Di lo que quieras / El breve espacio en que no estás

Lo que me gusta de ti (Adaptación TaeNy)
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Capítulo 101: Di lo que quieras / El breve espacio en que no estás

Si muriera, su vida habría estado más que bien, por todo el tiempo que había pasado junto a él. A pesar de todo, habría sido como un sueño hecho realidad.

Se acercó a su cama, donde dormía junto a Tiffany. Siempre le gustó cómo se veía cuando dormía, cuando despertaba antes que él y sólo se dedicaba a verlo y acariciar su rostro y su cabello. Justo como ahora hacía. 

Si ese era su último adiós, no habría ya más lágrimas que secar. 

Abrió los ojos lentamente al sentir que le acariciaban en el rostro y sólo le costó un par de segundos enfocar bien, para darse cuenta quien estaba frente suyo, sonriéndole.

-¡Rob!

Se levantó de un salto y al mismo tiempo que lo hizo, la imagen de Rob desapareció, dejándolo confundido y aturdido. Se llevó la mano al pecho y lo sintió latir desesperado, casi como si fuera a salirle por la boca. Se sentía realmente mal y una sensación extraña no lo dejaba.

Escuchó un gemido de dolor venir del otro lado de su cama y vio a Tiffany moviéndose y llevarse la mano hasta la frente, mientras ponía cara de dolor. La pelirroja abrió los ojos y parpadeó un par de veces, viendo al techo y como si tratara de recordar cómo había llegado hasta ahí. 
Sólo tardó unos segundos para voltear y ver a Minho, observándola.

-Hola-saludó Minho, con un parco hablar.

Tiffany frunció el ceño y miró alrededor y a sí misma; no tenía la blusa y sólo llevaba el brassiere. Buscó desesperadamente en su memoria lo sucedido en la noche, pero sin lograrlo. Ya iba a gritarle a Minho si la había violado o qué le había hecho, cuando él le habló.

-No hicimos el amor, Tiffany. Tranquilízate y respira hondo-dijo él, muy serio.

-Pero… ¡¿Qué demonios hago sin mi blusa?!-chilló, angustiada y sintiendo un dolor de cabeza espantoso-¡Me estás viendo sin camisa, degenerado!-gritó, golpeándolo con lo primero que cogió que fue una almohada. 

-¡No me golpees, loca! ¡¿Qué te pasa?! ¡Te cuido en toda la noche y encima me pegas!-reclamó Minho, molestándose.

Tiffany agarró su blusa y salió corriendo a vomitar. Minho suspiró y se levantó también para ir a ayudarla. Al verla cerca del retrete, le tomó el cabello para que no se lo manchara, pero ella lo golpeó de nuevo.

-¡Suéltame! ¡Te has aprovechado de mí y mi amistad! ¡Seguro que estaba tan borracha que pensaste que…!

-¡¿De qué película fantasiosa me estás hablando?! ¡Te dije que no hemos hecho nada!-gritó Minho, disgustado-Bueno…nos besamos y…

-¡¿NOS BESAMOS!?-apenas chilló, espantada y volvió a vomitar-¡Maldito aprovechado…!

-¡Tú te lanzaste sobre mí!-soltó Minho, de inmediato antes que ella lo golpeara-…admito que te respondí, porque…joder, bueno…me gustó… ¡Pero hasta ahí! ¡Yo me aparté porque no me iba a aprovechar de ti y luego tú te quedaste dormida! ¡No hicimos más nada!-exclamó-Y si te quité la blusa, es para que durmieras cómoda. No tienes ni qué molestarte conmigo, no es como si antes no te hubiera visto desnuda.

Tiffany quiso patearlo, pero él se alejó a tiempo y salió del baño. Ella fue hasta el lavamanos y se lavó la boca, sintiendo la garganta congestionada y adolorida, como si tuviera fuego en ella. 

-Ahí hay un cepillo de dientes nuevo y una pasta dental, por si deseas lavarte los dientes…

-¡Por supuesto que me los voy a lavar!-chilló Tiffany, agarrándolo del estante con el espejo-No sé qué demonios…

-Bueno, tú eres del tipo raro…no sufres de mal aliento al levantarte. Debe estar en tu ADN o qué se yo qué cosa…

Se miró al espejo y vio su rostro, horrorizándose por lo terrible que se veía. Tenía el aspecto de estar enferma.

Minho se sentó en la cama y tomó aire con fuerza, esa sensación de malestar que tenía no se le quitaba con nada y aunque podía ser por haber bebido mucho, sabía que no era así y que tenía que ver con Rob y con la visión de él que tuvo al despertar. Se veía tan real, como si hubiera estado verdaderamente ahí, incluso había podido sentirle…Eso le daba mala espina y unas tremendas ganas de llorar, por alguna razón. 

Vio hacia Tiffany, que ya se había cepillado y estaba saliendo del baño mientras se colocaba su blusa y luego se arreglaba el cabello. Incluso hasta recién levantada y sin maquillaje, se veía hermosa. 

-Me tengo que ir-dijo Tiffany, colocándose sus sandalias-Taeyeon y los chicos ya deben haber llegado y yo estoy aquí todavía. Soy una irresponsable. 

-Me tienes que llevar a casa-dijo Minho, levantándose para tomar su turno al baño-Rob se ha llevado mi auto y…bueno…debo ver si sigue en la casa o si ya se ha ido. 

-¿Ido?-preguntó Tiffany, confundida y notando que no tenía nada que ver con “irse al trabajo” sino de la casa-¿Qué pasó?

Minho bajó la mirada, avergonzado y Tiffany creyó comprender. 

-¿No le habías dicho nada?

-No.

-Te descubrió con Minhyuk.

No era una pregunta y Minho se encogió de hombros.

-Estás en problemas, amigo-repuso Tiffany, seriamente-Date prisa, te esperaré abajo. ¿Hay algo de comer aquí?

-Uhmm, no creo…pero busca a ver si quedó pastel.

Minho se encerró en el baño y Tiffany tomó su celular para ver si tenía algún mensaje o llamada. Tenía 5 mensajes y 30 llamadas perdidas.

-Joder… quien seas, estás desesperado…

Como tenía el vibracall y estaba en silencio, no lo había escuchado. Todas las llamadas estaban entre 20 de Jong y 10 de Myungsoo. Cuando vio el nombre de Myungsoo, sintió un dolor de estómago terrible, como nervios y ansiedad. Iba a marcarle, pero le entró una llamada de Jong y rápidamente atendió.

-Jong…

-¡Por fin atiendes esa mierda!-exclamó Jong, molesto y desesperado-¡He estado llamándolos a Minho, a Taeyeon y a ti desde las 5 de la mañana y no atendían! 

-¿De qué hablas? Taeyeon no está aquí-repuso Tiffany, confundida.

-Pensé que estarían los tres juntos…-musitó Jong, extrañado.

-Pues aquí no ha estado, porque sino me lo hubiera dicho Minho-dijo Tiffany-Él sí se acuerda de todo anoche, yo no.

-Bueno, lo que sea, tienes que traer a Minho ya. Ahora mismo a la clínica, Rob ha tenido un accidente a las 4 de la mañana con un camión y está grave. 

-¡¿Qué?!

-Sí, tráelo ya mismo. Myungsoo intentó comunicarse con él también apenas llegó la ambulancia que trajo a Rob, pero no atendió nunca. Y Tiffany…

-Dime…-musitó, quedamente. Viendo a Minho salir del baño y sintiendo ganas de llorar. Jong habló más lentamente esa vez.

-Rob está muy mal. El camión embistió el auto de Minho y lo arrastró hasta una pared, donde quedó casi inservible. Rob quedó atrapado y costó sacarlo. Tiene un fuerte golpe en la cabeza y unas costillas fracturadas...

-¿Y cómo…?

-Como te dije está muy mal, demasiado mal y…podría morir en cualquier momento, Tiffany. Así que por favor…trae a Minho y sé cuidadosa al decírselo…Ya yo llamé a la mamá de Rob para avisarle, viene en camino-se hizo un breve silencio y Tiffany seguía mirando a Minho, que parecía totalmente distraído y pensativo-Nos estamos viendo.

-¡Espera! ¿Y los chicos y…?

-Los chicos están bien.

Él colgó, pero no le respondió por Taeyeon. Guardó su celular y miró de nuevo a Minho, quien; ahora sí, había volteado y la observaba.

-¿Jong?-preguntó él.

Tiffany asintió, sin decir más nada; buscando la forma de decirle sobre Rob, pero mientras más lo intentaba, más le costaba. Minho notó que ella parecía tener dificultades para hablarle y frunció el ceño, estaba muy pálida y al ver a sus ojos, ella dejó de intentar decirle. No era necesario, ya lo sabía.

El mundo entero pareció aplastarle. Por eso Rob había estado ahí.
…………………………………………………………

Se había pasado la noche entera llorando. Las imágenes de Tiffany y Minho juntos, besándose y a punto de hacer el amor, se repetían como en una película mala y vieja en blanco y negro.

Tal vez eso había servido para darse cuenta que la pelirroja había cambiado de opinión y ya no quería estar más con ella, que ya no quería que volvieran. Sabía que todo era su culpa, pero habría querido que por lo menos Tiffany la hubiera llamado y le dijera que no la quería más. 

No había tenido valor para volver a casa y después de ir sin rumbo por todas partes, en la Grand Cherokee de Tiffany; lo primero que se le ocurrió fue llamar a su tío para que la dejara pasar la noche en su viejo apartamento que no usaba desde que muriera su padre.

Hyuk, que vivía en otro sitio, tuvo que salir de inmediato para hacerle entrega de la llave. Al verla llorando, supuso que tendría que ver con Tiffany, pero no preguntó nada; sino que se quedó con ella toda la noche para cuidarla y había llamado a casa de la pelirroja para avisarles a los chicos que vigilaran a Manse, porque Taeyeon no pasaba la noche allá. 

Taeyeon salió de una de las habitaciones, con grandes ojeras y cara de haber pasado la noche realmente mal. Hyuk le sirvió un vaso de leche con chocolate tibio y se lo puso en la mesa, a la vez que ella se sentaba y después de beber sólo un sorbo; recostaba su cabeza en la mesa. 

-¿Qué pasó?-preguntó Hyuk, sentándose frente a ella.

-No quiero hablar de eso, tío-musitó Taeyeon, con la mirada perdida en algún lugar y acariciando el borde del vaso.

-Pues, mira…creo que nos quedaremos aquí hasta que hables y me expliques el por qué no estás ahora mismo con…

-No quiero hablar de ella.

-¿Hablaron?

-No, no hablamos, pero…

-Pero ¿Qué?

-¡La vi con él!-explotó, llena de rabia y llorando-¡La vi besándose con Minho! ¡Yo fui a buscarla para hablar con ella y me los encuentro en la cama juntos a punto de hacerlo frente a mí! 

-¿En la cama de ella? ¿Cuándo subiste a la casa y…?

-¡NO! ¡En casa de él! ¡En casa de los padres de él! ¡Estaban en una fiesta y me los encuentro así, tío!

Taeyeon se levantó y fue hasta la ventana para tomar aire y respirar mejor. Hyuk la siguió y la tomó por el hombro.

-Tienes que hablar con ella, Tae…

-¡No! ¡No quiero hablar con ella! ¡Me dijo que me esperaría! ¡Me dijo que lo nuestro no era un rompimiento!

-¿Y debo recordarte yo lo que tú hiciste con tu guardaespaldas?

-Eso es un golpe bajo, Hyuk-siseó Taeyeon, herida. 

-Esto debe tener una explicación, porque no creo que Tiffany no te diga que ya no quiere estar contigo y se vaya corriendo a estar con ese chico…

-¡No es cualquier chico, Hyuk! ¡Él era su ex novio! ¡¿Recuerdas el chico de la otra vez?! ¡¿Cuándo me fui a Londres?! ¡Es el mismo! 

-Sí lo recuerdo, Tae…-repuso Hyuk, hablando lo más calmado posible para que Taeyeon bajara la guardia-Pero de cualquier manera, no creo que Tiffany…

-¡¿Por qué la defiendes?! ¡Ella se acuesta ahora con su novio de hace años y yo…!

-Tú te acostaste con tu guardaespaldas-respondió Hyuk, serio-Y discúlpame que te lo diga de esta forma, pero no tienes nada que reclamar. Ni siquiera sabes con seguridad si se acostó con él o sólo fue lo que tú pensabas que iban a hacer…

-¡Maldita sea, Hyuk! ¡¿Querías que les tomara fotos y videos para mostrártelo?!

-No me levantes la voz, jovencita. No soy tu tío de sangre, pero Oleg me dejó la potestad para darte tus buenos jalones de oreja cuando te los merezcas-replicó Hyuk, sin alzar la voz, pero hablando con contundencia-Además, si sigues poniéndote así te harás daño a ti y a Michelle. Así que por favor, cálmate. 

Taeyeon se enfurruñó y cruzándose de brazos, frunció los labios como si fuera una nenita enojada. 

-Yo sé lo que vi, tío.

-¿Sabes lo que viste? ¿Cuánto tiempo permaneciste parada a ver lo que ocurría después?

-¡¿Es que querías que me quedara a ver como se desnuda…?!

-No hablo de eso y lo sabes bien. Desde pequeña siempre has cometido el mismo error de escapar sin antes verificar las cosas. ¿Recuerdas la vez que escuchaste a tu padre decirme que se iba a mudar y tú pensaste que se iba del país y te iba a abandonar? ¿Lo recuerdas?

Taeyeon bajó la mirada y asintió.

-Me fui antes de escuchar que sólo se mudaba de habitación y me dejaba la suya, que era grande, para mí. 

-Exacto. Menos mal que lo recuerdas. ¿Cuánto apostamos a que ahora con lo de Tiffany te fuiste antes de siquiera decirles algo?

-Yo…de todas maneras, ¿Y si se acostaron?

-¿Y si se acostaron qué…? ¿No hablarás con ella por eso? ¿Ella te abandonó cuando supo que tú habías estado con Leeteuk? 

-De todas formas…no creo que quiera hablarme-susurró Taeyeon, tristemente-No me ha enviado ni un solo mensaje para decirme nada. Es como si…se hubiera olvidado de mí.

Soltó de nuevo el llanto y en su lugar ya Hyuk tenía su hombro para que llorara en él. 

-Si sigues así, le va a hacer daño a Michelle y no quieres eso ¿Verdad?

-No…

-Bueno, creo que no es aquí donde debes estar y no es que te esté echando.

-Pareciera que sí-dijo Taeyeon, sonriendo levemente y secándose las lágrimas. Hyuk también sonrió.

-El llanto y las cosas malas a veces te ofuscan y hacen que veas las cosas peor. Ya sabes lo que debes hacer.

Taeyeon sonrió y asintió. Su celular comenzó a sonar en la habitación y tuvo que correr para cogerlo, con la esperanza de que fuera de Tiffany; pero esta se desvaneció cuando vio la pantalla.

-¿Dónde demonios estás? Te estoy llamando desde la madrugada.

Taeyeon alzó las cejas, sorprendida.

-Se dice “Hola”, Jong. Cuando eres tú el que llama, debes…

-Lo que sea, Taeyeon. No estoy para bromas ¿Dónde estás? Pensé que estarías con Tiffany y Minho, o por lo menos sólo con Tiffany.

Taeyeon cerró los ojos y suspiró.

-Es una larga historia…

-No tengo tiempo de oírla, lo siento. Rob ha tenido un accidente y está grave.

-Es una broma…es una broma pesada y horrible, Jong.

-No, no lo es y Tiffany y Minho deben ya venir en camino. Fue anoche a eso de las 4, está muy mal…

-¿Cómo fue?-preguntó Taeyeon, consternada.

-Un camión embistió el auto de Minho, que era donde iba y pues…se estrelló con una pared. 

-¿Y el conductor del camión?

-Salió ileso, como es obvio. Le hicieron las pruebas de alcohol y estupefacientes, pero no iba con nada de eso. Sano completamente. Se comió la luz; aunque él dice que se le cortaron los frenos…no sé, habrá que esperar a ver qué sucede. Se podría demandarle por negligencia al no revisar los frenos antes de salir, él dice que estaban bien antes, pero que un momento fallaron y aunque intentó frenar varias veces, se pasó dos señales de alto, el semáforo en verde y ahí fue donde colisionó con el auto de Rob. Se lo han llevado detenido en espera de las averiguaciones y la planimetría del accidente.

-Voy para allá, Jong, pero antes iré a ver cómo está Manse. Le he dejado en casa de Tiffany.

-¿Y dónde estás tú, pues?

-En el apartamento de mi tío. Larga historia.

-Cierto y luego me enteraré. 

Colgaron y Taeyeon botó el aire que había estado reteniendo. Aquello de Rob le había impresionado demasiado y le hizo recordar la vez cuando un conductor borracho la había chocado y le había destrozado el Porsche, pero a ella casi nada le había pasado, por no decir nada. Al día siguiente, se había enterado de su embarazo y ahora mismo podía decir que era un milagro, como un renacer. En aquel momento sólo podía pensar en su propia estupidez. 

Deseando que Rob se pusiera bien, salió corriendo a ducharse. 
…………………………………………………….

Corrió por los pasillos de la clínica tan rápido como podía, buscando desesperadamente a Myungsoo por algún lugar. Las personas lo veían y se preguntaban por qué tendría aquel golpe en el pómulo, pero no le importaba nada, absolutamente nada. Sólo quería encontrar a Myungsoo y que le dijera donde estaba Rob, necesitaba saber que se iba a poner bien. Si no…

Llegó a una recepción de enfermeras y una de ellas lo miró, abriendo los ojos como platos al verle el golpe. Él no le prestó atención y al mismo tiempo que Tiffany llegó a su lado, le preguntó.

-¿En qué habitación se encuentra Rob Favreau, por favor?

-Un segundo, por favor…

-¡No tengo un segundo! ¡Un segundo es lo que tuvo mi novio para…!

-¡Por favor, cálmate!-pidió Tiffany, agarrándolo por el hombro.

-¡No me pidas que me calme!

-Está en Terapia Intensiva en el piso 5. No creo que lo puedan ver, lo siento-contestó la enfermera, con aquella cara de póker que hizo cabrear a Minho. 

-¡A mí nadie me dice que no puedo verlo!-le gritó Minho, dando un puñetazo en el escritorio y yéndose hacia las escaleras para subir hasta el piso 5.

La enfermera iba a llamar a seguridad, pero Tiffany la detuvo a tiempo.

-Mire, por favor ubique al doctor Park, él es nuestro amigo y…

-¿Es usted Stephanie Hwang y él era Minho Horvejkul?-preguntó la muchacha.

-Sí.

-¡Lo hubieran dicho antes! El doctor les está esperando en el piso 5.

Tiffany suspiró, impaciente y subió por las escaleras, no podía esperar que bajara el ascensor. 
Minho llegó rápido y por alguna razón no sentía cansancio por subir corriendo las escaleras, buscaba desesperado donde estuviera la sala de Terapia Intensiva y ahí fue cuando escuchó la voz de Myungsoo. 

-¡Minho!

-¿Cómo está Rob? ¿Dónde está? Quiero verlo.

-Cálmate primero…

-¡No quiero calmarme! ¡Quiero saber de Rob! ¡Maldición!-reclamó Minho, dándole una patada a una de las sillas de la sala de espera. 

Myungsoo le iba a decir que no destrozara las cosas, pero sabía que era inútil, así que continuó.

-Rob llegó aquí con fracturas en 3 costillas y doble fractura en la tibia y peroné derechos. Un severo golpe en la cabeza, del lado izquierdo. Lo operamos y reparamos los daños lo mejor que pudimos…

Minho tragó con fuerza. Sintió una mano en su hombro y a su lado llegó Jong, al igual que Tiffany.

-“Lo mejor que pudimos, lo mejor que pudimos…” ¿Qué demonios significa…?

-Si bien reparamos todo eso, cuando ocurrió el accidente hubo parada cardiorrespiratoria. Los paramédicos llegaron en pocos minutos pero, él estaba atrapado en el auto y hubo que romper completamente el parabrisas para poder acceder a él y hacerle la RCP y hacer uso de un DEA; porque si se perdía más tiempo era más peligroso para él. Así que mientras, los bomberos movían el camión y rompían la puerta del auto con un aparato. Cuando lo sacaron, lo conectaron a un respirador y lo trajeron, pero estuvo igualmente demasiado tiempo sin llegarle oxígeno al cerebro y tuvo una convulsión…-bajó la mirada y se cruzó de brazos, muy serio-Está muy grave, Minho. Ahora mismo acabo de dar la orden para que lo trasladen a su habitación. Rob no está respondiendo a nada y sigue inconsciente después de pasadas 6 horas, si te soy sincero…no creo que…no quiero darte esperanzas si luego nada funciona y lo mejor es que te prepares…

-Quiero verlo-interrumpió Minho, no dispuesto a escuchar nada más de lo que ya sabía Myungsoo quería decir-Quiero verlo ahora mismo, ¿Dónde está?

Myungsoo lo miró fijamente por unos segundos y finalmente miró una carpeta que llevaba en las manos. 

-Piso 6, 615.

Ni bien terminó de escucharlo, salió corriendo para subir un piso más por las escaleras. Myungsoo miró a Tiffany y a Jong.

-¿Tan mal está? ¿No se puede hacer más nada?-preguntó Tiffany, preocupada.

-Todo queda de parte de Rob.

Fue lo único que contestó y pidiendo permiso, se marchó por el pasillo al escuchar que lo solicitaban en enfermería. 
…..

Entró a la habitación con mucho cuidado y sintiendo como las manos comenzaban a sudarle al apretarlas con fuerza. Lo vio en la cama y se detuvo a la mitad, tapándose la cara, sintiendo como se le rompía el corazón muy despacio. Su rostro tenía varios cortes y estaba tan pálido que no podía creer que ese fuera el mismo Rob que conocía, el mismo que creyó ver en su habitación, su Rob. 

Tenía la cabeza vendada y una máscara de oxígeno, al igual que miles de tubos y tubitos estaban conectados a él. Aparatos que hacían sonidos y el cardiógrafo que daban los latidos de su corazón.
El miedo que tenía de acercarse a él era infinito, sentía que si lo hacía le haría más daño o que se le iría ahí enfrente suyo. Verle las heridas era como sentir que cada una de ellas se las había causado él mismo y que si lo tocaba o algo, le agregaría una más. 

Aún así, tomó un poco de valor y se acercó. Tembló cuando quiso agarrar su mano, porque sentía que no tenía derecho de hacerlo, que ni siquiera tenía derecho de mirarlo, después de todo lo que le había hecho.

Recordó, entonces, cuando él le había dicho aquello de “¿Qué harías si mañana me muero?”. 

No pudo soportarlo más y lloró como un niño, arrodillándose frente a él sin dejar de mirarlo. Aquello no podía estar sucediendo, debía ser un horrible sueño y si era así, quería despertar en ese mismo momento. Esa frase se le repetía en la mente y era como una burla, una maldita burla. Cada vez que recordaba sus besos y la última vez que hicieron el amor, el dolor incrementaba y eran más las burlas implícitas, que Rob había dicho sin conciencia alguna, sin darse cuenta de lo que decía y de cuán reales y palpables eran ahora. Desde aquella en la que ni siquiera quería pensar una respuesta, hasta esa donde le decía “…Ni te besaré, ni te miraré. Me rogarás que te vea, pero yo ni te oiré”

-Rob…mi niño…-susurró, acariciando sus manos heladas-No me vas a mirar ¿Cierto?...Yo tampoco me miraría de ser tú…no merezco que me mires y te juro que…-su voz se quebró y besó su mano-No quiero que me mires…quiero decir, sí quiero, pero… ahora sólo desearía que me escucharas…sé que me dijiste que no lo harías…pero yo sé que ahora mismo lo estás haciendo, aunque no me digas nada.

Se sentó en una silla que estaba cerca y entrelazó sus dedos con los de él, mientras derramaba más lágrimas sobre las sábanas y prestaba atención a sus latidos que eran mostrados por el cardiógrafo, sonriendo.

-Te vi esta mañana…no sé si…fue producto de mi imaginación, por todo lo que bebí o si fue simplemente que te tenía tan presente en mi mente, que tuve esta visión de ti…frente a mí-explicó, pensativo-Cuando estuve despierto lo suficiente y me senté en la cama…ya habías desaparecido. Te repito, no sé si sólo fue un sueño o si…en realidad estuviste ahí…sólo sé que me dio mucho miedo. Ahora mismo siento miedo de lo que eso puede significar.

Acercó la mano de Rob a sus labios y acarició cada dedo con ellos, al igual que su propia mejilla; en un intento por rememorar sus caricias mientras cerraba los ojos y se imaginaba que de verdad lo hacía. 
Quiso mantenerlos cerrados un rato más y deseando que al abrirlos, ahí estuviera Rob, despierto, mirándole…así fuera con odio por todo lo que había hecho, pero que lo mirara…era mejor que su indiferencia, que su completa ignorancia a lo que sucedía a su alrededor, que verlo inconsciente y no saber cuándo iba a despertar. 

-Tienes que ponerte bien, Rob-musitó, aún con los ojos cerrados-Te necesito…aunque no me creas, aunque pienses que te miento; de verdad te necesito…te amo…no tengo derecho alguno para decírtelo, no merezco que me creas, yo sólo…quería que lo supieras…tengo muchas cosas para explicarte, no creo que desees escucharme, pero quisiera que lo hicieras…si después de eso, igual no quieres continuar conmigo…lo entenderé. Prefiero saber que estás bien y en alguna parte de este mundo, con alguien más que pueda valorarte como yo no supe hacerlo; prefiero eso a que…te vayas para siempre…-las lágrimas salían como cascadas y era imparables, mientras más intentaba no pensar en sus inexistentes caricias, más le dolía-No podría soportarlo…me iría detrás de ti. 

Abrió los ojos y la decepción no pudo ser más hiriente, cuando vio que su deseo de verlo despierto, no se había cumplido. Recostó su cabeza en la cama y alargó la mano un poco para acariciar su mejilla con uno de sus dedos.

-Vas a vivir, Rob…-susurró-Aún te queda mucho por delante, mi amor…demasiado… Todo el daño que te hice jamás me lo voy a perdonar…te amo. Quisiera que abrieras tus ojos, quisiera que me des una oportunidad de explicarte…-sonrió lentamente, recordando-Todavía nos falta la nevera, mi niño travieso… ¿Vivirás?... Dime que sí, por favor…háblame…dame una señal…

Le tomó por sorpresa, como pareció sentarse sólo por un segundo y después caer sobre su espalda de nuevo, para luego comenzar a sufrir lo que parecía un ataque de convulsiones; seguidas por el pitido de alarma del cardiógrafo y de otro aparato que ahí había y que emitía las ondas cerebrales.

-¡Rob! ¡ROB!-abrió la puerta, desesperado y comenzó a pegar gritos pidiendo ayuda-¡ALGUIEN VENGA! ¡Auxilio!-se acercó de nuevo a Rob, que ya había dejado de sacudirse y con terror vio como el cardiógrafo mostraba una línea larga y sin final con un pitido-No…-se acercó con el miedo latiéndole por todos lados y lo agarró por el rostro para mirarlo-Rob… ¡Rob! ¡ROB, mi amor! ¡Por favor, no te mueras! ¡Rob! ¡Despiertaaaaa! ¡Despierta, mi amor! 

Los doctores entraron como un batallón y uno de ellos agarró a Minho con fuerza, alejándolo de Rob y que, a pesar de su esfuerzo por liberarse, era en vano porque el doctor lo sacó a la vez que pudo ver como Myungsoo le aplicaba la desfribilación y el cuerpo de Rob sufría un espasmo, pero la puerta se cerró y no pudo ver más.

La ola de dolor que sintió en ese momento fue horrible e inexplicable, haciéndole gritar de rabia e impotencia; además de patear un envase de basura que había cerca. Se derrumbó al suelo, cegado por las lágrimas y las ganas de morirse; acurrucándose contra la pared. Si Rob se moría, iría tras de él. 

Tiffany y Jong llegaron corriendo atraídos por los gritos y al verlo en el suelo, en posición fetal y llorando, se imaginaron lo peor. 

-Min…

-Váyanse.

-No, antes dinos qué pasó-pidió Tiffany, angustiada y acercándose lentamente.

No dijo nada, solamente se quedó ahí, sentado y con el rostro oculto entre sus brazos y sus piernas encogidas. Tiffany iba a tocar su cabeza, pero él la levantó y la miró fijamente, con los ojos rojos de tanto llorar.

-Ha tenido una convulsión-dijo, con la voz ronca y extrañamente calmada-Ahí frente a mis ojos…no sabía qué hacer…me quedé paralizado y de pronto…todo se detuvo...-cerró los ojos y volvió a llorar. 

Tiffany se puso a su lado y lo abrazó, mientras él se aferraba a ella como un niño asustado-No quiero que se muera…-sollozó-Si lo hace, me voy con él.

-No, Min…

-Sí, me voy…

-No.

-Me voy-repitió, tercamente-Me mato…me mato…

-¡NO!-volvió a negar Tiffany, con mayor contundencia, tomándolo por el rostro para que él la mirase-¡No se va a morir y tú tampoco! ¿Entiendes? Tienes que tener fe que él va a estar bien.

Se acurrucó de nuevo en sus brazos, con la mirada perdida y en estado de completo shock emocional. 
Se escuchó un taconeo acercándose a ellos y pronto pudieron escuchar a Jong saludar a la recién llegada.

-Hola, Tae.

-Hola…chicos.

Tiffany alzó la mirada al instante y se cruzó con la de ella, quedándose absolutamente ahogada en sus ojos onices. La miró de arriba abajo y de abajo arriba, casi comiéndosela con la mirada de lo hermosa que estaba.

Taeyeon, por su parte, sintió que los colores le subieron al rostro y sus mejillas ardían por la fuerza con que Tiffany no dejaba de observarla. Buscó desesperadamente observar hacia otro lado, cuando no pudo sostenerle más la mirada. 

La puerta de la habitación de Rob se abrió y por ella salieron varios doctores. Minho se levantó de un salto y ayudó a Tiffany a ponerse en pie, mientras veían que a lo último salía Myungsoo, con una cara de póker. Sin nada de emociones. 

-Myungsoo…-murmuró Minho, angustiado-¿Cómo…está?...Se va a poner bien ¿Verdad?

-Como resultado del Trauma craneoencefálico, el paciente no responde a ninguna orden, de acuerdo a la escala de Glasgow-declaró Myungsoo, con rotundidad-Ha entrado en coma profundo. Lo siento. 

Tal parecía que sus lágrimas nunca se secarían, Tiffany lo abrazó y Minho sollozó en su hombro sin saber si podría soportar todo aquello. Ese era su castigo y lo sabía, estar en la incertidumbre a partir de ese momento. Su mente daba mil vueltas y era insostenible.

Todo era como una horrible pesadilla.

Hacía rato que la había visto atender su celular y pedir permiso para apartarse. Estaba sólo unos metros más allá, pero no dejaba de observarla ni por un segundo. Deseaba hablarle, pero no sabía cómo iniciar una conversación con ella; además que parecía que iba a durar un rato más largo hablando con quien sea que estuviera del otro lado de aquella llamada. 

-Entonces… ¿Me contarás que pasó anoche?-preguntó Jongwook, sacándola de sus propios pensamientos-¿Por qué no fuiste a la final a…?

-Sí, fui-cortó Taeyeon, apesadumbrada-Pero…no quiero hablar de eso ahora-contestó, volviendo a mirar a Tiffany.

Jong asintió y siguió su mirada hasta la pelirroja, que ahora mismo lucía bastante más seria de lo normal.

-Entiendo, quieres hablar con ella antes ¿No?-preguntó Jong-Si sigues aquí y no buscas hablarle, no colgará en un buen rato.

-No la voy a interrumpir si es muy importante-repuso Taeyeon, ceñuda.

-Te aseguro que si vas ahora mismo, ella colgará, así esté conversando con el mismísimo Karl Marx, resucitado.

Taeyeon soltó una risita y miró a Jong, quien le guiñó un ojo y la apremió a que fuera con la pelirroja. 
Le hizo caso, se levantó y caminó hasta ella. Le pareció de pronto como si llevara unos pesados sacos de tierra y piedras en los pies, porque caminaba con lo que pensó, eran andares de pato. Cuando estuvo a su lado, ella volteó y la miró, alzando las cejas con sorpresa.

-...No, eso no…aún tengo que hablar con ellos, tío…pero te aseguro que yo tengo a mi abogado…uhh, sí…tío…disculpa, tío, tengo que colgar…

Taeyeon tuvo que taparse la boca con la mano, para evitar que se viera cuando sonreía al escucharla decir que tenía que colgar. Miró a Jong en la sala de espera y le sonrió en señal de agradecimiento. 

-Sí…entiendo, tío, pero mira…tengo que colgar…hablamos luego, tío…sí, yo te llamo. Vale, chau-colgó tan bruscamente, que Taeyeon tuvo que morderse la lengua y aguantar la risa que le produjo. Tiffany se guardó su celular en el bolso y miró a Taeyeon, seriamente-Hola, disculpa que no te saludé antes.

-Nah, no importa…estabas con Minho. Eso puedo entenderlo-repuso Taeyeon, remarcando sutilmente el verbo en pasado de Estar. Sin embargo, Tiffany pareció no captarlo-¿Cómo estás?

-Uhmm…bien, dentro de lo que cabe-respondió Tiffany, parcamente y señalando la dirección hacia la habitación de Rob-¿Y tú?

-Igual.

-Claro, entiendo.

Se quedaron calladas, sin saber exactamente qué más decir. Parecían un par de extrañas. Tiffany esperaba que ella dijera algo, porque se suponía que ella era quien se había acercado; pero mientras, Taeyeon deseaba que fuera Tiffany quien rompiera el hielo.

-Uhm… ¿Quieres…tomar algo?-preguntó Tiffany, tímidamente-Un jugo…

-Estaría bien, gracias. 

“¡Esto es totalmente estúpido y ridículo!”-pensó Taeyeon, siguiendo a Tiffany hasta el cafetín de la clínica y sin hablarse-“¡La he besado! ¡Hemos hecho el amor cientos de veces y ahora apenas puedo mirarla!” 

Tiffany abrió la puerta de vidrio del cafetín y dejó entrar primero a Taeyeon. Fue casi instantáneo, varias personas las reconocieron y las siguieron con la mirada mientras buscaban una mesa vacía. Encontraron una al fondo y una vez que se sentaron, ya tenían al lado al mesero. 

-Buenos días-saludó el mesero con una sonrisa-¿Qué van a tomar las señoritas? 

-Pide tú primero-le cedió Tiffany el turno a Taeyeon

-Uhm…un jugo de...fresa, puede ser-dijo Taeyeon, dudosa y mirando en el menú.

-¿Algo más?

-Ah no, gracias…

-¿Ya comiste?-preguntó Tiffany, interesada-Si no has comido, puedes pedir algo…

-No, no, ya comí en casa de Hyuk-respondió Taeyeon, pensando que encontraba súper adorable que se preocupara-Gracias.

-¿En serio? Yo no tengo problema…

-Te lo digo en serio, Tiffany. Tranquila-dijo, tomando su mano distraídamente. Miró al mesero y sonrió-Un jugo de fresa nada más, por favor.

-Perfecto…. ¿Señorita Hwang…? ¿Lo mismo de siempre…?

-Sí, Nigel. Gracias.

-Enseguida está listo el pedido. Permiso.

El mesero se marchó, dejándolas solas y haciendo que volviera la incomodidad por eso. Tiffany notó que Taeyeon aún no soltaba su mano y aunque quiso tomársela también, sonrió y miró a la morena fijamente. Ella al principio pareció no notar nada, pero cuando lo hizo, enrojeció y la retiró rápidamente. 

-Y bueno…-comenzó Tiffany-¿Cómo te fue en la última entrevista en Valencia?

-Bastante normal…sólo me preguntaron una vez por lo de la boda de Leah y Luke y….bueno…eso nada más-contestó Taeyeon, restándole importancia-¿Hablaste con ellos?

-No, aún no… Gracias, Nigel-agradeció, sonriéndole al mesero cuando éste dejó los vasos de jugo enfrente.

-A la orden.

-Aún no hablo con ellos-repitió Tiffany, bebiendo con su pitillo el jugo de naranja-Les dije que sería hoy, pero con esto de Rob…se me ha atrasado. Con quien hablaba hace rato, es mi tío…el papá de Luke y Alice. 

-¿Qué harán ellos?

-Por lo pronto, no pueden venir hasta acá, porque mi tío tiene trabajo y mi tía…pues, mucho menos. Sólo me queda ver qué hago con las cuestiones legales, porque ambos se casaron sin permiso de los padres o tutor legal. En este caso, solamente yo; porque ya Luke es mayor de edad y sus padres ya no pueden ver por él como si fuera un niño. Puede ir a la cárcel por esto y todo.

-¿Y qué vas a hacer?

Tiffany frunció los labios y suspiró, pensativa. Negó lentamente.

-No tengo idea…debo hablar primero con ellos-respondió, quedamente-Pero antes tengo que hacer miles de cosas, como ir a la oficina y reportarle a Jiyong que Minho tiene baja temporal. 

La sola mención del nombre de Minho, hizo que a la mente de Taeyeon llegaran de nuevo esas imágenes que no se terminaban de ir y sabía que nunca lo harían, sino hablaba en ese momento. Se atrevió a mirarla y vio que Tiffany se la devolvía. 

-¿Tienes algo para decirme?-preguntó ella. Se apoyó sobre la mesa con ambos codos y de pronto a Taeyeon le pareció que estaban más cerca y que la iba a besar, pero para su decepción, no fue así-¿Tiene que ver con lo de…?

-No-interrumpió Taeyeon, sin pensarlo. Tiffany frunció el ceño-O quiero decir, sí…pero…es algo que…

-¿Qué?

Taeyeon hizo un puchero y se mordió el labio inferior.

-Anoche yo…estuve en la casa esa de Minho-admitió, finalmente-Yo fui y…estuve ahí.

-¿Qué? Pero, yo no…

-No, no me viste-corroboró Taeyeon, doliéndole recordar-Ni Minho tampoco…Yo me fui antes. 

Tiffany intentó recordar algo, buscar en su memoria algo perdido, pero sólo podía recordar la apuesta de los amigos de Minhyuk, luego de eso, no podía saber qué había ocurrido con ella. Eso la avergonzó bastante, sobre todo porque tenía fama de hacer cosas indebidas, como lo que le había dicho Minho de que lo había besado y casi…

Se quedó paralizada y cerró los ojos, expulsando el aire acumulado. Ya entendía.

-Tú…

-Los vi, sí-cortó Taeyeon, pesadamente-Jong me dio la dirección para ir a buscarte. Estabas tardando mucho y quería saber dónde estabas, así que llamé a Jong…cuando llegué, él ya se había ido, pero me dejó la llave escondida cerca de la puerta y yo entré…-relató-Cuando subí a las habitaciones y te vi con él…me fui, me sentí…

-Engañada-completó Tiffany, distraídamente.

Taeyeon sabía a qué se refería y ahora se comenzaba a sentir culpable. Por primera vez, en lo que les había parecido una eternidad a ambas, Tiffany tomó su mano y Taeyeon se sintió estremecerse con tan sólo ese contacto. 

-No ha sido mi intención que sonara como un reproche-susurró-No te estoy sacando eso. Yo sólo quiero que sepas que…yo bebí mucho anoche…me pasé de tragos y…no recuerdo nada-admitió, avergonzada.

-¿Nada?-preguntó Taeyeon, nerviosa-Tú no bebes, tú no…

-No, pero anoche sí bebí y demasiado…Minho me aseguró que sólo nos besamos, pero que luego él se apartó y yo me quedé dormida. No puedo decirte por mí misma lo que pasó, porque no recuerdo, pero de verdad creo en Minho y confío que no me mentiría en algo así.

-¿Cómo puedes…?

-¿Te molesta?-preguntó Tiffany, frunciendo el ceño y pareciendo algo herida por su cuestionamiento-¿Te molesta que haya podido pasar algo más entre nosotros?

-No, no me molesta. Solamente que si Minho también estaba…

-Estaba borracho, sí, pero no lo suficiente como para no recordar. Yo llevaba mi ropa en su lugar, a excepción, lo admito, de mi blusa…pero eso es nimiedad porque él estaba completamente vestido. ¿De verdad crees que me mentiría en el estado en el que está ahora? ¿Tendría ánimos siquiera de hacerme creer que no pasó nada?

-No…lo siento, yo…soy una desubicada.

-¡No, Tae!-negó la pelirroja, exasperada-No eres una desubicada. Lo que haya pasado anoche con Minho no tiene importancia para mí, en lo absoluto. Y para él tampoco es importante.

Apretó delicadamente su mano entre las suyas y ambas, al mismo tiempo, se miraron los anillos de compromiso en cada mano. Tiffany rozó con su dedo los de Taeyeon y en ese momento, la morena aprovechó un poco de valentía acumulada y le alzó el rostro por el mentón.

Se quedó ensimismada mirando a sus ojos marrones y luego a sus labios, acariciándolos muy sutilmente con su dedo.

-No sabes cuánto extrañé hacer esto…

-Taeyeon, por favor…

-Shhh…siempre hablas demasiado.

No la escuchó, fueron sólo sus labios moviéndose y Tiffany leyéndolos; mientras Taeyeon se inclinaba sobre la mesa para rozar sus labios, quedándose sólo en el intento, porque el celular de la pelirroja sonó, haciéndolas apartarse casi como si se hubieran electrocutado.

Taeyeon maldijo por lo bajo al inoportuno que la llamaba justo en ese momento. 

Tiffany susurró un “Lo siento” y atendió.

-¿Sí?...Ah, hola, Jiyong… 

“Estúpido, Jiyong. Te visitaré en la noche y te sacaré mi médula” 

-No, mira, tendrás que arreglártelas tú solo…El novio de Minho ha tenido un accidente y está grave…sí, anoche…no, no va a poder asistir en estos días, Ji… ¿Un ayudante? No, no creo…antes te las arreglabas tú solo, porque Minho aún no entraba…mira, luego hablamos ¿Sí?...en un rato, porque de igual forma tengo que ir a la oficina por unos trabajos pendientes…exacto, pásame todo eso cuando yo llegue. Los firmaré en cuanto pueda…vale, chau.

Colgó y se terminó de beber su jugo, agarrando su bolso y levantándose en el proceso.

-¿Ya te vas?-preguntó Taeyeon, confundida.

-Sí, tengo que ir a la oficina primero, para firmar unas cosas que me tiene Jiyong. Luego pasaré por casa para ver cómo están los chicos y ver si puedo hablar, por fin con Leah y Luke-respondió Tiffany, apurada y haciéndole señas a Nigel, el mesero para que supiera que el dinero estaba debajo del servilletero y que se quedara con el cambio. 

Salió apresurada y Taeyeon terminó de beberse su jugo de fresa, casi a los golpes y dejando el vaso; se dio prisa para seguir a Tiffany hasta la salida, la cual ya cruzaba.
Una vez afuera, logró ponerse a su lado y tomándola por el hombro, la volteó.

-Tae… ¿Qué…?

-¿Y qué pasa con nosotras?-preguntó Taeyeon, sin poder comprender su actitud-¿Cuándo hablaremos finalmente nosotras? 

-Podemos hablar más tarde cuando…

-¡Y un cuerno, Tiffany!-protestó Taeyeon, comenzando a molestarse-¡Mira lo que le pasó a Rob! ¡Mira lo que le pasó a Minho con Rob! ¡En cualquier momento podemos simplemente tener un accidente, morir súbitamente! ¡Tantas cosas que pueden pasar y nosotras discutiendo! ¿Qué es esto? ¡Yo te nece…!

-¿Podrías, por favor, bajar la voz?-pidió Tiffany, mirando a su alrededor-Estamos en una clínica. 

La agarró por el rostro y se acercó a ella tanto, que Tiffany pensó que se derretiría ahí mismo. Su cuerpo tan absurdamente cerca, al igual que sus labios, que le hacía tan difícil pensar.

-Sólo quiero que hablemos, Tiffany ¿Es tan difícil de entender?-dijo en un susurro, casi inaudible-Estoy intentando decirte qué es lo que siento y tú…sólo pareces dar vueltas.

Tiffany no dijo nada y eso lo tomó Taeyeon, como un momento para besarla. Estuvo tan increíblemente cerca, que aún no podía creer que la misma Tiffany la hubiera detenido. 

-Puedes venir conmigo a la oficina-propuso la pelirroja, consiguiendo asirse de los brazos de Taeyeon y hacer que se apartara-Podríamos hablar durante todo el camino y…bueno…e

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Comments

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ignacia12 #1
Chapter 111: Me gusto mucho la historia es genial.
yoonalim__ #2
Chapter 6: Sejauh ini blm ada perkembangan
yoonalim__ #3
Chapter 5: Apakah alex undang taeyeon juga
yoonalim__ #4
Chapter 4: Adik tiffany selusin apa
yoonalim__ #5
Chapter 3: Taeyeon lu baru ngeliat tiffany sudah langsung jatuh cinta
yoonalim__ #6
Chapter 2: Tiffany bertabrakan dengan Tae
yoonalim__ #7
Chapter 1: Oke
yoonalim__ #8
Sepertinya menarik
ana2381 #9
Lo he leído más de una vez. Es mi favorito, encabeza la lista.?
lizbsol
#10
Chapter 111: Estupendo, brillante no se que mas decir