Ocurrió por primera vez cuando tenía diez años.

Un lluvioso día de octubre, Soonyoung se levantaba de su cama después de un sueño reparador de nueve horas y al abrir la puerta de su baño, sin previo aviso él estaba en un bosque, moho de las rocas y la frescura del monte daban a Soonyoung seguridad de que no estaba soñando, porque los sueños no son así de reales ¿o sí?

Lo siguiente que recuerda es haber colapsado sobre el azulejo, sus padres pensaron que había resbalado, pero cuando Soonyoung les conto que había estado en un bosque, en un verdadero bosque al abrir esa puerta, no le creyeron.  Los siguientes meses estuvieron llenos de psicólogos y médicos.

Psiquiatra… era la palabra que más disgustaba a Soonyoung.

La pubertad  y adolescencia de Soonyoung fue tormentosa, como la de cualquier persona a su edad, solo que llena de inseguridades e insultos de los demás debidos a su medicación.  Medicación que era única y exclusivamente para pacientes con esquizofrenia. Debido a esto, todos decían que él estaba loco, aunque para Soonyoung fuera más real que su existencia misma.

Cuando todo parecía gris para Soonyoung y a punto de ser medicado por depresión, sus padres decidieron cambiarlo de institución. Ahí conoció a un nuevo estudiante que acaba de mudarse de China, Minghao, con el tiempo este chico se volvería en su mejor amigo.

Desde ese momento decidió ocultarle al mundo sobre su enfermedad.

Por su bien.