Epilogo

El amor verdadero siempre será el blanco de todos aquellos que están llenos de odio o que han sido traicionados por el mismo, por gente que jamás ha sentido amor o la mala suerte de nacer en un habitad donde carecían de él.

El amor verdadero siempre luchara por mantenerse unido, por no dejar que la maldad los separe como lo desea, aun cuando crean que lo haya logrado y no haya  un esperado regreso, sólo si es un amor puro, volverá.

El amor verdadero siempre perdona, aun cuando te hayas equivocado horriblemente, solo bastaran unas cuantas palabras para recordarte lo impórtate que eres y por qué te necesita a su lado.

El amor verdadero siempre busca volver después de haber sido separados y no descansara hasta estar de nuevo a tu lado.

En el piso quince de un edificio de treinta, en un pequeño, pero moderno departamento, una recién levantada castaña con mechas claras, prepara lo que será su ligero desayuno.

Como todas las mañanas, desde hace aproximadamente ocho meses, hace la misma rutina de todos los días.

Sale de la cama con tan solo una blusa de manga larga que hace muchísimo, pero muchísimo tiempo se robó del departamento de Jessica. Se dirige a la cocina para de inmediato abrir el refrigerio y sacar los ingredientes para su saludable desayuno. Toma el control negro que se encuentra en una esquina de la barra y el nuevo disco que Taeyeon se reproduce en él.

Tal vez su intento por olvidarse de la acaramelada no esté funcionando pero, ¿Cómo podría funcionar si todas las noches duerme con la misma blusa y todas las mañanas escucha el nuevo disco?

Además de eso, supo de inmediato de la muerte de Hyeri al dar a luz a su pequeño hijo y quiso correr a los brazos de Jessica para darle ese apoyo que necesitaba, más no lo hizo pues la gente lo vería mal y no estaba lista para ser criticada.

Termino de cocinar y se disponía a comer su delicioso omelette, cuando el timbre de su departamento se escuchó.

Al abrir la puerta se encontró con un jovencito de dieciocho años.

-¿Sí?

-¿Stephanie Hwang?- pregunto después de mirar una pequeña pizarra.

-Sí, soy yo, ¿Qué desea?

-Firme aquí,- señala.- por favor. El paquete es suyo.

-¿El paquete?

Sus ojos se fijan en el rectangular y no tan grande, pero ni tan pequeña caja de color blanco. No es su cumpleaños, de hecho ya había pasado y aún falta un mes para navidad.

El chico solo se encoge de hombros al no tener la respuesta que la chica desea.

Tiffany no teniendo idea de lo que sea y ni de quien sea, firma para después adentrarse a su departamento con la caja en sus brazos.

Corriendo a la mesita en la pequeña sala de estar, deja la caja blanca para con cuidado abrirla y ver el contenido que hay en ella. Sus ojos se abren al ver el hermoso vestido que hay dentro de él. Su mirada se posa en una pequeña nota que hay en medio del vestido, para mala suerte, la caligrafía fue claramente hecha a computadora.

Espero verte hoy en la noche, pero me alegría verte más con el vestido que compre especialmente para ti.

¿Tú también ansias verme?

Te extraño.

-¿Te extraño?- levanto una ceja.- ¿Está noche?

La mujer está más que confundida, ¿Quién podría haberle mandado un vestido que obviamente ha de haber salido una gran cantidad de dinero?

Ella no recuerda tener a alguien detrás de ella, no desde que se hizo pública su relación con Jessica. Aquellos que había mostrado algún interés en ella, de la nada habían dejado de cortejarla y desconocía las causas.

-¿Sera de algún admirador?- se preguntó a si misma.- ¿Sera de algún pretendiente?

¡IMPOSIBLE!

Cuando se refería a esta noche, supuso que debía referirse a la boda de su hermana Yuri con Taeyeon. Hace tres meses le había hablado emocionada para darle la muy buena noticia, que la mayor de la Jung le había propuesto matrimonio.

Aquello sin duda no se lo esperaba, pero se había alegrado tanto por su hermana, al igual que ella, había sufrido demasiado cuando se separó de la mayor y ahora la vida le estaba recompensando de la mejor manera.

Muchos creyeron que la boda se llevaría a cabo en Seúl, pero se equivocaron. La roquera  había tenido que volver a los Estados Unidos y esta vez Yuri había aceptado irse con ella, pues una separación más y no creía sobrevivir nuevamente.

Krystal y Sulli se había tenido que separar por un par de meses, la menor de las Jung había tenido que regresar a los Estados Unidos para una nueva película que estaba por comenzar y Sulli tenía un par de sesiones que realizar antes de trasladarse definitivamente con su novia a aquel país.

Jessica era la única que no había abandonado Corea todavía, ya que era comprensible por lo que estaba pasando. Sin embargo, su padre y Boa habían decidido quedarse para ayudarle con el pequeño.

Debido a eso, Tiffany fue la que ha ayudado a su hermana con la planificación de su boda, claro, aparte de Tae que se tomaba su tiempo para aportar ideas. Sin embargo, eso había sido hace unas cuantas semanas atrás.

La boda no sería tan grande, las dos chicas quería algo discreto y sencillo, en realidad, lo único que les interesa es poder proclamar a la otra como suya. No obstante, las constantes idas y vueltas no se pudieron evitar.

Sí bien, hoy era el gran día en el que su hermana decía adiós a la soltería y le decía hola al matrimonio, y ella se encontraba tan tranquila.

-¡Maldición!- escupió al recordar.- ¿Qué horas son?- corrió en busca de su celular.- las nueve. Creo que lo mejor será apurarme, quede formalmente de ayudarle a mi pequeña hermana con su vestido.

De repente, como si un cubetazo de agua fría le hubiese caído en la cabeza, queda congelada con la mirada puesta en el vestido que se haya en la caja.

No podía ser posible… no podía ¿o sí?

Sacudió la cabeza quitando ese pensamiento de su cabeza, Jessica fue muy clara. No quería verla más, no después de haberle estado engañando a su esposa y más ahora que está muerta. Además, Jessica no la recordaba ¿O sí?

-No, no puede ser ella… no lo es.

Camino de regreso a la barra, se subió al alto banco y desayuno su delicioso omelette. Fuese quien fuese la misteriosa persona del hermoso vestido, no pensaría en él. Aunque a decir verdad, el vestido es demasiado bonito.

Tenía el tiempo contado y no podía darse el lujo de retrase, la boda es a la cinco, pero por supuesto, la novia debía estar lista antes. No deseaba que Taeyeon sufriera de una pequeña crisis de nervios, todo por no ver a la novia llegar a tiempo.

Ríe al imaginarse a la estrella del rock en ese estado.

Salió de su departamento justo a la hora planeada, se montó en su elegante BMW color rosa y arranco con toda la tranquilidad del mundo.

¿Por qué lo había olvidado?

Es demasiado obvio que Jessica este aquí, es la boda de su hermana mayor y por nada en el mundo podría perdérselo.

¿Qué probabilidad había de no encontrársela en ningún momento en la boda?

Tiffany suspira al darse cuenta que prácticamente no había nada que ella pudiera hacer. Después de ocho meses la volvería a ver y no se sentía prepara para ello.

¿Qué haría cuando la tuviera frente a frente?

¿Cómo reaccionaría Jessica cuando la volviese a ver?

Sabe por su hermana que cuando dio por terminado su contrato con J&K Corporation, Jessica se volvió loca y exigió, sí, exigió saber a dónde había ido y con quien. Por supuesto, Yuri no había  abierto la boca por dos razones.  La primera, Tiffany nunca le informo en donde estaba y se mantuvo alejada de las sesiones y pasarelas por tiempo; dos, cuando lo supo le hizo jurar que no se lo diría a nadie y así lo hizo.

Por desgracia, Jessica no había podido viajar de inmediato cuando se enteró en donde estaba. Su pequeño hijo aún era muy chico para viajar y debía esperar.

¿Vendrá sola o vendrá con su hijo?    

¿Él bebe se parecerá a Jessica o Hyeri?

Sea como sea él bebe de tan solo ocho meses será la cosa más bonita que Tiffany haya podido ver.

Una sonrisa se forma en su rostro.

Espera con ansias convertirse en mamá muy pronto y tener al que será su esposo o esposa a su lado para siempre.  

Tras un largo recorrido, llego por fin a la mansión Jung, donde fue recibida con una sonrisa por las chicas del servicio.

Todo dentro de la enorme mansión era un caos total y no es para menos, la boda esta por realizarse en un par de horas y todo debe estar listo y perfecto para la ceremonia.

-Es bueno verte de nuevo Tiffany.

La modelo voltea sólo para sonreírle al empresario.

-Sabía que no podías perderte la boda de tu hermana.

-Jamás.- sonríe.- Hoy el día más feliz de Yuri y no puedo perdérmelo por nada en el mundo.

-¿Cómo has estado?

-La verdad, es que muy bien.- contesta con honestidad.- Podría acostumbrarme a vivir aquí para siempre, al fin y al cabo soy americana.

-¿No tienes planeado regresar a Corea?

-Tal vez… en algún futuro muy lejano.

-Creo que New York te ha enamorado.

-Demasiado diría yo.

-¿Vas asistir a la boda con alguien?

-Sí, tengo pareja.- el rostro de Yunho decaí.

-¿Pareja?

-Sí.

-Oh… no… no lo sabía, Yuri no me ha dicho.

-¿Decir qué?- alza una ceja en señal de confusión. Se ha perdido.

-De tu novia.

-¿De mi novia?- su confusión aumenta.

-Sí, de la chica con el que iras a la boda.

-¿Cuál chica?

-Tu pareja.

-¡Ha!- se da cuenta que el empresario mal entendió.- no es chica, es chico y…

-Tiff, ¿Qué haces aquí abajo?,- aparece la morena nerviosa al final de la escaleras.- te necesito acá arriba ¡AHORA!,- regresa a ver al empresario.- Padre, por favor no entretengas a mi hermana.

-Creo que me solicitan con urgencia.

-Veo que sí.- su sonrisa no es la misma.- Te veo en un rato.

-Ahí estaré, Yunho.

La castaña subió las escaleras sólo para encontrase con su nerviosa hermana. Ambas se abrazaron fuertemente, pues había dejado de verse hace ocho meses. Nunca antes se habían separado por tanto tiempo, a pesar de haber sido solo ochos escasos meses, para ellas había sido una eternidad.

-No sabes la felicidad que me provoca que este aquí.

-¿En verdad creías que no iba a venir a tu boda?,- pregunte en medio de una sonrisa.- ¡Por dios! No todos los días se casa mi hermana menor con el amor de su vida. 

-Sabía que no podías fallarme, pero…

-Pero nada,- le interrumpió.- aquí estoy y eso es lo que importa.

-Sé que esto es muy difícil para ti.

-En realidad no, en todo este tiempo me di cuenta que todo lo que necesitaba hacer era dejarla ir, hacerme a la idea de que lo nuestro ha dado fin y que debo seguir adelante, mirar por mí.

Por primera vez en mucho tiempo, Yuri logra ver de nuevo a su hermana, a la Tiffany con la que creció casi la mitad de su vida. Aun cuando Jessica no está del todo olvidada, la castaña está haciendo lo posible por seguir su vida sin mirar atrás y eso es algo que la morena no puede dejar pasar.

-Me alegra ver, que estás bien, que todo este tiempo te ha servido para pensar y ver las cosas buenas de la vida.

-Estaba consciente que tarde o temprano la iba volver así que, veamos que tal me va.- sonríe con su eye smile.

-Esa es mi hermana, ahora manos a la obra.

Hoy es un día especial y Tiffany está dispuesta a no echarle a perder su boda con sus preocupaciones.

Se prometió a sí misma no volver a derramar ni una lágrima más y asi ha sido desde entonces.

No es necesario decir todo lo que las hermanas Hwang-Jung hicieron, la presencia de Tiffany es más que nada para quitarle los nerviosismos a Yuri, mientras da una que otra opción en el peinado, maquillaje o accesorios.

El tiempo sí que pasa tan rápido cuando andas súper ocupado y entretenido, que en está ocasión no fue una opción. La boda se llevara a cabo en el gran jardín de la mansión Jung y el padre ha llegado junto a los pocos invitados.

Taeyeon que en toda la noche no había podido pegar el ojo, había llegado junto a su hermana Jessica, quien venía acompañada de su suegro y cuñado, además del nuevo miembro de la familia.

Pocas lágrimas nublaron la vista de cierta mujer que mira con adoración y mucho amor a su pequeña gran hija con tan magnifico vestido de novia, mientras Tiffany sonríe tan cariñosamente, orgullosa de la hermosa figura de su hermana.

-¡Oh por dios!

La dulce voz de la actriz hace eco en la amplia habitación, mientras observa de arriba hacia abajo y viceversa a su hermana.

-Taeyeon va morir de tanta belleza cuando te vea.- todas sonríen.- Yul, estas preciosa.

-¿Ves los pendientes?

-Veo que seguiste mi consejo.- ahora es el turno de la menor de sonreír.

-Eres mi hermana y tu opinión también cuenta. 

-Hola Tiffany,- saluda a la mayor.- no sabes lo feliz que estoy de verte de nuevo, desapareciste por dos meses enteros.

-A mí también me da mucho gusto verte, Soo Jung.- dice con cariño.- y sí, necesitaba unas pequeñas vacaciones antes de ponerme a trabajar.

-También esta hermosa.- dice mirándola. Una sonrisa extraña se forma en su rostro.- Bellísimo el vestido que escogiste.

-Es verdad,- la morena le regresa a ver, ahora extrañada.- ese no es el vestido que compraste para mi boda, ¿Qué paso con el otro?  

-Cambio de planes.

-¿Deseas impresionar a alguien?- dice con picardía la menor.

Tiffany estaba por contestar, cuando un llamado a fuera de la habitación se lo impide.

-Señorita Hwang, el joven Russell ha llegado y pregunta por usted.

-Muchas gracias, Katia. Por favor decirle que me espere en la sala, ya bajo.- pronuncia en voz alta.

-¿Qué no es el apellido de tu abogado?,- dice con una ceja levanta.- el que te ayudo a divorciarte de mi primo.

-Por supuesto señorita Hwang.

-Sí, Krys, es mi ex abogado.- se acerca a su morena hermana.- Ha llegado la hora hermanita.- besa su frente.- te esperamos abajo.

Sin decir más, abandona la habitación siendo seguida de una Krystal perpleja, ¿Acaso Stephanie está en una relación con su ex abogado?

Al llegar a la enorme sala, regala una de sus más sinceras sonrisas de ojos, algo que sin duda contagia al apuesto joven.

-Tan puntal como siempre, Ian.

El chico se acerca a ella y sin poder evitarlo, recorre cada parte de la modelo con admiración, actitud que no pasa desapercibido por la menor de las Jung, quien solo mira la escena con mucha seriedad y en total silencio.

-Estas hermosa Tiffany.

-Muchas gracias Ian, tú no te quedas atrás.- le acomoda el moño del traje.- Estas guapísimo.  

-Seré la envidia de la noche.

-Por supuesto,- dice con un poco de ego.- soy Tiffany Hwang.- el joven ríe sonoramente.

-¿Cómo pude olvidarlo?

-No tienes perdón.- ríe ahora la mujer.

-¿Vamos?- le ofrece su brazo y Tiffany le mira por unos segundos.

-Vamos.

Toma una última bocanada de aire antes de salir al jardín, donde todos esperan a la novia.

La atención de todos los presentes caen en ella, pero solo una mirada es la que la hace temblar de nerviosismos.

Jamás ha sentido una mirada tan penetrante caer sobre ella, y no es necesario adivinar de quien provenía.

Sabe perfectamente que Jessica Jung le está pidiendo casi a gritos le devuelva la mirada, pero no lo hace, todo lo contrario, la ignora, y eso solo ha provocado la furia de la acaramelada.

Sulli, Sooyoung, Hyoyeon Yoon ah y Seohyun están completamente sin palabras. Tiffany está pisando el mismo suelo que Jessica, y hasta el momento sus ojos no se han encontrado con los de la empresaria. Eso en definitiva no era una buena señal.

Tiffany tomo su lugar en la boda, justo en el momento preciso, pues la marcha nupcial dio inicio, impidiéndole a Jessica ir en su búsqueda.

Los ojos de Taeyeon se iluminaron al ver a tan bellísima mujer caminar hasta a un lado de ella. Quería llorar, pero de pura felicidad.

Para todos los invitados es la hermosa escena de dos jóvenes enamoradas, que están a punto de casarse después de tantas adversidades. Para Taeyeon y Yuri es el inicio de una nueva vida juntas, el día en que todo el odio, rencor y mal dejan atrás para dar paso al amor, felicidad y bien.

La ceremonia transcurre con tranquilidad, ya no hay nada ni nadie en el mundo que pueda separarlas y eso solo se confirma cuando en típica frase de “Sí hay alguien que quiera impedir esta unión, qué calle ahora o calle para siempre.”, ni un alma se escucha, permitiéndole al padre, finalizar la boda.

Los sonoros aplausos lograron formar una amplia sonrisa en el rostro de cada una. Ahora, para el mundo entero ellas son el envidiado matrimonio Jung. Esto debido a que Taeyeon decidió no cambiar su apellido, aun cuando todo el mundo ya sabe que es hija de Kim Jaejoong.

Tras la boda religiosa, la boda civil se realizó con mucho éxito. Por parte de Taeyeon, Jessica y Krystal fueron sus testigos, por parte de Yuri, fue Tiffany y Sulli.

La boda no solo quedo grabada en la memoria de cada individuo sino también en la cámara de los paparazzis y en las fotos del recuerdo. Después de obtener la exclusividad los paparazzis se marcharon y las recién casadas podían disfrutar de su grandiosa fiesta.

Las esposas se tomaban fotos con todos los invitados, mientras que en una de las mesas, Jessica luchaba contra sus impulsos de ir hacia donde cierta castaña.

En la mesa donde se encuentra Tiffany con los trabajadores de J&K Corporation Estados Unidos, que se volvieron sus grandes amigos. Todos se encuentran riendo a más no poder por el grandioso chiste que Dereck había contado, sin embargo, en un movimiento, una de las bebidas que se encontraba en la mesa, cae en el elegante traje del acompañante de la modelo, ensuciándolo por completo.

-¡Maldición!

-Ven, veamos qué podemos hacer para salvarlo.- sugiere la castaña con una sonrisa.- ¡No!, te vas a manchar más.- le detiene bruscamente.

-Pero…

-Vayamos a la cocina a limpiarte.

-Está bien.

-Ahorita regresamos.     

La pareja se levanta y caminan juntos hasta la entrada a la sala de la mansión, bajo la mirada de cierta acaramelada, que sin pensarlo dos veces, lo siguió.

Una colorida mirada observa desde una distancia prudente la interacción de la bella mujer y el atractivo hombre. Una terrible oleada de temor se apodero de ella y por inercia se adentra a la cocina.

Ha pasado tanto tiempo desde la última vez que se vieron. No podía esperar por más, no al ver que la está perdiendo.

Aquellos oscuros ojos se encontraron, después de mucho tiempo con los acaramelados ojos que, el corazón de ambas se aceleró a un ritmo incontable.

¿A quienes querían engañar?

No importa cuánto tiempo pase, no importa cuánto tiempo estén separadas, no importa cuántas veces tengan que encontrarse de esta manera, el efecto siempre será el mismo “Amor a primera vista”.

-Jessica…

Tiffany no esperaba enfrentarla tan pronto, pero había llegado el momento y no podía permitirse salir huyendo.

-Necesitamos hablar Stephanie.

-Tú y ella no tienen nada de qué hablar.- dice el abogado.

-De la manera más amable posible te dijo, no te metas en esto.- la mirada es la más fría que puede dar.- Este asunto lo tenemos que resolver ella y yo.

-No pienso ir…

-Déjanos solas Ian.- informo Tiffany, el chico le mira sorprendido.

-Pero Fany.

-Jessica tiene razón, es un asunto que debemos resolver de una vez.

-Estaré cerca, ¿Sí?- la castaña asiente.

-Gracias.

Una vez que el abogado abandona la habitación, Tiffany se atrevió a mirarla.

-¿Y bien?

-Primero que nada, he recordado todo.

-Qué bueno, me da gusto por ti.- dice sin mucha emoción.

-Se lo que hicimos Tiffany.

-¿Y que hicimos?- alza una ceja.

-La última vez que estuvimos juntas…

-Ni lo digas,- le interrumpe rápidamente.- escuche suficiente ese día.

-Quieras o no me escucharas.

-Genial.- dice sarcásticamente.

-Aquel día, termine contigo porque Krystal nos había descubierto.- la castaña le regresa a ver con los ojos bien abiertos.- Hablo conmigo seriamente, me hizo ver las cosas como eran y pidió que parara lo que tenía contigo, no porque te odiara o algo por el estilo, todo lo contrario, porque te ama y siempre te ha considerado parte de la familia, y por ello, no quería verte sufrir y tú estabas sufriendo, al igual que Hyeri,- ¿Esa era la verdad?- que si te amaba tanto como decía, debía dejarte ir y así lo hice.

-Pero todo lo que dijiste ese día…

-Mentí.- agacha la mirada.- Debía tratarte cruelmente para que tú te alejaras de mí,- alza la mirada.- porque si hubiera sido por mí, nunca hubiera podido alejarme de ti.

La hermosa castaña da media vuelta, dispuesta a no permitirle verla llorar porque incluso ella misma se había prometido no volver a llorar, pero ahora ha descubierto porque de la noche a la mañana la acaramelada cambio drásticamente, porque la trato de esa manera aquel día.

Habían sido descubiertas y  no tenía opción, aquello que tenían a escondidas había estado mal y ambas lo sabían, aun así siguieron y creyeron que funcionaria, pero la realidad fue cruel con ellas, al igual que la separación.   

 -Sé que probablemente estás haciendo tu vida de nuevo y sé que probablemente tu abogado puede ser la persona que te haga feliz realmente,- la modelo se gira rápidamente.- pero mis impulso no me permiten dejarte ir, mi corazón no puede ser feliz si no te tengo a mi lado y me llena de miedo todo el cuerpo el pensar que tal vez lograste olvidarme.

-Ojala pudiera olvidarte…

-Sé que tal vez no me merezco tu amor,- se va acercando a ella.- por todo el daño que te cause, por todo el daño que te causo mi familia, por haber borrado tu brillante sonrisa…

Su mano rodea su perfecta cintura, mientras la otra sube desde la espalda baja hasta la nuca, que toma con firmeza.

-Pero soy egoísta y quiero creer que nuestro amor es más fuerte que todos los malditos obstáculos que obligaron a separarnos.- pequeñas lágrimas bañan el rostro de Tiffany.- No puedo imaginarme una vida si no es contigo, no puedo imaginarme una familia sino es a tu lado, no puede haberme mejor mujer que tú para cuidar y amar a mi hijo como si fuera suyo.- una verdadera e inigualable sonrisa aparece en el rostro de la menor.- Aun cuando Hyeri no lo hubiese pedido, aun así yo lo hubiera hecho, pero quiero todo contigo Tiffany, te quiero en mi vida, en la de mi hijo, en la de nuestros futuros hijos, quiero recuperar el tiempo perdido, así tenga que enamorarte todos los días, lo hare, pero necesito que me aceptes de vuelta.

Las lágrimas eran imparables y lo que sentía la modelo en ese instante era algo que no podía comparar con nada.

Había esperado tanto por ese momento, por tener de vuelta a su acaramelada, por volver a estar juntas para esta vez ya no ser separadas nunca más.

-Jamás he estado tan enamorada de alguien en mi vida, como lo estoy de ti,

No hay mejor respuesta que un simple, delicado y suave beso, para dejar claro que la acepta de vuelta, que sus dulces palabras lograron convencerla y que la promesa de un para siempre si existe.

-Te amo Jessica Jung, te amo como nunca creí amar a nadie en esta vida.

-Esta vez,- junta su frente con la de ella.- vamos a estar juntas para siempre, que ni incluso la muerte nos va poder separar.

-Aunque el odio nos separe, el amor siempre nos unirá de nuevo, Jessica.

-Nuestro amor es más fuerte.

-Ay pero que bonito…

Ambas mujeres giran su rostro para encontrarse a todos sus amigos.

-Amor, ¿Estas llorando?- dice una sonriente Sulli.

-Es que me llegaron al alma las frases que dijeron.

-Ya era hora que estuvieran juntas de nuevo.- dice felizmente la mayor de las Jung.

-Me huele a boda.

-Yoong, cielo, acaban de regresar y tú ya las estas casando.

-¿Qué tiene?- se queja.- Te acordaras de mi cuando dentro de un par de meses estemos celebrando otra boda.

-Cincuenta dólares a que se casan en cinco meses más.

-¡Tae!

-¿Qué?- mira con inocencia a su ahora esposa.

-Ochenta dólares a que se casan en cuatro meses.

-¡Yoon ah!

-Tranquila amor, vamos a ganar.

-Jessica, más te vale casarte en cinco meses.- advierte la mayor.

-Que sean en cuatro Tiff.

-Cien dólares a que se casan en un mes.

-¡Krystal!

-¡Trato hecho!

…

-A todo esto, ¿Fuiste tú la que compro este vestido verdad?- la acaramelada alza una ceja.

-¿Quién te está tratando de conquistar Tiff?

-¿No fuiste tú?- se preocupa al ver la cara de enfado, pero al instante suelta un sonora risa.- Jessie.

-Te ves, preciosa.

Estados Unidos, cinco años después…

-¡Abuelito!

-¡Lito!

Las dulces voces de dos pequeños niños, de cinco y tres años respectivamente, resuenan por toda la mansión, provocando que el empresario, se levantara de su silla, caminara un poco, se agachara a la altura de los pequeños y abriera sus brazos para recibirlos.

-¡Ouch!- exclama.

Los pequeños técnicamente se abalanzaron sobre su abuelo, al tenerlo tan cerca.

Había sido hace seis meses desde la última vez que vieron a su abuelito, en sus vacaciones a Corea. Hubieran sido más, a no ser por el pequeño hijo mayor del matrimonio Jung, que entraba al jardín de niños ese año y su escuela obviamente quedaba en otro país. 

Es obvio que los niños se emocionen al tenerlo de nuevo, sí es el típico abuelo consentidor, protector y cariñoso.

-Ten cuidado con tu abuelito, Yeri.

-Cada día estás más grande campeón.

-Mami dice que estoy creciendo muy rápido,- dice con una sonrisita amplia, lleno de orgullo.- que si sigo así, voy a poder cuidar de Emma yo solo, de Emily aun no porque va estar muy pequeña.

-Sé que cuidaras bien tus hermanas, Yeri.- siente como algo jala de su camisa.

-Mi princesa hermosa.- besa su frente.

-Lito…

-¿Cómo se ha portado la princesa de la casa?- le besa la pancita, la niña ríe.

-Emma se ha portado bien abuelito.

-¿Así que te has portado bien?- la menor asiente.- entonces, mira lo que tengo para ti.- saca un pequeño dulce de su short.

-¡Duce!

-Sí, mi vida, un dulce.

-Y tú campeón espero que hayas aprendido a comerte las verduras.

-Toda,- asiente el niño.- aunque saben feas, mami ya no espera a que me las coma todas.

-Entonces, esto es para ti.- le entrega una cajita.

-¿Qué es, abuelito?

-Ábrelo.

Mientras la menor disfruta de su paleta de caramelo, el pequeño hombrecito busca abrir la cajita blanca, dificultándosele un poquito, pero lográndolo al final.

-¡Chocolate!

-¡Shh!,- silencia el empresario.- recuerda que Emma no puede comerlo por su alergia, procura comértelo cuando no te vea.- el niño asiente.

-Lo hare abuelito, gracias.

-De nada campeón, ahora vayan a saludar al resto de la familia.

-¡Sí!,- dice emocionado el mayor.- ven Emma,- la toma de la mano.- vamos a saludar a tía Krystal, tía Yuri, a tía Tae y a tía Sulli.

-¡Bebe!

-Sí, Emma, vamos a ver a Yuli y a jugar con Leo, Wendy y Jeon Han.

-Jugal Leo.

 -Abuelita Boa está también.- dice mirando a toda la gente.- ¡Abuelito Sung Mi!, ¡Tío Joon!

El pequeño niño estaba por salir corriendo al encuentro de sus abuelitos, sin embargo, recordó que sostenía a su pequeña hermanita.

-Venga Emma, corre, vamos a saludar.

La niña menor solo asiento y ambos niños, tomados de la mano corrieron al encuentro del resto de su familia y amigos de sus mamás.

-Nuestro hijo está creciendo muy rápido.

-Lo sabemos.- dice al unísono las dos mujeres.

-Hola papá.

-Hola Yunho.

-Hola hija, hola Tiffany, ¿Qué tal el embarazó?

Sus ojos oscuros se posan en la notable panza de ocho meses de la modelo.

-¿Todo bien con Emily?

-Todo más que perfectamente bien padre, dentro de poco tendremos a la nueva integrante de la familia.

-Yeri está muy emocionado, ¿verdad?

-Demasiado, es un gran hermano mayor.- dice con honestidad la mujer.

-No puedo creer lo rápido que aumento mi familia.- las mujeres sonríen.- Tres nueras, próximamente cinco nietos, mi esposa y mis hijas, ¿Qué más puedo pedir?

-Tal vez otro nieto.- dice Taeyeon con una gigantesca sonrisa y acercándose con Yuri.

-Yul, ¿Estás…?

-Dos meses y medio.

-¡No puede ser!- grita la castaña emocionada.- ¡Seré tía de nuevo!

-Felicidades hermana.

-¿Quién será tía de nuevo?- pregunta la recién convertida en madre.

-Tú.- dice al mismo tiempo las hermanas mayores.

-Pero si eso ya lo sé, Tiffany está a casi nada de dar a luz. 

-Estoy embarazada Krys.- la boca de la menor se abre ligeramente. No sé esperaba aquella noticia.

-Oh…- voltea a mirar a su mujer, que viene tras de sí.- Sul, tenemos que apurarnos con el próximo bebe, no están ganando

La risa les gana a todos, incluyendo a Sulli.

-¿Es que acaso esto es una competencia o peor, una apuesta?

-Si fuera una apuesta, ya hubiera perdido Krystal.- comenta divertida la roquera.

-Lo bueno que no lo es, no quiero recordarles quien gano la apuesta de hace cinco año.

-Yah, pero esa fue con Yoon ah.

-Yoon ah…- volteo a mirar a la chica que platica con Soo y Hyoyeon, la próxima pareja en casarse.- ¡Rayos!, Yoon ah tiene dos hijos.

-Perdiste hermanita.

-No, perdió Soo, ella a penas se animó a casarse, incluso Sunny le gano.

-¡Cierto!, ¿Sunny con quien se casó?

-Con Chorong, la chica que tenía a Yuri comiendo de su mano.

-Vaya, sí que el amor es raro

-Aun así, yo gane la apuesta de hace cinco años.

-Yoon ah y yo perdimos cincuenta y ochenta dólares.- voltea a ver a la pareja implicada.- ¿Por qué se casaron en un mes?

-Porque ya no aguantaba.

-Ansiaba ser su esposa.

-Y ahora lo son.

-Y no sabes que feliz somos.

Aun cuando el odio este decidido a separar un amor tan puro, jamás lo lograra, el amor siempre las volverá a unir.

Fin 

Mis queridos lectores, esto ha sido todo, espero que hayan disfrutado de la historia tanto como yo, sé que los hice sufrir mucho con el Jeti, pero como se pudieron dar cuenta, el amor triunfo muahahahaha

No podía destruirles más su corazón así que me apiade de ustedes, na, no es cierto, la historia siempre fue por el camino del bien.

Nuevamente, vuelvo a reiterar, posiblemente terminando la historia del guerrillero fantasma que es un Yulsic y Taeny, todas las historia que he publicado aquí sean pasadas a mi wattpad, donde me pueden encontrar como DMJIMON.

Espero que en un futuro para los amantes del Jeti, nos volvamos a leer, pero por ahora, lo dudo. Fue un gusto crear una historia con parejas que realmente nunca antes había contemplado, pero la verdad, me ha encantado el resultado.

No es un adiós, pero si un hasta la próxima historia Jeti.