. Y YO PENSANDO QUE ESTABA DEPRIMIDO POR LA REGAÑIZA QUE LE DIO SARANG (o por las canciones deprimentes de Mr.Zhang Papa «Lay» Yixing)
ZBabyz
#6
Chapter 17: *Saca su micrófono para todo momento, las bocinas y las cortinas del teatro(?)*
¡LECTORES Y LECTORAS, AUTORES QUERIDOS, OS PRESENTO MI GRAN OBRA MAESTRA! QUE SHAKESPEARE SE PONGA DE RODILLAS ANTE EL MAGNANIMO COMENTARIO DEL CAPITULO 17. *saca su guión y se ahoga con una pelusa* ejernh (tos) Primero que nada, comenzaré con el título. ESHE TITULOW. yo casi lloro, y es que me pongo más sentimentalosa que Magdalena (I lurv chu Magdalena.) cuando me sacan estas cosas, porque ya sabes que los sentimientos y esas cosas. Ay, pero ¿qué no puedo hablar como una persona decente? Bueno, sigamos con el comentario. La primera partecilla, cuando Sarang se queda a un lado como que "¿y a estos que pirifluisti les picó?" me recuerda tanto a mí en todos lados... y no, no. Yo no soy Sarang. Yo soy los tres alienígenas raritos que andaban con ella. Ahora, llegamos al templo, si, ese templo, no Siwon, no el del papa ¡EL DE PIEDRA, SEÑORES! Y yo ahí con mi risota de Maléfica/Malo de telenovela a todo lo que da. Porque mientras a Sarang le daba un patatús cuando vió a los tres extranjeros (la mala parodia de los tri musketirs) flotando con pelos parados, ojitos de foco y pegados como garrapatas a las columnas con personas en vestidito y copos de nieve y unicornios (Y por algo no hago descripciones.) yo estaba a carcajadas imaginándomelos con el pelo flotando, así:
"Tanto que tarde en hacerme el delineado, como para que esas lucesitas no combinen con él. Gosh" Dijo Baekhyun mientras hacia una pose de diva.
"¿Me habeís visto? Tío, ¿me habeís visto? ¡HE FLOTADOOOOOOOOOOO!" Dijo Chen mientras comía naranjas.
"Eh... vale, ¿qué ha pasado? ¡Si yo no recuerdo nada! ¡¿QUIENES SOIS TODOS VOSOTROS?!" Finalizó Lay mientras apuntaba a sus dos hermanos y a Sarang con expresión del Grito de Munch.
"Los hubiera dejado mientras pude, dime Vida, ¿Por qué así?" Susurro Sarang, llevándose una mano a la cara.
El símbolo del guifi. EL SIMBOLO DEL GUIFI POR DIOS. Luhan. Y despues continuo.
ZBabyz
#7
Chapter 17: Y aqui reaparece tu fan número uno, con un teclado muy extraño y que de batalla para manejar. AL FIN ACTUALIZASTE Y YO AQUÍ CASI LLORABA PORQUE NO APARECIAS. Ya después dejo un comment larguísimo acerca de este cap, ¿vale?
FAN NUMBA WUAN OUT.
Cheosan #8
Chapter 16: Hola unni pasaba x aqui cm x centésima vez pra ver si actualizaste plis actualiza este fic me encanta y cada dia q entro en internet miro a ver si haz actualizado xfa unni no nos dejes q la historia hasta aqui
CarolineMinSoo #9
Chapter 16: Actualiza porfasss!!!
julissachacon #10
Esta excelente la historia me encanta sigue subiendo porfavor esta muy interesante