cap 8

Vampira ( taeny)

 

Ese día me levanté con mucho ánimo y alegre.

Es que cuando tomas una decisión tu cuerpo descansa y tu alma sonríe.

Me di un buen baño; traté de secar mi cabello porque hoy tengo ganas de llevarlo suelto, así que traté de darle algo de forma, algo complicada realmente, pero al menos lo intenté.

El clima no ayudaba a ser y, pero me puse una falda larga y una blusa que dejaba ver mi atrevido descote que adorné con un collar con un granate rojo que contrastaba con mi cabello.

Apenas estuve lista, salí de la habitación.

Vi la mandíbula de yoona caer al mirarme.

—Dios mío taeyeon, estas bellísima.

—No exageres, estoy igual que siempre—le dije.

—Yo no puedo ir así, —se señaló a sí misma—Tengo que cambiarme de ropa, a tu lado voy a parecer una indigente. No podía creerlo.

—Por Dios yoona, si estás muy linda.

—Espérame un poco taeyeon, me voy contigo.

—Sabes que me va a llevar sunny.

—Bueno claro que lo sé, y si tú puedes tener un chofer, entonces yo también. Además, tal vez así te animes a decirme de quién estas enamorada.

—No tengo nada que decir.

—Eres mi amiga y sé que estas enamorada, no me demores más que vamos a llegar tarde.

Me senté en el sofá a esperarla; afortunadamente no demoró mucho, ella tenía clases a primera hora al igual que yo.

Salió bella como siempre, ahora llevaba un suéter vinotinto y una falda corta.

Como decía ella misma, para ser bella hay que ver estrellas. Seguramente pasaría bastante frio entre clase y clase.

Al fin bajamos y estaba sunny en la puerta esperando.

—Buenos días sunny, ¿Cómo estás?—pregunté al verla.

—Muy bien taeyeon…—me miró significativamente—Permíteme decirte que estas muy bella.

Creo que me sonrojé.

—Muchas gracias. Yoona vendrá con nosotras.

—Hola sunny—saludó mi amiga simplemente.

—Hola—respondió sunny con desgana.

Yoona se movió hacía el auto.

— ¿No deberías abrirnos la puerta?

—Claro, supongo que eso hace un chofer.

Sunny abrió la puerta, subimos al auto y luego arrancó con rumbo a la universidad.

—Me gusta esto de tener chofer, puede que le dé un descanso a mi auto por estos días—dijo yoona mientras cruzaba las piernas.

Pude ver que por el retrovisor sunny clavaba la vista en las piernas de yoona y no solo me di cuenta yo, si no que yoona también. Aunque esperé que le dijera algo o sencillamente se acomodara, permaneció en esa posición por lo que concluí que mi amiga la quería dejar ver.

Yoona era todo un caso, no podía evitar coquetear así fuera con sunny.

Al llegar a la universidad sunny estacionó el auto y me ayudó a bajar, luego lo hizo con Rachel también que, por supuesto, se tomó su tiempo.

—Espero que este contenta con su chofer—dijo sunny.

—Me parece que puede funcionar—respondió yoona tratando de ser indiferente.

—Hablaba con taeyeon y no contigo, tu opinión no me importa.

Yoona pareció indignarse por como sunny la trataba.

— ¡Eres una idiota!—dijo mi amiga y se marchó echa toda una furia.

Sunny rió satisfecha.

—sunny, no seas así con ella—le pedí.

—Se lo merece por pretenciosa—de pronto pareció preocupada—taeyeon, ¿Estas segura de lo que haces?

—No sé de qué me hablas.

—taeyeon, esa ropa y tu actitud me dicen que vienes por tiffany. Recuerda que somos peligrosos, no te dejes engañar. Tu vida correrá siempre peligro, después que cruces esa línea no tendrás vuelta atrás.

No lo demostré, pero sentí cierto temor.

—Tranquila, yo sé lo que hago.

Me marché rumbo a la clase que tenía, no quería darle más vueltas al tema, mi decisión estaba tomada, dependía de tiffany si me quería ahora a su lado o no.

Yo sencillamente no podía o no quería vivir sin ella.

Durante la primera hora todo paso con normalidad, tomé mis apuntes y vi toda la clase.

Al salir estaba tiffany sentada en un banco. Cuando quise ir hasta ella se le acercó una de sus “fans” a la que le dedicó toda su atención. Frené mis pasos y me fui hacia otro lado, por lo que podía ver me estaba alejando, así que cambié de planes.

“No voy a ir a ti tiffany, tu vendrás a mí”.

—Que chofer tuyo más pesada—me dijo yoona cuando se sentó conmigo en el banco.

—A mi realmente me parece muy guapa, ¿No me vas a negar que sunny está como para como para comérsela?—le dije sabiendo que tiffany podía escucharme.

—Pensé que siempre era yo la que hablaba de las personas como comida—dijo sonriente yoona.

Yo no pude evitar sonreír también.

—Tal vez sea hora que yo comience a comer o a dejarme comer—le respondí y pude ver como los ojos de tiffany se fijaban en mí.

Mi vampira estaba celosa.

Se pone tan bella cuando entra en su plan de posesiva. Aunque en el caso de tiffany, hacerle ese tipo de provocaciones era jugar con fuego, pero qué puedo decir, también es muy divertido.

Como si la hubiera llamado, llegó apoyo de inmediato.

—Hola taeyeon, estas preciosas—dijo jessica sentándose a mi lado.

—Hola jessica, gracias, tu como siempre muy amable—le plante mi mejor sonrisa.

—Hola jessica, estoy aquí por si no lo has notado—dijo yoona gesticulando frente a la cara de jessica.

— ¿Qué tal yoona?—saludo esta sin hacer realmente caso.

—Aquí parece que estoy sobrando y además hace frío, así que mejor me voy a mi clase. Cuida bien a mi amiga, tal vez también tenga frio.

—Seguiré tu consejo yoona, y por cierto, estas muy guapa también.

—Gracias.

Eso satisfizo al ego de yoona quien continuó su camino a clases sin mirar atrás.

Jessica sin dudarlo me abrazó.

—Seguiré el consejo de tu amiga y te protegeré del frio.

—El clima esta agradable hoy, pero está bien aceptare tu calor—le dije.

No necesitaba mirar para saber que tiffany nos observaba.

—taeyeon, me encante sentirte cerca, tu olor es increíble, me perturba.

Mientras jessica decía esto, hundía su cara en mi cabello y aspiraba; entonces puso sus labios muy cerca de su oído y me susurró.

—No puedo dejar de recordar tus gemidos mientras te hacía el amor, te extraño demasiado, por favor vuelve conmigo.

“Dios, espero que tiffany no escuchara eso porque creo que sería demasiado”.

— ¿Solo eso extrañas de mí?

—No, claro que no—respondió poniéndose derecha en el banco y tomando mi mano—Yo extraño todo, tu sonrisa, como me mirabas con dulzura cuando te contaba mis locuras, esa cara concentrada que pones cuando lees un libro, tú inteligencia, incluso tus malcriadeces.

—No soy malcriada—argumenté.

—Si lo eres, te gusta salirte con la tuya.

—Bueno, tal vez un poco.

—Claro, que también extraño tu cuerpo, tus manos. Tener tu cuerpo desnudo pegado al mío, ¿Te acuerdas aquella noche de invierno frente a la chimenea en la cabaña de mis padres?

Esto se estaba poniendo muy comprometedor, así que era mejor que me marchara, y pronto.

—jessica, tengo clases así que mejor me voy, hablamos después—le dije mientras me levantaba, pero ella tomo mi mano y no me dejo ir.

—Puedo ver que te pone nerviosa recordar y eso me dice que tengo una oportunidad. Ve a clases taeyeon, pero debes saber que no voy a rendirme—dicho esto, me dio un beso en la mejilla, muy, demasiado cerca de mis labios.

Me fui a clases sin decir nada más, estaba nerviosa, tiffany debió escuchar lo que me dijo y seguramente estaba molesta. Y además, jessica estaba poniendo recuerdos en mi cabeza.

Me desvíe a un baño que no era muy concurrido para tratar de calmarme, solo necesitaba unos minutos de paz para continuar.

Entré al baño y me recosté contra los lavados dejando caer cabeza y mi cabello hacia atrás, cerré los ojos un segundo y de pronto sentí un cuerpo que se apretaba a mí.

—No juegues con fuego tae, tu solo me perteneces a mí—dijo tiffany mientras pasaba su lengua por mi cuello.

Mi cuerpo se estremeció, aun así, traté de mantener la compostura.

—Yo pensé que preferías pasar el día con tus fans—le dije empujándola para alejarla de mí.

Tiffany retrocedió por voluntad propia ya que sabía que no tenía fuerza para moverla ni un milímetro, sus ojos se clavaron en los míos atrapándome como siempre.

—Yo quiero salvarte y tú solo quieres hundirme en el infierno de los celos.

—Quizás mi infierno es estar sin ti.

La mirada de tiffany se hizo más profunda.

—tae, esa mujer, jessica, aunque me duela, aunque me vuelva loca de los celos, puede darte una vida normal, puede hacerte feliz,

— ¿Cómo puedes saber tu qué es lo que me hace feliz? Tal vez me estas condenando a vivir en la tristeza y en la soledad por el resto de mi vida.

Mis palabras calaron hondo, lo pude ver en sus ojos.

Estaba luchando con soltarme y marcharse o quedarse conmigo. Fijó su mirada en mis labios, ella deseaba besarme, lo sabía y yo necesitaba sus besos como el aire que respiro.

Basta de pensar me dije y acerqué mis labios a los de ella. Nuestros labios se unieron en un profundo beso, las chispas salieron como si fuera un corto circuito.

Me sentí más viva que nunca aunque coqueteara con la muerte.

Las manos de tiffany viajaron por mi cuerpo acariciándolo y yo recorría su espalda y su cabello que tanto adoraba.

Con un solo movimiento me subió al lavado y comenzó a acariciar mis piernas mientras subía mi falda. Yo estaba mojada ya de deseo, necesitaba a tiffany, quería sentirla dentro de mí.

Entonces se detuvo y temí por un momento que no quisiera estar conmigo hasta que vi sus ojos negros como la noche y una sonrisa traviesa en sus labios.

—Viene alguien, así que tendremos que parar, pero espérame esta noche en tu habitación… sin ropa y con el cabello suelto—me miró fijamente y agregó—Déjate este collar, me gusta—dijo recorriendo con un dedo el accesorio—Voy a hacerte olvidar esta noche cualquier cabaña que hayas visitado.

Mi garganta se secó.

Me miró unos segundos más y salió del baño rápidamente dejándome llena de deseo y extrañando su cuerpo, pero sabía que esta noche la tendría y no podía esperar a que llegara ese momento.

Me acomode la falda y justo en ese instante, entró una chica muy apurada por usar el baño, así que me marché a clases saboreando todavía los besos de tiffany.

El día pasó muy lentamente, las clases se me hacían eternas, yo solo podía imaginarme en los brazos de tiffany, besándola, abrazándola.

Estaba haciendo mi mayor esfuerzo por concentrarme en las clases, comer, en fin dejar que transcurriera el día.

Finalmente, llegó la hora de irme y sunny nos estaba esperando afuera.

Durante el camino, yoona se enfrascó en una discusión con sunny a la que no preste atención, pero debió ser muy intensa porque cuando llegamos yoona tenía los ojos húmedos y sunny estaba muy seria.

Apenas entramos al ascensor le pregunté a yoona por lo ocurrido.

—yoo ¿Qué paso?

—Nada importante, que tu chofer es una idiota.

— ¿Estas segura que no la provocaste?

—Siempre soy yo la culpable, ¿No es así taeyeon? ¿No puede ser otro el responsable de las cosas?

Eso me sorprendió un poco.

—Disculpa yoona, tienes razón, hablaré con sunny.

—Está bien, no pasa nada, solo necesito descansar un poco, estoy agotada y también necesito estudiar, así que me iré directo a la habitación.

— ¿Seguro que estas bien yoona?

—Estoy bien, no te preocupes y no le digas nada a sunny, no quiero darle importancia al tema.

Apenas entramos yoona se fue directo a su habitación como había dicho; yo me fui al mío para darme una ducha de agua caliente necesitaba relajarme, aunque ya había estado con tiffany, me sentía profundamente nerviosa porque esta noche seria solamente mi vampira y yo, para cambiar mi vida para siempre.

Salí del baño más tranquila.

Cuando me fui a poner ropa, recordé lo que me había pedido tiffany, así que solo me puse el collar. Peine mi cabello y me metí en la cama. Tomé mis lentes y comencé a repasar las clases de hoy.

Me quedé profundamente dormida y no supe de mí hasta que sentí que me quitaban los libros de encima.

Abrí los ojos lentamente para descubrir que la persona que los retiraba era tiffany  y que me miraba fijamente con ojos oscuros.

—Hola, disculpa, me quedé dormida estudiando.

—No podía imaginar una imagen más y que encontrar que una bella mujer desnuda y cubierta de libros—dijo con voz ronca.

Fue cuando recordé que no tenía nada puesto y que realmente lo único que me cubrían eran los libros.

Me sentí un poco apenada, pero al ver lo complacida que estaba tiffany con todo aquello, solo pude quedarme quieta, creo que incluso no respiraba.

Una vez que mi hermosa vampira retiró todos los libros, me quito los lentes y los colocó sobre la mesa de noche. Entonces comenzó a quitarse la ropa frente a mí, muy, muy lentamente.

¡Dios mío!

Era pura belleza.

Su cuerpo tonificado, lo esbelta que era, sus senos suficientes para llenar mis manos y ese cabello despeinado que me encantaba.

Luego subió a la cama, lentamente, como un felino al acecho; me cortaba la respiración solo verla. Bajó un poco y sus labios comenzaron a cubrir mis piernas y sus manos apretaron mis nalgas conforme subía.

Cuando su boca se acercaba a mi centro, por instinto mis manos estrujaron las sabanas.

Esa era mi tiffany, apasionada y sensible.

Su lengua comenzó a lamer mi centro, húmedo ya por la anticipación.

—Sabes a gloria tae, pero no vamos a ir tan rápido esta vez.

De pronto dejó de lamerme y continuó subiendo, besando mi vientre mientras sus manos continuaban apretando mis nalgas. Sus besos llegaron a mis senos y acarició el pezón son su lengua, lo succionó suavemente y luego aumento su fuerza, una descarga eléctrica bajó hasta mi vientre; un gemido escapó de mi boca y tiffany rugió suavemente al escucharlo.

No podía evitar que sus sonidos, un tanto humano y un tanto animal, despertaran más deseo en mí.

Pasó al otro seno y como si fuera poco, esta vez lo mordió suavemente lo que provocó que me humedeciera más aún.

Subió a mis labios y me besó.

Fue un beso lento y calmado que fue profundizando poco a poco. Me estaba volviendo loca y lo sabía, controlaba mi deseo a su antojo.

Sus manos buscaron mi entrepierna y sin pedir permiso, entró en mí llenándome completamente y arrancándome más gemidos de placer.

—Eres mía tae, solo mía—me dijo al oído.

—Tuya tiff, soy tuya—respondí porque así lo sentía.

No tenía ninguna duda en eso.

Salió de mí y me quejé como una niña que le quitan su juguete preferido.

—tiffany, por favor no pares.

Su risa inundo la habitación, pero su mano no se alejó completamente, solo fue a mi clítoris para acariciarlo, para torturarlo y luego entró de nuevo, una y otra vez llevándome hasta el borde.

Cuando ya estaba por alcanzar el éxtasis, succionó de nuevo mi seno con fuerza y toda la energía que se acumuló dentro de mi estalló en un potente o.

Tiffany me tomó en sus brazos mientras mi cuerpo, como una gelatina, no podía y no quería poner resistencia, estaba extasiada con sus caricias.

Nuestras respiraciones estaban agitadas.

—tae, sé que no debería estar aquí, pero yo también me siento hundida en la soledad sin ti. No tengo miedo a la muerte, pero si a vivir sin ti.

—tiff, tú me haces sentir más viva que nunca, yo tengo miedo es a estar sin ti.

Todo había sido dicho.

La deseaba, así que giré entre sus brazos y comencé a besarla.

Mis manos recorrían su cuerpo con ansias de conocerlo, de hacer un mapa de cada centímetro de ella.

¿Cuántas personas se pasan la vida buscando el amor de su vida?

Y yo lo tenía aquí, en mi cama, justo en mis manos.

No, definitivamente, no podía vivir sin ella.

Me detuve un momento a mirar sus ojos y pude ver que estaban completamente negros. Ella estaba deseándome tanto como lo hacía yo, así que no pensaba dejarla con las ganas.

Comencé a acariciar sus senos y a succionarlos intermitente arrancando algunos gemidos; regresé a su cuello y labios mientras con mis pulgares continuaba consintiendo sus pezones.

Me detuve de nuevo a ver su rostro. La cara de tiffany sutilmente y sus ojos permanecían oscuros como la noche, no quería perderme el espectáculo, así que baje mi mano hasta su centro y comencé a acariciar su clítoris.

Tiffany se movía rítmicamente contra mi mano y sus gemidos aumentaban, podía ver sus comenzar a despuntar, pero ella los controlaba y eso no gustó, yo no quería que se frenara, así que intensifique mis caricias, lo quería todo.

—Mírame tiff, quiero verte cuando llegar.

—Más tae, dame más—dijo entre roncos jadeos.

No la podía hacer esperar más, entré en ella y comencé a empujar con fuerza. Su espalda se arqueó buscando todavía más mi contacto, así que me acomodé para acariciar también su clítoris con mi pulgar mientras los dedos entraban y salían de ella.

Lo que vino después de eso fue un derroche de amor y deseo.

Tiffany rugió, sus colmillos se desplegaron y sus ojos se clavaron en mí. Yo sencillamente no lo pensé porque lo desea intensamente.

Quien sabe desde cuando lo deseada y si moría en ese momento, me iría con la imagen más hermosa del mundo: Mi tiffany llegando al o por mí.

Giré mi cuello y se lo ofrecí, ella se levantó un poco y clavó sus colmillos en mí.

Todo pasó a ser muy rápido y lento a la vez.

Fue una sensación maravillosa, estaba conectada con tiffany y podía sentir su placer fundiéndome como el mío. No podía analizar qué ocurría, yo solo podía hundirme en la sensación que estaba sintiendo y derrumbarme extasiada en los brazos de tiffany.

Fue sublime.

Pasaron algunos minutos antes de que pudiera darme cuenta de lo que había hecho.

Toqué mi cuello, pero no tenía rastros de sangre en él. Tiffany me miraba con temor, ella tenía más miedo de mi reacción que yo de lo ocurrido. Me acerqué a ella y la bese en los labios para tranquilizarla.

Cuando me alejé unos centímetros le sonreí muy tímidamente.

—¿Qué ha pasado?—le pregunté.

Ella esquivó mi mirada.

—Yo…—sus ojos volvieron a los míos—Siento más placer si me alimento durante el acto ual—me respondió pareciendo incomoda.

Yo asentí.

—Pero, ¿Cómo es posible que para mí también sea tan placentero?

Sonrió levemente como una niña traviesa.

—Libero una sustancia en tu sangre cuando te muerdo que te relaja para que yo pueda alimentarme, pero si estoy excitada, proyectara mi placer equilibrándolo con el tuyo. Pasa lo mismo si eres tú la que esta excitada, prácticamente lo compartimos.

Eso me complació y sorprendió mucho, nunca había imaginado que pudiera existir ese tipo de conexión.

— ¿Pasará algo conmigo después de esto?—le pregunté un poco preocupada; ahora podía pensar en lo que había hecho.

Conocía muy bien las historias de vampiros de las películas.

—No te convertirás si es lo que preguntas; en realidad el proceso es un poco más complejo que eso y la verdad no es tan malo ser un vampiro después de todo—dijo algo molesta.

—tiff, no digo que sea malo o bueno, es solo que no lo pensé y quería saber que puede pasarme.

—tae, solo tome un poco de tu sangre, pero no es necesario que pase de nuevo. Para mí es muy placentero, aun sin tomar tu sangre es maravilloso estar contigo—se removió un poco—Yo no debí permitir que esto ocurriera, pero no es solo el placer ual que me das, ni la felicidad que es para mí alimentarme de ti, sino que ahora llevaras mi olor en tu piel por varios días y todos los de mi especie sabrán que eres mía, y eso me satisface no sabes en qué medida.

—Mi amor, yo quiero que esto pase de nuevo. Tú no me lo pediste, yo me ofrecí a ti y lo disfrute mucho, deseo que esto pase tanto como tú.

Tiffany tomó mi cara entre sus manos y me besó dulcemente, aun podía sentir un poco el sabor metálico de mi sangre en su boca; eso produjo un escalofrió en mi cuerpo de puro deseo.

Ella podía tomar de mí toda la sangre que quisiera, tiffany era mi vampira y yo aceptaba todo lo que viniera con eso, incluso mi propia muerte.

—tae, quiero pedirte algo.

—Dime ¿Qué quieres?

Ella se puso de lado para quedar frente a frente.

—Veras… para que mi especie pudiera convivir en paz en este mundo, fue necesario crear algunas reglas. Una de ellas es que podemos tener donantes de sangre; son personas a las que nos une algún lazo sentimental y nos permiten alimentarnos de ellas voluntariamente. Es el primero paso para tener un esposo o esposa de sangre, aunque no es obligatorio que esto ocurra.

— ¿Donantes? ¿En plural? Explícate mejor tiffany.

Mis celos estallaron rápidamente.

—Tranquila tae—me dijo sonriendo—Sí, pueden ser varios; sin embargo, en mi caso nunca he tenido uno y así como yo no quiero compartirte, entiendo que tú tampoco quieras hacerlo.

—Me alegro que lo tengas claro—ella volvió a sonreír—Ahora explícame más, por favor.

—De acuerdo. Para ser una esposa o esposo de sangre debes ser donante de sangre por al menos un año, luego de eso puedes convertir en vampiro a tu donante. Tae, esto no tiene por qué pasar, se puede ser donantes por años y seguir siendo humano, es una decisión que se toma en conjunto llegado el momento.

—¿Por qué existe el tiempo mínimo de un año? ¿No puedes convertir a quien quieras? Te pregunto más que nada por curiosidad.

—Recuerda que te comenté que debemos controlar la población, de lo contrario seriamos demasiados y eso destruiría el equilibrio del mundo en el cual vivimos. Además, de nuestro acuerdo con los humanos, solo podemos convertir por derecho de sangre o esposa de sangre. Por derecho de sangre si es un descendiente tuyo, sobrino, nieto o bisnieto; y esposa de sangre es tu pareja para toda la vida. Solo puedes tener otra si muere o después de separarse por diez años.

—Algo así como un divorcio.

Ella asintió aunque no era una pregunta.

—Pero, ¿Por qué diez años¿ Es mucho tiempo, ¿No te parece? Al menos es mucho tiempo para una vida humana.

—Veras tae, al inicio muchas personas se convertían en donantes para tener la posibilidad de ser vampiros y poder ser inmortal, pero apenas se convertían buscaban otra pareja, lo que sería comúnmente llamado esposa por interés. Además, la organización no tenía tiempo de evaluar si eran de buenos sentimientos y muchos se pasan al otro lado.

—¿Cuál otro lado?

—Los malos tae, no puedo decirte más por ahora.

No quise presionar.

—Está bien, es mucha información también para mí, así que vamos poco a poco.

—Yo prefiero explicarte mejor qué es un donante de sangre y por favor, necesito que me prestes mucha atención.

Miré a tiffany con dulzura invitándola a continuar. Yo estaba segura que me lo pediría y si quería explicarme todo, la dejaría; pero por mi lado estaba todo aceptado porque yo estaba irremediablemente enamora de mi vampira.

Me apretó en sus brazos y besó mi frente, antes de continuar hablando.

—Si bien un donante de sangre puede alimentar a su pareja, puede hacerlo solo cuando así lo desee. La dieta será complementada con otras tomas de sangre que pueden ser fácilmente adquiridas en nuestros bancos de sangre. Sin embargo, es importante que el donante ingiera muchas vitaminas para evitar debilitarse. Un donante debe ser aprobado por un miembro del consejo, el cual está conformado por ocho de los miembros más antiguos, es decir de los primeros que mutamos y que han demostrado su valor, sabiduría y buena voluntad durante todos estos años. Sólo los aspirantes a donantes de los vampiros que forman parte o pueden llegar a ser parte de este consejo son entrevistado por nuestro primer ministro. La seguridad del donante será considerada tan importante como la un vampiro y será evaluado durante ese año para ver si obtiene el permiso de ser esposa o esposo de sangre. Claro, esto ocurre si los dos, tanto el donante como el vampiro, lo solicitan al consejo. El donante podrá ingresar al cuartel y conocer más sobre nosotros. Formará parte de nuestra sociedad, pero deberá para esto firmar un acuerdo donde no puede divulgar nada aunque deje de ser donante de sangre. Este acuerdo no se rompe ya que es eterno. Escucha bien,—me pidió—Este acuerdo no implica que puedan demandarte o algo así de sencillo, si lo rompes morirían las personas que más amas. El consejo tomara varios nombres de las personas que amas, ellos lo investigaran y lo colocaran en el acuerdo, si lo rompes ellos morirán y luego de presenciar estas muertes, será el donante quien muera.

No había hecho una pausa desde que comenzó, en este instante lo hizo.

Tragó saliva y continuó:

—tae, yo quiero que seas mi donante de sangre, pero si no lo deseas, yo lo entenderé.

Asentí con una leve sonrisa.

—tiff, yo nunca te traicionaría. Aun sin firmar ese acuerdo, se los peligros que corres y no seré yo quien te exponga a uno. Quiero ser tu donante de sangre—le dije mirándola a los ojos.

Tardó un par de segundo en comprender mi respuesta.

Tiffany me besó profundamente y luego me miró a los ojos fijamente para pronunciar las palabras más hermosas que había escuchado nunca.

—Te amo taeyeon.

Mi corazón dio un vuelco.

Mi pulso se aceleró.

Mi respiración se hizo un poco errática.

Las mariposas del estómago formaron un tornado.

Todas mis emociones salieron a flote.

Lagrimas asomaron a mis ojos.

—Yo también te amo tiffany—le dije.

Me besó de nuevo y luego se levantó muy rápido de la cama y comenzó a vestirse.

—tae, tengo que irme ahora para comenzar a preparar todo. Normalmente esto toma dos o tres días, pero yo quiero ver si podemos firmar mañana mismo.

Yo solo podía verla vestirse y sonreír, se detuvo un instante y me miró con preocupación.

— ¿Prefieres pensarlo un poco más? Tal vez no sea buena idea apresurar las cosas.

—Ve y resuelve esto de inmediato, yo no quiero pasar un día más sin ser tu donante de sangre.

Tiffany sonrió, me levantó de la cama y me abrazó.

—Tus deseos son ordenes mi amor. Vendré mañana temprano antes de que te marches a la universidad ahora descansa.

Me dio un beso fugaz y desapareció de la habitación. Yo volví a acostarme en la cama sintiéndola vacía sin tiffany.

Esto era una locura y estaba por firmar el acta del manicomio, pero no me importaba porque solo los cuerdos están realmente locos.

Me desperté con mucho apetito, supongo que por la actividad de la noche anterior; así que me duche y vestí para ir a clases, aunque antes pasaría por la cocina para prepararme unos huevos revueltos con tocino.

Cuando ya estuve liste y me disponía a salir de la habitación, fui sorprendida por tiffany que me tomó por el brazo e hizo girar y me dio un beso arrebatador.

Eran los mejores buenos días que me habían dado.

No conforme con eso comenzó a recorrer mi cuerpo con sus manos, yo me pegué a ella buscando más contacto.

—tae me vuelves loca,—dijo apenas despegando sus labios de los míos—Si no fuera porque tengo que encárgame de tantas cosas hoy, te arrancaría esa ropa que llevas puesta y te metería en la cama.

Mi cuerpo con solo escuchar sus palabras se agitó de placer.

—Ven, siéntate aquí conmigo en la cama que quiero darte algo—me invitó mientras se sentaba en la cama y me llevaba consigo.

Me senté en sus piernas provocativamente.

— ¿Estas segura que no tienes tiempo?—le pregunté.

Sus ojos se pusieron completamente negros, pero agitó su cabeza tratando de pensar.

—Mujer, esta noche fue movida, tengo que atender la misión y pedir los permisos. No me tientes por favor, o no poder resistirme.

Me apiadé un poco de ella, así que pasé de sus piernas a la cama, justo a su lado.

— ¿Qué pasa?

—Hasta que no seas oficialmente mi donante, no puedo darte más protección que sunny, así que por favor trata de estar siempre cerca de yoona.

—No comprendo, ¿Pasó algo anoche?

—Sí, sunny te contara camino a la universidad, pero por ahora quiero que desayunes. Te traje esto que lo compré por el camino—dijo entregándome una bolsita de comida que tenía un olor estupendo.

En cuanto lo abrí, comencé a devorarlo con entusiasmo, realmente tenía apetito esta mañana.

—También toma estas vitaminas, son un complejo vitamínico que ayudará a compensar la pérdida de sangre.

—Tomaré lo que sea con tal de sentir de nuevo tus colmillos en mi piel—le dije con dulzura.

—No puedo estar más enamorada de ti—dijo mirándome fijamente y con sus ojos de nuevo negros como la noche.

—Yo siento lo mismo que tu tiff, así que es correspondido todo lo que estas sintiendo.

Me miro sonriente y saco una caja pequeña que hasta ese momento no le había visto, la abrió y pude ver un arma de fuego.

—Tengo algo más para ti—me miró con tensión—Quiero que lo tengas siempre contigo. Trataré de explicarte rápidamente como usarla. Es una Five - seveN, pesa sólo 750 grs., tiene un moderado retroceso y un alto poder de penetración. Está modificada, puedes matar humanos con ella, pero lo más importante, puedes matar vampiros. La cargas de la siguiente manera…

La detuve.

—tiff, para por favor, yo sé cargar el arma y tengo buena puntería, mi papá me enseñó a usarla, pero en un campo de tiro, no para cargarla siempre conmigo, no me gusta la violencia.

—tae, algunas veces no se puede escapar de ella porque necesitas mantenerte viva. Yo no puedo imaginarme sin ti—dijo con angustia.

—No me gusta la idea de estar armada.

—Por favor tae, al menos piénsalo. Aquí te la dejo, ahora debo marcharme para arreglarlo si no has cambiado de opinión, claro está.

—Sé qué esperas que salga corriendo, pero no lo haré, quiero estar contigo.

—Bien, entonces me voy mi amor, puede que me tarde un par de días, pero moveré mis influencias para que sea un día. Cuando esté todo listo, te vendré a buscar—estaba a punto de saltar por la ventana cuando se regresó—tae, quizás sea hora que le digas a Rachel que tienes novia porque después de lo de anoche no podrás negárselo.

—¿Crees que fuimos muy ruidosas?—pregunté sonrojándome de la vergüenza.

—Estoy más bien segura—dijo con una sonrisa burlona.

—¿Puedo decirle quien es mi chica?

—Puedes decirle a todo el planeta si quieres.

Me dio un beso y esta vez sí se marchó.

Terminé de desayunar lo que me trajo y salí de la habitación. Afuera estaba yoona sentada en el sofá con una sonrisa.

—¿Está todavía contigo?—me preguntó.

Fue directo al grano.

—Ya se fue—respondí simplemente.

—Saltaría por la ventana porque estoy levantada desde muy temprano y no he visto a nadie salir.

—No sé cómo no la has visto porque es imposible no mirarla cuando te pasa por el lado.

—Muy bien, entonces es una chica guapa, eso me gusta.

—La más guapa de todas.

—Dime que no es sunny por favor, es una pedante insensible.

—yoo no es sunny, pero es una buena chica, no comprendo qué te pasa con ella.

En ese momento tocaron la puerta y yoona se encargó de abrir. Era un florista con dos ramos de rosas rojas, uno grande y otro más pequeño. Ella se encargó de firmar los papeles y yo ayudé a acomodar los dos ramos en la mesa.

—¡Vamos a ver las tarjetas!—dijo mi amiga dando saltitos y tomando la tarjeta del ramo grande sin que pudiera detenerla.

—Seguramente son para ti—dije.

—No señorita, es para ti, de parte de jessica. Imagino que por eso se fue tan temprano del departamento.

Tengo que confesar que era un poco extraño que mientras jessica me enviaba flores, tiffany me regala un Five – seveN. Lo había pensado un poco y me quedaba con el arma porque no importaba qué te regalaban, si no, quién lo hace y de tiffany, sencillamente, quiero todo.

Yoona finalmente me pasó la tarjeta y pude leer el mensaje: “Te extraño mi amor, por favor perdóname”. Se la regresé para que pudiera leerla, estaba desfalleciendo de curiosidad.

—Entonces tampoco es jessica, porque si así fuera, no estaría pidiendo perdón todavía.

—No es jessica, pero vamos a ver la tarjeta del otro ramo.

Yoona comenzó dar saltitos de nuevo. Leyó la tarjeta y se puso muy seria, no dijo nada, sólo la metió en su bolsillo.

—¿Qué dice? ¿Para quién son esas rosas?—pregunté.

—Son de una idiota que ya va a ver quién es Im yoona.

Yoona tomó varias rosas del ramo, su bolso y salió del departamento. Yo la seguí con mis cosas por supuesto, para irnos a la universidad.

Cuando llegamos al auto estaba sunny esperando y apenas nos vio, abrió la puerta para que entráramos, pero en lugar de eso, lo que ocurrió fue que yoona fue hacia ella y comenzó a golpearla con las rosas.

Sunny no se inmutó, solo mantenía su mirada firme en los ojos de yoona.

Yo la detuve porque, aunque no sabía qué ocurría, estaba mal que la golpeara con las rosas.

Logré alejarla un poco de sunny.

—Esto es para que aprendas que no puedes recoger las babosadas que dices tan solo con unas rosas—le gritó mi amiga a sunny.

Yo no entendía nada.

—yoo, ¡Cálmate por favor!—le pedí.

Ella se quedó muy quieta, pero sin dejar de mirar con rencor a sunny.

—Tranquila tae, que ya terminé y me voy en mi auto, puedes irte tranquila con tu chofer—escupió esa última palabra.

En ese momento fue cuando finalmente sunny habló.

—Eso no va a ocurrir, te vas conmigo.

Yoona la miró sin poder creérselo. Rió con sarcasmo.

—Claro que no, yo me voy sola en mi cauto.

Yoona se fue caminando hasta su auto y sunny fue detrás de ella.

Me pareció que era algo que tenía que dejarles resolver solas, así que me subí al auto. Por la ventana pude ver que discutían y luego sunny alzaba a yoona y la traía a la fuerza.

—¡¡Eres una bestia!! ¡¡Y no sé cómo puedes tener tanta fuerza!!—gritaba yoona, aun después que subió al auto.

Sunny subió al auto y se puso al volante sin inmutarse.

—Anoche violaron y mataron a dos estudiantes de la universidad que caminaban por el campus—dijo sunny cuando puso el motor en marcha.

Yoona y yo nos quedamos en silencio, fue una noticia terrible e impactante.

—La policía está por todas partes; sin embargo, la seguridad no es suficiente. Los que mataron a esas chicas son unos animales, no merecen estar sobre esta tierra, así que hoy manténganse juntas, yo las estaré esperando para traerlas a casa.

Eso calmó las cosas entre yoona y sunny.

La situación no estaba para nada más, así que el viaje transcurrió en completo silencio.

Cuando llegamos a la universidad yoona se bajó del auto rápidamente y se marchó. Entonces aproveche la oportunidad para pedir más detalles a sunny sobre lo ocurrido.

—¿Fueron Vampiros?

—Fueron los miserables, no tienen otro nombre—su rabia pude notarla de inmediato—Las chicas sufrieron mucho antes de que le succionaran toda la sangre—dijo mirando al vacío.

—Tranquila sunny, estaremos bien.

—taeyeon, esos vampiros están buscando a yoona y cuando seas la donante de sangre de tiffany, te buscaran quizás más que a ella. Por favor manténganse juntas, es la única manera que podremos protegerlas.

—¿Por qué buscan a yoona? ¿Cómo sabes que la están buscando?

—Son muchas preguntas, te diré lo que puedo. Logramos encontrarlos en una zona arbolada, seguimos el rastro de sangre que dejaron. Era un grupo de rastreó, un par de ellos huyeron. Taecyeon y otro de nuestros hombres resultaron heridos.

—¿Están bien?

—Se recuperan bastante bien, pero necesitan descanso y alimentación. Tiffany no está, así que somos menos hoy.

—Tal vez tiffany debió quedarse y esperar.

—tiffany a esperado demasiado por el amor, ya es hora que piense un poco en ella—hizo una pausa—No te preocupes taeyeon, estaremos bien mientras la loca de tu amiga no cometa ninguna imprudencia.

—La cuidare sunny.

—Muy bien. Dime, ¿Llevas el arma contigo?

—No, le dije a tiffany que lo pensaría, no estoy segura de querer tener un arma.

—taeyeon no se trata de tu vida nada más, si no de la vida de las personas que amas. Si le pasara algo a yoona o tiffany y tú no tuvieras como ayudarlos, ¿Cómo te sentirías? Piensa en eso por favor.

Me alejé del auto pensando en eso.

Estaba siendo muy egoísta con el tema del arma. Además, yo sabía en lo que me estaba metiendo cuando decidí estar con tiffany.

A partir de mañana comenzaría a llevarla conmigo.

La universidad estaba convulsionada por lo ocurrido.

Se corrió el rumor de que habían sido unos drogadictos los que atacaron a las chicas. Asumo que habían limpiado un poco la escena para la policía.

Yo pasaba de una clase a otra siempre pendiente de yoona. Cuando fue la hora de almorzar, me fui al comedor a buscarla.

—Hola yoo, ¿Qué tal?—la saludé en cuanto la vi.

Torció un poco el gesto.

—Más o menos, esto de las chicas me tiene perturbada y aunque cuentan la historia diferente a lo que dijo sunny, yo le creo a ella.

—Haces bien, sunny es de fiar, pero dime, ¿Qué te pasa con ella?

—tae, esa mujer es una pesada que piensa que me conoce. Me dijo que era una engreída idiota que no le importaba nada ni nadie, que mis abuelos deben estar avergonzados de mí.

—Así que fue eso, se metió con tus abuelos. Estoy segura que lo lamenta, pero tú sabes que apenas la ves, no paras de insultarla.

—Mejor no hablemos de eso. Dime, ¿Quién es tu chica secreta?

Había llegado el momento.

—Es tiffany—solté como disparando a quemarropa.

Mi amiga pestaño varias veces antes de comprender.

—¿tiffany? ¿tiffany young? ¿Esa mujer guapa, forrada en billetes y que todo el mundo quiere seducir?

Quise reír, pero me contuve.

—Supongo que sí, esa misma mujer—respondí.

—¡No te lo puedo creer! Y por lo de anoche supongo que además es muy buena en la cama—dijo arqueando una ceja.

No sé por qué, y aunque no es mi naturaleza, pero no me sentí cohibida al decir:

—Ufff, no tengo palabras para describirlo.

—tae, pero esa era mi trofeo. Estaba esperando para pasearla de mi lado por la universidad, no puedo creer que me la quitaras.

—Vamos yoo, tú sabes que no te quite nada.

—Dime algo, ¿Qué pasa con jessica?

—jessica es pasado, ahora mi presente es tiffany y voy en serio con ella.

—Espera tae tú no la conoces bien, ten cuidado. Tiffany me gusta para restregársela a las demás en la cara, pero no sabemos nada de ella.

—Se de ella todo lo que necesito saber.

Después de eso regresamos a clases y al final de la tarde sunny estaba esperando para llevarnos a casa.

Esta vez yoona no se resistió a subir al auto.

Al llegar al departamento entré en mi habitación y encontré un Iphone idéntico al mío con un mensaje que decía: “Coloca en este teléfono el chip de tu celular, recoge un par de mudas de ropa, en una hora paso por ti”.

No sabía que ropa llevar.

Me decidí por algo practico, pero bonito.

Estaba nerviosa, en una hora estaría tiffany buscándome para llevarme a quien sabe dónde, para convertirme en su donante de sangre.

Definitivamente estaba loca.

 

Like this story? Give it an Upvote!
Thank you!

Comments

You must be logged in to comment
LlamaAmerica #1
Chapter 17: Hermoso me encanto la historia *-* <3
natovida #2
Chapter 17: Se acabo super rapido! Gracias por la historia
LlamaAmerica #3
Chapter 12: A mi se me hace que esa kelly tiene algo que ver mmm
LlamaAmerica #4
Chapter 11: Que capituló más intenso Jajajaja lo de Sunny y la YoonA ya se venía venir xD jajaja
LlamaAmerica #5
Chapter 9: Enserio me encanta la historia *_* <3
LlamaAmerica #6
Chapter 7: Bueno estaríamos ambas locas porque también me voy con ella xD
LlamaAmerica #7
Chapter 6: Mi respuesta es si también *-* <3
LlamaAmerica #8
Chapter 5: Ahhh que emocionante este cap!!
LlamaAmerica #9
Chapter 4: Ok Tae ya se dio cuenta y veamos qué pasa /.\
LlamaAmerica #10
Chapter 3: Jajajaja lo hiciste con una Vampira Tae :$