El Instinto

DON'T LEAVE...ME

CAPÍTULO 6 (CORREGIDO)

 

—¿Yeobseo?

—¡Ah! Hasta que me respondes, ¿en dónde te metiste?— reclamó.

—Ya lo sabes Qri, estaba en el centro tocando algo de música.

 

Desde que despertaron de su largo sueño, Soyeon tenía mucho tiempo libre después de sus entrenamientos, fué cuando decidió aprender a tocar el violín pues le recordaba a su madre quien cada noche practicaba en el salón del palacio. Sus melodías las tenía bien grabadas.

 

–Entiendo, pero no apagues el móvil,  me preocupas. Estaba a punto de rastrearte.

 

La otra sonreía al otro lado de la línea,  la preocupación de su hermana era infundada pues sabía que ella podía defenderse muy bien. Sin embargo para la mayor nunca había dejado de ser una niña.

Soltó una carcajada.

 

–¡Ya! De qué te ríes, sabes muy bien que no puedes exponerte así...

 

Su risa fue desvaneciéndose y dijo— Qri,  no es para tanto, estoy bien.

Un silencio se escuchó por parte de la pelirroja, el cuál se disipó con un suspiro profundo.

—Está bien...entonces, compra algo para cenar. Estoy hambrienta.

 

—Si. Yo llevo la cena.

 

—¡Anyong!— se despidió la mayor con su tono dulce.

 

Soyeon colgó el smartphone y siguió caminando por las calles del centro que por la noche se abarrotaban de gente haciendo compras o pasando un buen momento en los centros nocturnos.

 

Cada tarde cuando se aburría salía a recorrer la ciudad, se instalaba en la explanada de una plaza aledaña, abría el estuche de su instrumento y lo colocaba a sus pies mientras deleitaba a los caminantes con alguna de las '4 estaciones' de Vivaldi, adaptaciones que hacía de algunas canciones actuales, a veces sólo recordaba aquellas que su madre solía interpretar y las imitaba.

 

La menor recorría su camino en busca de algo para comer, hasta que encontró el lugar perfecto: una hamburguesa con queso, papas fritas, helado...relajarían a su hermana.

 

Llegó al final de la manzana para cruzar a la otra esquina en dónde estaba el restaurante. Pero, antes de que lo hiciera sus sentidos agudos percibieron un alboroto dos cuadras a su derecha haciendo que se detuviera. Se concentró y pudo escuchar a una mujer.

 

—"¡No lo hagas!"

 

Algo estaba mal, lo sabía bien, así que puso más atención. Entre la bulla escuchó algo que la hizo quebrantar una de sus reglas. Algo ajeno a otras personas y que seguramente era el detonante de todo aquello.

 

—"No quiero estar más así..."

 

Soyeon llevó sus manos a su boca dejando que el estuche cayera de sus manos ante el asombro de haber oído tal premisa. Contra su voluntad, la promesa que había hecho de no mostrarse al mundo, no podía dejar que tal tragedia sucediera, mucho menos si ella podía hacer algo para impedirlo.

Rápidamente colgó en sus dos hombros el estuche para luego correr al lugar. Al estar ahí a unos metros pudo notar que todos miraban arriba del edificio,  efectivamente era lo que ella pensaba, aquella persona estaba a punto quitarse la vida. Las sirenas de las patrullas aún sonaban distantes.

 

Se dirigió hacia la parte trasera del edificio para poder llegar al último piso, al estar ahí tenía dos opciones: volar hasta arriba sin pasar desapercibida o llegar por las escaleras corriendo, aunque ninguna de las dos alternativas la harían pasar por alguien normal.

 

—¡Nooooo!— se oyó un grito femenino.

 

—¡Ah! ¡Demonios!— sacó una gorra negra junto con un cubrebocas de su bolsa mientras ascendía y los colocaba, así nadie reconocería su identidad.

 

Ya en la parte alta pudo notar que tal persona se desvanecía ya inconsciente hacia adelante, Soyeon aceleró el vuelo lo más que pudo y alcanzó a una chica antes de que la caída se acelerara, la tomó del tobillo derecho y rápidamente la jaló hacia arriba y la atrapó en un abrazo ágil para evitar que cayera en seco contra el concreto ante la fuerza que aplicó, haciéndose caer para evitar ser descubierta. 

 

Las personas abajo gritaban aterrorizadas, pero su sorpresa aumentó al notar una ausencia de una caída.

 

—Ahh...¿Y ahora que hago?— se preguntó mientras miraba a los lados aún con la chica en brazos.

 

No tardó en percatarse que tal chica estaba inconsciente y sangrando de sus muñecas.

 

—¡¡¡Mierda!!! Voy a parecer asesina serial—

Al final decidió recostar con cuidado a la víctima en el suelo, al levantarse y mirarla, tenía una expresión que reflejaba un pesar muy profundo, algo dolía muy profundo en su corazón y no era capaz de soportarlo.

Su cabello le cubría la cara, en su rostro, sus ojos, habían aún lágrimas, Soyeon se hincó sobre sus rodillas hasta estar a la altura y apartó un mechón, era una chica de tez blanca, joven aún, definitivamente no alcanzaba a comprender qué había sido lo que la impulsó a cometer tal acción. 

 

Ya escuchaba a la policía junto con la ambulancia a dos calles de dónde ella se encontraba. Pero no podía dejarla sangrar así; tomó su playera arrancando dos tiras de tela, las amarró a modo de torniquete en el antebrazo de la persona. De pronto se escuchó que trataban de derribar la puerta de la azotea, una chica desesperada, tal vez conocía a esa chica que salvó.

 

—¡Boram! ¡Boram!— el llanto de aquella otra chica era desesperante. Se escucharon más golpes contra la puerta de metal.

Soyeon supuso que tal vez ese era su nombre. Se dirigió rápido a la puerta, la abrió provocando que la otra chica casi cayera,  rápidamente se escondió tras unos conductos para no ser vista. Pero no se quedo ahí, dio un salto hasta el otro edificio y se esfumó sin causar algún indicio de que ella había tenido algo que ver en ese asunto.

 

Entonces miró lo que pasaba desde allí.

 

—¡Responde! Por favor— decía una chica con cabello corto tomando entre sus manos el rostro de la otra.

 

Los policías arribaron al lugar, subían lo más rápido posible las escaleras y tras de ellos venían los paramédicos de la ambulancia.

 

—¡Por aquí,  la puerta está abierta!— dijo uno de ellos.

 

—¡Señorita! ¿Se encuentra bien?— corrió hasta la pelicorta en llanto.

 

— Si, si, ella es la que no está bien.

 

—¡Que los paramédicos suban hasta la el techo del último piso!— el policia dijo por su radio.

 

—Tranquila señorita, todo estará bien. La llevaremos al hospital.

 

—Muchas gracias— dijo aún asustada.

 

—¿Cómo es que la señorita está aquí? Las personas vieron que se dejaba caer.— preguntó aquel policía mientras hacia notas en un pequeño cuaderno.

 

—¡¿Wae?!— casi gritó la chica.— N...No sé...ella estaba aquí cuando logré abrir.

 

El sujeto se puso de cuclillas y observó los torniquetes bien hechos en los brazos.

 

—¿Usted hizo esto?—Señaló los pedazos de tela negra.

 

—No señor, ya los tenía cuando llegué...

Cuando estaba a punto de formular otra pregunta más los camilleros interfirieron.

 

—¿Conoce a la señorita?— cuestionó un paramédico.

 

—Si...es mi amiga.

 

—Muy bien, la llevaremos al hospital, ¿podría llamar a alguno de sus familiares?  

 

—Si...si...—contestó en una especie de shock.

 

—Síganos por favor, usted es la única conocida que puede acompañarnos por ahora. 

 

Cuando terminaron de asegurar a la joven sin conciencia, todos se dirigieron escaleras abajo...Pero tanto el policía como la amiga de la herida no se dejaban de preguntar cómo es que no cayó. Los dos buscaban con la mirada algún indicio,  lo único que tenían era que no había llegado ahí sola, alguien o algo tuvo que interferir.

 

Finalmente todo había pasado, Soyeon estaba más tranquila escondida en el edificio de atrás.

 

—¡Aaah! Ya pasó...— dijo entre un suspiro mientras se quitaba la gorra y el cubrebocas, apoyando su cabeza en un tubo de los conductos.—A veces los humanos son tan complicados...

Se levantó de dónde estaba sentada, revisó su ropa para buscar alguna gota roja y no encontró nada; se dirigió al borde del edificio, luego saltó hacia abajo asegurando antes que nadie pasaba por ahí. 

Entonces actuó normal, casi olvidaba el detalle de su playera y cerró el cierre de su chaqueta rápidamente, tomó de nuevo el violín en una de sus manos, dirigiéndose al restaurante.

 

Al llegar se dirigió directamente a la caja.

 

—Buenas noches.

 

—Bienvenida señorita, que desea ordenar.

 

—Dos hamburguesas con queso y papas fritas para llevar— dijo Soyeon un poco distraída.

 

En ese instante miró a una pareja mayor entrar mientras platicaban.

 

—Todas las personas aseguran haber visto que la chica se lanzó.— dijo la señora.

 

—¿Señorita?

Interrumpió la cajera.

 

—Ah, si, perdone— se disculpó Soyeon.— ¿Cuánto es?

 

La extraterrestre pagó y salió en cuánto le entregaron su orden.

A pesar de haber salvado a esa humana, exsitía algo contradictorio, se había expuesto ante la gente. Aunque no fue mucho el tiempo bastó un instante para que tal acción provocara inquietud. Pasó todo el camino pensando en todos esos pros y contras de lo que había hecho,  pero en su naturaleza estaba el proteger a todo aquello que consideraba frágil o vulnerable, evitar las injusticias...Tal como la liebre que encontró aquella noche. 

 

 

Hola, muy buen día, espero y tu lector estés disfrutando la historia, no pretendo abandonarla pues es el primer fic que me atreví a escibir. No había actualizado porque desde el último capítulo comencé a tener algunos asuntos y luego entré a la Universidad y a vece no puedo dedicar el tiepo que requiero para escribir. Dejen sus comentarios. Muchas gracias por darte una vuelta. Pronto añadiré el siguiente capítulo de "Storm Heart".

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Comments

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Solyta #1
Chapter 9: Siii.... continua por fis
youshouldtellme
#2
Chapter 4: El poder de Taeyang es algo de lo que tener miedo y este capitulo lo ha dejado claro, pues está cambiando a Soyeon de una manera que nadie parece esperarse.
Lo que me gusta de este fic es que cuidas los pequeños detalles. Me gusta que lo hagas, honestamente. Me gusta ver en las pequeñas cosas ese mundo de ciencia ficción que has creado.
Admirable tu trabajo y muchas gracias por compartirlo con nosotros.
youshouldtellme
#3
Chapter 3: Y llegamos al capítulo tres. En serio, esto es una pasada. Me recuerda a una de mis novelas favoritas, Sin noticias de Gurb, pero sin alienígenas que caminan por Barcelona y se caen por las alcantarillas.
Esto es realmente adictivo y genial. Muchas gracias por traer este soplo de aire fresco a Asianfanfics.
Mil gracias.
youshouldtellme
#4
Chapter 2: Me gusta mucho cómo haces la amistad entre Qri y Soyeon, cómo Qri la protege gracias a su tecnología avanzada. Me gusta mucho ese papel de científica. Me pregunto a dónde querrás llevar esta historia y me tienes intrigada. Desde luego, me engancha mucho tu contenido. Es como jugar a un videojuego, es muy potente. Hace que me sumerja totalmente.
Voy a decirte algo que suelo decirles a todos los que escriben por aquí y les preocupa que no aparezca su pareja aún: haz la historia que tienes en mente. Escribe lo que quieres y disfrútalo.
Muchas gracias por compartirlo.
youshouldtellme
#5
Chapter 1: Nueva lectora aquí.
La ciencia ficción es un género que me encanta leer pero me aterra escribir, así que te felicito por haber conseguido hacerlo tan verosimil.
Me tienes fascinada.
Muchas gracias por escribir y sobretodo disfruta de hacerlo.
hyominfan57
#6
Chapter 3: Un muy lindo cap :-):-):-)!!! ME ENCANTO :-D:-D:-D!!! ME GUSTA MUCHO ESTE FIC :-):-)!!! ESPERO LA CONTI ;-);-);-)!!!
drch1812
#7
Chapter 2: Por fin un soram, son muy escasos, me gusta continua por favor :D