Capítulo Seis

Sentir Normal

 


-Gracias por todo Sunny – dice con nostalgia en su voz cuando ve las luces de su casa encendidas y al aparcarse en la acera, observa como las cortinas de la ventana se corren y obviamente sus padres están allí espiando, así que su plan de poder robar un beso antes de irse ha sido arruinado, el fastidio es mostrado en su rostro – Gracias a ti, has sido una cita adorable – sonríe la mayor, pero nota el rostro poco sereno – Vamos te acompaño a la entrada – TaeYeon agacha la cabeza para reírse – Que caballero – Sunny abre los ojos y se frena con la puerta abierta – ¡¡Claro que sí!! – y ambas sueltan una carcajada. Tae copia lo que Sunny hace y se encuentran en la vía peatonal, para caminar hasta la entrada, tomadas de la mano, como durante la tarde.

 

Sin que la puerta sea tocada se abre, y muestra a la señora allí de pie un tanto ansiosa, tomando a TaeYeon por la muñeca y metiéndola a casa – Adelante doctora – Pero sunny inmediatamente niega con la cabeza y una pequeña sonrisa – no, ya debo irme, tengo que organizar unos papeles – mira a Tae que está claramente enojada y la señala con las manos – de eso venía hablando con Taengoo en el camino – la señora arruga la frente por la manera cariñosa en que la ha llamado pero no dice nada – Tae, ya sabes, me llamas si necesitas algo – ella asiente detrás de su madre y el señor aparece allí mismo, con una pequeña canasta que está cubierta por un papel de color morado un tanto transparente – Doctora, le traje estas galletas de una panadería que está cerca de la casa de mi madre – dice con una gran sonrisa – Señor Kim, muchas gracias, no debe molestarse- corresponde inclinándose, mirando por encima la variedad de bocadillos que tiene – Espera – de la nada TaeYeon dice y sale corriendo, ella mira a los adultos y ellos a ella, tal vez buscando respuestas donde no las hay.

 

Después de poco tiempo los pisotones vuelven a hacer presencia, la chica pasa sin cuidado en medio de sus padres con un rollo de tela en sus manos – Para ti – dice con el rostro tan falto de emoción que parece una mala actuación. Así que Sunny la mira un instante más antes de estirar su brazo para tomar el obsequio, cree ahora que Tae no se quiere quedar atrás en comparación con su padre. La Psicóloga sonríe asintiendo – gracias cariño – se le escapa, y no se arrepiente, así que con todo el valor del mundo en su ser, Tae se acerca y la abraza – Gracias nuevamente – Sunny puede observar los rostros incómodos de las dos personas juntas en la puerta, así que el señor toma a su esposa por el brazo y la arrastra hasta adentro, sintiendo obviamente que no caben en la escena – ¿Se fueron? – Pregunta en un susurro la menor, y Sunny sonríe por la inteligencia de la chica, que aún no se desprende del abrazo – Ahora si – dice volteando para ver si están en la ventana y cuando se cerciora de que no hay nadie, le da un beso casto en la mejilla. Sonríe y corre hasta el marco de su puerta – Que tengas un buen regreso a casa – le dice moviendo la mano – Te avisaré – responde Sunny yendo a su carro, se da cuenta que tae no se va esperando a que se vaya, así que hace sonar la bocina despidiéndose una vez más, Tae se adentra cuando ya no puede visualizar el coche.

 

··

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TaeYeon había pasado los siguientes dos días emocionada, hacía las tareas con su padre, o ella misma las hacía y cuando él había regresado del trabajo se las mostraba para ver si algo andaba mal. El resto del día TaeYeon, se encerraba en el estudio a hacer dibujos, su mamá enojada porque decía que la chica estaba echando a perder su ropa y procuraba estar pendiente de cuando se adentrara al lugar para fijarse si estaba usando la roba ‘Buena’ para pintar.

 

Su padre creía que Tae podía estar participando en algún tipo de concurso de pintura, pero no era como que conociera el arte extenso de la muchacha, debido a que su paisaje favorito era Sunny, su escultura favorita era Sunny y musa de inspiración la misma persona.

 

Él ha comentado la idea y ella ha aceptado, para practicar sobre otro tipo de retratos se había propuesto a pintar el gran cuadro de su padre y de su madre recién casados, el cual ha dicho el señor, que una vez terminado iba a reemplazar la fotografía vieja que cuelga de la pared.

 

Los cambios extremos que mostraban la muchacha desde el comportamiento, el respeto, la manera de hablar y querer dejar tanto señalar y gesticular por musitar palabra era algo que no permitía ir la sonrisa del señor Kim de su rostro.

 

Le refutaba a su esposa cada tanto que todo lo que hacía la doctora Lee era genial para su hija, pero ella seguía sin estar muy convencida del todo, pensaba que tal vez ahora que TaeYeon estaba presentando mejoras, prefería dejar que el agua corriera para buscar su destino, como las pequeñas corrientes que se forman después de un gran aguacero y fluyen hasta los ríos y quebradas para ser una gran masa húmeda.

 

Pero el hombre con quien había compartido gran parte de su vida no estaba de acuerdo, teme profundamente por una recaída de la chica. Piensa en que ya está mayor y permitirse estancar ahora es simplemente desperdiciar por todo lo que se ha luchado. Así que el tema ha sido completamente cancelado.

 

 

-¿Amaneció seco el cuadro?- cuestiona su padre tomando un bocado de ensalada en su almuerzo -Si, estaba dándole retoques con otra pintura para que alcanzara a secarse más rápido- informa Tae acomodando un poco su cabello -como no tuve clases…- termina diciendo con eso, que en ello invirtió su tiempo en la mañana.  El asiente un par de veces y se da cuenta que la chica ha dicho más palabras en ese instante, que las que dijo, en un solo año cuando era solo una niña.

 

Así que se queda mirándola un momento, lleno de orgullo y de alegría, porque pensaba que jamás vería a su hija de tal modo. -¿A qué hora es la cita?- pregunta cambiando de tema inmediatamente para seguir gozando de la elocución de su pequeña -a las 4- dice Tae tomando el vaso de la mesa -No, no la cita con la doctora Lee, la del salón- aclara el adulto mayor, sabiendo que para Tae lo más importante en días como hoy es la cita con la especialista -a las 2- dice con la boca llena y se ríe cuando algo de líquido se sale de su boca, ella se apresura para quitarlo.

 

-Deja de hablar mientras comes- dice su madre con rostro serio y estirando el brazo para pasar una servilleta de papel, que ella toma aun riéndose y se limpia con avidez, mientras su padre siente que no se cambia por nadie, a pesar de la mirada de muerte que le lanza su esposa, sabiendo que él es quien siempre le busca conversación a Tae cuando están en la mesa.

 

 

 

 

TaeYeon no deja de mirarse en el espejo retrovisor del carro de su padre, desde que salieron del salón le pregunta a su padre después de un vistazo y acomodar su cabello -¿Me veo bien?- y el sonriente, no se cansa de responder con diferentes sinónimos cada nueva pregunta, que al final resulta ser la misma -Te ves hermosa, hija- ella lo mira buscando mentira en sus ojos pero vuelve a desajustar el espejo solo para seguir alineándose.

 

Llegan justo a la cita y TaeYeon le sonríe a Suzy, quien corresponde ante ella inclinando su cabeza – En poco sale – informa. Tal vez evitando que entre sin permiso como muchas veces ha hecho, o que se quede de pie al borde de la puerta, para que al escuchar algún tipo de ruido que proviene del micrófono,  ella decidir entrar sin si quiera ser mencionada.

 

Misteriosamente la chica se sienta tranquila al lado d su padre, y aunque demuestra ansiedad mordiendo su labio inferior y golpeando sus rodillas juntas, se queda sentada con las manos unidas en su regazo sosteniendo un pequeño bolso. Una vez el ruido suena, ella levanta la frente y observa como un muchacho alto sale y camina en silencio hacia una señora que está a tres puestos de ella. – Kim TaeYeon- resuena en el lugar y ella sonríe como si le hubieran dado la noticia de su vida. Mira a su padre y se levanta para entrar calmada y como pocas veces. Sin darse cuenta por los nervios que ha dejado un presente para su psicóloga, pero entra a paso seguro permitiendo que la puerta no suene al cerrarse.

 

Camina aun tratando de alinear su cabello en los hombros con una sola mano, ya que en la otra trata de ajustar el pequeño maletín.  Va con una sonrisa semi-suprimida, tratando de parecer segura con su andar rápido. Sunny levanta la mirada, y solo cuando ve a la chica justo en frente de su escritorio deja de mirar la hoja y termina poniendo un punto – Y esta hermosa mujer rubia, ¿De dónde salió?- a lo que la menor responde levantando los hombros y sonriendo amplio.

 

Sunny se levanta y Tae se inclina inmediatamente, procurando no despeinarse demasiado. Sunny sonríe y camina lentamente hacia ella – Yo llamé a Kim TaeYeon, una hermosa chica de cabello oscuro y me la cambian por…- acaricia su cabello y la mira a los ojos cuando Tae se voltea para observarla abriéndole sus grandes orbes – Otra Kim TaeYeon igual o más hermosa- termina la reproducción de sus labios, haciendo que Tae se sonroje. Pero no es un impedimento para echar su cabeza un poco hacia el frente y besarle la mejilla – Hola – dice hasta entonces.

 

 

Sunny no puede evitar sonreír después del acto infantil que le provoca abrazar a la chica para permanecer un poco más tiempo juntas, pero el ambiente de consultorio siempre está recordándole el lugar que le corresponde – Puedo saber a qué se debe el cambio?- cuestiona dejando ir las hebras de cabello que parecían haberse adaptado en el tacto de la mayor.

 

—Solo eso, un simple cambio…— Sunny la queda mirando un rato más hasta que ve como sus pequeñas esferas se desvían ligeramente

—Que espero te guste— dice cuando la cabeza ha estado agachada y su tono es bastante bajo. Sunny sonríe y muerde su labio inferior, más que por las palabras, por notar como su paciente muestra tanta empatía hacia ella y que la frialdad cada vez usaba para absolutamente todo parece que está empezando a evaporarse por ese calor que parece ahora ropa su corazón y tal vez sea el mismo que cause las mejillas rojas sobre la menor.

 

—Me ha gustado mucho— le responde la profesional a su inocente inquietud. Levanta la mirada para encontrar la sonrisa brillante en quien tiene su corazón puesto. TaeYeon siente que tiene un permiso, o un vale en blanco, para que ella lo rellene con lo que sea quiera hacer o que suceda, así que se aproxima a la doctora Lee y la mira a los ojos de forma intensa. Sunny cree que es una del as jugarretas que la chica en ocasiones ha usado para seducirla y luego solo burlarse un poco, pero se queda inmóvil cuando la menor ha avanzado demasiado pronto y está demasiado cerca.

 

Sunny traga tan sonoro que hace que TaeYeon se sienta dueña de la situación, la mire y solo vea miedo, y es cuando entonces se aleja —Me temes— la mayor vuelve a tragar sintiendo como el profesionalismo se ha salido de sus ropas y ella debe contestar solo con todo lo que está sintiendo. Los latidos de su pecho quisieran incluso tomar la iniciativa y contestar por ella —Claro que no ¿Por qué dices eso?—

 

TaeYeon da un paso más hacia atrás, y aunque algo por dentro le dice que simplemente se vaya, ella debe anclarse a ese lugar, porque si huye solo empeoraría su asunto. Es entonces que usa las manos de la chica en frente como sostén para permanecer, las mira y las acaricia con sus dedos pulgares antes de proseguir —Lo veo en tus ojos —

 

Sunny aprieta para que sienta que todo va a estar bien y la chica inmediatamente vuelve a perderse en los ojos marrones —Tengo miedo por otras cosas, no por ti— se suelta pese a que Tae parece que no querer dejar ir el contacto, pero no le queda más remedio que ceder, así que Sunny para ahuyentar todos los fantasmas que parecen estar inquietando a la menor, pasa su mano libre por la mejilla y le vuelve a dar una sonrisa.

 

 — ¿Vamos al sillón?— Tae acepta sin soltar la mano de la chica, que sabe que la muchacha está buscando estar con ella, y su corazón parece estar abrazado en ese volcán de ternura que aunque si sabía que la chica tenía, jamás se había permitido que fluyera con tanta intensidad.

 

Llegan al lugar y la deja sentada, vuelve a su escritorio por la libreta y la toma para empezar con lo de siempre, pero aun que lo de siempre s esperar que la chica hable, su corazón que por el momento la ha dejado sorda, también sabe que le está gritando que algo más puede pasar. Pese a que su  “rutina” con Tae no siempre es  eso, hoy se siente más nerviosa de lo normal para asumir cambios y roles, pero  por algo su paciente hoy  llegó con un aura distinta, un comportamiento más maduro, la mira de forma más directa y sus coqueteos picaros han pasado a un desborde de ternura absoluta que la han dejado con sus órganos derretidos internamente al no poder soportar verla durante demasiado tiempo.

 

El tacto parece que le quema la piel y no puede si quiera controlar su respiración. La cercanía de hace un momento casi la hace perder el control de sus rodillas, pero la distancia que luego tomó parecía como si un abismo se hubiera creado instantemente, su mirada la hizo caer al vacío, pero cuando le habló la mandó a volar por los cielos, tomadas de la mano, hasta que la dejó en el sofá. Entonces su consultorio vuelve a sonreírle con dureza para recordarle como siempre, que es su paciente y la tiene que ayudar.


Disfruten y Abrazos (:

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Comments

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MAR7GS
#1
LA VOLVI A LEER ME ENCANTO, SE EXTRAÑA SUNYEON :)
soneeee
#2
Chapter 13: me encanto, ciertamente la ame <3 :'v muchas gracias chamita bella <3 me encanta el SunYeon :'v <3
mei-chan4556 #3
Chapter 13: Simplemente, genial.
De verdad, creo que reflexione muchas cosas con esta historia.
Aparte de que la amo con todo mi corazón, dato curioso, pero que a nadie le importa.
Esta historia la conozco desde que inicie la preparatoria, y su final llega justo ahora que estoy en la universidad.
Cuanto tiempo deberás. Jajajaja
Igual, gracias, por favor sigue escribiendo más Sunyeon, ¡el mundo lo necesita!.
MAR7GS
#4
Chapter 13: Me gusto, muchas gracias.
MAR7GS
#5
Chapter 12: Me encantó muchas gracias.
MAR7GS
#6
Chapter 12: Muchas gracias
MAR7GS
#7
Chapter 11: Espero que algún día actualices, me encanta tu historia.
mei-chan4556 #8
Chapter 11: Ay dioh yo quede lok :'v
No, enserio esto es tan.. Genial.
No me esperaba eso de la madre de tae :'v
Gracias por actualizar <3
desfachatados
#9
Chapter 10: wow, no puedo creer que realmente esté leyendo esta historia de nuevo, es raro jaja pero es grato, me alegra que hayas vuelto y me alegro de que sigas actualizando este fic que siempre fue de mis favoritos y lo va a seguir siendo <3
muchas gracias(((: