CHANGE OF PLANS

En cuanto la morena entró a su habitación, fue atacada por preguntas de parte de la rubia y la pelinegra pero Yuri simplemente negó a cada una de ellas, pues no halló respuesta o mejor dicho no encontró la forma de evocar alguna palabra, pues cada vez que intentaba abrir su boca para hablar, un nudo de tristeza, rabia e impotencia se posicionaba en su garganta, Taeyeon en cuanto comprendió lo sucedido intentó tomar su arma para vengarse pero Hara le detuvo ipso facto, ya que para ninguna era conveniente que por su acto de imprudencia se descubriera quien era el caballero de uniforme negro…

-nos hemos quedado solas-musitó la rubia con la mirada pérdida

-no se han quedado solas-alentó Hara-aún se tienen la una a la otra además de que cuentan conmigo-Taeyeon sonrió débilmente y luego observó a Yuri, la mujer frunció con perspicacia su entrecejo

-¿qué tienes ahí?-cuestionó señalándole los brazos, la morena titubeó un poco y luego dio dos pasos hacia atrás con nerviosismo-¿Yuri?

-le prometí al vizconde que la cuidaría-susurró al mismo tiempo que dejaba al descubierto aquel "paquete"

La rubia abrió sus ojos de golpe-que sea un  perrito-dijo con miedo pero para su sorpresa era la pequeña Soonkyu-¡diablos!-exclamó al ver a la bebé fruncir sus cejitas a causa de la tenue luz que había en la habitación

-pequeña ternurita-habló eufórica Hara mientras la cargaba en sus brazos

-yo prometí cuidarla-susurró pero la rubia solo negó mientras empezaba a dar vueltas por la habitación, realmente estaba preocupada

-no debiste prometerlo, no somos responsables…-Taeyeon se llevó sus manos a la cabeza en señal de desesperación

-no podía hacer nada mas-se defendió Yuri-pudo morir

-¡diablos!-exclamó nuevamente la más baja, escuchándose esa última palabra antes de que la pequeña abriera sus ojitos y soltara un gemido que inundó aquella habitación, el llanto provocó en la mayor de todas un largo y pesado suspiro…

De esa forma, desde aquel momento la tranquilidad para aquellas mujeres cambio por completo, pues la pequeña rubia se había encargado de llorar toda la noche y mientras el sol salía, de esa misma forma se hacían presente grandes ojeras en los rostros de las mayores; entrada la mañana y ya harta Taeyeon tomó a la pequeña en sus brazos…

-¡mocosa!-le espetó enojada y la rubiecita paró de llorar un instante, mirándole con molestia frunció sus pequeños labiecitos y volvió a llorar esta vez con más fuerza

-¡ay por Buda!-exclamó Yuri al cielo

-¿y si le damos de comer?-propuso Hara en medio de un bostezo

-no creo que sea hambre, ya se ha tomado 4 teteros de leche-acusó Taeyeon

-mécela un poco-habló la morena y la rubia obedeció, siendo esto mala idea pues la pequeña debido al vaivén devolvió todo lo que había comido sobre la espalda de la bajita

-no me digas que…-y tanto la morena como la pelinegra hicieron un mueca de asco-¡de acuerdo! Me rindo-habló desesperada Taeyeon y entregó a la pequeña en brazos de Yuri- no nací para esto- y luego huyó prácticamente de aquel lugar

-no nos dejes así…-gritó Hara pero infortunadamente no fue escuchada, ambas mujeres se miraron con preocupación y cuando pensaron que nada podía ser peor, Taeyeon volvió a aparecer

-la princesa viene para acá-de esa forma sentenció y volvió a huir, Yuri por su parte palideció y Hara tomó de inmediato a la bebé tratando de calmarla pero aquella lloraba con más fuerza hasta el punto de que sus mejillas se tornaban rojas

-atiende a la princesa y yo intentaré calmarla-la morena asintió y salió de la habitación encontrándose con la castaña al principio de la escaleras

-¿dónde has estado?-preguntó algo furiosa-te esperé toda la noche pero no apareciste- acusó cruzándose de brazos-estuve preocupada y desesperada, pensé que pasaríamos la noche juntas pero jamás llegaste a mi ventana, ¿qué pasa contigo?

-nada- respondió la morena extrañada por la actitud de la mujer

-y solo respondes “nada”, ¿qué me estás ocultando?-Yuri negó nerviosa-te conozco, no me mientas…-Jessica habló con tristeza-¿sucedió algo ayer después de que nos despedimos?

La morena afirmó-anoche tenía que evitar que alguien muriera… pero no pude hacer nada-soltó la mujer en un hilo de voz dejando pálida a la princesa-realmente yo no pude hacer nada…me sentí como una inútil

-lo siento-musitó y luego la abrazó suavemente-pero debes entender que el caballero negro no es omnipresente y que aunque así lo quieras no puedes protegerlos a todos-la morena sollozó en los brazos de la más baja mientras asentía-estoy segura que hiciste todo lo que estaba a tu alcance-la princesa tomó el rostro de Yuri entre sus manos-no estés triste, por favor-susurró con una ligera sonrisa pero aquella se borró cuando escuchó un estruendoso ruido salir de la habitación de la morena-¿quién está en tu cuarto?

-¿en mi cuarto?-cuestionó de vuelta Yuri y Jessica asintió con una mueca-Taeyeon-repuso rápidamente sin embargo la princesa solo caminó hacia la habitación

-la vi salir de la casa-repuso enojada-te lo preguntaré una vez mas ¿quién está en tu cuarto?-cuestionó enfatizando cada palabra

La morena tragó en seco, “¿sería prudente dejar que viera a la pequeña?, quizás si lo hacía tendría que explicar muchas cosas, contarle la verdad,  y por esa verdad involucrarla, eso sería peligroso y ella no estaba dispuesta a dejar que su amada princesa estuviera en medio de su guerra con el general Jang,… no ¡eso ni pensarlo!”

-como sea-dijo Jessica antes de abrirse paso pero Yuri la tomó de un brazo, deteniendo su andar

-no hay nadie

-¡mientes!-exclamó molesta y zafándose corrió hacía la habitación, abriéndola de golpe encontró a Hara sonriendo nerviosa

-su majestad-habló entrecortadamente mientras aun mecía a la pequeña que al parecer había cesado su llanto

-¡oh mi Dios!-la mujer se acercó lentamente hasta verificar que llevaba la pelinegra  entre sus brazos-es la pequeña Soonkyu-susurró

-así es-respondió Yuri desde el marco de la puerta-anoche sus padres fueron… asesinados-una lagrima le resbaló por su mejilla

-¿quién…fue?-la morena negó

-no quiero que te involucres-la princesa miró con repruebo la respuesta de la morena pero en cuanto se dispuso a contestarle la pequeña volvió a recordar el motivo de su disgusto y de nuevo rompió en llanto

-¡otra vez!-exclamó Hara agotada provocándole a Jessica una sonrisa

-déjame ayudarte-dijo sosteniendo a la pequeña, y luego la deposito en la cama-¿ya ha comido?-las mujeres asintieron-¿ha dormido?

-un poco-aseguró Hara

-¿ya revisaron su pañal?-ambas mujeres se dieron un golpe en la frente, en efecto se habían olvidado de aquello-esa debe ser la razón de tu llanto-musitó cariñosamente la princesa a la bebé y de esa forma fue sacando su ropita, poco a poco y con ayuda de las dos pelinegras Jessica cambió a Soonkyu, aquella sonrió dulcemente en señal de agradecimiento, mostrando sus ojitos en forma de medias lunas y aquellas pequeñas perlitas que parecían ser sus primeros dientecitos-¡que preciosa sonrisa!-elogió la castaña, luego la posó en su pecho meciéndola delicadamente y la niña se aferró fuertemente a los senos de la mayor provocándole a Jessica un gran sonrojo

-estoy empezando a sentirme celosa-habló Yuri viendo como la pequeña hundía su cara en el pecho de la mujer-¡hey! Eso no es tuyo-dijo casi gritando

-es el colmo que te sientas celosa por una bebé-espetó Hara

-pero…

-es una tierna y dulce bebé-apoyó la princesa mientras veía como aquella cerraba lentamente sus ojitos

-es cierto, es una tierna y dulce bebé… de la cual no podemos encariñarnos-susurró Yuri lo suficientemente audible para las mujeres, ambas le miraron extrañadas-es que Taeyeon tiene razón, no somos lo suficientemente responsables, no podemos hacernos cargo de ella-tanto Hara como Jessica se miraron con tristeza pues aquella pequeñita les había robado el corazón.

Por otra parte la rubia corría tras las faldas de la condesa, aquella no le miraba y ni siquiera le había dirigido la palabra y eso era incomprensible para Taeyeon, pues no entendía el porqué de su comportamiento.

-¿qué habré hecho mal?-se preguntó con amplia incertidumbre y luego corrió nuevamente tras ella hasta ponerse a su lado-mi amada condesa, no deje que mi corazón caiga en las fauces del desasosiego, usted me mata de la duda y me deja sin alma cuando me ignora-habló con un tono tan suave y melancólico que derritió a la pelirroja pero aquella solo mordió su labio y siguió con su camino, la rubia suspiró- y es que mi vida depende de su voz-continuó- de sus miradas, de sus manos, de sus caricias, mi vida se esfuma cuando no me besa, cuando usted no me toca, mi vida decae en estos momentos y mi corazón se acongoja solo porque no tengo su atención…

-¡ya cállate!-ordenó Tiffany roja por sus palabras

-no puedo acallar a mi alma-susurró poniéndose frente a ella y tomándola de las manos-no puedo guardar silencio porque mi corazón y mi mente gritan todo el tiempo lo mucho que siento por usted, todo mi cuerpo se regocija cuando usted está a mi lado y la euforia me invade cuando tan solo roso sus labios-la rubia posó delicadamente su frente sobre la de la condesa

-si es así… ¿por qué visitas a la virreina?-preguntó la mujer triste, recordando el momento en que le había visto salir de aquel cuarto

-nunca lo hago…

-¿y ayer? No puedes negarlo, te vi-Taeyeon suspiró

-no malinterprete mis actos-le susurró acercándose a sus labios carmesí-solo fue un saludo cortes, nunca he tenido otra intensión con ella, nunca he imaginado tenerla como la estoy teniendo ahora a usted-la rubia tragó nerviosa mientras rosaba sus labios con los de la condesa-nunca la he deseado como la deseo a usted-al escucharle Tiffany abrió sus ojos sorpresivamente

-Tae…-musitó antes de que la rubia la besara con delicadeza, acariciándole los labios con tanto amor como nunca le había hecho, Taeyeon bajó sus manos a la cintura de la condesa y tomándola con fuerza profundizó aquel beso demostrándole así la pasión y el deseo que sentía por ella, lentamente la pareja se separó recuperando el aire perdido por su acto de amor. Tiffany soltó un débil suspiro en cuanto sintió sus piernas vibrar…

-eres mi vida Stephanie Hwang-le dijo la rubia con un amplia sonrisa y luego la abrazó con firmeza

-no volveré a dudar de ti, lo prometo-susurró la pelirroja aferrándose a la más baja-tú siempre has sido sincero conmigo y yo solo desconfió de ti, perdón-Taeyeon tragó con dificultad al escucharle y sintió su pecho arder pues realmente si le guardaba un gran secreto y eso no era justo para su relación

-mi amada condesa-dijo la rubia separándose de la pelirroja-yo debo hablar con usted-la mujer se tornó seria tomando por sorpresa a Tiffany

-te escucho-la rubia sonrió con un dejo de tristeza y aunque no tenía las palabras previamente preparadas aun así quiso continuar

-yo…

-¡Stephanie!-llamó la princesa apareciendo detrás de ellas y cerrando la boca del general-mi padre nos necesita, sucedió una catástrofe anoche…-la condesa frunció su ceño mientras que Taeyeon recordó lo sucedido

-pero…

-vaya-cortó la rubia-lo que tengo que decirle lo haré esta noche, en cuanto la luna esté en lo más alto del cielo, a esa hora vendré a verle... así que esté preparada

-de acuerdo, te estaré esperando-comentó la condesa con una sonrisa y luego depositó un beso en sus labios, después se marchó de ahí junto con la castaña.

-hoy ¿me amarás o me odiarás?...

En un frío y oscuro cuarto aguardaban seis hombres, aquellos lucían impacientes y algo nerviosos, pero ninguno parecía tener remordimiento, todos se miraban entre sí, notando como cada uno cargaba sobre sus hombros el peso de la noche anterior, cada uno podía percibir del otro el olor a pólvora, sangre y muerte, un séptimo hombre se adentró en la habitación, luciendo un uniforme de color azul, característico de la corona, y  cargando consigo una filosa espada, aquel sonrió con malicia al ver en el rostro del que estaba a cargo la decepción y la rabia…

-por lo visto no les fue tan bien como pensabas-habló el hombre con su característica voz ronca

-no-respondió simplemente el subordinado mientras hacía una mueca, el mayor sonrió con amplitud y caminó hasta hacerle frente…

-¿te ha visto?-el menor negó-¿qué ha sucedido con él?

-murió

-¿y Lya?

-también-el hombre de mayor edad, frente a la presencia de todos, le propinó un fuerte golpe haciendo que cayera de bruces, luego desenfundó su espada y ante la asustadiza mirada del joven asesinó a aquellos que le acompañaron, ninguno tuvo opción de escapar…

-¿por qué?-susurró aterrado mientras se limpiaba su labio roto y veía los cuerpos de los que, hasta hacía unas horas, fueron sus cómplices

-no me gustan los testigos-musitó-y el golpe fue porque asesinaste a un buen hombre y a una buena mujer-una sonrisa de satisfacción salió de su boca al ver el rostro desencajado del joven-ahora ponte de pie, no seas llorón- el joven obedeció

-¿qué debemos hacer?

-¿tan rápido se agotan tus ideas?-preguntó  sonriente

-es que ya no sé cómo descubrir su identidad, mi última pista falleció anoche-comentó el hombre con ira

-la paciencia es la virtud de los sabios, decía el vizconde, y no te preocupes que he estado pensando en eso y llegué a la conclusión que ahora mi lucha no será contra el caballero negro

-¿de qué habla?-cuestionó sin entender

-quiero la corona de este reino-las palabras de aquel hombre sonaron con firmeza en el cuarto, haciendo eco en las paredes

-pero ¿cómo lo hará? Porque es… es imposible, hay una heredera, si el rey muere ella tendrá que sucederlo y no habrá forma de que alguien más acceda al trono

-pequeño muchacho, no limites tu imaginación-el hombre le tomó del hombro-ella va a morir junto con su padre porque yo me encargaré de levantar al pueblo en armas-el hombre joven pasó saliva temeroso-¿acaso no te gustaría ser rey?-ante la propuesta quedó atónito-soy realista, ya estoy algo viejo pero tú… tú estás en plena juventud-el mayor esbozó otra sonrisa-podrás gobernar y para eso he planeado deshacerme del rey junto con su hija, mejor dicho, me desharé de toda la casa real, no quedará ningún sobreviviente…

-el caballero querrá intervenir-susurró el menor-él será nuestro mayor obstáculo

-¿por qué piensas eso?

-porque al parecer al caballero le interesa la princesa-el hombre de edad soltó una profunda carcajada

-¡es perfecto!-exclamó feliz-si lo que dices es cierto, podemos decirle al pueblo que ahora el caballero rinde cuentas al palacio, que es un traidor a sus ideales y así los pondremos de nuestro lado, los armaremos y haremos una revuelta, tomándonos el palacio y con eso la vida de todos, si el caballero quiere intervenir le estaremos esperando… no quedará rastro alguno de él

-pero ¿cómo me hará rey?

-tengo mi propio batallón, en cuanto acabemos con la casa real, no habrá más ejército y podremos tomarnos este reino, te posicionaré rey y seré el temur, gobernaremos a nuestras anchas y con ello la venganza estará completa-el joven sonrió-lo único que aún no he decidido es como acabaré con el general Kim, ¡maldito aparecido! Quisiera saber de dónde salió…

-por eso no debe preocuparse, mi gran amigo Siwon se ocupará de él esta noche…

-¡magnifico!-ambos sonrieron-todo saldrá perfecto pues esta noche será el principio del fin de Jung…

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Esa misma noche, en el frío establo real Taeyeon daba vueltas inquieta y nerviosa, se repetía una y otra vez las palabras que diría ante la condesa...

-Stephanie Hwang yo… yo soy una mujer... ¡no!-aquella apretó los ojos mientras negaba-eso es muy áspero, no puedo decirle eso-la rubia caminó de nuevo y miró con preocupación a su corcel-¿qué hago Jayu? Debo confesarle quien soy realmente pero tengo miedo de perderla-la pequeña acarició el hocico del caballo y este relinchó-¿cómo decirle que la amo y que mi amor está por encima de cualquier cosa?-se dijo con fuerza mientras una pequeña lagrima rodó por su mejilla-lo mejor será confesarle quien soy realmente, si me odia que lo haga ahora y no más adelante cuando mi corazón ya no pueda de tanto amor-la temerosa mujer se encaminó con pasos firmes hacía la entrada de aquel establo pero antes de salir del sitio un corpulento hombre apareció ante ella con una maléfica sonrisa…

-Lord Choi-dijo Taeyeon con sorpresa

-General-replicó el hombre-es bueno encontrarlo por acá-Siwon acarició su barbilla mientras ampliaba más su sonrisa-¿recuerda cuando le dije amablemente que se alejara de la condesa?-preguntó con sugerencia y la rubia entrecerró sus ojos

-¿cómo olvidarlo?-susurró-como olvidar aquel momento pues ese mismo día Stephanie me besó y prometió estar conmigo para siempre-soltó la mujer provocando ira en el hombre, ira que fue disimulada por otra sonrisa

-General es una pena que no me haya hecho caso aquella vez…

-Lord, ahora no tengo tiempo para sus estupideces-la rubia le cortó e intentó pasar por su lado pero este le detuvo con un fuerte empujón

-no Kim, esta vez no te escaparás-y acto seguido varios hombres salieron desde atrás del lord, la mujer al verse rodeada empuñó su espada pero con lo que no contaba era con que otro hombre la atacaría a traición propinándole un fuerte golpe en su cuello que la dejaría inconsciente…

-¿ahora que Lord?-preguntó uno de ellos

-cúbranle la cabeza y saquémoslo de aquí, y sean cuidadosos no quiero que nadie se entere-aquellos hombre asintieron, pusieron una bolsa de fique sobre la cabeza del general y alzaron el noqueado cuerpo, con sigilo le trasladaron fuera del palacio y le llevaron hasta lo más alto de una cascada que se encontraba cerca de ahí, aquellos hombres que estaba a órdenes de Siwon dejaron el cuerpo de la rubia sobre una lisa y húmeda piedra-¡despiértenlo!-ordenó Choi y uno de ellos dio un certero golpe en la mejilla de la rubia haciéndole recobrar la conciencia

-¡demonios!-exclamó al sentir el puñetazo en su rostro

-¿dormiste bien?-preguntó el hombre con burla

-¿Dónde carajos estoy?-preguntó Taeyeon mientras miraba a su alrededor y su respuesta fue dada por si sola al escuchar el golpeteo producto de la caída del agua

-estamos en el lugar que será tu tumba-dijo Choi y con su bastón golpeó la cabeza de la rubia

-¡bastardo!-resopló Taeyeon mientras se incorporaba sujetándose su cabeza, una línea de sangre salió de allí y recorrió su rostro hasta su mentón-¿qué demonios quieres?

-matarte-soltó el lord con ira-quiero aniquilarte y que desaparezcas de mi vida y de la vida de la condesa-al escuchar la seriedad de sus palabras Taeyeon buscó su espada pero le habían despojada de ella-ni lo intentes, esta vez no saldrás con vida

-¡cobarde!-repuso sonriente la rubia y después Choi le propinó otro golpe, reventándole su labio-¡hijo de puta!-Taeyeon se levantó con rapidez y se abalanzó contra el hombre, un par de golpes fueron a parar contra el rostro del moreno pero los hombres a disposición de Choi corrieron y la separaron súbitamente de él-¿esto eres tú?-preguntó la mujer al ser sostenida-¿un cobarde que se esconde tras sus perros falderos?

-¡cállate!-gritó entre dientes el hombre mientras se limpiaba la sangre de su rostro-esta noche tus ofensas no me afectarán-Choi apretó fuertemente su mano y propinó otro golpe en el estómago de la rubia, dejándola sin aire-debiste alejarte Kim, debiste hacerlo cuando te lo dije-el hombre golpeó de nuevo la boca de la mujer y aquella escupió sangre- tú no eres nadie y serás menos ahora-replicó una vez más antes de desatar su furia en el cuerpo de la rubia, golpeándola hasta el cansancio, aun con las últimas fuerzas que le quedaba la mujer alzó la cabeza, mirándolo fríamente

-eso quisieras, pero soy más que tú-Taeyeon miró a quienes le sostenían-y esto lo comprueba-Choi sonrió con burla y uno de sus secuaces le entregó un arma de fuego, la rubia tragó en seco

-Kim-habló el hombre-puedo perdonarte si te arrodillas y suplicas por tu vida y prometes alejarte de la condesa-la más baja soltó una sonora carcajada

-Lord que poco me conoce, yo no me humillo ante nadie, yo no le suplico a nadie y la condesa, a ella no voy a renunciar… jamás-el furioso hombre la miró y le apuntó-le diré una última cosa… no falle, porque si lo hace le juro que lo haré pagar

-te veré en el infierno…-susurró y jaló del gatillo, el sonido del arma impactó en los oídos de todos y una densa capa de humo salió de la boquilla, la bala, aquella atravesó el pecho del general, y esta solo cerró sus ojos "te amo Stephanie". Quienes le sostenían la dejaron caer por aquella cascada y el cuerpo de Taeyeon se perdió en medio de la frías y profundas aguas de aquel río, Choi, por su parte,caminó con una sonrisa hasta el acantilado-¡feliz viaje!-pronunció con burla…

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Hola a todos/as, disculpen la tardanza pero he estado demasiado ocupada y praticamente no he tenido oportunidad de escribir, espero con todo el corazón que les haya gustado el capítulo y muchas gracias a quienes se han suscrito, a quienes se toman el tiempo de leer esta historia, a quienes han dado su voto y a quienes siguen fieles, los adoro :)

bye, bye... nos leeremos  próxima :D

pd: please!!! comenten y no me dejen con la intriga de saber si les gustó xD