Poco faltaba para el comienzo de las competencias deportivas del colegio y las jornadas pasaron a enfocarse de los libros a los entrenamientos. En cuanto sonaron las campanas que daban pie al primer receso, Namjoo salió corriendo se su salón de clases para buscar a Wheein y llevársela corriendo hasta las gradas de la pista atlética a un costado del edificio, donde las chicas de primer y segundo año se encontraban en pre calentamiento para las próximas pruebas de atletismo. Sentadas en medio de las gradas miraban a YooA estirarse, luciendo su esbelta figura cual pavo real presume sus coloridas plumas.

Namjoo: No sé quién cree que es… alguna reina de belleza o algo así.

Wheein: No le prestes atención, es justo eso lo que está buscando. Además hablando así parece como si le tuvieras envidia.

Namjoo: ¿Envidia yo? ¿Por qué tendría envidia de esa niña malcriada?

Wheein: Será una niña malcriada pero tiene todo lo que desea, y es bastante linda, si no te fijas en lo insoportable que es.

Namjoo: Bueno sí, es cierto, pero aun así me irrita. Mira cómo se amarra la camiseta para dejar descubierto su vientre, escuché de unas chicas que se está presentando a audiciones para convertirse en idol…

Wheein: No entiendo como hay tanto chico de nuestra edad queriendo entrar en ese mundo, he leído que lo que les hacen pasar es inhumano… no sé si valga la pena tanto esfuerzo para algo tan frívolo.

Namjoo: ¿A ti te gusta la pintura no?

Wheein: Si, pero no creo tener el talento suficiente para dedicarme a eso de forma profesional y las artes plásticas son muy diferentes.

Namjoo: El arte es arte, los artistas buscan mostrarle lo que aman al mundo y que reconozcan sus obras. En eso es para todos lo mismo, cueste lo que cueste su meta es llegar a las personas y expresar lo que sienten.

Wheein: En mi caso, prefiero seguir en el anonimato, hasta que me sienta lista.

Namjoo: Prométeme que seré la primera persona a la que invites cuando abras tu primera exposición.

Wheein: ¿Tanta fe tienes en mí?

Namjoo: Claro que sí, eres la mejor. –Afirmó sonriendo. –

Wheein: Entonces te lo prometo. –Declaró contestando su sonrisa. –

Namjoo no mostraba su dulce sonrisa a su fiel mejor amiga hasta que vio a unos metros a la polémica chica de cuarto año venir hacia ellas.

Namjoo: Oh no, mira quién viene ahí…

Wheein: Deja de ser tan celosa.

Namjoo: No lo soy.

Sonoramente la menor que hacia estiramientos en la pista atlética llamo reclamó la atención de Moonbyul.

YooA: ¡¡Byul-yi Sumbae!! –Gritó a la Rubia que se acercaba a las gradas. –

Tomando una botella de agua a sus pies la menor se agachó contorneando su cuerpo en una estrategia seductora que pensaba estimularía a la mayor.

YooA: ¿Puedes venir aquí? …Solo será un momento. –Pidió con suspicaz expresión.−

Moonbyul: Buenos días preciosa, ¿Cómo puedo ayudarte?

Desde sus asientos, Wheein y Namjoo observaban la escena con atención.

YooA: Unnie, hace mucho calor hoy, es… sofocante, ¿Podrías dejar caer un poco de agua por mi espalda mientras me levanto el cabello?

Moonbyul: Esta bien…

La menor volteó recogiendo su cabello con una mano para descubrirse la nuca, su camiseta seguía atada a su cintura, mientras la mayor veía como el agua se deslizaba desde la boca de la botella por la espalda de la menor viajando por el sutil canal que se formaba en la zona de su espina dorsal.

Un cuarto del agua de la botella ya generaba que la tela de su camiseta se pegara a su cuerpo y de reojo YooA intentaba ver el rostro de Byul, comenzó con lentitud a voltear para quedar nuevamente frente a ella. Desde la misma botella la mayor bebió la poca agua que quedaba y la lanzó al suelo.

Moonbyul: Sé lo que estás intentando hacer YooA.

YooA: Unnie… − Susurró con mirada temblorosa buscando los ojos de la mayor.−

Estirando su mano alrededor de la cintura de la menor, Moonbyul la estrechó ligeramente contra su cuerpo y acercando sus labios al oído de la chica de primer año hizo una discreta advertencia.

Moonbyul: Si juegas con fuego, te puedes quemar.

Quedando de una pieza, YooA no movió ni un cabello en cuanto Moonbyul se separó de ella para seguir su camino hasta donde estaban Wheein y Namjoo.

Moonbyul: ¿Estabas escapando de mi Jung Wheein?

Wheein: Namjoo me trajo corriendo hasta aquí.

Namjoo: Si, y no daré explicaciones de por qué quiero pasar tiempo con mi mejor amiga. –Aseveró con antipatía abrazando a Wheein. –

Moonbyul: Okay, Okay, tranquila…

Namjoo: ¿Por qué no nos dejas un tiempo a solas y vas a jugar con tu novia del preescolar?

Moonbyul: YooA no es mi novia, solo quiere jugar…

Namjoo: Y parece que le quedaron ganas de seguir jugando por que viene hacia acá.

La seductora menor subió las gradas para volver a dirigirse a Byul.

YooA: Sumbae…

Moonbyul: ¿No saludarás a tus mayores YooA?

YooA: Aah… sí. Hola… −Dijo con desinterés.− Unnie… Voy a celebrar mi cumpleaños con una fiesta este viernes en la noche y quería invitarte.

Namjoo: ¿Cómo harás eso? Tú vives en el internado, al igual que yo y Byul.

Con desagrado YooA observó a Namjoo sin el menor pudor.

YooA: Mis padres arrendaron una casa para mí, y pagaron a una productora para organizar el evento… −Señaló con desdén hacia las chicas de penúltimo año para volver a sonreír al mirar a Byul.− Asique habrá bar abierto, Dj, espuma… debes ir, por favor…

Moonbyul: Iré, pero… mis amigas vienen conmigo, y los chicos también.

La expresión de YooA se descompuso, pero entendiendo que de no ceder la mayor no asistiría, aceptó su condición contraria a su voluntad y dejó a las tres superiores para volver con su clase.

La calurosa semana llena de evaluaciones y entrenamiento avanzó hasta el día del evento. La pandilla de Wheein habló hasta el último día de qué es lo que iban a vestir para el dichoso evento, cómo iban a llegar, cuanto iban a bailar, y un sinfín de fantasías para esa noche, no obstante a Wheein no le interesaba mucho e iba más a acompañar a sus amigos, que por el genuino deseo de asistir, asique solo se limitaba a reírse de lo emocionados que Chan Suk y Ji Hoon conversan de la fiesta. Los estudiantes más populares de la escuela asistirían al evento, el cumpleaños de la princesa YooA era algo que la mayoría había estado esperando hace semanas y el grupo de Wheein no era el único que hablaba en los pasillos sobre la celebración.

Gracias a los poderes persuasivos de Moonbyul, los padres de Wheein le autorizaron a asistir al evento, ya que el lugar se encontraba hacia la costa a una hora de la casa de la joven, Moonbyul tuvo que convencerlos para permitirle la salida.

Esa tarde Byul mensajeó a Wheein para que fueran juntas a la fiesta, pero Wheein prefirió llegar con Namjoo y su grupo, a fin de no fomentar los celos de su mejor amiga, quien en los últimos días se había estado sintiendo algo desplazada. La pandilla, a excepción de la mayor, se reunió a las nueve de la noche en una parada de bus y tomó el transporte público para llegar al sitio del evento; era una enorme casa con al menos cinco habitaciones, tres baños, una amplia sala de estar y la fiesta ya había empezado cuando llegaron, había mucha gente dentro y fuera de la casa, repartida entre el interior y la parte trasera. Las escaleras hacia el segundo piso estaban bloqueadas por cintas brillantes a modo de adornos que impedían el acceso a las habitaciones.

Vistiendo una chaqueta de cuero negra, sobre una camisa de mezclilla, acompañada de unos pantalones negros rotos a la altura de las rodillas, Byul-yi hacía su siempre imponente llegada al lugar, con el ruidoso rugir del motor de su motocicleta. El grupo de Wheein le esperaba para entrar y en cuanto aseguró el vehículo, dieron entrada al lugar.

YooA, estaba junto a su séquito de amigas sobre una pequeña tarima bebiendo desde unos anchos vasos plásticos de color rojo y orilla blanca. Ella y sus amigas estaban caracterizadas al estilo de la villana de comic Harley Quinn, pero solo ella llevaba el traje del conjunto azul y rojo destacando entre las demás.

Eran las diez y media de la noche y la anfitriona de la fiesta daba por iniciada su celebración de cumpleaños, la música estaba a todo volumen, la casa llena de adolescentes y el alcohol no faltaba de esquina a esquina del lugar. Fue la misma YooA que puso el primer vaso de cerveza en la mano de Moonbyul, dándole la bienvenida a su fiesta.

Moonbyul invitó a Wheein a adentrarse entre la gente para empezar a bailar y a beber, pero eso no era un panorama que entretuviera a la menor, así que negando con la cabeza rechazó su invitación, viéndola finalmente desaparecer entre la gente, al voltear la cabeza Wheein tampoco podía ver a ninguno de sus amigos, de pronto sintió que una mano sujetaba su muñeca. Namjoo tiró del brazo de Wheein antes de que ésta se perdiera de su vista y logró llegar hasta fuera de la caza.

Namjoo: Wow… ¡Esto es una locura!

Wheein: Noche, alcohol, música, adolescentes reprimidos sin vigilancia… ¿Qué esperabas que saliera de esa combinación? –Señaló sonriendo. −

Namjoo: No creí que vendrían tantas personas, más de la mitad de la escuela debe estar aquí.

Wheein: Hay gente a la que jamás había visto…puede que también hayan venido de lugares fuera de la escuela. Quedémonos aquí, antes de que se forme una pelea.

Namjoo: Primero vamos a buscar comida y si vemos a alguno de los chicos en el camino los arrastramos con nosotras.

Wheein: No me voy a hacer cargo de nadie, cada uno sabe lo que hace.

Namjoo: ¿Quieres que deje a Ji Hoon ahí?

Wheein: Es cierto, debemos ir a buscarlo, pero no responderé por Chan Suk y Jae Hyun.

Ambas volvieron a entrar para buscar a los chicos, Wheein acordó esperar a Namjoo cerca de algún lugar con snacks o lo que encontrara para comer mientras Namjoo veía la posibilidad de localizar a alguno de sus amigos.

Después de chocar contra varios chicos besándose, bebiendo y bailando, que apenas y dejaban espació para hacerse camino al avanzar, con toda velocidad Namjoo arrebató de las manos de Ji Hoon un vaso de vodka cuando lo encontró casi echándoselo a la boca, para luego darle una palmada detrás de la nuca, ahuyentando de Ji Hoon todas sus ganas de beber.

Namjoo: ¡Hay ley seca para ti esta noche! −Gritó intentando hacer escuchar su voz por sobre el fuerte sonido de la música. –

La chica tiró de la chaqueta de su mejor amigo sacándolo de ahí, arrastrándolo otra vez a las afueras de la casa, Wheein ya había logrado salir y ya se había instalado a un lado de una larga mesa cubierta de bocadillos.

Namjoo: No pude ver a los demás. –Comentó preocupada a Wheein. –

Wheein: Deben estar intentando conquistar a alguna chica de segundo o primer año, seguro volverán luego. –Señaló intentando calmarla.−

Namjoo: Espero que sí, y también espero que no tengamos que cargarlos borrachos de vuelta a casa…

Wheein: Yo creo que si alguno bebe de más lo más prudente sería quedarnos aquí hasta que amanezca, ya vi a Byul bebiendo.

Namjoo: ¿Y tus padres no te dieron una hora límite?

Wheein: No, vine con Byul, me dejaron “a su cargo”, que ridículo, seguro ella va a ser la primera en perder la conciencia esta noche.

Ji Hoon: Exageran, no creo que sean así de desconsiderados… −Acusó con tono inocente.−

Namjoo: Tú no tienes derecho moral a decir nada, si hubiese llegado diez minutos más tarde, probablemente te hubiera encontrado ebrio.

Ji Hoon: Claro mamá. –Contestó con ironía. –

Namjoo: Si fueras mi hijo, no estarías aquí.

Wheein: Ya, déjalo en paz. Sólo quería divertirse un poco…

Al escuchar la defensa de su Noona, Ji Hoon de inmediato le abrazó por la cintura y mostró su lengua a Namjoo en gesto de burla.

Namjoo: ¿Y así quieres que no te trate como a un niño? Está bien, me rindo, comamos algo y divirtámonos…−Accedió cambiando su gesto de preocupación por una sonrisa. –

Wheein: ¿A eso vinimos no?

La líder del grupo tomo un par de vasos de refresco de la mesa y los sirvió a sus amigos. Después de un par de horas riéndose de bromas sin sentido que probablemente solo ellos entendían, algo de baile y más que nada llenar sus estómagos de bocadillos y gaseosa, los tres decidieron dejar el jardín trasero de la casa donde también habían muchas personas en todos lados, para entrar a la casa para ver que ocurría, solo por curiosidad, se introdujeron con cuidado para no perderse los unos a los otros entre la gente y llegaron al centro de la sala de estar, en donde un gran circulo de personas se encontraba sentado sobre una alfombra alrededor de una baja mesa de cuatro patas en medio.

Sin mucha sorpresa frente al hecho, encontraron que el resto de su grupo estaba sentado en el círculo, la cumpleañera evidentemente pasada de tragos sentada en una de las esquinas del circulo levanto los brazos con una botella vacía de cerveza en su mano para gritar, “¡¡Que gire la botella!!”, mientras reía fuera de toda cordura, como si el personaje del cual se había caracterizado se hubiese apoderado de ella.

Wheein: Vamos a fuera, no hay mucho que ver aquí… −Sugirió volteándose hacia la salida otra vez.−

Ji Hoon: No, quedémonos… ¿En serio no te parece interesante?

Namjoo: Oh si, a mí también me parece que hay mucho que ver aquí… −Dijo con suspicaz mirada.−

Wheein: Son un par de morbosos… −Río.−

Ji Hoon: Quédate con nosotros o quizás no te vamos a poder encontrar después, además si a Jae Hyun o a Chan Suk les toca besar a un chico, tendré mucho material para molestarlos después.

Wheein: Okay, Okay me quedo.

De los cinco primeros turnos, tres de ellos fueron para Moonbyul con unas chicas de segundo año, YooA intento cancelar los turnos pero los participantes abuchearon su poco respeto contra la dinámica del juego, así que Byul terminó besando a las tres chicas. Pasado unos minutos también salió elegido por la botella Jae Hyun, pero para decepción de Ji Hoon también tocó con una chica. Moonbyul no volvió a salir para la frustración de YooA, y en su contrarió fue besada por Chan Suk y el muy infantil celebró aquel beso como si hubiera anotado un gol su equipo favorito de Futbol. Tanto Chan Suk como Jae Hyun y Byul parecían estar bastante alcoholizados pero sin duda la más tambaleante era Byul que con dificultad se levantó des suelo mareada e inestable.

Terminado el juego, todo el mundo de supo de pie para volver a bailar, sin perder el tiempo ni las ganas lo primero que hizo YooA al ponerse de pie fue caminar hasta Moonbyul para abalanzarse sobre ella y tomando entre sus dedos que se asomaban por sus guantes inspirados en cuero rojo el rostro de la mayor, le quitó el aire con un apasionado beso, que no parecía se detendría.

Las manos de Moonbyul a pesar de reaccionar tardíamente, se aferraron a la cintura de la menor, solo cubierta por una camiseta de malla calada. Wheein vio toda la escena, y sonrió nerviosa con un dejo de incomodidad, su amiga de la infancia siguió su mirada intentando descifrarlo que Wheein estaba pensando, pero ni la propia Wheein en ese segundo sabía muy bien que pensar al respecto.

Namjoo: Vamos a buscar a los chicos, ahora sabemos que están cerca. –Indico distrayendo a propósito su atención. −

Wheein: Si… vamos. −Respondió reaccionando.−

Ambas con la ayuda de Ji Hoon encontraron a Chan Suk y a Jae Hyun, los arrastraron hasta afuera y los sentaron a un lado de la larga mesa de bocadillos en un par de mesas de jardín. Les llamó la atención que habían bocadillos esparcidos por el suelo y tal parecía que varios vasos de refresco se habían volteado sobre la mesa, habían servilletas empapadas pegadas al mantel, todo era un desastre.

Namjoo: Yo y Ji Hoon intentaremos tranquilizar por un momento a estos dos, ¿Podrías ir a la cocina en busca de un par de tazas de café? A ver si así les devolvemos un poco la sobriedad. –Pidió a Wheein.−

Wheein: Si, yo me encargo.

Namjoo: E intenta volver acompañada de Byul. Ella es una de nosotros ahora…

Wheein: Haré lo que pueda…

Nuevamente la chica del hoyuelo entró en la casa, escurriéndose entre la sala de estar que seguía convertida en pista de baile llegó hasta la cocina. Abrió los estantes y encontró una lata que en su interior contenía café, de todos modos lo olfateo para asegurarse y salando dos tasas de una repisa, busco algo para hervir agua. Estaba demasiado enfocada en su tarea para darse cuenta que su amiga perdida estaba asomada por el umbral de la puerta observándole.

Moonbyul: Hola preciosa, ¿Necesitas ayuda?

Wheein: Así que apareciste… −Comentó sin darle demasiada importancia a la presencia de su compañera. −

Moonbyul: ¿Estás enojada conmigo? – Preguntó algo balbuceante. –

Al escuchar la débil modulación de la mayor volvió la mirada en su dirección.

Wheein: Moonbyul ven aquí. –Le exigió.−

Moonbyul: Yo voy donde tú me pidas Jung Whee In.

A distorsionado equilibrio la mayor dio un par de pasos hacia Whee In, ella tomo su rostro para ver su difusa mirada más de cerca, y con sus pulgares bajó los parpados de Byul para examinarla más cuidadosamente.

Moonbyul: ¿Qué? ¿Acaso tú también quieres besarme? Me gusta esa idea…

Wheein: Estas ebria.

Moonbyul: Wuaa… −Exhaló.− ¿También sabes de medicina? ¿Por qué eres tan perfecta? ¿No quieres ser mi enfermera?

Wheein: Aigooo… de verdad estas borracha…. Aunque esas estupideces sé que las dirías incluso sobria…Seguro no comiste nada antes de venir y comenzaste a beber con el estómago vacío.

Moonbyul: No me regañes, por favor, porque realmente te amo más cuando lo haces. –Rogó mientras como peso muerto abrazaba a la más joven.−

Wheein: Byul-ah… Byul-ah, estás asfixiándome, ¿Por qué pesas tanto? cielos, esto es difícil… −Dijo intentando lidiar con el cuerpo semi inconsciente dela mayor.−

Moonbyul: Soló bebí como siete vasos… −Confesó mostrando sus palmas abiertas como si estuviese señalando el número.−

Wheein la ayudó a sentarse en un rincón del piso de la cocina mientras terminaba las tasas de café.

Wheein: ¿Sabes que voy a hacer?, voy a buscarte algo de comer. ¿Quieres un Sándwich? Te preparare uno y lo comerás junto con un café que también te prepararé.

Moonbyul: Comeré todo lo que hagas para mí.

Wheein: Muy bien, entonces dame un segundo y tendré todo listo.

Rápido y tal como declaró Wheein preparó una taza de café más y después de seguir revisando todos los lugares de la cocina de YooA, preparó el Sándwich para Byul-yi sin tomar más de cinco minutos. Se agachó y puso la pieza de comida entre los dedos de la rubia buscando nuevamente su perdida mirada.

Wheein: Cómelo, el pan debería absorber un poco del alcohol que hay en tu estómago.

La mayor vio su reflejo en el lustroso refrigerador de la cocina, mirando confundida como el contorno de su boca estaba rojo, y su nariz estaba blanca, si comprender que había sido el maquillaje de YooA que había manchado su rostro.

Moonbyul: Jung Wheein… me veo como un payaso triste, mírame. Así soy ¿Verdad?

Wheein: No, es solo pintura.

Moonbyul: ¿Pintura? Y como llegó hasta ahí.

Wheein: ¿Estás diciéndome que no lo sabes?

Moonbyul: No, no lo sé, pero no la quiero…

Dejando la comida de lado, frenéticamente y con brusquedad la menor empezó a frotarse la cara con sus manos angustiándose casi hasta el pánico porque el rojo pasaba de su boca a sus manos.

Wheein: Espera, espera, te estás haciendo daño.

Moonbyul: No se quita… ayúdame… −Rogó con ansiedad.−

La más joven volvió a ponerse de pie, estirando sus piernas, fue hasta el lavaplatos y mojó un poco de papel, y volvió a flectar sus piernas para ponerse en cuclillas frente a Moonbyul, sostuvo el rostro de la mayor entre sus manos y delicadamente arrastró el pañuelo de papel sobre su nariz, y luego sobre sus labios para quitar la pintura y con eso la angustia de la rubia. Con el rostro ya limpio volvió el papel sobre su mano y acarició nuevamente con el pañuelo dedo por dedo hasta la palma para borrar el maquillaje, mientras Byul miraba atónita con el cuidado, cariño y dedicación que la joven le cuidaba. Al terminar, Wheein pretendía levantarse y llevar ambas tazas de café a los dos borrachos que quedaban en el jardín, pero la mayor se aferró a su mano sin dejarle marchar.

Moonbyul: No te vayas… quédate conmigo.

Wheein: Tengo que llevar esa bandeja afuera, quédate aquí y come lo que hice para ti, volveré pronto, te lo prometo.

Con inseguridad la mayor le soltó, confiando en que Wheein cumpliría su palabra.