*PVP Krystal*

-Odio Los Lunes, murmure tallando mis ojos mientras sentía como el carro se movía a una fuerte velocidad, -y odio que conduzcas rápido-, mire el camino.

-Yo odio que te levantes tarde y aun así lo ases, gruño mi novia tratando de concentrarse enfrente con los hombros tensos.

-Las semanas pasan tan jodida mente rápido, susurre aburrida jugando con unos llaveros que tenia amarrados a mi mochila como adornos.

-Ya lo creo, suspiro.

Mi celular vibro de imprevisto y lo saque de el bolsillo de mi sudadera, puse la contraseña y la pantalla se desbloqueo, abrí la bandeja de mensajes y allí estaba uno nuevo de Jonghyun. Sonreí.

-¿que es lo que te hizo sonreír tan de repente?, pregunto Amber molesta.

-Un mensaje de Jonghyun, su rostro se ilumino en cuanto escucho el nombre de nuestro amigo.

-¿que es lo que dice?, observe la pantalla y leí.

"Hola, ¿hace algún tiempo que no hablamos cierto?, pero tengo buenas noticias...Regreso a Corea, ¿estas feliz?, no me has informado nada de tu vida...necesito ponerme al día, Tengo otras buenas noticias pero me gustaría ver tu rección cuando te las diga. Llegare inesperadamente así que espérame."

-¿Y bien?, hablo amber rompiendo el silencio.

-Santa mierda, susurre, -¡¡JONGHYUN REGRESA!!-, chille.

-¿En serio?, pregunto sorprendida, -Hace demasiado tiempo que no le vemos por aquí-, asentí emocionada.

-Ya quiero verle, mi sonrisa se ensancho.

Las clases en el instituto pasaron realmente lento, mi cabeza como siempre estaba en otras partes, al salir como siempre camine a casa, no pude evitar sonreír cuando recordé a Jonghyun, seguramente Amber también se sentía emocionada o incluso se sentía mas feliz que yo.

Llegue a casa, todo estaba silencioso, registre cada parte de la casa y como me lo había imaginado Amber no estaba así que aproveche para entonces hacer la tarea que tenia, estuve un rato vagando por Internet hasta que dieron las 5 de la tarde. Miraba el reloj impaciente, pero Amber no llego.

No había comido nada porque en realidad no tenia Ambre, camine hacia la habitación y me acosté en la cama sintiendo como mis parpados pesaban y de un momento a otro ya estaba dormida. Los minutos o quizá las horas pasaron cuando escuche que la