Tenía el escáner en las manos y no podía creer lo que mis ojos veían, el escáner claramente mostraba que Dara estaba infectada.

-Maldición, ¿Amber nos engañó?–Dejé caer el escáner al lodo.

¿Por qué demonios vamos a sacar a una chica infectada? –Teddy se agarraba la cabeza.

-No estoy infectada. –Dara estaba apoyada sobre un auto.

-¿No? ¿Entonces el escáner miente? –Me acerque a ella y la tomé por los hombros.

-Puedo explicarlo. –Mi sangre hervía de coraje estaba arriesgando mi vida por una infectada.

-Pues explícate rápido –Teddy me apartó de Dara.

-Miren esto. –Dara corrió la manga de su ropa y nos enseñó su brazo donde tenía una mordedura que ya estaba cicatrizando.

-No, eso es imposible, ninguna mordedura sana, al contrario se infecta más y en menos de tres días mueres y te vuelves uno de ellos. –Teddy se dejó caer al lodo.

No podía creerlo Dara había sido mordida y seguía con vida y no solo eso su herida estaba sanando. A lo lejos escuchamos que otro camión militar se acercaba.

-Dara, Teddy corran, ¡Corran! –seguimos por otro camino. Nos adentramos a un túnel debajo de la carretera, salimos del otro lado pero igual estaba lleno de militares.

-Vámonos, que los chasqueadores acaben con ellos. –Escuche a uno de los militares decir, esperen ¿Chasqueadores? qué demonios son esas cosas.

Los militares empezaron a irse y aprovechamos esa oportunidad para seguir avanzando y adentrarnos en las alcantarillas.

-Se han marchado. –Me senté sobre una roca.

¿Cuál era el plan? Digamos que te entregamos a las luciérnagas ¿y después? –Teddy se acercó a Dara, que se encontraba sentada sobre una roca.

-Amber… dijo que ellos tienen su propia zona de cuarentena, con médicos… buscando una cura. Y que lo que sea que me haya pasado es la clave para encontrar la vacuna.

-Un momento… Teddy ¿Por qué hacemos esto? Qué pasa si todo es una mentira y solo estamos arriesgando nuestras vid…-No terminé de hablar porque Teddy se puso enfrente de mí.

-¿Y si es cierto? Hemos llegado muy lejos, terminemos con esto. –Teddy tomó a Dara de la mano y empezó a caminar con ella.

-¿Quieres que te recuerde lo que hay ahí afuera Teddy? –Le dije, pero él me ignoró siguió caminando con Dara.

No tuve más remedio que seguirlos. El exterior en esta zona era la peor, los edificios estaban destruidos, unos encima de otros, todo por los bombas que se lanzaron para acabar con la mayoría de infectados que se pudiera. Seguimos avanzando hasta que escuchamos como un gruñido.

-Teddy ¿Has escuchado eso?–Saqué mi arma.

-Sí, pero se escucha lejos, apresurémonos.

Decidimos cortar camino atravesando el edificio en vez de rodearlo, el lugar era bastante tétrico, pero ahí estaríamos a salvo de la lluvia.

-Ahí, ayúdame con esta puerta Teddy. –Empezamos a empujar la puerta que se abrió de golpe y caí al suelo y de la nada una criatura bastante rara se abalanzó sobre mí como pude intente quitármela, su cara estaba cubierta de una cosa como coral de esos que se forman en el mar.

-¡CL! –Teddy pateó a la criatura y después le dio un tiro.

Al parecer esto es un chasqueador del cual los militares hablaban, los hongos han remplazado casi por completo el rostro del infectado. Todo el rostro, menos la boca. Su rostro estaba lleno de protuberancias producidas por el hongo, lo observo me