El embarazo es la etapa por la que pasa una mujer, dura alrededor de treinta y seis a cuarenta semanas. Algunas dicen que son meses maravillosos y otras personas como en el caso de Jessica no piensan lo mismo. Para Jessica el embarazo, aunque deseado, era horrible, cuando decidió estar embarazada lo hizo pensando en Stephanie, no se arrepentía, pero a veces dudaba si lo pensó con el detenimiento suficiente.

El comienzo fue lo menos agradable ya que sus pechos estaban más sensibles de lo normal, tenía mucho sueño y cansancio, sin contar las náuseas matutinas, mareos y vómitos. Aparte de sus cambios de humor, por suerte Nichkhun era un hombre muy paciente y soporto todos los desplantes por la gran felicidad que sentía. Pero la que se llevó la peor parte fue Stephanie, ya que los cambios de humor eran peores con la pelinegra y esta los aguantaba y soportaba sin problema.

Para la primera ecografía Jessica pidió que Stephanie los acompañara, esto era por ella, no la dejaría fuera, el tailandes acepto encantado. Cada uno sujetaban una mano de Jessica mientras a esta le hacían el eco, después que la doctora les enseño a su pequeño guisante salió de la habitación dejándolos solos, Nichkhun se acercó a la pantalla emocionado, Jessica solo veía a su mejor amiga esperando una reacción, pero la pelinegra estaba absorta en la pantalla mientras sus lágrimas caían por sus mejillas.

 Las primeras semanas los calambres y molestias en el bajo vientre comienzaron por el crecimiento. También los antojos, Stephanie se hizo cargo de esto, ya que Nichkhun tenía que viajar constantemente por tu trabajo y este le pidió a ella estar para su esposa en su ausencia.

-“Steph”- llamaba Jessica desde el sofá

-“Dime”- dijo sin apartar la vista de la pantalla de la computadora

-“Quiero helado de chocolate con menta, fresas y bananas, también algo de miel de maple”-

La pelinegra dejo lo que estaba haciendo y fue en busca de las cosas en su cocina

-“También jugo de tomate”- no recibió respuesta –“¿Puedes agregarle aceitunas?”-

Unos minutos después Stephanie regresaba con todo y una gran sonrisa que hizo volar mariposas en todo su estomago

-“Gracias, Steph”-

-"Estoy gorda”- lloro mientras se veía en el espejo del probador

-“No es cierto, Jessi”-

-“No le mientas, unnie”-

-“¡KRYS!”-

Jessica salió del probador haciendo puchero –“Me veo gorda”- la pelinegra nego y la más alta asintió –“Me aprieta los pechos”-

-“Están enormes”-

-“Es cierto”- dijo con una tonta sonrisa Stephanie mientras se perdía en sus pensamientos

Se escuchó el grito de delfín por parte Jessica antes de regresar al probador

-“Creo que estas en problemas, unnie”- le dijo Krystal

-“¿Por qué?”-

-“Acabas de admitir que esta gorda”-

Krystal estaba sentada en el sofá mientras veía a su hermana comer un