XIX. Rosie.

Cuando las noches son de té y los días de lluvia

Lo primero que Rosie hace al cerrar la puerta tras de ella, es quitarse los tacones. Luego deja que el vestido caiga de forma natural resbalando por su caderas. El aire acondicionado está en marcha lo que convierte la acumulación de sudor en su cuello y en su espalda en gotas de rocío gélido. Sus pies se sienten livianos y supuso que se debía por los tragos que se había tomado antes. ¿Cómo era que se llamaban?, ah, sí, un old fashioned . Le hubiera gustado pedir vodka con coca cola o algún gintonic cuan lo mucho. Sin embargo, no era el momento para eso. No era una entusiasta de los tragos cosmopolitans; esa sin duda era Jennie; tampoco estaba tan familiarizada con los vinos como Jisoo. La razón por la que Lisa y ella se adherían bien la una a la otra fue por sus elecciones rudimentarias al beber — habían aprendido juntas los placebos del alcohol —. Preferían una cerveza en cualquier tipo de presentación, sean latas o en botellas de vidrio, servidas en tarros espumosos o en un simple vaso de plástico rojo. Sí tenía que ponerse exigente estaba pidiendo un daikiri o una piña colada. El soju siempre era un común denominador para los asadores de carne a los que iba con sus amigas en Seúl. Una vez probó el negroni en una de sus salidas de fiesta con Jennie por L.A., mala idea. Tenía un sabor tan insípido como el jarabe para la tos. A veces le gana la tentación de pedirlo, cuando está en algún bar de incógnito queriendo impresionar a una chica en la barra creciendo sobre ella un halo misterioso.

Estaba algo ebria. Eso lo tenía claro. ¿Fue el old fashioned ?, quizá. Incluso pudo haber sido los tragos de Bacardi que había tomado como un calentamiento antes de salir de la SUV . Pudo ser la botella de Johnny Walker que Joan y ella compartieron después de transpirar en medio de un grupo de estadounidenses hasta el culo de ebrios danzando de forma descoordinada. Se talló la cara con desaprobación gimiendo de cansancio. El maquillaje se le quedó adherido a la yema de los dedos y no había mucho que rescatar de éste; se había corrido con el paso de la noche. Hasta llegó a pensar que si los paparazzi la hubieran seguido aparecieran fotos de ella con los ojos desorbitados siendo guiada por sus escoltas hacía el SUV. Su nariz se arrugó mientras comenzaba a sentirse disgustada consigo misma por estar tan pegajosa. 

No le gustaba esa sensación. 

Un rato después salió del baño con la cara lavada y el cuerpo envuelto en una bata. Su visión estaba borrosa porque se había quitado con éxito sus lentes de contacto. No recordaba bien donde dejó el estuche con sus gafas circulares. Usualmente sólo las utiliza cuando está en su apartamento y rara vez fuera de él. De hecho, se sintió bastante arrepentida de haber cogido primero el teléfono de su cartera YSL . Sólo iba a dañar más la retina de sus ojos y su oftalmólogo no estaría para nada contento. El señor Ok le había dicho imperiosamente que por ningún motivo utilizará dispositivos electrónicos sin su gafas o lentes de contacto. Y cada que pecaba de eso solía decirse a sí misma que eran las desventajas de haberse formado miope.

Desbloquea con la huella dactilar y comienza a desplazarse a través de las notificaciones. Twitter estaba lleno de comentarios sobre ella y su atención a la cena que Anthony había realizado en honor a los Oscars . Las fotos ya circulaban por todo internet y la mañana siguiente cuando despertara con resaca habría más. Ella no navegó por ahí. No tenía ganas de interactuar con sus mutuals, cuya identidad desconocían por completo. En cambio fue a sus SMS y comenzó a contestar las tandas de mensajes que se acumularon como si fueran bacterias en una superficie insalubre. Primero, contestó los mensajes de Joan que le había preguntado si ya estaba segura en su hotel. Después de la “fiesta” ambas terminaron en una discoteca gay bastante discreta en la ciudad. Seguidamente comenzó a contestar los mensajes de sus unnies que estaban pidiendo una actualización completa sobre su estado; estaban algo preocupadas cuando les mandó un mensaje diciendo que saldría con Joan después de vacíar su agenda. Jennie sobre todo le dio un par de tics para pasar desapercibida; lo menos que querían era que la prensa se diera cuenta de dónde estaba y con quién. Rosie se sacó una selfie bastante horrible que sabía nunca tendría que ver la luz del día en Instagram con la cama desecha en el fondo. También tuvo una breve charla con Lisa en su chat privado. Su mejor amiga estaba enviando fotos de los platillos callejeros que sus primos y ella comían en los puestos callejeros de Bangkok. Incluso le envió una selfie con Palisa a su lado sonriendo. Lisa había viajado a Tailandia hace unos días para pasar su cumpleaños con su familia. Hacía tiempo que no los veía y Rosie estaba feliz de saber que se pudo reunir con todos sus seres queridos. Los últimos años habían sido verdaderamente estresantes para ella. Desde el momento en que las restricciones comenzaron y estaba atrapada en China grabando Youth With You ; Luego The Album, The Show, el documental, su debut en solitario… hasta Jennie.

Lisa siempre reiteró que Jennie era una constante problemática en su vida. No en un aspecto negativo. Antes quizás hubiera sido calificado de esa forma. Ahora era más como "una canción molesta que se te pega y no puedes sacar de tu cabeza" .

O eso decía ella. Y Rosie podía entenderlo muy bien.

Ella misma tiene a alguien que es como una canción molesta que no puede borrar de su mente.

Cerró brevemente su teléfono y comenzó a buscar su pijama. Necesitaba al menos está vestida con su ropa para dormir. Pronto ya estaba en la enorme cama tomando una gran bocanada de aire antes de ver los mensajes de Suzie.

No se habían visto en una o dos semanas. La actriz había dejado de asistir a las clases de repostería; porque estaba metida ocupada en una filmación bastante extenuante. No dio muchos detalles al respecto por un DNA que parecía haber firmado. Sin embargo, en cambio le mandaba un montón de selfies desde un camerino bastante desordenado. Las selfies de Suzie siempre dejaban un sabor edulcorado en la boca; eran graciosísimas, sobre todo cuando hacía una duck face o ponía los ojos en blanco. La mayoría de las veces podía notarse los signos de cansancio debajo de su mirada. Así que Rosie pensó en animarla un poco. Comenzó a enviarle cajas con postres que ella misma preparaba en sus clases con el portero del edificio donde vivía en esa zona residencial de Hongdae. Siempre ponía notas con rotuladores de colores, a veces dibujaba caricaturas de Damon y Hank. Suzie parecía apreciar todo aquello. Enviaba fotos de sí misma y a veces de Hyun comiendo los bocadillos. Siempre con una sonrisa enorme como si estuviera viviendo el mejor momento de su vida. Le decía a Rosie que después de un largo periodo de filmación en los sets, ese era su momento favorito.

Una de las cosas que le gustaban mucho de Suzie era eso. Siempre fue demasiado atenta con ella y apreciaba demasiado sus detalles. Incluso si estaba muy ocupada se tomaba un momento para denotar su presencia. Incluso cuando estaban bifurcadas, Suzie aún se preocupaba como para hacerle saber que seguiría ahí.

Se lo había dicho cuando decidieron dar un paso hacía el costado:  "Tienes que ir. Yo siempre estaré aquí. Lo sabes"

¿Fue miserable por eso?, quizás, pero, era lo mejor. Ahora sentía que podían volver a conectarse. No lo sabe, quizás Melbourne fue un pequeño nudo en esa cuerda invisible que por alguna razón sigue encaprichada en seguir tirandolas a estar juntas. Y Rosie está comenzando a quererla más.

No sé. Me gustaron mucho las primeras dos, aunque sigo diciendo que es malditamente cuestionable. ¿No crees?, Estaba leyendo novelas para matar el tiempo. Tiene un nivel de detalle brutal, eso sí, pero carece de profundidad en los personajes. Y eso tampoco ayuda en la película. Si me lo preguntas, se siente como un borrador, una escaleta de lo que puede ser. Y Edward es insufrible tanto como Jacob. Bella igual, pero tiene atractivo. Tiene sus defectos y eso lo hace interesante. Sin embargo, carece de personalidad. Hay cosas ahí. Luego estaba leyendo The Host. Creo que me gusto más : ) 

Igual me divertí un poco. Mejor que cuando me hiciste ver esa Rom Com de Netflix de tres partes.

No puede evitar reírse entre dientes por el mensaje. Al mismo tiempo se sentía bastante sorprendida por el hecho de que Suzie en realidad tomó en cuenta su sugerencia de ver Crepúsculo después de en una llamada nocturna haberle confesado que no había visto las películas. El mensaje llevaba horas colgado y por eso se apresuró a teclear una respuesta. Sabía que a Suzie no le importaba mucho si contestaba tarde. Pero a Rosie sí. 

Lo siento si no te contesté.

Estaba en un horario. Aunque no lo creas tal parece que las cenas y fiestas pueden ser trabajo. Me divertí un poco eso sí. No tanto, porque tenía que cuidar las apariencias. Me decepcioné un poco al saber que Taylor Swift estaba en una fiesta similar y no en la mía. Como sea, entonces en mi ranking de Hanks… ¿Cuántos Hanks le darías a la Saga Crepúsculo?

Para tu información yo era Team Edward, sólo porque tocaba el piano y era emo.

Esperó un rato mordiéndose el borde de sus uñas. Notó que Suzie se había puesto en línea. Comenzó a pensar si ya era demasiado tarde en Seúl o  sí aún eran horas impías. Buscó en Google y se dio cuenta que había diecisiete horas de diferencia entre ambas. Luego buscó la hora en Seúl y se dio cuenta que sólo eran las 5 PM.

Suzie no tardó en responderle.

 

Lo entiendo demasiado bien. He estado en muchas de esas. No tan internacionalmente como tú, claro está. ¿Ya viste The

Host?, dime que lo hiciste, por favor :c ¡La protagoniza Saoirse Ronan y eso es un incentivo!

Es preciosa, ¿Te gusta ella? 

Sobre Taylor Swift, la próxima vez es la vencida y cuando eso suceda por favor que te firme algo.


 

Rosie frunció las cejas y respondió:

¿Te gusta mucho Saoirse Ronan?

¿Te pone celosa que me ponga? :p 

¡¿Entonces te parece hot?!

¿A ti no?

¿Si te dijera que Irene me pone ?

Diría que son los genes Bae ; D

Bueno Irene me pone.

xd

¿Pensé que odiabas los emoticones?

¡Te desconozco!

¡Y me cambiaste por Saoirse Ronan!

Tú me cambiaste por ¡IRENE!

Lol Jimin me enseñó.

Y sí, me dio nauseas de pensar que mi prima

te pone .

Era un ejemplo…

No he visto The Host, ignore su existencia.

Tienes que verla.

Podemos verla, la próxima vez.

¿Tienes horario el domingo?

: v

No, estoy libre.

¿Vienes a mi casa?

Hyun no estará.

Voy a llevar algunos bocadillos, ¿Te parece?

Quédate a cenar.

No creo que eso sea buena idea.

¿Por qué?

Eso podría tener resultados uales.

O.O

Deberían darte el título de reina de los emojis.

Sin duda no me acostaría contigo.

Bueno, quizás o tal vez no.

No sé, soy una persona célibe.

¿Desde cuándo?

: p

Tonta, sólo ven a mi casa y veamos esa película.

Te extraño.

Sí, obvio voy.

Te extraño también.

Necesito mi dosis de tiempo de calidad con Suzie.

El sueño comenzó a drenar su energía. Entonces se despidió de Suzie con la promesa de encontrarse el domingo. Bloqueó el teléfono y se acurrucó en las pesadas frazadas con una sonrisa estúpida antes de quedarse dormida. No recuerda lo que soñó, pero quizás tenía que ver con Hank.

[...]

El domingo por la tarde se montó en un taxi rumbo al apartamento de Suzie. Todo el camino estuvo rebotando entre los asientos con la impaciencia de una niña en Nochebuena esperando a que por fin amaneciera para abrir los regalos debajo del árbol.

No era necesario anticiparse para saber que estaba emocionada por ver a Suzie.

Una parte de ella estaba dudosa sobre sus sentimientos. No, en que estaba comenzando a quererla. Sabía que mientras más tiempo pasara sus emociones florecerían. Rosie entendía que Suzie estaba creciendo como una enredadera de hiedra sobre una casa abandonada. Sobre ella misma. Su pensamientos iban más en que si debía dejar que sus emociones salieran a flote o tener un poco más de cautela sobre ello. Suzie le había causado dolor, eso lo tenía claro cuando inclinó su cabeza sobre el cristal de la ventana del taxi, pero el dolor, no fue tan desgarrador y sórdido como el que Gyeong había gestionado. No, sin duda no lo era. Si ese hubiera sido el caso, ella no hubiera abierto la puerta a parte de su intimidad, como lo eran su familia y una selección de recuerdos tormentosos. Suzie no fue Gone , no fue una melodía triste atorada en su mente mientras seleccionaba acordes en el estudio. Ella tomó la responsabilidad de ese dolor y eligió disculparse. No desapareció como la asistente de un mago como lo hizo Gyeong. No es que quisiera compararlas, es que no quería repetir esa experiencia nuevamente. Sentirse utilizada y al mismo tiempo sentirse como esa niña de diecinueve que se sentía que le habían arrebatado su infancia en un juego retorcido.

El cielo estaba azul y había pequeños grupos de nubes condensados a su alrededor. En sus oídos jugaba una canción de Apple Music ; The Jacket de Widowspeak . Desde que salió el álbum había estado obsesionada con The Drive , True blue , y como Slow Dancing .

Esa mañana Ashley le había señalado su humor efervescente como algo no muy típico. Sobre todo el resplandor que había adquirido su rostro. Se habían encontrado para almorzar como todos los domingos. Esa vez fue en un restaurante italiano. Rosie estaba en medio de su fetuccini cuando Ashley le dijo: "No pensé que estarías así, dado los últimos inconvenientes", tampoco es que no quiera comerse la cabeza con ello; todavía se le revolvía el estómago cada vez que el logo de IG en la pantalla principal de su iphone. 

Los últimos días en L.A. la tuvieron tan perdida en una burbuja de plástico que olvidó publicar una felicitación por el cumpleaños de Lisa. No es que se haya olvidado de desearle feliz cumpleaños. Mandó un audio bastante bochornoso cantando Happy Birthday con voz de bebé a lo que Lisa respondió riendo entre dientes de la misma manera con un "Thank u bro". Pero, no se dio cuenta que la había cagado hasta el momento en que aterrizó en Incheon. En la furgoneta ya la estaba esperando un miembro del staff que se presentó como Ki Byung-ho. No hizo más que reprenderla en todo el viaje de regreso a su apartamento. Tuvo que apretar sus dientes y mantener la cabeza gacha escuchando todo ese gran sermón. ¡Ni siquiera lo conocía!, Gun-ho oppa tuvo que meterse un rato después. Él mismo se estaba exasperando y se disculpó con Rosie bastante apenado por la situación incómoda. "Es nuevo", es lo único que le dijo cuando le ayudó a subir su equipaje hasta el quinto piso donde estaba su lugar. Rosie recuerda haber rodado los ojos y sólo decir que no era una justificación adecuada. Tampoco es que pudiera defenderse mucho. Sí hubiera elevado su voz, él podría haberse aprovechado de la situación y haberla acusado de agresora en algún foro de internet o con la misma empresa.  Eso hubiera salido mil veces peor. 

Jennie había puesto una regla de oro cuando esto pasaba: no quejarse con el staff directamente, sino ir con la administración y levantar un reporte. Era una forma útil de solucionar las cosas. Sobre todo cuando comenzaron a tener éxito y estos últimos años era más efectiva porque la empresa estaba buscando por todo los medios retenerlas en sus filas.

Rosie nunca incumplió esa regla; era por el bien de Blackpink.

Al llegar al edificio detuvo el puente de Iris de Goo Goo Dolls y se quitó los auriculares de los oídos. El conductor se había orillado aun lado de la banqueta y cuando Rosie estaba por pagarle la tarifa él se negó. En cambió le pidió un autógrafo. Eso la hizo suspirar con frustración. 

Él la había reconocido. 

Al menos no había sido espeluznante al respecto. Hubo ocasiones donde la miraban mucho por el espejo retrovisor, haciendo que se le enchinara los pelos de la nuca. 

Sus ojos se suavizaron al escuchar que su hija era una fanática del grupo y que había disfrutado su debut en solitario.

Gone sin duda fue bastante catártica para ella. Acababa de salir de una relación bastante dura y le ayudó mucho sentirse acompañada.

Rosie como siempre que ocurriría una situación como esa: no supo qué responder al respecto. En cambio se dedicó a firmar la hoja de una libreta que él guardaba en el maletero agradeciendo también por el viaje. 

Tomó sus cosas y salió de ahí. 

Fue casi saltando hacía los peldaños de concreto de la entrada. Se tomó un momento antes de pulsar el timbre del interfono que tiene al lado el número 8 B. Se pone un poco nerviosa ante la lente de la cámara que registra su rostro y espera tambaleándose un poco esperando a que Suzie le responda.

Hola, ¿Quién es?

— Soy yo, Jangmi.

Se siente un poco vacilante, la respiración de Suzie cruje por un momento.

Ah, pasa por favor. Llegaste temprano.

Le da el acceso para entrar por la puerta. Alguna vez tiene que mencionarle a Suzie que su edificio parece una fortaleza impenetrable. No lo hará ahora. Sin duda después.

Sube el ascensor intentando no parecer un cachorro sobreexcitado. Una parte de ella está un poco insegura. 

¿Había llegado tan temprano?

Tomó un par de inhalaciones profundas. Peinó un poco su cabello debajo del sombrero de pescador negro. Su mano izquierda estaba temblando mientras sostenía la bolsa de plástico con las cosas que había comprado en una tienda de conveniencia antes de ir al apartamento de Suzie.

"Es sólo una tarde de película", se sentía bastante tonta por sentirse de esa manera. Incluso se regañó por eso. No había nada que temer, ni porque estar rebotando contra las paredes del elevador.

[...]

Igual su cordura se fue a la mierda cinco segundos después…

Las puertas metálicas se abrieron de par en par y Suzie estaba ahí; en medio del corredor solitario.

La respiración de Rosie se enganchó al verla. La sonrisa se extendía en su rostro mientras le daba un pequeño gesto tímido de saludo. Lo imitó tan pronto cruzó el umbral del ascensor.

¡Ni siquiera ha puesto un pie dentro del apartamento y ya se siente embriagada por ella!

"No te crié para que fueras débil, Pasta" , eso es algo que Jisoo le diría sin dudar al verla ahí, flanqueando por Bae Suzy.

Pero siempre fue débil cuando se trataba de Suzie , le habría respondido sin pensarlo. En cambio prepara sus cuerdas vocales para impulsar el sonido hacía afuera de su boca.

Hey.

Es lo que le dice de manera empequeñecida mientras se acerca con cortas zancadas.

Hey —, Suzie suspira cuando están bastante cerca la una de la otra.

Rosie está un tanto incómoda. No sabe dónde poner los brazos. Sus extremidades superiores se balancean como si no estuvieran vivas. Pero sus manos empuñan la agarradera de la bolsa con fuerza y se muerde el labio oculto tras la mascarilla clínica. Están tan cerca que puede ver las imperfecciones en las mejillas, los poros, las marcas de cansancio, el resplandor de la lámpara pegada al techo brillando sobre la piel de Suzie.

Al final la actriz le hace un gesto para que pase hacía adentro. La puerta está totalmente abierta y Rosie se obliga a caminar.

Suzie la sigue. 

Ya ahí, refugiadas de cualquier mirada curiosa se siente aliviada un poco más aliviada. Lo cual es una completa contradicción, porque está a solas con Suzie.

Intenta no pensar más en eso. Rodó sus ojos y se abofeteó mentalmente. Le entrega la bolsa con los bocadillos que traía sin rechistar.

— Compre un six de cerveza y unas botanas. Son las papas que dijiste que te gustaban y unos macarons de matcha que mencionaste se te antojaron hace unos días. 

Suzie sonríe con aprecio el gesto.

— Gracias.

— No hay de que.

Rosie se quita el abrigo negro que lleva por encima de la hoddie que Lisa le había regalado. Lo cuelga sobre el perchero que está pegado sobre la pared al lado de donde está la mesa con el cuenco para llaves. Luego se sienta sobre el pequeño escalón y se quita los zapatos para meter sus pies desnudos en un par de pantuflas grises que Suzie le pasa.

El apartamento desprende un un olor a lavanda que de cierta forma hace destensar sus hombros. Es bastante agradable , piensa. Muy diferente al perpetuo hedor rancio que cae sobre las calles de la ciudad. Suzie la mira desde el umbral del angosto pasillo . Está parada de forma torpe e indecisa. Pero, nunca pequeña. Ella nunca se achica como Rosie lo haría ante ella.

— Llegas temprano.

Rosie subió una ceja girando hacía Suzie mientras se ponía de pie hasta ascender a su altura. Hay una sonrisa ladeada en su rostro cuando se quita la mascarilla; es la que utiliza siempre para coquetear cuando alguna chica al azar le da luz verde para proceder. 

— ¿Eso es malo?

Ve a Suzie estremecerse y eso por alguna razón mueve algo en su estómago. Una especie de llama que calienta sus huecos.

— No —, parece encogerse de hombros. — Hyun ya se fue. Sino, ella estaría haciendo un gran interrogatorio. Tal vez me asesinaría después.

Rosie se sintió bastante confundida por el comentario. Suzie parece restarle importancia y ve lo que hay dentro de la bolsa con una sonrisa bastante atontada.

— ¿Por qué? —, quiere indagar mientras ambas caminan hacía adentro.

— Hyun es protectora —, exhala y luego ve como arruga la nariz al ver a un Damon bastante sobreexcitado que corre para atropellar a Rosie.

Siente que su sonrisa se expande mientras se agacha a su altura para jugar sacudiendo sus orejas: — Hola, yo también te extrañe mucho. Hanki te extraña mucho. Debemos de vernos más seguido.

Le dice como si fuera un bebe. Suzie deja la bolsa de plástico en la mesita para café y comienza a configurar la TV.

— ¿Tienes hambre? —, interroga haciendo una seña hacía la cocina.

— Nop —, Rosie responde mientras carga a Damon en sus brazos que se remueve dando lengüetazos en el rostro. Ella se ríe entre dientes caminando hacía el sofá dejándose caer con él encima de ella.

— Él enserio te adora.

Rosie sólo puede darle una sonrisa brillante a Suzie y ve cómo sus mejillas parecen encenderse. Los enormes ojos de Suzie se desvían hacía la televisión.

— Yo también —, confiesa con una pequeña risilla.

Toma una gran calada de aire y el olor a lavanda recorre sus fosas nasales. Se siente bien bastante bien. Vuelve sus ojos para encontrarse con ese marrón derretido en miel que está torpemente observando con cierto recelo, como si tuviera miedo a derramarse.

— Lindo suéter, por cierto. ¿Se lo robaste a Freddy Kruger ?

Rosie se burla y Suzie entorna los ojos.

— ¿No te gusta?

— Te ves bien. Seguirías mirándote bien. Incluso si usas una bolsa de basura.

— Me tomaste desprevenida —, dice mirando su ropa puesta. Suzie no lleva ninguna capa de maquillaje y su flequillo está desordenado. 

— No importa.

— ¿Enserio?

— Hablo enserio —, Rosie afirma intentando ocultar un poco de rubor en sus mejillas. Suzie la mira de una manera bastante intensa. Es como si quisiera devorarla. Ve por la puerta de cristal que da al balcón. Hay algunas macetas con un rosal donde han brotado rosas rosas. Parece bastante sorprendida por eso. Suzie sigue mirándola y la mirada pica debajo de su piel. No de manera áspera, como se ve el suéter de Freddy Kruger . — Te digo que no importa mucho, sigues siendo atractiva.

Suzie parece suspirar con pesadez recargando su cuello hacía atrás contra el borde del respaldo del sofá. 

— No sé si podría competir contra tus modelos de YSL . Ni con las embajadoras, ¿Zoe Kravitz

Rosie se cruza de brazos frunciendo las cejas. Ve como Suzie simplemente busca en el catálogo de Star+, la película. Puede sentir la inseguridad en cada tramo del movimiento raquítico de su mano contra el control.

— Bueno, tampoco podría competir contra Saoirse Rona.

Suzie parece no creerle: — Really?

Rosie simplemente la mira. Un buen rato recordando todas aquellas noches en que se quedó absorbida por las llamas que bailaban alrededor de las paredes hechas sombras.

— Bueno, siempre he tenido debilidad por tus dientes de conejo.

Intenta burlarse para que no se le noté el temblor en la voz, tampoco la sensación espesa dentro de sus entrañas. 

No quiere teñir los muros azules de púrpura.  

Suzie en cambio la mira. Hay algo insondable en el detenimiento de sus labios entreabiertos. Pero, Rosie no se atrevería a borrar la línea trazada en la arena seca y calcinante por el sol estival dentro de ellas. En vez de eso bloquea cualquier verdad dicha a la inversa. Juega con los cordones de su pantalón y evita que cualquier extremidad roce con la de Suzie. El sofá no ayuda mucho. Son como dos gigantes sobre una estructura minúscula. Y ella se siente como una niña creyendo que las piernas desnudas y de una tez espectral se han convertido en lava. Volvió a poner sus ojos sobre ella de manera discreta. Estaba tan turbada por la forma en que la rótula se tornaba de un color coral por el calor del sol que provenía del balcón. 

No había forma de no sentirse rara, como si las hormigas se movieran sobre sus mejillas y su propia boca se torciera. No quería mirarla de más. No quería verse tan espeluznante como los tipos en los aeropuertos o en las esquinas.

¡No había forma en que no quedara atontada por ella!

¡Suzie estaba de lo más casual con esos pantaloncillos de baloncestos cortos y holgados!

Sintió que la pubertad volvía a venirse contra ella. Estaba en medio de un sueño húmedo, mareada del panorama, de la necesidad de querer tocar y sentir la tersa piel fría sobre la yema de sus dedos. Y Suzie parecía sólo volverse como un caramelo irresistible. Necesitaba respirar sin notarse perturbada o ertida o incluso acolorada, o cómo podría llegar a burlarse internamente.

"Tienes que controlarte un poco!" , se dijo inhalando mientras se cruzaba de brazos y presionaba sus piernas contra el apoyabrazos del sofá. Suzie olía a lavanda, a fresa y a chicle. Había una suavidad única en la forma en que la esencia flotaba cerca de Rosie. "Es ropa… Sólo es ropa normal, la que usarías si estuvieras en tu día libre y no quieres despegarte de las sábanas. No es para nada el Babydoll que Ariana Grande usó en “Dangerous Woman''. No es una reafirmación a tu lesbianismo, y aunque lo fuera no puedes faltarle al respeto de esa forma… ¿Quieres faltarle al respeto?". 

Rosie observa hacía la pantalla. 

Los créditos de inicio comenzaban a gestarse.

Decide sepultar su boca en frituras y dejar que el sabor salado engañe a sus sentidos.

¡Malditos pantaloncillos cortos no estaban ayudando mucho con su imaginación!

[...]

— Sé que Saoirse Ronan es y. Pero, ¿No me convence aquí?

Ambas están alejadas en extremos opuestos del sofá. Rosie está más relajada mientras comenta aquello. Suzie se gira a verla mientras masca uno de los macarons de matcha haciendo que se le hinche un lado de sus mejillas.

— ¿Por qué?

— Se ve más y en Lady Bird .

— ¿Y qué me dices de Little Women

— ¿Por qué? —, pregunta confundida.

— Me gusta como se ve ahí. Cabello rubio desordenado. Hay una especie de mirada salvaje en su rostro —, expresa.

— Estaba más ocupada con Florence Pugh —, Rosie responde mientras mastica un puñado de frituras saladas. Suzie la mira con desagrado y le da un pequeño pellizco en los mofletes que hacen que se tornen de un color rosáceo. 

— Te vas a ahogar si sigues hablando con la boca llena.

— ¡Estabas comiendo esos macarons cuando estabas hablando sobre Jo March ! —, se quejó señalando en el paquete casi vacío. 

Suzie en cambio se lo tendió y Rosie agarró uno para después comerlo. El sabor a matcha se deslizó sobre su paladar mientras machacaba con sus dientes. La amargura parecía estar más rebajada y dejó que el sabor terroso a nuez se condensara sobre su lengua.

— ¡No pongas esa carita!

— ¿Qué carita?

— La de perrito pateado, ¡Ugh!

Rosie estalló en una carcajada gutural.

The Host estaba bien. No era tan entretenida como Crepúsculo . Ese sin duda fue un verdadero fenómeno. Alice y ella solían ir a ver las películas juntas al cine de Mall.

Rosie ya no estaba en Melbourne cuando salió Amanecer Parte 2

Ese noviembre se sintió bastante deprimida por ese hecho. Lisa intentó animarla un poco. Compró boletos para una función un fin de semana. Incluso convenció a Miyeon de ir. Además, de que arrastraron a Jisoo que se negaba rotundamente a sentarse por dos horas mirando como según ella, Stephanie Meyer había arruinado el género de vampiros.

Recordar a su unnie refunfuñando le hizo volver a sentirse nostálgica. No es como si pudieran salir al cine juntas — actividad que hacían siempre que podían permitírselo —. No hay lugar para normalidad cuando eres exhibida sobre un pedestal enorme. 

Esa vez recuerda que estaba llorando, su nariz moqueaba y el olor rancio de la mantequilla en las palomitas la estaba fastidiando. Estaba molesta, muy molesta porque Allie no estaba ahí. No estaba presionando su mano y aliviando cualquier sensación de incertidumbre. No estaba ahí con cada chillido gutural cada que Jacob se desnudaba. Ni codeando cuando había una escena teñida de romance incómodo. 

— Tuvo una obsesión por Crepúsculo —, Suzie pareció inclinarse ignorando por completo la película para escucharla.

— ¿Ah enserio?

— A mi pasa que a veces algo me obsesiona mucho y por un tiempo determinado  estoy tan… Tan concentrada en saberlo todo sobre eso, ¡Todo!, y no puedo hablar sobre otra cosa —, parpadea dudando si tomar un sorbo de su cerveza por lo ventilada que estaba siendo a su intimidad. ¿No es como si Suzie no la hubiera visto desnuda o vomitando por ansiedad?; sólo volvió a jugar con los cordones haciendo nudos como si fuera una niña exploradora. — Cuando pasa es como… Blank Space , ya sabes… Sólo una obsesión más en la lista. Luego otra y luego otra. Eso terminaba mal, porque me olvidaba de mis responsabilidades, soy una irresponsable de mierda. ¿Ni siquiera sé cómo llegué tan lejos? —, comienza a reírse y su pecho se torna como un acordeón expandiéndose y retrayendo.

Suzie la miró con cautela antes de decir de forma suave: — ¿Está bien si tomó tu mano ahora?

Rosie la miró inquieta y extendió su mano sobre el forro del sofá. Sintiendo sobre sus yemas el cuero que lo envolvía. Suzie apretó suavemente sus dedos. Sus palmas eran como un cubo de hielo. Pensó que era por la lata de cerveza que hace unos momentos acunaba sobre el reposabrazos. Miró  hacía la pantalla. Wanderer estaba consiguiendo uno de esos sprays curativos para salvar al hermano de Melanie. 

— Como sea. Lisa me llevó a ver la última película. ¿Sabes quién es Miyeon? —, Suzie frunció pensativa mirando hacía el techo.

— No, creo que no.

Rosie la miró con incredulidad: — ¡¿Choi Miyeon?, ¿Idle?!

Suzie entonces pareció darse cuenta de quién era Miyeon o al menos de la banda.

— El grupo de Seo Soojin.

La mirada de Rosie se ensombreció asintiendo. No era tan cercana Idle como lo era Lisa. Sin embargo de alguna forma había tenido la oportunidad de convivir con Seo Soojin una vez, en una salida con su mejor amiga y Minnie. No era más que una chica tímida que le recordaba mucho a Jennie unnie. Siempre estaba sonriendo con suavidad y Rosie y ella habían estado lanzando sonrisas nerviosas cada que sus manos se tocaban para tomar algún encurtido. Lisa intentó una vez tenderle una cita con ella. 

Se sintió con vértigo cuando se enteró de todo el escándalo.

Seo Soojin no se merecía eso.

— Sí, ese. 

— Escuche un par de canciones. Hann me gustó mucho.

— Es bastante buena. ¿Has escuchado UH-OH ?, últimamente me ha dado por ponerla cuando estoy por hacer un horario.

— ¿Cuál es?, no, creo que Jimin sólo me enseñó la canción de Lion . Ella estaba apoyándolas mucho en el Queendom .  

— Ah, ¿Enserio?

Suzie puso los ojos en blanco: — Obligaba a todos en el chat familiar a apoyarlas. Creo que la tía Yeol terminó por quitarle el móvil y entonces obligó  a Minjeong y Minjeong obligó a su prima Aeri, porque ella no lo iba hacer bajo ninguna circunstancia.

Rosie se rió ante eso.

— Sin duda suenan como algo que ellas harían.

— Bueno… Creo que volviendo al eje central de la historia.

— Ajam.

— Miyeon-ssi antes era aprendiz de YG, de hecho hubo un tiempo en que compartió habitación con Lisa. Como sea, Lisa invitó a Miyeon-ssi y arrastraron a Jisoo unnie también. Jennie unnie no fue porque estaba pasando ese fin de semana con su madre. Yo no estaba muy feliz con la idea. Entonces Lisa y yo nos peleamos. Porque somos así. Nos peleamos muy fácilmente. Es como si ella fuera una llama y yo fuera viento. Luego yo dije cuatro cosas que le hirieron, porque cuando me peleo con ella, puedo ser bastante hiriente. Entonces se fue a llorar al baño. Miyeon-ssi tuvo que ir tras de ella. Jisoonnie me regañó por haberle gritado a Lisa. Así terminamos las cuatro sentadas en las últimas filas. Todas estábamos molestas por algo. Menos Miyeon-ssi. Lisa y yo por nuestra disputa. Jisoonie porque decía que sólo se prestó para ese aparato de tortura por nosotras y por eso mismo teníamos que disfrutar la película. Y en un punto me puse a llorar, porque, soy una sensible de mierda. 

— ¿Todo bien? —, Rosie no se había dado cuenta que estaba jugando con los dedos de la mano de Suzie hasta que parpadeó para ver lo que estaba haciendo. 

Asintió.

— Cada vez que las películas se terminaban. Allie apretaba mi mano. Porque me inquietaron mucho los finales. Y ese era el final. Como el fin de Harry Potter . Y las cosas iban a cambiar. De todas formas todo había cambiado muy rápido en un par de meses —, se rió de manera sardónica. — Pero…

— Tu hermana no estaba ahí, ¿Verdad? —, vio como los ojos de Suzie parecían tornarse en la misma sintonía. Como si le hubiera pasado telepáticamente la misma serie de notas musicales que nadaban en su cabeza, la misma angustiosa percusión.

— No —, respondió con una voz que sonó funesta. —, no lo estaba. Y mierda… Eso era triste. Tal vez ahora comprendo ciertas cosas, si prestó atención a mi tren de la memoría —, suspiró llevando su mano libre al mentón.

— ¿Estás temblando?

— Oh. No me había dado cuenta… —, susurra mirando sus hombros.

— ¿Puedo abrazarte o prefieres otra cosa?

— ¿Puedo abrazar a Damon?, creo que me gustaría eso.

Suzie llamó a Damon que hace un buen rato estaba echada sobre el suelo. Él saltó sobre el regazo de su dueña y ella se lo pasó a una Rosie que apretó sus mejillas contra el lomo estático de él que latía debajo de ella. Su pelaje era como el de un peluche, incluso más sedoso que el de Hank. Él no parecía incómodo ante el afecto. Se quedó en silencio. No era esa sensación desesperada ni lúgubre. Sólo era como algunas veces con la señorita Ha, cuando hablar llevaba a descarrilar algunas cosas que parecía no haber entendido. Cómo voltear al cuaderno de matemáticas y ver a esa operación irresoluble como posible. Rosie ahora puede entender, después de muchos años, el actuar de su madre cuando su hermana murió. La forma en que estalló como una tormenta eléctrica que inundó toda la cocina, la forma en que la ropa volaba a su equipaje y escapaba de ellos en un taxi sin verlos plantados en la acera. Piensa en la ausencia que duró meses y entiende el brutal accionar ante un cambio que no le entumeció los huesos hasta que pudo comprobarlo con sus ojos. 

Inhaló y exhaló, hasta que pudo continuar.

— No era lo mismo. Pero, Jisoo unnie me preguntó: "¿Qué estaba mal?". Y yo le respondí que Allie no estaba ahí y entonces no se sentía como un final sin Allie ahí. Ella me dijo que podía fingir que ella era Allie. Le dije que era imposible, ¿No crees que es imposible?, Unnie y Allie no se parecen para nada. Son opuestas. Unnie es bastante agradable y cálida, pero también desvergonzada y juguetona. Es bajita y es demasiado bonita. Siempre me quitaba el aliento y mi corazón latía rápido. Allie no hacía eso, no provocaba eso en mí. Allie era más alta que yo, era delgada como un fideo y claro era bonita, pero no bonita como Jisoo unnie, no era esa belleza que desprendía realeza. ¿Sabías que Jisoounnie está conectada con la realeza?, bueno lo está. Era imposible que fuera Allie. No había forma en que yo pensara que era Allie y se lo dije y se rió en mi cara. 

Hizo un puchero con sus labios y Damon le lamió los dedos.

Suzie estaba quieta escuchando todo sin reaccionar. 

Rosie prosiguió: — Entonces sólo me preguntó que hacía Allie. Le dije todo al pie de la letra y ella dijo que no iba a chillar cada vez que Jacob se quitara la camiseta. Incluso aunque hubiera una escena donde se queda en ropa interior. Pero, sujetó mi mano al final de todo. Y no era Allie y se lo dije. Pero, volteando a ver hacía atrás, agradezco ese gesto.

— Eso suena muy tierno.

— Lo es —, dice mientras siente cómo sus cejas tiemblan. Dejó que Damon se vaya y él caminó hacía el regazo de Suzie donde descansó mirando hacía la tele, exhalando un suspiro exhausto.

— ¿Así que estabas enamorada de Kim Jisoo también? —, Suzie se burló. Había una especie de temblor en sus sonrisa que hizo que Rosie frunciera sus labios.

— Sí. ¿La has visto?

— Sí, digo es bonita. Es buena para tí. Digo esa cosa de Chaesoo en Weiboo.

Rosie entonces no pudo evitar echarse a reír de la forma en que Suzie parecía estar celosa.

— Unnie y yo nos queremos mucho. Y quizás en otra vida tal vez nos hubiéramos enamorado. Pero, querer a alguien a veces no es suficiente. Además, a unnie no le interesa mucho eso del romance a diferencia de mí; a ella sólo le gusta conectar con las personas, sin romance de por medio. No somos más que personas felices con P de platonicas. 

— Oh.

— ¿Sólo oh?

— Esperas que diga algo.

— No, no sé. Te veías rara hace un momento.

— Bueno, es imposible negar que Kim Jisoo es un gran partido y eso quizás me ponga celosa. Creo que no debería estar celosa de eso.

— Yo estaría celosa. ¿Sabes?

— ¿Hablas enserio? —, la miró con incredulidad.

— Sí, soy totalmente honesta. Suzie, quiero tener una relación contigo.

Las cejas de la actriz se alzaron de manera precipitada ante aquella confesión.

— ¿Estás hablando en serio?

— No ahora. Creo que nos debemos el seguir pasando tiempo juntas antes de formalizar. Pero, sí. Quiero salir contigo y hacer todas esas cosas cursis que hacen las parejas. Usar ropa complementaria, celebrar los cien días, llamarnos por nombres tontos, acurrucarnos en el sofa, tener citas, bailar en medio de la sala con los muebles corridos,  no sé… tener o. ¡Diablos en serio quiero acostarme contigo!

— Pero nos debemos el celibato —, Suzie bromeó y Rosie asintió con pesadez.

— Disfruto el tiempo contigo. Hablo enserio. Lo hago. Digo, la película es horrible y la estoy disfrutando porque estoy contigo. Y tus comentarios sarcásticos de vez en cuando me causan gracia.

— De nada. Podíamos haber visto otra cosa. Si me hubieras dicho.

— Bueno. Lo digo ahora. Deberíamos ver otra cosa.

— ¿Quieres ver Orgullo y Prejuicio ?

Rosie miró a Suzie con una expresión de exagerada emoción.

— ¡Diablos sí!

— Es mi película favorita —, Suzie admite mientras la pone. — Siempre me han gustado las historias de Jane Austen.

— ¿Entonces… Orgullo y Prejuicio es tu libro favorito de ella?

— No, es Emma .

— Oh, vi la película de Anya Taylor-Joy.

— ¿2020?

Rosie asintió y tomó un puñado de palomitas.

— Viste la tensión ual en el baile de Mister Knightley y Emma.

Suzie asintió.

— Sí…

Rosie no sabía si decirlo o no. Sus mejillas comenzaron a ponerse color bermellón.

— Sé que nunca tocamos el tema a profundidad… Pero, ¿Qué recuerdas de la fiesta de Hyeri unnie?

Suzie se reclinó contra su lado del sofá de manera pensativa.

— Tu bigote estaba hecho con sharpie. Todo el mundo le puso empeño a su vestuario, menos tú.

— No iba a sacar un atuendo de regencia, hice lo que pude con lo que tenía a la mano —, se excuso recordando cómo había destrozado uno de sus abrigos favoritos hecho con tela de cachemir para hacer un frac improvisado. —, Te veías preciosa. Eso es lo que más recuerdo.

— Y el puñetazo que le diste  a ese tipo.

Ambas comenzaron a reírse.

— ¡Sí!

— Ni siquiera nos llevábamos.

— Pero te quedaste conmigo el resto de la noche… Y luego sólo sé que hubo mucho champán.

— Te pedí bailar…

Suzie pareció sorprendida.

Rosie jugó torciendo los cordones del pantalón con más fuerza. El recuerdo estaba ahí. La mirada de Suzie quemaba tanto como sus pulmones sin aire.

— Estaba mareada de tantos olores y las luces… —, admite con sus vasos sanguíneos rostros en sus mejillas. — Creo que ese fue el punto de inflexión… Lo demás… Sólo recuerdo que estaba encima de tí.

— Así que fue un baile.

Rosie asintió.

Volvieron su atención a la película. Esta vez Rosie estaba más sumida en la trama. Intentando ignorar sus pensamientos. Suzie lanzaba comentarios de vez en cuando. La mayoría eran sobre lo bien que se veía Matthew Macfadyen como el señor Darcy . Hubo un momento en particular en que Suzie llamó su atención.

— Mira, esta es mi parte favorita. La escena del carruaje. 

— ¿Por qué?

— Sólo ve. Cómo la ayuda a subirse. Es tan sútil el tacto de sus dedos. Es una secuencia rápida pero denota mucho…

Rosie se siente embobada. No por la secuencia. Sino por la forma en que los ojos de Suzie miran hacía la pantalla con demasiado anhelo. Es tanto que el aire en su pecho se condensa. Recordando la mano enguantada en seda sobre sus dedos. No puede evitarlo. La forma en que busca la mano de Suzie que descansa sobre el sofá. No hay forma en que evite que sus dedos sudorosos se resbalen sobre los de la actriz. Ella sólo lo deja ahí, trémulos de miedo. 

¿Y si se aparta? 

Suzie en cambio envuelve su mano y se quedan el resto de la película de esa forma. 

Rosie no puede evitar sentirse complacida.

[...]

Dos días después es de madrugada. Rosie está esperando a que la lluvia se escampe desde la vitrina de una tienda de conveniencia. Hank está a su lado y ambos ven el agua correr sobre la acera. 

El teléfono de Rosie vibra, entonces contesta la llamada cuando ve que es Suzie.

Vi tu mensaje… —, la escuchó bostezar al otro lado de la línea.

— ¿Estabas durmiendo?

Acabo de llegar  a casa del set.

— ¿Tenías un llamado?

Lo dice lo bastante sorprendida mientras baja un poco el borde del sombrero de la parte de enfrente. No quiere que su rostro se vea.

Sí. Como sea, ¿Dónde estás?

— Estoy comiendo un bocadillo en una tienda de conveniencia.

Dame la dirección por GPS, voy por ti.

— ¡No tienes que hacerlo!, voy a llamar a Oppa para que venga por mí.

Rosie… Es tarde, voy por ti. Estoy encendiendo mi auto. Dame la dirección.

— Ok. ¿Quieres algo?

Un café negro sin azucar.

— Está bien, gracias.

Es lo único que dice exhalando y vuelve a ver las gotas que se rompen sobre el cristal del aparador.

[...]

— Toma y gracias. 

Rosie le tiende el café mientras pone a un empapado y molesto Hank en la parte trasera.

— Estás mojada —, Suzie señala dando un sorbo rápido antes de poner el vaso de cartón en el portavasos. Se saca la campera negra que lleva y la pone sobre los hombros de Rosie.

— Gracias —, dice con los dientes castañeando. Su cuerpo comienza a calentarse por la calefacción encendida. La primavera se cierne en brutales aguaceros por la ciudad y eso la hace sentir pena por los cerezos recién florecidos que parecen disolver sus pétalos.

— Vamos a tu casa entonces…

Rosie se quita el sombrero y ve a Suzie. Debajo de sus ojos se notan las marcas del cansancio.

— Te ves agotada.

— El café ayuda —, dice dando otro trago antes de ponerse en marcha.

— No pensé que llovería.

— ¿Qué haces afuera tan tarde? —, es lo único que comenta mientras prende el estereo.

— Me gusta correr —, señala su ropa deportiva debajo de la chaqueta.

— ¿De madrugada? —, Suzie le enarca una ceja mientras conduce tarareando la canción en la radio a esa hora. Es una Twice .

— Me gusta correr cuando la ciudad duerme. Me siento como si fuera la única persona viva. Tal vez un vampiro —, le da una sonrisa dentuda que pretende que se vea llena de inocencia. Suzie bufa y toma otro trago de café.

— ¿Quieres?

Le ofrece y Rosie se niega.

— Sí me das café me provocarás dormir. Usualmente a veces me pone en un efecto inverso. 

Suzie la mira con incredulidad: — ¡¿Estás hablando en serio?!

Rosie asiente. 

— Creeme como idol, he dependido del café para realizar mis horarios. Incluso aun lo hago, pero, sólo me genera más y más pesadez en los párpados. 

— Dios, suena terrible. No creo que podría funcionar de esa manera. Si me lo preguntas.

Rosie se encoge de hombros.

— Soy un alien.

Luego canta el coro de esa canción de Lee Sun-hyun de Akmu : Alien .

Suzie la acompaña pareciendo reconocerla.

— Entonces, ¿Te parece si conectas tu teléfono a mi auto y pones música?

Rosie lo piensa por un instante y ve a Suzie. Con los ojos reventados en sueño mientras aprieta su agarre sobre el volante e intenta mantenerse consciente.

— Me parece que me gustaría hacerte hablar. No quiero que te duermas. Podía haber tomado un taxi. Es irresponsable conducir cansada.

— Estamos a cinco cuadras de tu edificio. Creo que puedo mantenerme despierta —, Suzie espeta.

— Está bien. Pero te haré preguntas hasta que lleguemos.

— Genial, me gustan las trivias —, dijo sonriéndole de manera cariñosa. A Rosie se le aceleró el pulso y llevó su mano a su pecho.

— ¿Cuál es tu libro favorito?

[...]

Obligó a Suzie a quedarse a dormir en su apartamento. No quería que cruzara la ciudad en esas condiciones tan calamitosas. Pensó que se desmayaría cuando estacionó su auto en el estacionamiento interior del edificio.

— Me quedo en el sofá.

Vio a la actriz caer sobre este mientras Rosie llevaba a Hank para secarlo con el secador y una toalla.

— Ve a mi habitación. Yo duermo en el sofá —, Rosie le insistió.

— No, estaré bien en el sofá.

— Suzie.

— Jangmi… —, la escuchó gemir abrazando un cojín.

— Tuviste un día largo. Descansa en mi cama, te va doler la espalda.

Suzie elevó su rostro arrugado haciendo un mohín.

— Me quedo aquí.

— Ve a dormir a mi cama.

— Sofá.

— ¡Cama!

— ¡Sofá!

— ¡Cama!

— ¡Sofá!

— ¡Suzie!

— ¡Jangmi!

Al final Rosie sonrió victoria mientras conducía a una somnolienta Suzie hacía su cama. Ella se metió a bañar y se puso ropa cómoda. Cuando salió Suzie estaba desmayada debajo de sus sábanas mientras abrazaba a un Hank recostado sobre su pecho.

Rosie puso los ojos en blanco y tomó una almohada y una frazada del armario. Caminó tranquilamente hacía el sofá mientras avisaba en el chat grupal de las chicas que ya estaba en casa. Jisoo le respondió diciendo que se fuera a dormir y Rosie le dijo que hiciera lo mismo. Pasa un rato de quisquillosa mirando vídeos en Youtube . La mayoría son referentes a momentos graciosos de Modern Family . Cuando por fin se siente con sueño se acurruca en el sofá y agradece que es lo suficiente grande para estirar las piernas antes de mirar las gotas de lluvia deslizarse sobre la ventana panorámica que muestra el río Han. No es para nada deprimente, ni tampoco se siente sola. De hecho está aliviada que Suzie está con ella, aunque está durmiendo en su cama. Incluso si Rosie deseaba acurrucarse con Suzie, está bien. Esa madrugada aprendió un par de cosas al azar. Primero, el libro favorito de la actriz es Breakfast at Tiffany’s ; odia los días lluviosos; su serie favorita del momento es What We Do In The Shadows ; Ha visto toda las temporadas de The Walking Dead incluso si no le gusta mucho en género de Zombies, agregó que no haría una película de ese género; Sí pudiera hablar con una persona muerta le preguntaría a Jane Austen sobre ¿Cómo hubiera acabado Sandinton ?; Y si pudiera escribirle una carta a Santa le pediría el mustang de Barbie que tanto quiso en su niñez y se negaba a comprar ahora. De hecho el pensamiento más certero que tiene en esos momentos es el buscar ese mustang por Amazon .

— Tal vez tengan uno…

Dice para sí misma dejando escapar un bostezo. Sus párpados se cierran y entonces. Sintiéndose bien con esa idea que quizás se borre por la mañana, es embaucada a la tierra de los sueños. 

Y ahí sólo se ve a sí misma de pequeña con Allie enseñándole a bailar Footloose, para no hacer el ridículo en esa fiesta de cumpleaños infantil. 

Aun si eso es un recuerdo lejano e imposible de revivir ahora por la forma en que terminaron las cosas su hermana, sigue siendo un recuerdo feliz.

Porque incluso si Allie le laceró el corazón, hubo felicidad con ella.

Y no podría cambiar ese hecho.

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Thank you!
TorresMendoza
Espero que les guste.

Comments

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nishichan
#1
Nice
Kookkne
#2
Chapter 11: Pero qué fue todo este capítulo??? LMAOOO mi estado de ánimo se elevó diez veces con cada cosa que iba leyendo JSJS
Kookkne
#3
Chapter 10: Así que los Bae han pasado por muchas cosas eh, y también son otra cosa, pueden ser tan impactantes en cuanto a su apariencia como también su personalidad. Suzy ha pasado por mucho, espero que paso a paso vaya aprendiendo a sobrellevar todo mejor. Por otra parte autor(a), admito que me quedé en esta historia porque (aparte de lo interesante que es) tiene una etiqueta wenrene, en este cap ese pequeño atisbo de lo que pudo suceder entre las dos me dejó intrigada, tengo curiosidad por saber que fue lo que sucedió entre ellas (aunque también *inserta meme tengo miedo* porque suena a que sucedió algo que no es bonito). La tía Yeol es otra cosa, la parte en la que habla de la ardilla JSJS. A la espera del próximo capítulo 👀
Rose_124 #4
Chapter 9: Mi favorita historia en el momento
Kookkne
#5
Chapter 9: Wow cada vez se vuelve más interesante esta historia, me gusta. Admito que me sorprendió ver que era escrita en español, son escasos los trabajos en nuestro idioma así que me gusta la sensación de saber que el contexto lo puedo entender completamente sin tener la barrera de leer todo en un idioma extranjero y que maneja significados distintos.

Hasta el momento el desarrollo es genial y ver cómo de "odiarse" a luego terminar en una relación para llegar hasta este punto dónde Rosé está conociendo a la familia Bae es un crecimiento que hace que quiera seguir viendo que sucede después. La parte final de este capítulo JAKSK el próximo se ve prometedor, estoy impaciente por la prox actualización autor(a). Gracias por compartir esta historia :D
Noemami123xd #6
Chapter 3: Excelente historia!! Espero tener otro capitulo, tu forma de escribir me encanta!
Pmon21 #7
I loved it, I look forward to the next chapter
ettrrr #8
Chapter 3: No suelo comentar estas cosas pero me sorprendió no ver ningún comentario. Está muy bien escrito, sigue así!