Tiempo después
Corazón Delator“El tiempo es para algunos un concepto abstracto que limita las capacidades y oportunidades de las personas, te levantas por las mañanas como es tu costumbre, desayunas, posiblemente haces algún ejercicio para llenarte de energía o porque lo leíste en un artículo de alguna revista, es entonces cuando tu tiempo comienza a depender de las variables y estadísticas impuestas por alguien más; lo mismo sucede con aquellos libros de superación personal en donde la principal idea es cambiar comportamientos a través de si él pudo, yo también lo puedo hacer…. No es que desee faltarle el respeto a los grandes letrados del coaching… Coelho, tiene frases de gran relevancia; sin embargo, ¿Cómo es posible que nuestras horas, nuestros días, nuestro calendario etc… manejado bajo el mecanismo del orden numérico pueda influir con nuestro comportamiento y organización, tanto física como de convivencia?... no lo sabemos, porque se no ensena de niños a leer las horas, pero no a disfrutarlas.
No entendemos la física de, ni la química de nuestro propio reloj biológico, al cual le enviamos información brindado por mecanismos externos, como la tecnología, las redes sociales, los medios de comunicación. En medio de ello, el ocio se vuelve un pecado. Te sientes culpable de no hacer nada productivo, de atarte las manos y no correr a ayudar a aquellos que mueren de hambre. Te sientes mal contigo mismo por no pertenecer a ese conglomerado de seres humanos “pro” que vibran demencialmente por la vida. No obstante el ocio fue lo que llevo a grandes científicos a tener descubrimientos demenciales por la sociedad, a gritar ¡EUREKA! ¿Qué estaba haciendo Isaac Newton cuando le cayó una manzana en la cabeza?, nada… durmiendo bajo la sombra de un árbol, ¿el ocio tiene ecuación?, no.
En una tristeza que nuestros estados de procrastinación no entren en la variable para medir el tiempo, y más bien este estado (en el cual eliges no hacer nada y prestar más atención a cosas irrelevantes) sea considerado como parte de una enfermedad. Todo es una enfermedad cuando las acciones que realizamos no le convienen a otro ni hay una ganancia lucrativa, en cambio no estamos preguntando frecuentemente ¿por qué no puedo ser como él o como aquella?, fingimos libertad, cuando nuestro tiempo esta consumido en querer ser otro.
A la final, no es una cuestión de que hacemos con el tiempo, ni en que lo malgastamos. La cuestión es… ¿A dónde van a parar esas buenas ideas que nacen cuando no hacemos nada “lucrativo”? ¿Qué hacemos con esas ideas innatas, provocadoras, locuaces, tentadoras que nacen cuando no estamos haciendo nada más que envidiar las fotos de otros en Instagram?
El tiempo es el custodio de nuestras acciones como el corazón que se delata ante el amor…”
-Dara ya vamos a aterrizar- me recordó Bom interrumpiendo la lectura de un escrito hecho por el padre de Chaerin -¿estás bien?- mi mejor amiga sabía el temor que me producía los aviones, la turbulencia y el aterrizaje me ponía los pelos de punta.
-… Sí no te preocupes… - le conteste esperando sonar segura de mi misma, mi amiga me palmeo la pierna con ternura y sonrío, luego acomodo mi cinturón de seguridad como si yo fuese una niña pequeña.
-Pronto estarás con tu chica no frost – Bromeo Bom tomando mi mano, en el asiento de al lado dormía plácidamente Minzy y Harin estaba intentando despertarla, al final la traviesa hermana de mi novia no le quedo de otra que taparle la nariz riéndose de los sonidos estilo foca que salían de su acompañante.
-¿Ya vamos a aterrizar?... qué bueno estoy muy cansada…. – dijo Minzy restregándose los ojos
-Pero si te las has pasado durmiendo… - Sonreí al escuchar a mi lado a Bom pelear con ella, aquellas eran una turbulencia, su relación era divertida. Pasaban del amor al odio en tan solo instantes, eran polos que se atraían chocaban se repelían pero no podían dejar de estar juntas. Yo solo quería ver a Chae… la extrañaba mucho.
Hacía 3 semanas ella y Tiffany por asuntos de trabajo habían partido con rumbo a París, aquellos boletos que se habían comprado, con el fin de llevarme lejos de Mr. Yim, usando como excusa la boda de Teddy no se usaron, no tuve tiempo de huir, no fuimos a ninguna boda. La chica rosa tuvo que hacer miles de vueltas para que no se perdieran con el tiempo, a la final fue un asunto costoso. A pesar de todo, me sentía emocionada. Francia era un país totalmente desconocido para mí e ir a conocerlo con la persona que más quería hacía especial las cosas, sobre todo después de lo que había pasado.
La confusión, el caos, el miedo no dejo de reinar nuestros días después de la trágica muerte de Mr. Yim, la prensa no paro en especulaciones, el odio y la incomprensión se volvió el pan de cada día en nuestros vidas. La gente no sabe qué hacer con la verdad, mucho menos sabe qué hacer con lo que desconoce; aun así, seguimos adelante con la idea del que aquel hombre que murió era un acosador que estaba detrás de Yoona, todo con el fin de explicar su desaparición. Aunque no todo fue perfección, por las noches tenía ataque de pánico, me daba miedo dormirme y que al despertar no estuviese Chaerin a mi lado.
Algunas veces me despertaba de un profundo sueño con el único fin de verificar que Chae estuviese a mi lado, abría mis ojos para verla respirar, tocar sus mejillas, arreglar ese extraño corte de pelo que se había hecho. Fueron innumerables noches de insomnio hasta que decidí por mi salud macharme a Filipinas con mi madre, cuando se lo dije pude notar la incertidumbre del no saber si nuestro amor se acababa pero ella lo aceptó… soltó mi mano por un tiempo.
Pasó un mes antes de que volviera, un mes difícil, un mes en que lloré su ausencia, un mes en que lloré como si ella estuviese muerta, un mes para comprender que realmente vivía, un mes para acostumbrarme a mi nueva vida, solo un mes para comprender que me hacían falta sus latidos…. Un mes, 31 días
Comments