Diciembre 2015

El invierno siempre ha producido este sentimiento de melancolía en mi. Supongo que es por los días grises, la lluvia y el frío. También puede deberse a que se acercan las fiestas.

Navidad.

No tengo ningún recuerdo memorable de estas fechas. Siempre ha sido una un día como cualquier otro. Cuando era pequeña, Me dedicaba a trabajar. En general, la mayoría prefiere descansar y pasar el tiempo con sus familias, así que es una fecha bien pagada para trabajar turnos extras.

Así es como pasaba mis navidades antes de venir acá. Incluso en Corea, he intentado mantenerme ocupada durante estas fechas, simplemente para no sentir lo sola que a veces puedo llegar a estar.

Hasta ahora.

"¿Que me darás para navidad?"

"¿Debo regalarte algo?"

"Por supuesto. Es tu deber"

"¿Acaso soy Santa Claus?"

"Pffff... por supuesto que no. Eres un reno. En realidad una llama. Pero ese no es el punto. ¿Qué me vas a regalar?"

"¿Entonces, estoy obligada a regalarte algo solo porque es navidad?"

"Obvio."

"Tu lógica es muy... ¿Qué tal mis mejores deseos?"

"Quiero un disco."

"¿No te basta con mi amistad y mejores deseos verdad?"

"En realidad quiero que me lleves a una parte."

"¿Ahora soy tu chofer?"

"Vamos la próxima semana. ¿Si? ¿Por favor?"

"Es extraño como das órdenes con un 'por favor' "

"Sería perfecto la próxima semana"

"Me estás ignorando"

"Tengo libre un par de días"

"No puedo"

"El viernes estaría bien"

"Tengo planes"

"Podríamos decirle a las chicas si quieren ir"

"Krystal, deja de ignorarme"

"Les escribiré en seguida para saber si pueden ir"

"Te dije que no puedo..."

 

Me quedo mirando la reacción de Krystal. Ella sigue ignorándome, mientras escribe en su celular.

 

"No me crees verdad"

"Nope"

"¿Sabes que no tengo planes?"

"Por supuesto. Nunca los tienes"

"¿Cuando llegaste a conocerme tanto?"

"A veces puedes ser muy simple, Liu"

 

¿De verdad Krystal piensa que soy simple? Creo que es la primera vez que alguien me dice eso. ¿Y desde cuando me conoce tan bien? Me quedo mirando nuevamente a Krystal, y me pongo a pensar en cuanto he cambiado este año. Aún me cuesta mucho confiar en los demás, O pedir ayuda. Aún quiero estar sola la mayoría del tiempo. Pero cada vez que Krystal o las otras chicas del grupo me invitan a alguna junta, no me molesta salir un rato.

Durante sus promociones fui a verlas casi todos los días. Sé que han hecho un gran esfuerzo. Incluso Luna y Krystal se han enfermado bastante por la falta de sueño y poco descanso. No puedo hacer mucho, además de llevarles comida y ofrecerles mi casa para que descansen.

Jamás creí que una persona podría cambiar mi mundo y la forma en que percibo las cosas. Krystal Jung es una persona muy especial. ¿Me pregunto si se dará cuenta del impacto que tiene en quienes la rodean?

De prontos siento un dolor punzante en mi nariz.

"Ouch"

"Te estoy hablando hace un rato. ¿Porque me ignoras?"

"Lo siento. Solo pensaba"

"¿En qué?"

"No quieres saberlo"

"Si no quisiera no preguntaría, tonta... ¿Pesadillas?"

"Nope"

"¿No quieres ir?"

"Krystal. No es nada. Sabes que siempre estoy dispuesta a escapar un poco de la rutina. ¿Que dijeron las chicas?"

"Ya están haciendo sus maletas"

"¿Estás segura de que no deberían descansar estos días?"

"Pronto será navidad. Por suerte no hay nada agendado, así que podremos tomar un descanso."

"Muy bien. Si es así, entonces estaré encantada de ser el chofer designado"

"¿Estás segura de que está bien? Si no quieres ir, no hay problema."

"¿Ahora no quieres que vaya?"

"No es eso, es solo que no quiero que..."

"... si no quieres no voy. Me quedaré sola, triste y abandonada aquí."

"No dije eso. Solo pensé que..."

"... Ahora ya no quieres que vaya, verdad. Está bien, lleva a tu novio entonces. De seguro el maneja mejor."

"¡Por Dios, Amber! ¿Por qué siempre tienes que decir eso? De verdad quieres que lo lleve, porque sería muy fácil solo..."

"Es muy fácil hacerte enojar, ¿sabías?"

"¿Solo me estás molestando? No puede creer que... ¿Solo querías hacerme enojar?."

"Por supuesto. Es como un deporte. Debería ser un deporte"

"A veces eres una... ya me pusiste de mal humor. Tendrás que invitarme a comer para que se me pase."

"Lo iba a hacer de todas maneras. Como siempre. Vamos princesa. Yo también muero de hambre."

Realmente no me importa a donde quiera ir esta chica. O si siempre debo llevarla a comer. Nuestra relación es así. Yo la hago enfadar, ella se aprovecha de mí y mi dinero. Al final del día, cuando podemos sentarnos a hablar de cómo ha ido todo, me alegra saber que ella puede confiar en mí. A veces me llama para contarme cosas que le han pasado, a veces yo lo hago. La amistad es algo curioso.

"¿Que harás para navidad?"

"No lo sé. Supongo que lo mismo de siempre. Tal vez salga a algún club o algo"

"¿No tienes nada programado?"

"Nada. Mi agenda ha estado bastante vacía estos días"

Si hubiera puesto más atención supongo que habría notado como la mirada de Krystal se fijó en mí. Habria notado que había algo diferente en su mirada, abría notado que quería decirme algo, pero no pudo encontrar las palabras.
Después de unos minutos sentí que me miraba fijamente.

"¿Qué?"

"¿Quieres pasar las fiestas conmigo? ¿Digo, Con mi familia?"

"¿Por qué?"

"Normalmente una persona respondería con un 'claro, me encantaría' o un ' sería genial, gracias' "

"Creo haber dejado muy claro que no soy normal. Y pregunto de nuevo ¿Por qué?"

"Solo porque si. No tienes planes y mi familia te aprecia. ¿Por qué no?"

"Porque es precisamente eso. Algo familiar. No me gustaría entrometerme."

"¿De qué hablas? Por supuesto que no. La verdad es que iremos a Japón y pensé que te gustaría pasar las fiestas haciendo algo diferente"

"Supongo que podría ser. Pero primero debes preguntarle a tus padres. No me gustaría ser una desagradable sorpresa"

"Ya lo hice y les encantó la idea"

"¿Ya les preguntaste?"

"Si"

"¿Cuando?"

"Hace unos días. Estábamos hablando de ti"

"¿Hablas con tus padres de mi?"

"A veces. Mamá me preguntó cómo estabas, ya que no has ido a casa hace un tiempo. Y me preguntó qué harías para las fiestas"

"No sé qué pensar sobre el hecho de que hables con tu familia de mi."

"Solo hablamos ok. Nada malo. Solo les cuento a mis padres lo mal que me tratas"

"Oh, entiendo. Había olvidado que soy un horrible ogro maltrata princesas. Jamás, las llevo a comer y las trato tan mal que deben golpearme."

"Exactamente"

"Eres muy extraña Jung Soojung"

"¿Entonces? ¿Vendrás?"

"Lo pensaré."

"¿Por qué? Ya dijiste que no tienes planes"

"Porque... Es solo que..."

"No te gusta la navidad?"

"¿Por qué no habría de gustarme? No soy el Grinch, sabes. Es solo que nunca he pasado la navidad con amigos o familia. Siempre he trabajado"

"Entonces que mejor que tú primera vez sea en Japón"

"Eso sonó completamente mal"

"¿Tú crees?"

Krystal me da esa sonrisa llena de picardía y saca comida de mi plato, Actuando como si no hubiera dicho nada. Yo intento comer de su plato, por supuesto fallando olímpicamente. Krystal, ahora comparte conmigo muchas cosas, excepto su comida y su postre. Sobre todo sus postres.

Semanas después.

Finalmente llegó el día. Al final decidí pasar navidad y Año Nuevo con los Jung. La verdad había decidido no ir. Pero hace unos días me llamó la madre de Krys, para invitarme personalmente. Después de varios argumentos, los cuales no pude discutir, terminé accediendo.

Así, aquí estoy. Junto a Krystal y Jessica intentando esquiar. Aunque creo que lo correcto sería decir que intento mantenerme en pie.
No creo haber mencionado alguna vez que soy pésima en esta clase de deportes, verdad. Me gusta la adrenalina, sobre todo la velocidad. La patineta es una cosa, pero la nieve... definitivamente debería detenerme antes de que las chicas sufran un ataque o algo de tanto reírse de mí.

La hermanas Jung. Son realmente interesantes. Ambas son muy diferentes en muchos sentidos; música, películas, comida, ropa... sin embargo, cuando están juntas son realmente felices. El semblante de Krystal se ilumina, y pasa de ser esa distante y siempre perfeccionista chica, a esta dulce, infantil y adorable niña.

Sus padres las consienten mucho. Es cosa de que las chicas miren a sus padres y estos ceden de inmediatos a sus pequeños y malcriados caprichos.
Observándolos estos días me he dado cuenta de que son felices, de que intentan llevar una vida lo más simple y tranquila posible. Se alejan de todo el ruido y de las multitudes. De hecho, su casa, está ubicada en un lugar bastante retirado y exclusivo. Supongo que si tienes dinero puedes vivir donde Quieras.

Estoy sentada frente a la gran ventana que está en la habitación de Krystal. Viendo cómo Jessica y su padre intentan hacer un muñeco de nieve. Aunque creo que no se han puesto de acuerdo quien hace que, porque el cuerpo es mucho más pequeño que la cabeza, haciendo que se vea completamente desproporcionado.

Debo estar muy metida en mis pensamientos porque no siento a Krystal entrar a la habitación.
Solo siento cuando se lanza encima de mí y me abraza por la espalda. Mi reacción inmediata es que mi cuerpo se tensa. A pesar de que desde llegue a Corea, esto del contacto físico es bastante común, aún no logro acostumbrarme a que me abracen o me toquen.

"Krystal. ¿Qué hablamos sobre los abrazos?"

"No lo sé. No lo recuerdo. ¿Qué hablamos?"

"¿Te gusta ser una molestia verdad?"

"Me encanta... Estabas muy metida en tus pensamientos. ¿En que pensabas?"

"Siempre preguntas eso"

"Es la única forma en que puedo saber qué pasa por esa cabezota."

"Solo pensaba..."

Krystal me suelta, se pone frente a mí y me da esa mirada con la que me dice que debo darle una respuesta concreta. A veces esta chica puede ser muy persuasiva.

"...Solo pensaba en tu papá"

"¿Uh?"

"Es decir en tu hermana"

"¿Qué?"

"Quiero decir en tu familia. Pensaba en tu familia. Y en la vida que han construido. Se ven muy unidos."

"Mi hermana y yo hemos estado en la industria del espectáculo desde pequeñas. Muchas veces pasamos las festividades o celebraciones, como cumpleaños y esas cosas, separados. Por eso, cuando tenemos tiempo intentamos pasarlo todos juntos."

"Tú y tu hermana han creado una linda relación. Ella te molesta y tú la dejas. Es perfecta."

"Tú también me molestas."

"Si. Pero después te vengas el doble Jung"

"Con alguien debo desquitarme"

Esta mocosa. Lo dice como si no fuera nada. Creo que está demasiado cómoda conmigo ahora. Ya no hay respeto por los mayores ¬_¬

"Krystal, ¿estás segura de que está bien que esté aquí?"

"No me molesta que estés en mi habitación"

"Hablo de la casa. ¿Estás segura de que no soy una molestia? Porque si quieren yo puedo tomar un vuelo a Corea y..."

"... ¿Por qué sigues con eso? Si no hubiera querido que estés aquí no te hubiera invitado en primer lugar. Así que deja de actuar como una pobre víctima maltratada y ayúdame a poner la mesa"

"Ok. Ok. Entiendo. ¿Ahora puedes soltar mi nariz? Tú y tu las chicas tienen una obsesión con las narices"

Fue una velada muy agradable. Comimos y bebimos bastante. Sobre todo bebimos bastante. No tengo muy buena tolerancia al alcohol y creo que las hermanas Jung tampoco. Porque las últimas dos horas nos hemos estado riendo de absolutamente todo.

Estamos disfrutando lo que queda de noche, ya muy en la madrugada. Jessica se rindió ante los brazos de Morfeo y ronca plácidamente en el sillón más grande, mientras Krystal's yo aún conversamos tiradas en la cómoda y peluda alfombra blanca que cubre casi toda la sala de estar.

"Muy bien Jung Soojung. Es mi turno y quiero que seas muy sincera. ¿Cuantos novios has tenido?"

"Primero dímelo tú"

"Yo pregunte primero. Vamos, se honesta. Sabes que no le diré a nadie."

"No puedo decirte"

"¿No confías en mí?"

"Me da vergüenza"

"¡Oh! ¡Vamos Soojung! No te voy a molestar ni nada. Vamos, dímelo. Ok. Déjame adivinar. ¿Dos?"

Krystal mueve su cabeza de un lado a otro negando Muy lentamente

"¿Tres?"

Nuevamente vuelve a mover su cabeza, está vez un poco más enérgicamente. Visiblemente avergonzada

"¡Oh por Dios Jung! ¿Cuatro? ¡¿Has tenido cuatro novios?! No lo puedo creer... eres una..."

"¡Hey! Dijiste que no dirías nada."

"Tienes razón. Lo siento, lo siento. Es solo que me sorprendiste. Podía apostar que habías salido con un par de chicos, pero cuatro. Wow. ¡CUATRO!"

"Ya déjame. No te contaré nunca más nada"

"Solo estoy bromeando. Espera, ¿a dónde vas? Vamos Soojung, no te enfades. Solo jugaba, si. Vuelve acá. Lo siento."

Antes de que subiera las escaleras logre alcanzarla y tomarla de la mano para evitar que se fuera, Obviamente aún algo avergonzada por mi descubrimiento ella me pregunta lo mismo.

"¿Cuantos novios has tenido tu?"

"Ninguno"

"Mentira"

"Lo juro"

"¿Jamás? ¿Ni uno solo?"

"Nope."

"¿Por qué?"

"Esa es una pregunta difícil. No lo sé. Supongo que no estoy muy interesada en las relaciones amorosas. Recién estoy aprendiendo cómo tener amigos. No me imagino en algo más serio aún."

"¿Has besado a alguien alguna vez?"

"¿Las mascotas cuentan?"

"¡Amber!"

"Esto no es justo. Solo tú estás haciendo las preguntas."

"Está la es la última. Lo prometo"

"Si lo he hecho. Y debo decir jamás he tenido alguna queja"

"Oh por Dios. No puedo cree que hayas dicho eso."

"Yo solo digo. Mi turno ahora"

"¿Te has enamorado alguna vez?"

"Nunca. Las relaciones que tuve antes no duraron mucho. En algún momento creí que estaba enamorada pero, creo que solo era obsesión. Cuando terminamos, no me importó mucho."

"Tu corazón es de hielo"

Solo intentaba animarla un poco pero a cambio recibí un golpe. Esta chica es muy agresiva.

"¿Que hay de Jongin?"

"Otra vez con lo mismo"

"Solo pregunto"

"Te pareces a mi hermana. Hemos salidos varías veces, pero solo como amigos. Es agradable y lo paso bien con el. Pero no lo veo de una manera romántica. Creo que tiene otros intereses."

No puedo evitar levantar una ceja al escuchar eso. Por alguna razón, mi corazón dio un pequeño brinco al oír que ella no está interesada en el.

"¿Qué hay de él? ¿Crees que tu le gustes?"

"No lo sé. Y no me importa. Por ahora estoy muy ocupada en mis cosas como para pensar en eso. Además, prefiero pasar el tiempo con mis amigos, contigo."

No pude evitar sonreír estúpidamente cuando escuche eso, levante la mirada para molestar a Krystal pero su mirada era muy seria.
Mi sonrisa se borro enseguida y me puse muy nerviosa.

Y de pronto tuve conciencia de que estábamos sentadas en las escaleras y de alguna manera estaba abrazando a Krystal por la cintura. No me había dado cuanta lo cómodas que estábamos hasta que ella se acomodó un poco quedando justo frente a mi, con solo unos centímetros de distancia.

Como si fuera poco, Percibí como Krystal comenzó a acortar esa pequeña distancia aún más. Pude sentir su cálida respiración tocando mi cara. Su mirada era intensa, tanto así que intenté bajar la cabeza y recuperar un poco la cordura. La falta de espacio personal y el alcohol, estaban haciendo estragos en mi mente.

Krystal me obligó a mirarla levantado mi mentón y como si estuviera bajo el hechizo de algo que no puedo comprender me petrifiqué. Luego con la voz más dulce y suave que parecía el susurro de un ángel ella me preguntó...

"¿Has besado a una chica alguna vez?"