¿Taeyeon o Taiyan?

- Discúlpeme, no fue mi intención… haberme quedado mirándola- Esto último apenas fue audible.

- Jajaja no te disculpes, entré de sorpresa. Además estabas jugando con mis tesoros. Podrías hacerme un gran favor?

- Claro que sí… - Mi corazón sigue alocado por solo tenerla a unos centímetros de distancia, nunca me he sentido así, esta sensación es demasiado extraña.

- No me hables de usted, después de todo creo que tenemos la misma edad.- Wow esa sonrisa es tan grandiosa como un amanecer, y su voz es melódica.

- Está bien, Taeyeon.

- Así que Tiffany, tú eres la persona ideal para cuidar a mis gatitos?

- Eso depende de usted, disculpa quise decir de ti. Estoy acostumbrada a hablar así en el trabajo.

- Ya has trabajado antes no es así?- Taeyeon se había recostado en uno de los cojines esparcidos en el cuarto y acariciaba a su gatito como si fuera lo más preciado en su vida.- Por favor siéntate, estos almohadones son re confortables.

- Gracias.

Hubiera deseado ocupar el cojín más alejado de ella, me pone demasiado intranquila sentir el aroma de flores que desprende su fino cabello, pero terminé por estar aún más cerca de ella. Sus ojos son tan bellos y misteriosos al mismo tiempo. Apuesto a que pueden leer mi mente con solo desearlo.

- Me gustaría que me contaras sobre tus anteriores empleos, claro si no te molesta.

- Eran trabajos después de la escuela, como arreglar el jardín o cuidar mascotas. Más que todo lo he hecho para aprender a valerme por mí misma.

- Esa es una muy buena meta en la vida. Pero también te dabas tiempo para salir a distraerte con tus amigos.

- Bueno… no exactamente. El tiempo no me alcanzaba - Prefiero mentir en eso que decirle que no tenía amigos ni amigas.

- Siempre deberías reservarte un tiempo de diversión, sino estarás muy presionada.

- Solía pasear por la playa en las mañanas y en el atardecer.

- Y por qué ya no lo haces?

- Ya no vivo tan cerca de la playa, ni de mi casa. Soy de la ciudad de jeonju, Corea vine acá a Roma a estudiar en la universidad.

- Que suerte tenías las playas de jeonju son espléndidas. Aunque las de aquí también tienen lo suyo.

- Taeyeon, te puedo hacer una pregunta? –le dio una sonrisa para que prosiga

- Claro.- Debería estar prohibido que exista una sonrisa tan perfecta, sus dientes resplandecerían en la noche más oscura.

- La última pregunta de la entrevista…

- Esa pregunta fue la única que me importaba a decir verdad, yo misma la puse. Tu respuesta y reacción al verme me demostraron que no estuve equivocada al elegirte.

- No sé a qué te refieres.- Ahora sí que estoy más confundida que antes, en sus ojos veo una gran felicidad apunto de emerger.

- Todavía no me reconoces?

- Debería?

- Jajaja de verdad que no escuchas música romántica. Mi nombre es Taeyeon, pero soy más conocida como Taiyan.

Este día es el de las sorpresas. Primero me dan el trabajo en cuestión de horas y ahora descubro que trabajaré para una famosa cantante romántica.

- Todavía no entiendo

- Casi todas las que se presentaron en la entrevista, coincidían en gustos musicales de pop o romance. Y eso es muy peligroso para mí. Si para ti ha sido una gran sorpresa, imagínate lo que hubiera sido para una de ellas verme aquí.

En eso tiene razón, pero yo me sorprendí de ver