Cuarenta y dos
Bestia42
Unas horas después regresamos a casa, pero cuando llegamos papá estaba allí, viendo las noticias de la mañana en la CBS. La imagen detrás del reportero decía, "¿Monstruo en el metro?" Y mostraba a una criatura parecida a un lobo. La corbata de papá estaba suelta. Parecía desaliñado.
—¿Sabes algo de esto, Taeyeon? —Gesticuló hacia la televisión, al parecer sin notar el cambio en mí.
—¿Por qué debería? —Me encogí de hombros—. Obviamente, no soy una bestia.
Entonces, alzó la mirada.
—No, no lo eres, ¿no es así? ¿Cuándo ha pasado?
Quería saber si había pasado antes o después de la historia de las noticias. No respondí a su pregunta.
—Papá, esta es Tiffany.
—Encantado de conocerte, Tiffany. —Le ofreció su mejor sonrisa de presentador, al mismo tiempo arreglándoselas para tomar nota de su camiseta Jane Austen, sus viejas zapatillas, y sus vaqueros sin marca, mientras obviaba por completo su cara. Típico. ¿Acaso le habría matado hacer contacto visual con ella?—. Bueno, esto se merece una celebración. ¿Salimos a desayunar? -.Típico también. Ahora que yo era normal, estaba dispuesto a pasar tiempo conmigo. Miré a Tiffany. Y ella arrugó la nariz.
—Creo que no —dije—. Tengo que ir a hablar con Soo y Magda, ya que ellos han estado conmigo todo el tiempo. Y después voy a dormir. Llevo fuera toda la noche. —Disfruté viendo su cara cuando dije eso—. Pero eh, lo haremos pronto. — Como en un año o así.
Después de que se fuera, subí a buscar a Soo.
Eran apenas las cinco, así que por supuesto Soo estaba dormido cuando llame a la puerta. Llamé más fuerte.
—Adrian, tal vez deberías esperar hasta más tarde. Está dormido. —Tiffany se inclinó hacia mí—. Y se me ocurren otras formas de matar el tiempo. Te he echado mucho de menos.
—Yo también. —La besé. Pensé en el invierno. Había estado tan muerto
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