Capítulo 14: La verdad, el amor y el fin.

Miyeon despertó como un pequeño gatito que abre sus ojos lentamente, se acurrucó un poco en su cama, pero inmediatamente sintió algo extraño, había un cuerpo a su lado, entonces miró mejor y vio a Shuhua con los ojos cerrados respirando lentamente, sus labios se curvaron hacia arriba, un pequeño suspiro salió proveniente de sus pulmones, sus dedos tocaban esa delicada piel, estaba completamente enamorada de Shuhua... seguía perdida en su mundo cuando se dio cuenta de que ninguna de las dos llevaba ropa y solo eran las sabanas las que las cubrían.

Los ojos de la menor se comenzaron a abrir al sentir más movimiento a su lado, Miyeon sonrió al ver esos grandes ojos llenos de curiosidad, cuando Shuhua los abrió por completo decidió hablar. —Buenos días. —Dijo Miyeon con esa sonrisa encantadora. Shuhua se sintió algo nerviosa y se escondió bajo las sábanas. —Hola. —habló mientras solo sus ojos se mostraban ahora completamente abiertos, para Miyeon eran lo más adorable del mundo.

—¿Por qué no me saludas como corresponde? — Exigió Miyeon con un tono molesto, en el fondo solo lo hacía de broma, pero quería ver la reacción de Shuhua, quien inmediatamente saltó fuera de las sabanas. —¡No te enojes! — Tenía un puchero y una expresión de preocupación, las carcajadas de Miyeon no hicieron más que hacer más nerviosa a la menor —¡No te burles de mí!... Estoy avergonzada. — admitió la menor.

Ambas tomaban desayuno en el comedor, un café matutino y la mejor compañía creaban una atmósfera perfecta para las dos —Quedan solo dos semanas para que terminen las vacaciones— Comentó Miyeon. —Será extraño no poder estar todo el día junto a ti.

Shuhua comenzó a reír —Te iré a molestar al trabajo, al verte como profesora sentiré que automáticamente eres una anciana. — Miyeon abrió su boca impresionada —¡Yeh Shuhua! Ni sé por qué te dejé dormir conmigo!—Shuhua no dejaba de reír, pero terminó abrazando a Miyeon amorosamente, y la mayor cayó rendida a sus pies.

Después de ese desayuno ambas terminaron en el sofá viendo una de las cuantas películas que Miyeon tenía guardada. —Me encanta esta película — Miyeon tenía su cabeza en las piernas de Shuhua. —Aja — Miyeon volteó su mirada a la contraria. — ¿No te gusta? — Preguntó ahora, Shuhua solo miró a Miyeon y asintió, la mayor volvió a su posición anterior y continuó viendo la película, luego de un rato Shuhua ya se encontraba durmiendo.

El cuerpo de la menor se comenzó a mover — ¡Yeh Shuhua! —Los ojos de lamencionada se abrieron de golpe cuando escuchó el grito de su novia

— ¿Hmm? — su voz seguía sonando adormilada —Tu teléfono está vibrando— La voz de Miyeon era molesta y Shuhua intentó sonreír para que su novia no se enoje. —Debe ser Minnie— Anunció en lo que sacaba su teléfono del bolsillo.

—Hola — Contestó, Miyeon estaba atenta a la conversación, mientras sus ojos estaban pegados en la pantalla, sus oídos estaban atentos a la conversación de Shuhua. — Oh, hola Tzuyu. — Miyeon ahora miró a Shuhua con esos ojos que aterrorizaban a cualquiera.

—Me parece genial —Miyeon seguía atenta y Shuhua se dio vuelta para así no verle la cara. — ¿A las 6? – Preguntó. —Hmm no, no sé dónde es... ¿Felix? Ah... okey genial, adiós. —Shuhua cortó el teléfono, se dio vuelta y apenas sus ojos se encontraron con los de Jessica, pero esta volteó la mirada rápidamente al televisor, Shuhua se acercó lentamente y se comenzó a acurrucar como un gatito en el costado de Miyeon. — ¿Qué te pasa? – La menor usaba un todo de bebé que Miyeon solía amar u odiar — Nada — Contestó sin quitar su mirada del televisor.

—Me llamó Tzuyu —Shuhua sabía que Miyeon ya tenía conocimiento de que era Tzuyu quien estaba llamando, pero aun así prefería informarle para que esta no pensara que estaba intentando ocultarle algo. — ¿Y? – Miyeon hacía como si no le importara, cuando dentro de sí quería saber con detalle por qué Tzuyu estaba llamando a Shuhua.

—Quiere que salgamos a jugar en un rato – Miyeon se dio vuelta y escondió su rostro en el cuello de Shuhua, la abrazó fuertemente — Pero te extraño mucho —Se quejó Miyeon, su voz sonaba baja por el hecho de que estaba escondida en su cuello —Me tienes aquí— Contestó, Shuhua sabía que Miyeon era posesiva, pero no había razón para que lo fuera en ese momento, Shuhua estaba completamente segura de sus sentimientos por Miyeon, y no había forma en que las cosas fueran a cambiar, por lo menos no en un tiempo cercano —¿Y qué quieres que haga?— Miyeon se alejó un poco y miró a Shuhua directamente a los ojos.

— Quiero que hablemos, quiero que lo hablemos todo —Shuhua se volvió a sentir incómoda con respecto a la situación, no quería sentir como si estuviera obligando a que Miyeon le contara lo que estaba viviendo, prefería que las cosas se den naturalmente, de esa forma no habría remordimientos ni problemas, pero notando lo segura que su novia era para encararla en distintos temas, creyó que ella también tenía que armarse de algo de valor.

— Pero antes de contarte todo... tú y yo debemos hacer un trato — Miyeon tomó fuertemente de las manos de su novia, ella temía que Shuhua se alejara de ella, es por eso que sentía la necesidad de sostenerla con fuerza—¿Cuál? —Preguntó la menor — Yo te cuento todo lo que quieres saber, solo si tú arreglas tus problemas con Yoonje.

Shuhua parecía meditarlo, finalmente sonrió un poco y movió su cabeza para asentir, ya era un trato. No podía pasar toda la vida enojada con su abuela.

Miyeon tenía una pequeña sonrisa luego de haber escuchado la conversación entre Shuhua y Tzuyu, donde Shuhua le pedía disculpas a Tzuyu por tener que cancelar su salida. Entendía que no podía seguir siendo así de posesiva y se comprometió internamente en trabajar en ese defecto, pero ahora era momento de tener una conversación seria con su pareja.

—Entonces conversemos — Miyeon volvió a tomar las manos de Shuhua —Pregunta – Dijo Miyeon con nerviosismos.

Shuhua se puso a pensar que era lo que exactamente quería saber, entonces miró directamente a Miyeon y con seguridad preguntó —¿Quién es Hwiyoung en tu vida? — lo pregunto rápido y claramente, no había nada más que Shuhua quisiera saber en estos momentos, era su única duda, y si la respuesta la convencía, entonces no había forma de que algo más pudiera destruir su relación, Miyeon suspiró, ella ya sabía que la pregunta sería algo así, creía poder estar preparada para responder la pregunta, pero se volvió más difícil de lo que ella esperaba.

—Hwiyoung y yo nos conocimos hace unos buenos años, él es unos 7 años mayor que yo. —Shuhua estaba muy atenta escuchando su explicación. —Yo estaba en mi tercer año de universidad y él ya era médico — Hubo una pequeña pausa – Él venía a dar una charla a la universidad y estaba algo perdido, entonces me pidió direcciones de cómo llegar al auditorio, yo no tenía nada que hacer y terminamos caminando juntos al lugar, él... Él sonaba como un hombre maduro y a mí me interesó, intercambiamos números y comenzamos a hablar más seguido, salir a citas... termine sabiendo que Hwiyoung era un hombre con mucho dinero, sus padres eran médicos igualmente, y dueños de un hospital — Miyeon se sentía extraña al recordar esos momentos, sentía como si estuviera hiriendo a Shuhua al contar este tipo de cosas... Pero creía que lo mejor era ser sincera en estos momentos, no quería decepcionar a Shuhua, pero tampoco quería seguir ocultando cosas de su pasado — Me sentía como una perdedora a su lado, entonces decidí alejarme de él, no creía que alguien tan grande como Hwiyoung pudiera estar con una simple persona como yo. Mis papás tienen dinero, pero lo han conseguido con esfuerzo. Comparado con Hwiyoung éramos nada. —Miyeon quería interrumpirla y decirle que ser Cho Miyeon es lo más hermoso que existe en el mundo, y que para ella nunca sería poco, en vez de decirlo abrazó fuerte a su novia y besó su frente, Miyeon sonrió y decidió continuar con su historia —A las dos semanas después me enteré de que mi papá tenía cáncer, mis padres siempre han tenido una buena situación económica, pero mi padre tuvo que dejar de trabajar y mi mamá no podía con el pago de todas las cosas y tratamientos además de mi universidad y la escuela de mi hermana... —Las lágrimas comenzaron a caer. —Entonces me volví a contactar con Hwiyoung, comencé a salir con él y terminamos siendo novios, finalmente él se enteró de lo de mi padre y me ofreció ayuda... yo la acepte... mentí a mis padres diciendo que el hospital quería otorgarle ayuda a mi padre... cuando en realidad yo me acostaba con el hijo de los dueños. —Shuhua tuvo que otorgar refugio a Jessica entre sus brazos, las lágrimas seguían cayendo sin parar, Shuhua movía su mano en círculos en la espalda de Miyeon quien usaba el pecho de la menor como un lugar para desahogar toda su tristeza —Está bien Miyeon... está bien —Shuhua no sentía nada negativo hacia Miyeon, al contrario, pensaba que su novia fue muy valiente de vivir eso durante años.

Miyeon exhaló fuerte y se alejó un poco de Shuhua, quien secó las lágrimas de la mayor con su pulgar — Hwiyoung me pidió matrimonio, si no me casaba con él, entonces el tratamiento de mi papá se vería dañado... Pero yo ya soy profesional, tengo mi trabajo, te tengo a ti y creo que puedo seguir apoyando a mi mamá por mi cuenta... Shuhua si tú no hubieras llegado a mi vida no hubiera sido lo suficientemente fuerte como para detener todo lo que estaba pasando con Hwiyoung —Shuhua nuevamente la resguardó en sus brazos, se prometió apoyar a su novia en todo a partir de ese momento.

Ambas seguían abrazadas, sin ganas de despegarse por nada del mundo —Estoy muy orgullosa de ti — Dijo Shuhua para luego besar fuertemente a Miyeon.

Un tiempo después:

Ambas estaban frente al mar abrazadas, ya habían pasado años desde que ambas comenzaron su relación, habían superado fuertes barreras en lo que pasó esa cantidad de tiempo, pero aquí estaban, juntas y amándose como nunca antes en su vida... sentían que sus corazones habían encontrado un hogar y ya no había forma de dejar ese hogar —Te extrañé demasiado. —Miyeon no dejaba de abrazar a Shuhua, quien sonreía tiernamente a su novia.

—Te deje ir por un año y ahora estás rubia y más bella que nunca — Ambas estaban riendo, Miyeon había tenido dudas de su cambio de look, pero la respuesta de su novia la convenció de que había sido una buena decisión. —Te tengo una sorpresa —Comentó Shuhua sacando un pequeño cofre desde su lado — ¿Qué es eso? – Preguntó Miyeon. Shuhua lo abrió — Contiene un portafolio. — Miyeonlo tomó, eran muchas fotografías, de lugares hermosos que Shuhua había visitado el último año, ella decidió viajar para tomar fotografías, quería que Miyeon fuera con ella, pero esta prefirió quedarse dando clases, su vida era eso y no podría vivir sin hacerlo.

—Sé que has estado escribiendo, quiero que estas fotos sean una inspiración para ti, quiero que estas lindas fotografías te lleven a lugares maravillosos que te produzcan sensaciones especiales. — Miyeon sonrió y miró a Shuhua a sus hermosos ojos.

—Te amo demasiado, la inspiración más grande de mi vida está frente a mí —Se besaron nuevamente —Te amo mucho más Miyeon, por siempre.

Ambas sonrieron, porque sabían que su relación era como el verano, su relación nunca acabaría... El verano siempre está ahí, en algún momento en una parte del mundo y en otros momentos a otro lado del mundo, pero por más lejos que se encuentre, siempre está ahí... justo como el amor que ambas sentían.

Fin.