Capítulo 90: Personal Jesus

No sabía por qué había despertado sobresaltada, pero cuando enfocó mejor todo, la habitación y a Tiffany con su cabeza recostada, como ya era su costumbre, sobre su vientre; le vinieron esas repentinas náuseas y tuvo que salir corriendo hacia el baño.

Tiffany se había despertado en el proceso y al escuchar que la válvula del inodoro, bajaba, se desperezó y volvió a acostarse. Taeyeon salió del baño después de cepillarse los dientes para quitarse el sabor amargo del vómito y se acostó al lado de su novia, otra vez y la pelirroja, nuevamente, recostó su cabeza en su vientre.

Comenzó poco a poco a acariciar su cabello, enredando sus dedos y sintiendo la suavidad que le proporcionaba. Era realmente delicioso estar acostada junto a la mujer que más amaba y sentirse absolutamente en paz y protegida.

Estaba empezando a sentirse, otra vez, adormilada y su respiración se estaba volviendo más suave; cuando el repique de un celular la hizo abrir los ojos. Era el suyo, pero iba a dejarlo que siguiera sonando porque no tenía intenciones de levantarse para ir a buscarlo, además porque era muy temprano. El celular dejó de sonar y Taeyeon volvió a intentar quedarse dormida, pero al segundo comenzó de nuevo a repicar y enseguida supo que no la dejarían en paz hasta que no lo apagara. 

-¿A dónde vas?-Tiffany la agarró del brazo, deteniéndola al instante. Tenía la voz amodorrada, pero aún así no dejaba de sonar demandante. 

-Ya vengo, Fany. Voy a apagar el celular-contestó Taeyeon, intentando levantarse de nuevo, pero no pudo porque Tiffany volvió a detenerla y se abrazó a su cintura para no dejarla ir. 

-No. No te vas-dijo, testarudamente.

-¡Fany!-rió la morena, divertida y tratando de soltarse sin lograrlo, porque Tiffany la tenía bien agarrada-Tengo que ir a apagar el celular, está sonando mucho.

-Déjalo. Se cansarán al rato y colgarán.

Entonces se quedó quieta, esperando que sucediera el milagro que había dicho Tiffany. Nada ocurría, porque cuando dejaba de sonar, a los pocos segundos repetía nuevamente y así fue por lo menos 2 minutos, que fue cuando la pelirroja la soltó y dijo-Calla esa endemoniada cosa. Te quiero a mi lado en 2 segundos. 

Taeyeon rió y le dio un beso en la frente. 

-Como usted ordene, princesa-susurró. 

Encontró el celular metido en el fondo de su bolso y al ver escrito “Heechul” en el ID de la pantalla, mientras sonaba y sonaba el coro de la “Satisfaction”, frunció el ceño y dudó entre cancelar la llamada y contestarle. Algo le decía que debía responder. 

-Taeeeeyeooooon…

-Es Heechul-murmuró.

-¿Quién? ¡Vuelve a la cama ahora mismo, Kim!-protestó Tiffany, molestándose.

Heechul no se rendiría y estaba segura que vendría a buscarla, porque cuando algo era realmente importante para él, no se daba por vencido hasta que la encontraba. 

-Heechul…

-¡Prende la televi…!

-¡¡Taeeyeoon!!

-¡Un momento, Tiffany!... ¿Qué decías, Heechul?

-Prende la televisión. En 20 minutos te quiero en mi oficina. Kwang y Leeteuk van en camino. 

Colgó sin darle tiempo a preguntar lo que pasaba. Miró su celular y luego a Tiffany, que estaba mirándola con cara de fastidio y cruzada de brazos. 

-¿Piensas venir o tendré que traerte yo misma de las orejas?

No dijo nada, corrió al televisor y lo prendió rápidamente. Escuchó el gruñido de impaciencia de Tiffany y luego un portazo, señal de que se había encerrado en el baño.

Taeyeon comenzó a pasar los canales, hasta que encontró el primero donde la nombraban. Era un programa de esos de farándula y que tanto le daban dolor de estómago. El primer síntoma apareció cuando comenzaron a hablar los presentadores, a la vez que el título de la “noticia”: KIM TAEYEON, EMBARAZADA Y CACHONDA. Y una serie de fotos que se llevaron el color de su rostro.

“Estas son las fotos que recorren las páginas de Internet desde que alguien captara con la lente de la cámara de su celular a Kim Taeyeon, saliendo con su novia: la empresaria Stephanie Hwang, en el estacionamiento de la clínica y en posiciones muy comprometedoras…”

Una foto del momento en el que había estado con Tiffany en el auto, apareció en pantalla. Estaba oscura porque estaban en el estacionamiento con techo, pero se les veía lo suficiente a través de las ventanas del parabrisas del auto, como para reconocerlas. Estaba con la espalda desnuda y sentada en las piernas de Tiffany. No dejaban duda cuando mostraron una en otro ángulo, en la que salían del ascensor agarradas de la mano y luego otra donde estaba Tiffany sacándose los lentes oscuros. 

“Y bueno…son más, pero estamos en horario no adecuado para mostrarlas. En su lugar y según los rumores, Kim Taeyeon está embarazadísima. La noticia apareció esta madrugada en un conocido blog de chismes, donde se afirma que…”

No pudo seguir viendo ni escuchando. Apagó el televisor y todo le dio tantas vueltas, que se mareó y se dejó caer en la cama, con las lágrimas brotando de sus ojos.

Tiffany salió del baño en ese momento y al ver a Taeyeon en la cama, temblando y llorando, el corazón le dio un vuelco doloroso. 

-¿Tae?... Cielo, ¿Qué pasó? 

Taeyeon sollozó aún más y se abrazó a ella. Deseaba que la dejaran en paz.
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Entró en la parte trasera del auto y lo primero que vio, fue la mirada de Minho a través del espejo retrovisor. Un estremecimiento lo cubrió, sin embargo no desvió la mirada, lo sentía como un desafío a sus sentidos. Deseaba no sentirse tan desprotegido en ese momento, pero a la misma vez, tan tremendamente libre. 

Sólo había pasado 2 segundos desde que se montara en el auto y ya le parecía que hubiese estado desde el día anterior.

-Hola-saludó Minho, con una sonrisita-¿Cómo dormiste?-preguntó, poniendo en marcha el auto. 

-Bien-respondió, lacónicamente-Muy bien. 

Le vio sonreír a través del retrovisor y tuvo que tomar aire para darse fuerzas y no desvanecerse ahí mismo. Rob, que estaba adelante, volteó y le sonrió. Ambos se dijeron “Hola” en voz baja y siguieron en lo suyo.

-Iremos al gimnasio al que Rob y yo vamos, Minhyuk-dijo Minho-Si no te importa, claro.

-No, no me importa-contestó, brevemente.

El trayecto fue relativamente corto y silencioso, sólo interrumpido por la canción que sonaba en ese momento y que era tarareada distraídamente por Minho, era “Won’t Stop” de OneRepublic. 
A pesar de sus esfuerzos, no podía dejar de verlo. Era demasiado adictivo que sus ojos se desviaran una y otra vez hacia él y sus malditos dedos que tamborileaba sobre el volante. Detallaba la forma de sus manos, sus brazos y la manera como se despeinaba levemente el cabello cuando paraban frente a su semáforo o cuando su voz suave y que le erizaba la piel, resonaba a través del carro, hablándole a Rob.

Cuando le sonreía, era puro y sincero, sin malicia y eso era lo que más le gustaba de él. Era especial la forma como le hablaba a Rob y éste buscaba su mano sobre el freno de mano para agarrársela. Minho, por supuesto, entrelazaba sus dedos. 

Llegaron al estacionamiento del que parecía ser el gimnasio y una vez que Minho estacionó, Minhyuk abrió la puerta y agarrando su morral, salió del auto. 

Era un sitio grande a diferencia al que siempre asistía que era más pequeño. Minho bajó también, poniéndose la gorra con la visera hacia atrás y recibiendo el morral que le lanzaba Rob por encima del techo. 

-¿Vas a estar viniendo permanentemente con nosotros?-preguntó Minho a Minhyuk.

-Uhh…no sé…

-Si es así, debes inscribirte como miembro; si no, yo diré que vienes como recomendación de Rob y mía.

“Como recomendación, gracias” 

-Me inscribiré.

“¡Joder! ¡¿Qué coño te pasa?! ¡¿Eres masoquista?! ¡¿Te excita sufrir?!” 

Minho le sonrió y poniendo una mano en su hombro, lo instó para que caminara-Vamos. 

La música electrónica retumbaba por todo el lugar y reconoció de inmediato la canción que sonaba, “You Think You’re A Man” de Full Frontal, la que apareció en el primer capítulo de Queer As Folk, cuando Brian le dice a Justin:

-“Bueno… ¿Te corres o te vas? O te corres y luego te vas…o te corres… y luego te quedas” 

Volteó y para su sorpresa, Minho había dicho la misma frase de Brian. Se le quedó mirando y él le sonrió, divertido. 

-¿Qué?-preguntó Minhyuk, confundido.

-¡Nada!-rió-Vamos a inscribirte, chico-dijo Minho, acercándose a la recepción donde estaba un tipo moreno y bastante musculoso que estaba entregándole a Rob, la lista para que se anotara. El tipo lo miró y le sonrió a Minho -Ned, dame una planilla para anotar a mi amigo aquí.

El tipo le sonrió también a Minhyuk y le guiñó un ojo, pero no fue eso lo que lo sorprendió, sino la voz del tipo. Era la voz más afeminada que había escuchado en su vida y no correspondía con su porte de macho-Aquí tienes, cariño. Tu amigo está guapo-le guiñó un ojo a Minho y luego a Minhyuk, haciéndolo sonrojar-¿Cómo te llamas, cielo? 

-Minhyuk-respondió, atribulado-Seo Minhyuk. 

-¡Ay qué bello nombre! ¡Qué adorable es, Minho! 

Minho asintió y apartándose para dejar pasar a los demás, le entregó la planilla a Minhyuk-Toma, llénala y cuando estés listo, se la entregas a Ned. Él te entregará la llave de tu locker y te regalará una toalla personal. Nos vemos dentro en la bicicleta. Estaré con Rob.

-Gracias-murmuró Minhyuk, en voz apenas audible y nerviosa.

Minho lo miró fijamente por un rato y le dio unas palmaditas en las mejillas, entrando enseguida con Rob por una puerta eléctrica de cristal. Miró hacia dentro y vio varios hombres musculosos levantando pesas, otros haciendo press de pecho, de banca, lagartijas, saltando la cuerda…había unas chicas en unas caminadoras y pensó que tal vez no todo sería tan tormentoso, si se dedicaba puramente a ver a los tipos que estaban ahí y que tenían unos culos de infarto.

“Ninguno como el de Minho”-pensó.

-¡Cállate!

-¿Qué dijiste?-preguntó un hombre, volteándose y mirándolo con cara de querer golpearlo-¡¿Me estás mandando a callar a mí?!

-Uhh…no disculpe, no era con usted-dijo Minhyuk, apenado y enrojeciendo. 

-Más te vale-replicó el hombre, haciendo crujir sus nudillos y pasando al gimnasio junto con otro tipo. 

Expulsó el aire que había estado sosteniendo sin darse cuenta y se fijó en una barra cerca de la recepción donde estaban dos personas más llenando la planilla y se acercó para hacer lo mismo. 
Era bastante corta, sólo pedían algunos datos principales, talla, peso, enfermedades y/o alergias, además de operaciones sufridas y ejercicios contraindicados. Igualmente, pedían 2 fotos tipo carnet; sólo tenía 1 y era algo reciente. Después de llenar la inscripción, se acercó de nuevo a la recepción y Ned, el moreno musculoso le sonrió. 

-¿Listo, cariño?-preguntó él, agarrando una bolsa con una toalla. 

-Sí-respondió Minhyuk, también sonriendo, pero un poco más tímido. Le entregó la planilla y Ned le dio la bolsa con una toalla con el logo del gimnasio estampado. 

-Lindo, te falta una foto…

-Uhh, sí…yo puedo…

-Pero dejaré que me la traigas para la próxima ¿Vale?-dijo Ned, comiéndoselo con la mirada-Sólo no se te olvide. 

-No, muchas gracias.

-Aquí tienes tu carnet de afiliado que debes traer siempre y…firma aquí.

Minhyuk colocó su nombre en la lista, seguido de la fecha y su rúbrica; entregándole la carpeta a Ned. 

-Eso es todo, cariño. Que te la pases bien.

-Gracias. 

-Tienes unos ojos lindísimos. 

Minhyuk rió forzado y con ganas de desaparecer. Iba a pasar por la puerta, pero se tropezó con algo grande y muy duro.

-¡¿Otra vez tú, vale?!-gritó el tipo de momentos antes que pensó que le había mandado a callar-¡¿Qué coño te pasa a ti?!-lo empujó y tropezó con otra persona-¡¿No tienes ojos en la cara?!

-¡Fue sin querer! ¡Disculpe!-exclamó Minhyuk, asustado. 

-¡Randy! ¡Déjalo en paz!-gritó Ned, saliendo de detrás de la recepción.

-¡Discúlpeme! 

-Te voy a enseñar que conmigo nadie se mete…

-¡RANDY, NO!

Iba a darle un puñetazo a Minhyuk, pero él logró esquivarlo a tiempo y eso enfureció más al tipo llamado Randy, que volvió a intentar acercarse para golpearlo, pero de pronto alguien se metió en el medio y fue Rob quien sacó a Minhyuk del camino.

-¡Apártate! ¡No seas estúpido!-gritó Rob, agarrándolo por la cintura.

-¡Déjalo que se defienda solo!-gritó Randy, buscando acercarse-¡¿O es que es una nenita que necesita de su mami para que lo salve?!

-¡Randyyyy! ¡Maldición! ¡Cálmate! ¡Es una equivocación!-gritó Ned.

-¡¿Qué te pasa a ti?!-ahora era Minho, quien se metió entre Rob, Minhyuk y Randy-¡¿No coges la seña de que fue un error?!

-¡Apártate de mi camino, Horvejkul!-le lanzó para darle un golpe, pero Minho se quitó a tiempo.

Minhyuk logró en ese momento soltarse del agarre de Rob y se acercó para pegarle a Randy, pero con tan mala suerte que Minho se atravesó y recibió el puñetazo directo en la cara, cayendo noqueado al suelo en un segundo. 
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-¡Los voy a demandar! ¡Váyanse a tomar por culo! 

Colgó el teléfono con toda la arrechera y la rabia que tenía, respiraba entrecortadamente y golpeó con el puño en el escritorio. 

-¿Qué te dijeron?-preguntó Jong, muy serio.

-“No sabemos, Señorita Hwang”-imitó la voz de la muchacha que le había respondido.

-¿Eso fue todo?

-¿Qué más querías? Amenacé con demandarlos por violación a la privacidad…

-Privacidad-repitió Jongwook, intentando no reírse. Tiffany lo fulminó con la mirada.

-Cállate, Jong.

-Sabes que no puedes demandarlos por eso si estabas en un lugar público y sabes que podían ser vistas…

-¡Me cago en la leche! ¡Claro que lo sé! ¡Sólo lo dije para que me dijeran quién tomó las fotos y quién les dio la información del embarazo! ¡Pero ni ellos mismos lo saben! ¡Les llegaron las fotos en un anónimo!

-En todo caso sí puedes demandarlos por exponer las fotos y por daños a tu reputación y a la de Taeyeon-repuso Jong, rascándose la barbilla-Pero no por “Violación a la privacidad”.

-El auto es mío.

-Y estaba en un estacionamiento donde cualquier persona podía verlas, saldrías con los platos en la cabeza si hubiese estado un menor presente. Te acusarían por actos inmorales en la vía pública. 

Tiffany hizo un gesto de fastidio y se frotó la frente con los dedos. Estaba empezando a dolerle la cabeza.

-No quiero demandar a nadie. ¿Sabes el tiempo que perdería en eso? En todo caso Taeyeon y yo nos buscamos que nos sacaran así, pero… ¡Joder! ¿No pueden dejarla en paz?-golpeó de nuevo el escritorio y apoyó la frente en él-¡Todos los tiros fueron hacia ella! ¡Y claro, le afectó más por su embarazo!

-Está muy sensible…

-Si la hubieras visto llorando-musitó la pelirroja, con una expresión de dolor-Parecía una niña pequeña y mientras más intentaba calmarla, más lloraba. Era imparable…-se levantó de su asiento y apagó la laptop-Sólo me gustaría saber quién averiguó y cómo sabía lo del embarazo. 

-En Argentina…

-Se habría regado como pólvora antes de llegar aquí, Jong. Es absurdo. Es alguien que ya lo sabía de antes y sólo esperaba el momento oportuno para dejar caer la noticia.

-Tal vez el médico que me dijiste que la atendió en el ambulatorio de Bariloche...-dijo Jong, encogiéndose de hombros

-Te digo que lo hubiera dicho antes. Para mí, la persona que nos vio en el estacionamiento, es la misma que dio la noticia del embarazo ¿Por qué si no estaría en la clínica?

-Bueno…supongo que tienes razón… ¿Dónde está Taeyeon?

-En una reunión con Heechul-respondió viendo el reloj de pared-Dijo que llamaría apenas terminara para que fuera a buscarla. Los paparazzi ahora van a estar más pendientes de sus pasos-abrió la puerta del despacho y miró a Jong-¿Vienes?

-¿A dónde vas?-preguntó Jongwook, siguiéndola. 

-A la clínica. Quiero pedirle un permiso a Kyungmin para que Taeyeon pueda viajar mañana conmigo a Oslo. 

-¡Cierto que pasado mañana es la boda de Dahee!-exclamó Jong, pegándose en la frente con la mano-Cuando estés allá dile a Dahee y Zach, que me disculpen por no poder asistir. 

-Vale.

-¿Llevarás a los chicos?

-Por supuesto. No los dejaría solos en año nuevo-dijo, abriendo la puerta de la casa y dejando paso a Jong-Vamos rápido, porque si llama Tae, quiero tener el permiso ya de Kyungmin y solamente ir a buscarla. 

-Cuando fueron a Argentina, no pediste ningún permiso para que Taeyeon saliera.

-Cuando íbamos a Argentina, no se sabía de su embarazo.

-Buen punto.

Tiffany sacó de la guantera unos lentes oscuros y se los colocó, a la vez que se amarró un poco mejor las coletas que se había puesto y mirando a través del retrovisor, con el control remoto abrió la reja y poco a poco comenzó a salir en retroceso.

Ya estaba casi afuera, cuando de pronto vio que alguien con una cámara fotográfica se atravesó y tomando una foto rápida, salió corriendo.

-¡¿Qué demo…?!

-¿Qué pasa?

Colocó el freno de mano y salió del auto, para encontrarse de pronto con un montón de paparazzis tomándole fotos sin parar. Gruñó de impaciencia, se montó en el auto y se puso en marcha, rápidamente. 

-¡Tiffany! ¡¿Qué haces?!-reclamó Jong, incrédulo-¡Los vas a atropellar! 

No le hizo caso y continuó retrocediendo, haciendo que los paparazzis salieran corriendo del camino para apartarse. Algunos le dieron golpes al auto, pero otros se montaron en sus motos y apenas la pelirroja estuvo completamente afuera, salió a toda velocidad de ahí, siendo perseguida al instante por los endemoniados fotógrafos. 

-¡¿Cómo se te ocurre lanzarles el carro encima?! ¡Te pueden demandar! 

Tiffany no respondió. En su lugar aceleró aún más y Jongwook se agarró del asiento con fuerza. 
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-¡Embarazada! ¡Estabas embarazada todo este tiempo y no me lo dijiste! 

-¿Y es que tenía que decírtelo? ¡Es mi vida! ¡Lo que decidamos Tiffany y yo, no es asunto tuyo ni de nadie más! 

-¿No piensas ni un poco en tu carrera?-preguntó Heechul, confundido-¡Tienes un contrato, Taeyeon! ¡Un contrato para un tour por los 5 continentes! ¡¿Cómo se supone que lo harás si dentro de poco tendrás que estar de baja laboral y un año más por posparto?! ¡Te lo dije cuando estábamos en el tour nacional! ¡Te lo dije!

-¡¿Podrías dejar de gritarme?!-espetó Taeyeon, comenzando a llorar por los nervios-¡No eres mi papá! Estoy a tu lado y no hace falta que alces la voz.

-Vale, vale, lo siento ¿Bien?-Heechul se disculpó acercándose a ella e intentando calmarse a sí mismo-No llores, lo siento. Perdóname por gritarte es sólo que… ¡Demonios, Tae!-golpeó la mesa con el puño-A veces no puedo entenderte, en serio.

-Sólo estoy embarazada, no he matado a nadie-replicó la morena, con la voz ahogada. 

-Lo sé, pero es que…todo fue de pronto. Primero las fotos esas… ¿Estabas siquiera pensando?

Taeyeon le enseñó el dedo.

-No, no estabas. Obvio que no… ¿Cuánto tiempo tienes?

-8 semanas-musitó.

Heechul sonrió, pero en realidad tenía ganas de ponerse a llorar. Le desesperaba toda aquella situación, así que se levantó de la silla y caminó hacia la puerta.

-En 20 minutos empieza la rueda de prensa. Anda a que te maquillen.

El joven manager salió y cerró la puerta tras de sí. Taeyeon cogió su celular de su bolso y le envió un mensaje a Tiffany.

“Tiffany, estaré en una rueda de prensa. Cuando termine, te aviso. Te amo”
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-¡Auch! ¡Ya, suelta, suelta! Estoy… ¡Te dije que lo dejes así! ¡Estoy bien!

-No debiste atravesarte-replicó Rob, nuevamente y viendo el moretón en el pómulo de Minho.

-Iré a buscar más hielo-dijo Ned.

-Lo siento-repitió Minhyuk, por enésima vez y avergonzado-En serio, fue sin querer. Yo quería…

-Pegarle a Randy, ya entendimos-cortó Minho, agarrando la mano de Rob para que no siguiera tocándole el pómulo-Tienes fuerza, chico.

-Sí, ¿Dónde aprendiste?-preguntó Rob, mirándolo a Minhyuk con curiosidad-Si hubiese sabido que sabías pegar, ni siquiera me acerco a apartarte.

Minho le dio un empujón a Rob y el chico le sonrió, divertido. Minhyuk bajó la mirada y trató de ocultar lo rojo que se estaba poniendo.

-Ante ese tipo de situaciones, prefiero intentar conversar y arreglar todo con calma-contestó-No me gusta llegar a la violencia, pero cuando se me hace insostenible, sólo doy un puñetazo que me enseñó mi papá para noquear de una y luego, salgo corriendo.

-¿Ves? Deberías aprender de él-soltó Rob, dándole un pellizco en la mejilla a su novio-¡No llegar a la violencia! 

-¡Bueno, bueno! ¡Ya entendí! ¿Vale?-se quejó Minho, levantándose-Sólo vayamos ahora a seguir con los ejercicios.

-¿Estás seguro que puedes?-preguntó Rob, preocupado-Sería mejor que no…

-¡Estoy bien, exagerado!-exclamó Minho, cogiéndolo por la cara y estampándole un breve beso en los labios-Sigamos con la caminadora.

Se disponían a ir a la caminadora, pero Minho notó que Minhyuk no los seguía y volteó a mirarlo. 

-¿Vienes?-preguntó.

-Uhh…yo voy al baño un momento-respondió Minhyuk, intentando que no se le notara la incomodidad.

-¿Te esperamos?-preguntó Minho.

-No, adelántense ustedes. Yo les alcanzo luego.

Minho asintió, conforme y se fue con Rob. Minhyuk, por su parte, iba a entrar al baño de hombres, pero lo interceptó Ned en ese momento y llevaba una bolsa pequeña con hielo. 

-¿Y Minho?-preguntó, confundido-Dije que traería hielo para su golpe. 

-Dijo que continuaría con los ejercicios y que ya estaba bien-contestó Minhyuk.

-¿Para qué me hacen perder el tiempo? Me hubiesen dicho que no lo necesitaba… ¡Hombres! ¿Quién los entiende? 

Minhyuk sonrió, viéndolo alejarse y quejándose. Entró por fin al baño y una vez ahí, colocó su morral al lado de un lavamanos y procedió a lavarse las manos y luego la cara. La tenía caliente y las mejillas rosadas, como si hubiera estado corriendo. 

Cerró la llave del agua y al recordar el anillo de compromiso que acababa de ver en la mano izquierda de Minho, luego de besar a Rob y notar en la de éste, otro anillo similar; sintió una gran opresión en el pecho. No tenía derecho a sentirse así, no tenía derecho a sentir ganas de llorar y menos cuando Rob, a pesar de todo, le caía bien y era muy simpático con él. 

Tomando la toalla que le había dado Ned, se secó el rostro y pensó que lo mejor sería ir olvidando a Minho. Quería pensar en algo para sacárselo de la mente, pero no veía una forma rápida, por ahora. 
Respiró profundo y después de sacar su iPod, guardar en el locker su bolso y colgarse su toalla alrededor del cuello; salió del baño para ir a las caminadoras, pero parecía que el mundo se había puesto en su contra ese día, porque en aquel momento tropezó con otro hombre y le hizo soltar el iPod.

-¡Joder! ¡¿Qué acaso no se fija?!-gritó, molesto y sin pensar. 

-Disculpa, no te vi. Venía distraído-se disculpó el otro hombre, agachándose para coger al mismo tiempo el iPod de Minhyuk y se lo entregó.

Minhyuk miró al hombre a la cara, por primera vez y él le devolvió la mirada, sonriéndole brevemente.

-Nuevamente, discúlpame-dijo él, algo apenado-Puedo invitarte algo, para resarcir…

-No hay daños, despreocúpese-murmuró Minhyuk, más tranquilo-Supongo que sólo es el comienzo de los siguientes golpes.

-¿Qué?-preguntó el hombre, sonriendo aún más y bastante confundido. 

-Nada. Sólo hablo pendejadas…

Se fue de ahí, dejando al tipo con la palabra en la boca y se acercó, por fin, a las caminadoras, donde ya estaban Minho y Rob muy entretenidos, a un ritmo rápido en la caminadora.

Se subió a una y sosteniéndose brevemente para no caerse, encendió la máquina, comenzando así con sus ejercicios. Así mismo, encendió su iPod y se dispuso a escuchar música. 

-¿Qué escuchas?-preguntó Minho, hablando más o menos alto para que le oyera.

-“Proud” de Heather Small-contestó Minhyuk.

-¡¿”Proud”?!-exclamó Rob, sorprendido y saliéndose de su caminadora para acercarse a Minhyuk-Esa es mi favorita, es la canción de Brian y Michael en Queer As Folk y con la que empieza y termina la serie. ¿Puedo escucharla? 

Minhyuk se encogió de hombros y se quitó el aparato para entregárselo a Rob. Él le agradeció con una sonrisa y regresó a su caminadora. Minho volteó a ver a Minhyuk y puso una cara de incomprensión total que le hizo reír. 

-Es un freak de esa serie-dijo Minho, sonriendo-Tiene todas las temporadas en DVD y su personaje favorito es el tal Brian. 

-¿”El tal Brian”?-preguntó Minhyuk, alzando una ceja. 

Minho rió y asintió-Sería capaz de cambiarme por ese tipo. 

-Te escuché-intervino Rob, señalándolo con un dedo a Minho, pero sin voltear a verlo y siguió cantando-“What have you done today to make you feel proud? It’s never too late to try…” 

Minho y Minhyuk rieron.

-¿Tú viste la serie?-preguntó Minhyuk, interesado a Minho. 

-Sí…en Francia la daban, pero…no la vi toda. La cuarta temporada no la vimos hasta la mitad, porque estuvimos de campamento y no había televisor donde estábamos.

-¿Vivieron en Francia?

-Sí, Rob, otro amigo y yo. Mi otro amigo, se fue hace un tiempo a Irlanda porque su padre estaba muy enfermo y pidió verlo. Desde hace un buen que no sé de él…pero como te decía, no vimos la mitad de la cuarta y entonces Rob se enojó muchísimo conmigo, porque por mi culpa no había podido verla…-rió al recordar-Tuve que buscar en varios locales de videos, donde ya la tuvieran en DVD y le compré toda la serie.

-Supongo que te declararía su amor eterno-repuso Minhyuk, hablando en voz baja para que Rob no escuchara.

-Bueno…no. Para ese tiempo no éramos novios y yo no sabía que él era mi fan. 

Voltearon para mirar a Rob, pero ahora sí no escuchaba nada y estaba absorto escuchando la canción. 

-¿Cuál es tu personaje