Ahí se encontraba ella, cambiada y casi lista para salir, la mirada que tanto quería se le posaba en el cuerpo con lujuria y deseo.

-Ni lo pienses. –La detuvo antes de que terminara de acercarse.

-¿Para qué te vistes tan y cuando no me das nada? Te gusta torturarme, es injusto.

-Merecido te lo tienes. Voy a salir.

-¿A dónde?

-A casa de Namji, ya te había contado que veré a las chicas.

-No vayas. –Se le puso en frente impidiéndole el paso.

-Baby Jung, nunca pedí tu permiso. –La rodeo escapando.

-¿Por qué continua mi castigo si ya pasaron dos semanas de aquel día? También te castigas tu o acaso no extrañas todo lo que te provoco?

-Todavía puedo vivir sin ello unas semanas y mientras sea una tortura para ti sirve.

-Es suficiente ya, Sica se encuentra bien y no fue mi culpa, ella es la mayor debe cuidarme no yo a ella.

Hyuna se regresó para repetirle lo que ya le había dicho días atrás. -Tu hermana nunca había bebido tanto y tú lo sabias, también que se mareara con pocas copas, aun así pediste cocteles como si tuvieras una fiesta privada.

-Y Fany casi me mata y me he disculpado y tú me tiraste una cubetada de agua fría al siguiente día, no es eso suficiente? –Reprochaba, ahora esas acciones le parecían pasadas.

-Cuando regrese. . .-Formo una sonrisa en sus labios, era tiempo de que se acabara. -Tu castigo va a terminar.

-¿Qué tal si no te dejo ir? –La abrazo por la cintura con fuerza. –Esposa.

-Soojung. . . –Era conducida a la cama, fue sentada en el borde y su vestido comenzaba a ser subido.. -¡Krys! Estate quieta.

Llevo sus manos bajo ese vestido hasta llegar a su ropa interior. -Wanna make love, Wanna make love song, hey baby. –Canto el verso de cierta canción.

Hyuna se dio por vencida y dejo de poner resistencia. -Hazlo sin cantar.

-Esta no te la he cantado y es más linda que las demás.

-Solo no cantes y házmelo rápido. –Se levantó un poco para que Krystal pudiera quitarle la ropa interior.

-Desesperada. –Justo llevaba la prenda íntima por las rodillas de su esposa la puerta de la habitación se abrió

 -¡Tiffany! –Krystal le subió la ropa interior de nuevo. -¡Llama a la puerta!

-¡La tenían sin seguro! –Les había dado la espalda.

-Es nuestra habitación. –Le recordó Krystal.

-¡Cuando vayan a hacer sus ersiones ciérrenla! –Se giró para mirarlas. -¡Mi hija puede entrar!  

-Eunbi no puede abrir puertas. –Dijo Hyuna.

-¡Claro que puede! Le cuesta trabajo pero puede y a ustedes les cuesta tanto contenerse.

-¿Qué ocupas? –Pregunto Krystal molesta.

-Se las iba a encargar para sorprender a mi gatita la cual fue a casa de Gyul pero ahora creo que nunca más les dejare a Eunbi.

-Tampoco hacemos cosas delante de ella. –Se excusó Hyuna.

-¿Y las mordidas que se dieron frente a ella así como los besos?

-Eso es por. . . –Krystal no tenía una justificación a ello.

-¿Y lo de baby Jung? Pensaba que eres bebe de Hyuna.

-Lo soy. –Lo dijo feliz para ganarse un golpe por parte de Tiffany. -¡Hyun! Me pego. –Hyuna le acaricio el rostro a su esposa consolándola.

-La traumaron también con el cuento de la hermana, eso fue demasiado. –Ahora golpeo a Hyuna.

-¡Auch! –Se quejó. -Nosotras no le dijimos nada.

Tiffany estaba por golpearla de nuevo pero Krystal alcanzo a tomarle el brazo. –Lo arreglaremos, enserio.

-¡Mídanse! Tan solo es una niña inocente y quiero que lo siga siendo hasta que tengo 30 años.

-Ni metiéndola a un convento. –La Jung menor casi se gana otro golpe.

-Nos vamos a medir, lo prometemos. –Se apresuró a responder Hyuna.

-Nada de besos ni mordidas. –Les sentencio obteniendo miradas de queja. -Todo eso pueden hacerlo aquí a puerta cerrada. ¡Puerta cerrada! –Repitió para que les quedara claro. –Con seguro.

-Entendido. –Dijeron al unísono.

-Hyuna va a salir pero yo puedo cuidar a Eunbi si quieres. –Se ofreció Krystal temerosa.

-No. Esperare a Jessi como buena mujer. –Salió de la habitación cerrando la puerta tras ella.

Las esposas pudieron respirar tranquilas sin embargo ya no pudieron continuar lo anterior, Hyuna se marchó a casa de su amiga y solo se despidió de Krystal con un pequeño beso.

-Por culpa del fantasma. –Se quejó ya sola en la habitación, se le ocurrió ir a fastidiar a su unnie en venganza. -¿Fany? –Ella si llamo a la puerta antes de entrar.

-Pasa.

Cuando entro la vio guardar una caja en el armario y encontró a la pequeña tomando una siesta. -¿Y eso?

-Un paquete el cual no es de tu incumbencia y si lo tocas le contare a Jessica todas la inmoralidades que has hecho delante de Eunbi, no tendrá piedad.

-¿Es algo tan erso como para que me amenaces así? diablo con cabello negro. –Recibió la mirada de fuego. -Cuéntame que es y no digo nada. –No recibió respuesta. -Adivinare, son juguetes de esos, para que puedas usarlos necesitas a Eunbi lejos, si me los muestras yo puedo cuidártela cuando quieras.

-Puedo obligarte a que la cuides sin necesidad de mostrarte, no olvido el mal estado en que me trajiste a Jessica hace dos semanas, sé que del todo no es tu culpa pero si pudiste evitarlo.

Krystal se acostó al lado de Eunbi. -Princesa tu mami siempre me culpa de todo, ya dejo de quererme, no soy su hermanita.

-Deja de hablarle le vas a causar pesadillas.

-¿Vez? –Se volvió a Tiffany. -Ya no me quieres.

-No son juguetes de esos, tal vez luego sepas que es de todas formas que quieres?

-Un abrazo de mi unnie favorita. –Extendió sus brazos y después de varios segundos fue correspondida. –Extraño salir contigo.

-Saldremos pronto, las cuatro, cinco. –Se corrigió su pequeña también era importante. -Puede que el próximo fin, la semana la tendré ocupada con sesiones fotográficas y seguramente tu estas gravando todavía.

Krystal asintió espero un momento y saco un tema que debía investigar. -Unnie ahora Hyuna es la señora de Jung, cuando tú y Jessica se casen que apellido

-Yo no me voy a casar con tu hermana.

-¿Por lo del pasado?

-Voy a salir a comprar la cena, cuida a mi princesa, no importa que este dormida.

Gyuri recibía a Jessica.

-Jessica la sobreviviente.

-No te burles.

-¿Hasta hoy te levantaron el castigo?

-En realidad ni me castigo. Me ataco psicológicamente. –Tomo asiento en el sofá.

-Suena aun peor. –Gyuri se sentó frente a ella.

-Lo es, y ya sabes que estuve devolviendo toda la madrugada y parte de la mañana siguiente, Fany dijo que ese era mi castigo y karma porque la angustie toda la noche.

-Ahora hasta dramática es.

-Debió preocuparse en verdad, veía sus llamadas y simplemente no podía responder, hasta el celular se me cayó en el intento.

-¿Se rompió?

-De hecho lo perdí después de eso y luego ya no recuerdo nada hasta la parte donde estoy fuera de casa arrastrándome.

-Qué vergüenza.

-Luego estoy en el baño de casa y Tiffany está a mi lado.

-¿Viéndote vomitar? Qué asco.

-Atendiéndome.

-¿Te lo hizo en ese estado? –Bromeo

-Te voy a matar Gyuri.

-Fue una pequeña broma, ya sé que tu amada te cuidaba.

-La amo tanto. –Una sonrisa enorme apareció en su rostro seguida de un suspiro.

Gyuri se rio un poco ganándose una mirada fría, era increíble como Jessica podía pasar de felicidad a frialdad. -¿Conseguiste aquello? –Prefirió pasar al tema causa de la visita.

-Yul lo consiguió, ella fue la que la vendió a petición mía. ¿Recuerdas? Cuando era la más estúpida de Corea. –Le entrego un sobre.

-Ya no te culpes por ello. ¿Cuánto estas dispuesta a pagarle?

-Hasta el doble del valor.

Gyuri quedo en shock. –Eso es mucho.

-Confió en que eres una hábil negociante, de no ser posible ofrece el doble y dudo que se reúse. –Se levantó del sillón y camino a la ventana.

-¿Y si a Tiffany no le parece?

-A veces hay que arriesgarse. –Recordó el consejo de su hermana. –Esa mansión fue construida al gusto de Fany, para que viviéramos ahí. –Nostalgia se reflejó en sus ojos un momento. -Tengo que recuperarla, cueste lo que cueste.

Gyuri comprendía lo importante que era la mansión. -Sera tuya, de eso me encargo yo. –Hablo con decisión.

-Lo dejo en tus manos.

Paso el resto de la tarde con Gyuri y otra parte de esta con Minyoung a quien le conto sus deseos y a la vez temor sobre pedirle matrimonio a Tiffany, su amiga la animo lo que le dio valor, por desgracia todo se vio perdido cuando llego a casa, Krystal la recibió y le conto rápido lo que Tiffany le había dicho.

Ya ni siquiera fue a la habitación, se quedó en la sala con sus ilusiones muertas y culpándose de nuevo por el pasado que se suponía ya había quedado atrás, al parecer la atormentaría todavía.

-Eso no es tan importante, igual viven juntas es como si fueran –Krystal quería animarla.

-Por favor déjame sola.

La menor regreso a su habitación pero antes le aviso a Tiffany que Jessica había llegado, al parecer no la escucho llegar porque jugaba con Eunbi.

-Mommy. –La pequeña se acercó con emoción, Tiffany le seguía el paso. -Vamos a jugar fuera.

-Es tarde princesa.

-Es mi culpa, pensé que llegabas más temprano y le prometí que iríamos a los juegos en cuanto llegaras.

-Mommy.

-Vayamos. –Sorprendió a Tiffany. -Hay que cumplir las promesas. ¿Verdad?

-Sera poco tiempo princesa, ya es noche. –Advirtió Tiffany a una sonriente Eunbi.

Salieron al parque más cercano, se hallaba vacío preocupando un poco a la Jessica además de que seguía triste con lo que Krystal le había dicho.

Eunbi había soltado la mano de sus madres para ir a los juegos.

-Es seguro, debe de haber uno de esos policías que da rondas al lugar y eso. –Dijo Tiffany intentando calmar a Jessica. –Y tengo gas pimienta en mi bolsa.

-Vienes preparada.

-Siempre lo traigo por si en la agencia cierta idiota me fastidia de nuevo.

-¿Ya no lo hace?

-No puede, aunque algunas veces mi vestuario casualmente resulta perdido y se retrasa un poco la sesión.

-De todas formas no uses eso en ella, la puedes dejar ciega y no quiero que te metas en problemas por alguien que no vale la pena.

Tiffany asintió y pego sus labios a los de Jessica hasta que Eunbi las jalo para pedirles que la llevaran a los columpios. Fue ahí donde la pelinegra noto que Jessica no se encontraba del todo bien pues tenía la vista perdida mientras empujaba el columpio.

-Sonríe Jessi, les tomare una foto. –La rubia solo asintió todavía con su expresión triste. –Princesa foto.

-No quiero este. Al otro. –Pedía un columpio grande.

-Es para niños mayores, si subes te puedes caer y te vas a lastimar.

-¡Mami! –Protesto.

-Vas a subir con mommy entonces.

-¿Qué? –Jessica se notaba perdida apenas y escucho que Tiffany menciono mommy.

-Quiere subir al otro columpio sube con ella, yo las empujo. –Jessica asintió tomando a Eunbi en sus brazos y avanzando al otro columpio. -¿Estas bien?

-Me distraje un poco. Empújanos despacio. –Se colocó en el columpio con Eunbi en su regazo.

-Seré cuidadosa de todas formas agárrate bien. –En cuanto la rubia se acomodó bien Tiffany empujo despacio. -¿Por qué estas triste?

-No lo estoy. Estoy feliz, me estoy divirtiendo con ustedes. Empújanos más Tiff. –Las empujo un tiempo más hasta que se dieron cuenta que Eunbi se había quedado dormida, se la paso para poder salir del columpio. –Eres buena mami.

-Tú no sabes mentirme. ¿Qué te ocurre?

-Recordé momentos del pasado de cuando arruine

-Cuando nos conocimos. –La corto, indispuesta a recordar lo malo atino a mencionar ese primer encuentro. -Tenías a tu bebe, la primer sesión de fotos que tuve aquí fue para tu artículo, jamás olvidare eso.

La expresión de Jessica se relajó, incluso comenzaba a alegrarse. -Estaba muy nerviosa ese día porque tú eras demasiado bella para mis ojos, hasta estuve celosa de Tae porque ella podía captarte con su reflector y tenía oportunidad contigo ya que no estaba comprometida.

-Y realmente no tenía ninguna oportunidad porque no es mi tipo. Tú eres mi tipo, rubia y y linda. . . –Le regalo una de sus famosas eye smile. -Que vestía mal.  –Completo para que las dos rieran. -Gatita recordar el pasado está bien siempre que no sufras con él, cada momento ha valido la pena y si hemos estado separadas

-Ya no importa. –Rápido supo completar. -Ahora estaremos juntas por el resto de nuestras vidas.

-Mejor no lo pudiste decir. Ven y abrázanos y también bésame. –Uso un tono exigente y lindo a la vez con el cual Jessica no se iba a reusar, las envolvió con sus brazos con la fuerza necesaria para no apretar demás a la pequeña y seguido de ello unieron sus labios en una serie de besos cortos.

Una semana después Tiffany cumplió lo que le prometió a Krystal y salieron las cinco a lotte world, Eunbi se veía asombrada, no era la primera vez en un parque tan grande pero si había pasado tiempo desde que estuvo.

-Ya saben cómo deben comportarse. –Jessica advirtió a las esposas quienes asintieron con fastidio.

-Al carrusel. –Tiffany se mostraba emocionada.

-NO. –Hablaron las esposas.

-¿Qué tienen en contra del bonito carrusel? –Pregunto Jessica.

-Ustedes son unas obsesionadas con ese juego. –Recordó Hyuna. -Eunbi tiene que subirse a todos no solo al que sus madres elijan.

-Es temprano, hay mucho tiempo para subir a todos.

-Eunbi el carrusel es feo, salen monstros y

-Te voy a dar tus monstros a palos –Jessica corto el nuevo trauma que Krystal casi le causa a la pequeña.

-Princesas no perdamos tiempo. –Tiffany avanzo con la pequeña en brazos.

-No quiero carrusel.

-Te está mintiendo como con lo de la hermana.

-¿Qué hermana? –Jessica no sabía eso.

-Vayan, vayan al carrusel. –Ahora las animo Hyuna. -Nosotras iremos a comprarte un algodón de azúcar y otro a tu mami en color rosa. –Le sonrió a su sobrina.

-¿Y a mí? –Pregunto Jessica.

-Nada. –Krystal tomo la mano de su esposa y se fueron por otro camino.

-Te daré del que me traigan. –Tiffany dijo antes de que por fin fueran a subir al carrusel.

Ese juego mecánico les traía un recuerdo muy lindo, formarían uno nuevo aún más lindo porque tenían a su pequeña con ellas, la cual le encanto el carrusel que pidió subir de nuevo.

-No puede ser le ha gustado. –En una banca cercana observaban Hyuna y Krystal.

-La excéntrica de Tiffany es capaz de comprar uno para casa. –Krystal conocía lo exagerada que podía ser la modelo.

-Ya lo creo salvo porque no hay lugar.

-Habrá mucho cuando Jessica compre la ma…

-¿La qué? ¿Va a comprar una casa? Cuéntame, no me ocultes cosas.

-Es que. . . Te diré. –Se resignó. -Promete que no le contaras a Fany unnie.

-Lo prometo.

-La mansión que antes mando construir Fany, la que se vendió. –Hyuna asintió acordándose. –Sica ya sabe quién la compro, la usan como casa de descanso.

-Que desperdicio.

-Hará lo posible por recuperarla y se la pensaba obsequiar como regalo de bodas, aunque esa boda al parecer no se dará, Fany no se quiere casar.

-¿Ya se le propuso?

-Me mando investiga