Sulli POV:

¿Quién se creía que era? Encima de que esa chica aparecía de la nada para estropear el día trataba de que todo pareciera culpa mía ¿Cuántas chicas había visto con él solamente una semana? Estaba enfadada, una voz en mi mente susurró la palabra "celosa" pero la ignoré por completo, eso era imposible. Escuché un ruido detrás de mi y me di la vuelta para comprobar que era, un hombre de aspecto parecía estarnos siguiendo, no quería arriesgarme así que saqué el móvil para llamar a Minho y pedirle que viniera a por nosotros, puse mis gafas de sol a Noah, por si se trataba de algunos de los hombres que nos perseguían para encontrarlo. 

-Mamá...- Noah me llamó, parecía asustado, cuando me di cuenta de que todo el tiempo aquel hombres nos había estado conduciendo a una parte del parque en donde no parecía haber transito de personas.

-Noah, tienes que correr mucho ahora ¿Vale? - Le dije tratando de mantener la calma, Noah no quería hacerlo estaba demasiado asustado, así que le empujé para que comenzara a correr mientras le arrojaba el teléfono a aquel hombre, el niño pasó corriendo por su lado antes que yo, pero a pesar de eso se avalanzó sobre mi, entonces no era Noah su objetivo ¿Era yo? No sabía si sentirme aliviada porque no habíamos sido descubiertos o aterrada porque ese hombre se había avalanzado sobre mi tirándome al suelo.

Traté de golpearlo pero él parecía fuerte, no estaba segura de lo que buscaba, ya que introducía las manos en los bolsillos de ropa como si quisiera dinero o algo de valor, logré golpearle con la rodilla en su entrepierna y el se quejó del dolor, aproveché para golpearle de nuevo en el estómago y traté de incorporarme, él fue más rápido y se colocó sobre mí sujetandome para impedir que me moviera de nuevo, si salgo de esta, juro que aprenderé defensa personal. Él me gritó que me estuviera quieta y me golpeó con fuerza en la cara, tanto que me mareé entonces me di cuenta de que al no encontrar dinero iba a tratar otros medios, estaba muerta de miedo pero me maldije a mi misma por decidir ponerme un traje ese día. Quería gritar pidiendo ayuda cuando sentí sus manos dirigiendose a mi ropa pero el miedo me tenía paralizada. 

-Tranquila, princesa, no soy ese tipo de persona... Lo que quiero de tí es otra cosa. Aunque ¿Qué diablos? ¿Porqué no? Podría ser divertido y eso le hará pensarselo dos veces- Su voz áspera me dio arcadas, quería que se apartara de mi, el peso de su cuerpo sobre el mío me daba arcadas.

-¡Minho!- Grité de forma inconsciente, no sñe porqué, pero todo lo que mi mente podía pensar en ese momento era en él.

-Exacto, eso es.. Minho- Sonrió aquel hombre acercandose a mi cuello. Mis ojos se abrieron como platos cuando dijo eso ¿Conocía a Minho?

Minho POV:

Llevaba a Noah en brazos mientras le pedía a Amber que nos siguiera. Estaba muerto de miedo, lo admito, realmente asustado ¿Y si la perdía de nuevo? ¿Cómo iba a vivir si algo le pasaba a Sulli y yo no estaba allí? No importaba lo rápido que estuviera corriendo, sentía que el tiempo estaba totalmente detenido.

-¡Minho!- Ese grito me detuvo en seco, era ella, desde que me reencontré con ella odio escuchar mi nombre en sus labios, pero esta vez, sentí que era una señal divina para salvarnos a ambos, dejé a Noah en el suelo, al lado de Amber y corrí hacia el lugar de donde provenía la voz, me sorprendió que estuviera tan cerca, pero más me sorprendió la imágen que vi, alguien estaba sobre Sulli, su vestido se había subido debido a la caída y luchaba por apartar a ese hombre, eso me hizo sentir algo desconocido, una especie de fuego que parecía iniciarse en mis huesos y expandirse por todo mi cuerpo, eso era ira, verdadera ira. Pateé al hombre para que se apartara de ella pero lo único que conseguí fue que cayera al lado de Sulli, con un movimiento rápido se puso de rodillas y colocó algo en el cuello de Sulli obligándola a incorporarse.

-Es una pena, se nos acabó la diversión...- Gruñó el desconocido.

-¡Aléjate de ella!- Grité totalmente fuera de mi, pero aquel hombre se rió, se rió de mi y entonces le reconocí, mis manos empezaron a temblar un poco así que las convertí en puños, mirándole con tanta furia que podía notar que se estaba poniendo nervioso, si se atrevía a dañar a Sulli no habría fuego suficiente en el infierno para hacerle pagar. Por suerte o desgracia para mi, Sulli no es el tipo de chica que espera a que la salven, noté en la forma en la que me miraba que estaba planeando algo, solo espero que no cometa una estupidéz.

-Esto es tu culpa, Minho, así que no me mires así... Si fueras un buen chico tu novia no se vería envuelta en estos desagradables asuntos.- Acercó el objeto afilado a la garganta de Sulli y mi corazón se detuvo, le grité que no la tocara, pero no me dio tiempo ha hacer nada más cuando Sulli, con todas sus fuerzas golpeó a aquel hombre en el estómago, dandome unos preciosos segundos para lanzarme hacia ellos, sujetando el brazo del hombre y arrevatándole el arma, la adrenalina hizo estragos en mi cuando Sulli se arrastró alejándose me desahogué a golpes con aquel tipo, él se defendió pero no tenía nada que hacer cuando aún no había recuperado el aire por el golpe de Sulli.

-¡Minho! ¡Minho, basta!- La voz de sulli me pedía parar, pero yo no quería parar, quería matarle, puede que sonara drástico pero de verdad que quería hacerlo, entre golpe y golpe aquel desgraciado logró devolverme el golpe y me hizo caer hacia un lado, aprovechando eso para huir como la alimaña que era, me volví con urgencia hacia Sulli quería preguntarle si estaba bien, disculparme por haber llegado tarde, quería decir muchas cosas, pero no hice nada de eso, simplemente la abracé con fuerza, sintiendo como todo su cuerpo temblaba- ¿Donde está, Noah? - Su voz sonaba temblorosa, pero así era ella, después de una situación de peligro, ella se preocupaba por otras personas.

-Está bien, está con Amber- La apreté con mucha más fuerza, no me había dado cuenta de lo que había significado para mi su vuelta, de que es muy probable de que no pueda dejarla ir de nuevo, quería protegerla, aunque ahora mismo Sulli casi se había defendido perfectamente sola, yo necesitaba asegurarme de que lo consiguiera, asegurarme de que todo estaba bien.- Lo siento.

Mi disculpa la rompió por completo aunque no sé la razón, sentí como sus rodillas se doblaban y yo la dejé caer junto conmigo despacio hasta que ambos nos quedamos casi sentados en el suelo mientras comenzaba a llorar, demostrando lo asustada que estaba en realidad, la sentí llorar por todo, por su padre, por Noah, por mi, por su madre, por eso que no la deja dormir por las noches, por esas personas que le hacían la vida imposible cuando iba a clase, por miles de cosas que yo seguramente no tenía ni idea, era demasiado para una sola persona y yo no le había puesto las cosas fáciles, a veces olvidaba que Sulli era solamente humana, aunque aparentara ser a prueba de balas. Yo no me atreví a decir nada, la dejé llorar sin despegarme de ella apretandola contra mi para que me sintiera allí, quería estar allí de pie para ella, pero cuando su llanto se volvió tan desesperado que sus sollozos se conviertieron casi en gritos no pude evitar sentir que mis ojos se aguaban con los de ella. Era mi culpa, ese tipo la había escogido a ella para hacerle daño con el fin de darme una lección, un aviso de que no debo olvidar ciertas partes de mi pasado, si algo había descubierto con la vuelta de Sulli a mi vida era que las cosas no se enterraban, porque tarde o temprano volverían a por ti.

Sulli había perdido la consciencia, seguramente del agotamiento, así que la cargé hasta llegar a casa acompañado por Amber y Noah, nada más llegar Key me ofreció su ayuda y le pedí que atendiera a Amber mientras yo iba a mi habitación a dejar a Sulli allí, cuando la tendí en la cama me di cuenta de lo roja que estaba su cara, seguramente por el sofoco de antes, salí para tomar un paño con agua fría de la cocina y me di cuenta de que Key y Amber seguían mirandose en los mismos lugares, incluso Noah los miraba de forma extrañada.

-¿Estáis bien?- Pregunté algo perdido y ambos parecieron reaccionar entonces, empezando a realizar los movimientos de forma rápida como si intentaran recuperar el tiempo perdido antes en cuestión de segundos, yo tomé el trapo y lo mojé para luego colocarlo en la frente de Sulli y luego salir a la sala de estar, en donde Key le servía a Amber algo de beber. Yo me senté en el sillón cerca de ella y Noah directamente se subió a mi lado, poniendo su cabeza en mi regazo para que jugara con su pelo, como hacía siempre para dormirlo. Iba a empezar con el interrogatorio hacia Amber cuando ella empezó ha hablar por si misma.

-Conocí a Sulli en el internado, su padre la ingresó allí porque según él estaba fuera de control.- Solté Amber de repente.

-¿Internado? ¿Fuera de control?- Pregunté confuso, Sulli nunca había estado internada, su hubiese sido así yo lo sabría- ¿Qué clase de internado?

-Tú... ¿De verdad no lo sabes?- Amber me miraba como si interiormente estuviese respondiendose diferentes preguntas que solamente ella podía escuchar- Mi padre tenía razón, tú no sabías nada.

-Amber...- Mi voz sonó más bien como un aviso de que fuera directa al grano, sentía demasiada angustia como para encima alargar la conversación, además de que no quería dejar mucho más tiempo a Sulli sola, si se despertaba y yo no estaba allí sería peor aún.

-Según el padre de Sulli, la muerte de su madre la afectó hasta el punto de volverla casi loca, tenía crisis de ansiedad, terror nocturno... La ingresaron en la clínica donde mi padre y él fue designado como su psicólogo, le bastaron un par de sesiones con ella para saber que estaba perfectamente cuerda, que lo único que le pasaba era que Sulli había visto algo que realmente la había asustado o afectado hasta el punto de traumatizarla- Mientras Amber contaba aquello parecía algo enfadada, cosa que me hizo entender que probablemente si que fuera cierto que Sulli es importante para ella- Su padre, por el contrario insistía en que nada había pasado y que todo estaba en su cabeza, insistía que necesitaba medicación o terapia o lo que fuera, sinceramente, parecía más bien que solamente quería que internaran a su hija para quitarla del medio. La ética de mi padre no le permitía hacer eso, así que para tratar a Sulli me pidió a mi que pasara un tiempo internada con ella, que me hiciera su amiga para que ella pudiera tener alguien con quien hablar. Algo dentro de ella está buscando la manera de salir, algo que quiere olvidar desesperadamente -Aseguró Amber mientras apretaba con un poco más de fuerza, como habría hecho si fuese una bebida caliente en invierno, asentí despacio y bajé la mirada hacia mi regazo donde me encontraba acariciando la cabeza de Noah. Eso no tenía sentido, ninguno ¡Yo lo habría sabido! Era imposible...- Ella hablaba mucho sobre ti, siempre decía que vendrías a verla, que eras su mejor amigo, lo cierto es que tanto mi padre como yo dudabamos de que tu fueses real, nunca fuiste a visitarla y ella te tenía tan idealizado que pensamos que Minho Jenkins no era más que un amigo imaginario, hasta que su padre vino a visitarla, ella le preguntaba siempre por ti y el no hacía más que repetirle que tu te habías marchado en busca de mejores estudios y que no sabía como encontrarte.

-¿Un amigo imaginario?- Solté un bufido, yo no era nada de eso, escuchar la historia de Amber hizo que sintiera mucha más angustia, si decía la verdad, Sulli había estado pasando por todo eso sola- Pero eso no tiene sentido, yo no la habría abandonado así... Su padre me dijo que ella se había ido a estudiar a Estados Unidos, estuve tratando de encontrarla durante días, por si era una mentira, pero no lo logré...

-Porque estaba internada conmigo- Finalizó Amber dando un sorbo a su bebida- Tu pensaste que ella te había abandonado y ella pensó que tu le habías abandonado a ella, es un plan sencillo, su padre jugó con vosotros sin que ninguno se diera cuenta.

-Tenían 15 años, no es algo de lo que se les pueda culpar- Creo que Key trataba de defenderme al decir eso, pero no necesitaba que me defendiera, yo conocía a su padre, sabía la clase de persona que era, debería de haber insistido en buscarla para comprobar que era cierto...

-No conseguirás mucho mortificandote a ti mismo- La frase de Amber me hizo pensar que me leía la mente- No me mires así, mi padre es psicólogo no es tan difícil entrar en tu mente ahora mismo.

-¿Y Sulli? ¿Te lo contó? ¿Ten contó lo que ocurrió?- Pregunté algo ansioso pero Amber negó con la cabeza, por lo visto, Sulli había reprimido ese recuerdo de nuevo hasta guardarlo bajo llave en su mente, ni siquiera ella lo recordaba, su cerebro se sentía amenazado por ese recuerdo así que directamente, como si de un sistema de autoseguridad se tratara, lo había aislado en algún lugar de la mente de Sulli.- Genial.. Y además de eso ahora por mi culpa un tipo le...

-No fue tu culpa, Minho...- Insistió Key interrumpiendome, quería hacerme sentir mejor, pero ahora mismo nada podría hacerme sentir mejor. De todas formas yo no quería sentirme mejor, quería retroceder en el tiempo y no haber sido tan orgulloso, tal vez de esa forma las cosas no habrían acabado así. Y  sumado a eso, parecía que Key sabía perfectamente que Sulli era una chica, ya que no había mostrado sorpresa en ningún momento, era de esperar...

Esto es demasiado para mi, me levanté dejándo con cuidado la cabeza de Noah apoyada en un cojín y me fui hacia mi cuarto, abriendo la puerta y cerrandola después de entrar con el mismo cuidado, me acerqué despacio hacia mi cama en donde se podía distingir la figura de Sulli, me senté a su lado y pasé la mano por su pelo ¿Podía sentirme más miserable? Ante mi contacto, de forma lenta y soñolienta los ojos de Sulli comenzaron ha abrirse, parpadeando un par de veces antes de mirarme, cuando sus ojos se clavaron en mi sonrió levemente, de una forma casi imperceptible.

-Hola- Susurré tratando de no elevar mucho la voz, no sé la razón, simplemente sentía que el ambiente me pedía hablar en voz baja.

-Hola- Me respondió ella- Te he vuelto a causar molestias, lo siento... Pero gracias por no dejarme sola.

-No digas estupideces... ¿Sigues asustada?- Ella negó con la cabeza, aunque me costaba creerlo, una chica normal estaría aterrada, pero supongo que Sulli nunca fue una chica normal- Siento mucho las cosas que he dicho estos días, creo que nos hemos equivocado mucho los dos.

-Has hablado con Amber- Dijo ella, no era una pregunta, ella sabía que era así, asentí despacio.

-¿Porqué no me lo dijiste? 

-No sabía que no lo supieras, me dijeron que simplemente no querías ir a verme....

-Vale, vale, eso no importa ahora- No quería hablar de ello en ese momento y parecía que ella tampoco.

Sulli POV:

Me sentía avergonzada, me criaron haciendome pensar que llorar era una debilidad y que hacerlo me convertía en una estúpida cobarde, con el tiempo descubrí que no era así, pero es difícil deshacerte de las enseñanzas paternas. No me gustaba haber tenido ese momento de debilidad delante de Minho, él parecía tratarme diferente, pero supongo que es porque Amber le contó lo que ocurrió en su ausencia.

-Quiero que sepas... Que no me marché sin ti, tu padre me dijo que te habías ido, te busqué a pesar de ello pero supongo que ambos fuimos engañados- Minho dijo aquello y yo lo miré algo despistada ¿Fue eso? ¿Pero que ganaba mi padre haciendo que Minho se marchara? Las palabras de Amber vinieron a mi mente de nuevo, esas en las que Amber me trataba de hacer ver que mi padre quería alejarme de todo mi pasado, de cualquier pasado que pudiese provocar recuerdos en mi, por lo tanto, había algo que él no quería que yo recordara. Ahora entiendo porque el padre de Amber me ayudó con los papeles para mudarme-  ¿Estás bien? Pareces algo pálida aún....- Negé con la cabeza y alcé mis brazos hacia él como una niña pequeña que pide que la tomen en brazos, Minho sonrió entendiendo lo que quería y me hice a un lado para que se tumbara a mi lado, como cuando eramos pequeños. 

-¿Quien era ese hombre? ¿Porqué quería hacerte daño?- Las preguntas salieron de mi mientras los dos mirabamos al techo, sentí que su respiración se hizo más pesada, como si fuera algo duro de contar.

-Es algo largo...

-Tengo tiempo- Sonreí levemente para darle algo de seguridad.

-----------------------------Preview próximo capítulo-----------------

Respondí la llamada por si era algo importante, aunque tratandose de Key, lo dudaba.

-Minho... Deberías de venir a casa un momento- La voz de mi amigo sonaba extraña, pero no le di mucha importancia.

-Ahora mismo estoy ocupado, ya hablaremos más tarde.

-¿Seguro que estás demasiado ocupado como para una simple charla?- Esa no era la voz de Key, era la voz del padre de Sulli, el padre de Sulli estaba en mi casa, y eso hizo que toda la sangre de mi cuerpo se helara.