Tiffany se encontraba por los pasillos de las habitaciones pensando en que podía tener Jessica en la hielera como para reaccionar de esa manera.

-¡Droga! ¡Oh por dios, es mafiosa! –Corrió a la habitación de Sunny y Taeyeon y antes de entrar vio un nombre en la puerta. -¿Sunyeon? ¿Qué es eso? Sunny-Taeyeon Sun-Yeon, ¡Ahhhh estúpida Taeyeon aprovechada!  Tranquila Tiffany vienes a otra cosa. –Toco dos veces antes de que le abriera Sunny.

-Fany. –Le sonrió y la dejo pasar.

-¿Dónde está Tae?

-Tenía que ir a un lado.

-Vengo en otro momento.

-Quédate y espérala ¿Le ibas a decir algo? –Tiffany asintió. –Entonces espérala.

-Voy contra reloj y debo vigilar a alguien, dile que me busque.

-No te vayas. Tal vez yo puedo ayudarte. –Fue acortando la distancia hasta acorralarla.

-Para que molestarte, mejor a Tae.

-Nunca me molestaría hacer algo por ti. –Termino de acorralarla contra una pared.

-Oh... –La veía aproximarse a sus labios con decisión, era fácil saber que se venía por lo que se relajó y espero el momento.

Sunny tenia un pensamiento de la tengo y antes de que pudiera hacer nada se vio apartada por Tiffany.

-¡Jessica!  Esa, me quiere en su organización delictiva, no puede ser. –Se marchó en busca de su mejor amiga dejando a Sunny bastante extrañada.

Taeyeon está con su amigo Heechul, con el que acudió para contarle la actitud de Sunny.

-¡¿Por qué eres tan miedosa?! Dejaste ir tu oportunidad ¿Sabes a lo que se refería?

-A eso que creemos no era.

-Lo es. Te toquetea y luego te invita a la habitación y tú sales corriendo. Debería darte vergüenza.

-Primero quiero ser su novia y luego que ocurra. Saltarse pasos es malo, las cosas terminan mal.

-¿Cuándo piensas volver a tu habitación?

-Hasta que caiga la noche que ya este dormida. Oh no, siempre me duermo primero que ella, no sé a qué hora duerme.

-Vete ya, puede que aun tenga ganas.

-NO. Dame asilo otro rato, nada te cuesta a parte estas solito.

-Estúpido Siwon seguro fue a espiar a Jessica.

-¡Aquí estas! –Tiffany entro dando portazo, alterada se acercó a Taeyeon. -Jessica Jessica.

-Dile que no la vuelva a nombrar o la abofeteo. –Amenazo Heechul.

-¿Qué ocurre Fany?

-Es narcotraficante y me quiere recluir en su organización. –Caminaba en círculos por la habitación. -Claro por eso sacaba lo de esclava, lo seré cuando me tomé a la fuerza y me obligue a ocultar droga en mis entrañas.

-Estas muy enterada. –Dijo Heechul.

-Lo vi en un documental. –Se excusó dejando de dar círculos.

-¿Por qué llegaste a esa conclusión? –Taeyeon ya la creía loca.

-Es una teoría, la voy a estar espiando para confirmar. Resulta que tiene una hielera y la tire por error entonces ella se puso histérica, no me dejó recogerla ni me dijo que tenia en ella.

-¿Y piensas que es?

-¡Droga! –Levanto sus manos al techo.

-Puede ser comida especial, ensaladas, por eso nunca la vemos comer. –Explico Heechul. –O bebidas alcohólicas.

-Se habrían roto por la caída, de todas formas la voy a vigilar ya dije, primero muerta antes de ser su esclava, su empleada, digo su reclusa, lo que sea. –Salió del a habitación.

Heechul y Taeyeon se miraban confundidos y Tiffany regreso a la habitación.

-Olvide algo. –Se acercó a su amiga y le dio un golpe en la cabeza.

-¡¿Qué te sucede?!

-¿Con que Sunyeon?

Horas después.

Con sigilo entro a su habitación, la oscuridad era su enemiga, sin embargo, podía llegar a su cama fácilmente. La luz se encendió y se encontró a su compañera con una sonrisa.

-Ah, Sunny. –Los nervios le regresaron más al verla tan solo con una playera holgada como piyama.

-Hasta que llegas. –Dio pasos decididos a ella y se detuvo a su lado. -¿Por qué no encendías la luz?

-Es que no quería molestarte. –Sentía sus manos sudar.

-Yo decido cuando eres una molestia. ¿No crees? –Taeyeon asintió por inercia. -¿Vienes a la cama ya?

-¡SE ME OLVIDO ALGO CON HEECHUL! –Intento huir pero la Sunny fue más rápida.

-Acuéstate de una vez, se lo pides mañana. –Y de nuevo su seducción desapareció. -Si te desvelas no podrás estar al cien en las clases de mañana. –Dicho eso fue a acostarse a su cama. –Buenas noches.

-Buenas noches.  –Sin cambiarse fue a su propia cama desconcertada como nunca antes.

Tiffany se tomó con seriedad el papel de ser la espía, se acomodó en su cama de manera que pudiera vigilar la puerta de la habitación y viera la llegada de Jessica ya que para variar estaba ausente.

-Te voy a atrapar en la movida. –Se encontraba muy decidida, sin embargo, pasando las horas sus ojos comenzaban a cerrarse y cuando menos se dio cuenta el sueño la venció.

-ME QUEDE DORMIDA. –Despertó alarmada y gritando, se inclinó con miedo buscándola.

-Tranquila, todavía es temprano. –Jessica llevaba una charola en manos, Tiffany la miraba sin percatarse ya que pensaba en que momento llego. -Buenos días. –En la charola llevaba el desayuno y no cualquier tipo de desayuno, uno gourmet. -Para ti

Quedo en shock ante la acción y con la charola en sus piernas.

-Lamento lo de ayer, sé que no tiraste mis cosas apropósito, fue un accidente y yo actué agresiva, esto es mi manera de pedirte disculpas –Señalo el desayuno.

-¡Esta envenenado! –La acuso.

-Sabía que lo dirías. Y te comprobare lo contrario. Permiso. –Tomo un poco y lo llevo a su boca mastico y se pasó el bocado. -¿Contenta?

-Has tomado el que ya sabias que no lo estaba.

-Eres imposible, elige un bocado y lo comeré para demostrarte que no te quiero envenenar. –La vio observar el patillo minuciosamente lo cual la hizo sonreí por lo curiosa que se veía, se perdió en la imagen que cuando menos sintió tenia los dedos de Tiffany en su boca introduciéndole el bocado.

-Acábatelo. Sin trucos. –Le ordeno.

-Listo. –Aunque así lo hizo, Tiffany seguía dudosa. -Si te enveneno sabrían que fui yo he iría a la cárcel, además ¿para que te querría muerta?

Por fin probo el desayuno pero el miedo se mantenía ya que esas palabras le confirmaban sus sospechas, obvio no la quiere muerta, la necesita viva para usarla como traficante.

-¿Qué había en la hielera?

-Negocios míos, algo personal. Termina pronto, no queremos que llegues tarde a clases. –Se colocó el abrigo.

-¿A dónde vas?

-A clases.

-¿Y tus útiles para tomar notas? –Jessica señalo su cabeza y salió de la habitación.

En los pasillos de escuela se hallaban Siwon y Taecyeon a la expectativa para el momento en que Jessica se cruzara por allí.

-Ya viene, por fin. –Se alegró Siwon habían estado cazándola desde hace días y hasta ese dia es que lograron verla.

-Piedra, papel o tijera. –Sugirió el moreno y para su suerte gano.

-Maldición. –Se lamentó Siwon. -Te va a ignorar.

Taecyeon se adelantó quedando frente a Jessica. -Hola. –Fue evadido, no se rindió y camino a su lado. –Me llamo Taecyeon, sé que tú eres Jessica y eres compañera de habitación de Tiffany y

-¿Te puedes callar? No me interesa quien seas. –Su mirada era fría mostrándola con un aura de superioridad. Taecyeon se quedó en shock y Siwon se comenzó a carcajear desde su sitio. –Y dile a tu amigo que él tampoco me interesa, no me fastidien.

-Después te vas a arrepentir. –Grito Siwon ya molesto. -Cuando tenga novia vas a llorar. –La realidad era que él quería llorar, no pensó ser rechazado sin tener la oportunidad de hablar con ella.

Los dos chicos se fueron cabizbajos a sus respectivas aulas y así continuaron las siguientes horas, a la hora del almuerzo se reunieron con los demás, siendo que las únicas ausentes son Tiffany y Sunny. La primera por estar en su labor de espionaje y de la segunda no se sabía mucho.

-Mi pobre Siwon, de todas formas ella no es la gran cosa. –Lo animaba Heechul.

-¡Si es la gran cosa! –Dijeron Siwon y Taecyeon al unísono.

-Ella no está interesada en ustedes, acéptenlo. –Hablo Miryo.

-Ya viene Tiff. –Bora la veía apresurarse a la mesa.

Al llegar demostró su pánico creciente.

-¿Qué pasa? ¿Por qué esa cara? –Le pregunto Taeyeon.

-Me tiene. –Murmuro apenas audible. –Jessica me llevo el desayuno a la cama.

Taecyeon escupió su bebida mientras que a Siwon se le atoro el pedazo de sándwich con el que se estaba ahogando.

-Pequeño. –Heechul fue el primero en ayudarlo, no iba perder la oportunidad de tocarlo. –Caballito.

-Mira lo que provocas Tiff. –Bora se reía ante la escena.

-Ya, ya estoy bien. ¡Tiffany! Tú y Jessica.

-¡¿Se acostaron?! –Completó Taecyeon.

-¡NO! ¿Qué les hace pensar eso?

-Tú dijiste que te llevo el desayuno.

-Pero eso no significa que estén juntas. –Explico Taeyeon.

-¿Por qué te lo llevo? –Todas voltearon a la ver a la dueña de la vos. –Hola, llegue desde que Siwon se atraganto. –Sunny tomo asiento.

-Ya no sé. –Respondió Tiffany. –Quiere matarme o recluirme. Tal vez me dio mi última cena, era un desayuno gourmet.

-Tu último desayuno dirás. –Dijo Heechul.

-Última cena suena más dramático. Quedan avisados, si muero señálenla como primer sospechosa.

-Es increíble que te lleve el desayuno y tú pienses en que te matara, estás loca. –Se quejó Taecyeon recordando su desgracia. -A nosotros ni siquiera nos quiere hablar.

-Tiffany cree que es una mafiosa. –Le explico Taeyeon.

-Enferma. –Esta vez fue queja de Siwon. -¿Cómo alguien tan y como ella va a ser mafiosa? Esperen, Si es mafiosa. –Todos excepto Taecyeon le ignoraron y siguieron.

-Ahora si estas yendo muy lejos Tiffany. -Menciono Miryo sorprendida por las ocurrencias de Tiffany.

-Oculta algo y ustedes estarán de acuerdo que es misteriosa, no por nada nunca está en clases.

-Hoy sí. –Recordó Heechul. –A la primera.

-Casi nunca. –Rectifico Tiffany. -Duerme de día y de noche no está porque es cuando sale a trabajar.

-A lo mejor es mujer de la vida galante. –Opino Sunny ganándose dos miradas asesinas. –Solo digo.

-¿Y la hielera misteriosa?

-¿Qué hielera? –Pregunto Miryo ella no sabía del tema como muchos presentes.

-Tenía una que Fany tiro al suelo por accidente y no supo que había en ella ya que Jessica casi la saca de la habitación a patadas.

-Gracias Tae. –Agradeció por la breve explicación. -Hoy ya no la tenía, la remplazo por un termo, ahí ha de tener la droga ya en bolsitas para su distribución.

-Por dios Tiffany, mejor se directa y pregúntale, en verdad pareces loca. –Heechul se desesperó.

-Le pregunte que tenía en la hielera. Y ha dicho “Negocios míos” así hablan los narcotraficantes. Voy a buscarla, tengo que seguir la vigilancia. –Se alejó dejando a sus amigos en silencio.

-¿Y si tiene razón? –Pregunta Sunny.

-Imposible y no hay que hacerle caso, cuando se le mete una idea así se pone pero ya se le pasara. –Le explico Bora.

Ojalá las palabras de Bora hubieran sido ciertas, pasaron dos semanas de vigilancia y Tiffany no desistía, mucho menos encon