“Ellos ya lo han perfeccionado,

el escenario que lo oculta todo.

El mundo me lanza ésta pregunta:

¿Las cosas realmente estarán bien así?”

Humanoids – TVXQ

 

 

Una persona uniformada entró a la sala donde estaba comiendo un hombre, uniformado, un pollo asado en una mesa de caoba negra.

 

-Ya ha llegado mi Generalísimo –dice la persona poniendo una mano en la cabeza, saludando de manera militar al hombre sentado. Éste ni siquiera le mira, con un movimiento de cuchillo le indica que haga pasar a la persona y que se vaya, manchando ligeramente la mesa de grasa.

 

Una mujer uniformada entera de color blanco, excepto por el gorro de plato que era rojo y los zapatos negros, entra a la sala y se acerca hasta una distancia prudente del Generalísimo, haciendo una inclinación de noventa grados a modo de respeto.

 

-Siéntate –dice el hombre indicándole el otro extremo de la mesa de caoba -¿Tienes hambre? Te puedo conseguir un plato…

 

-No hace falta mi Generalísimo –contesta la mujer suavemente inclinando la cabeza.

 

-Te he dicho muchas veces que no me llames así, me haces parecer más mayor y apenas nos llevamos cuatro años de diferencia –le comenta el hombre sonriendo –llámame Shindong –le dice sonriendo de lado mientras se mete otro cacho de pollo a la boca.

 

-No podría mi Generalísimo –replica la mujer desviando la mirada.

 

-Entonces General Shindong –la mujer asiente y le sonríe ligeramente -¿Qué me trae hoy, Directora Taeyeon? –pregunta el hombre limpiándose con la servilleta y bebiendo un sorbo de vino.

 

-Lo de siempre, mi General… Shindong –dice la mujer ante la ceja levantada del hombre cuando va a decir el nombre –El informe anual del CIC.

 

-Oh, si… esos monstruitos –dice volviendo al pollo -¿qué les pasa?

 

-Nada General Shindong, están todos muy sanos –dice la mujer mientras abre un dossier con información del centro –a pesar de que solo hay diez en el centro, responden bastante bien a las evoluciones y los entrenamientos.

 

-¿Diez? –pregunta Shindong con un trozo de pollo a mitad de camino entre el plato y la boca.

 

-Si, después de la última reunión, al tener solo una reunión al año no le pude informar, pero tuvimos una nueva adquisición en el centro, ha respondido bastante bien a los entrenamientos y es bastante poderoso.

 

-¿Cuál es su anomalía? –pregunta Shindong bebiendo vino de nuevo.

 

-La ignición, puede controlar y crear el fuego, sea cual sea –informa la mujer después de leer el dossier del chico.

 

-¿Cuándo estarán listos? –pregunta Shindong seriamente apartando el plato de asado.

 

-Aún queda un poco para un par de ellos, pero ya les subimos el nivel de entrenamiento, no le queremos hacer esperar –dice la mujer como disculpándose.

 

-No, está bien, haces una gran labor para nuestra sociedad, librarnos de esa gente y adiestrarlos para que no hagan nada, solo quiero saber cuándo podré disponer de ellos –comenta Shindong bebiendo un sorbo de vino mientras mira a Taeyeon.

 

-No queda mucho mi General Shindong, en serio, dénos como mucho un año más, para entonces estarán listos –Taeyeon levanta la cabeza, hablando con seguridad y orgullo.

 

Shindong asiente mientras sonríe de lado.

 

-Un año entonces –y vuelve a meter la cabeza en el pollo asado que había dejado de lado durante la conversación, haciendo un gesto con el cuchillo, indicando que ya se podía ir, viendo de reojo la reverencia de noventa grados, y de paso, el culo de Taeyeon.

 

 

*

 

 

Cuando Victoria sale de su entrenamiento, es la última, Amber está en el comedor contándoles a todos algo que ha visto en uno de los entrenamientos.

 

-En serio Chanyeol –sigue diciendo Amber mientras se levantan para ir a la sala de aseos –a veces tus llamas toman formas extrañas.

 

-¿De verdad? –pregunta frunciendo el ceño con cara de no creérselo.

 

-Yo creo que te lo imaginas –comenta Kris.

 

-No no, de verdad, toman formas raras que… no sé –comenta llegando a la puerta de los aseos.

 

-Bien Amber, por mucho que visualmente parezcas un chico, físicamente no lo eres, así que tendremos que seguir la conversación luego –dice Henry, a lo que ella responde intentando darle un puñetazo, pero Jaejoong rápidamente la para cogiéndole de la muñeca, mientras, Yunho ha cogido una de las orejas de Henry y lo está llevando hacia dentro.

 

-Nos vemos luego –dice Jaejoong suavemente, dándole palmaditas en la cabeza a Amber, que es llevada por las otras dos dentro de la sala de aseo femenina.

 

 

*

 

 

Todos los chicos han terminado ya de bañarse y se han ido, excepto Chanyeol y Kris. Están los dos en silencio, afanados lavando las alas del rubio.

 

-A ésta parte ya llego, deberías bañarte ya –le dice Kris mirando el ceño fruncido de concentración que tiene Chanyeol.

 

-¿Seguro? –le pregunta cuando ha terminado el lado que estaba haciendo.

 

-Si, venga, vete ya, que apestas –le dice sonriendo de lado, recibiendo la esponja en la parte de atrás de la cabeza a modo de regaño, gira la cabeza y ve que Chanyeol le está sacando la lengua.

 

-Como si tú ahora mismo olieses mejor, hueles a dragón mojado –y se mete en uno de los cubículos riéndose cuando Kris falla al tirarle una de las esponjas.

 

Ahora mismo, la vida para ellos no podría ser mejor

 

 

*

 

 

Ahí la rutina siempre era la misma, en sus manos estaba hacerla más divertida, por eso Yunho siempre intentaba que los ejercicios de resistencia física fuesen lo más amenos posibles. Estaban haciendo uno de los ejercicios, que consistía en subir y bajar del banco lo más rápido posible “¡Como si quemase!” y después añadía “Si Chanyeol, a ti también te queman”, cuando Jaejoong se cae al suelo, parando el ejercicio. Yunho se acerca rápidamente a él.

 

-¿Estás bien? –le pregunta en seguida, intentando mirar en el lugar donde se ha hecho daño.

 

-Si, no te preocupes, creo que me he torcido el tobillo –contesta Jaejoong con una sonrisa –Iré a que la Dr. Sunny me de una pomada –mira alrededor sonriendo para no preocupar a nadie, pero Yunho sigue mirándolo intranquilo –de verdad, le dice dándole en el hombro un toque amistoso –Chanyeol me acompañará –Al final Yunho asiente, aunque muy reticente, dejando que el chico ayude a Jaejoong a salir de la sala y llevarle con la doctora.

 

Ya fuera y habiendo caminado lo suficiente, Jaejoong se despereza y empieza a caminar de manera normal ante los ojos atónitos de Chanyeol.

 

-Es que a veces los entrenamientos de Yunho son muy duros –explica Jaejoong mientras camina, siendo seguido por el otro –Finjo que me tuerzo el tobillo y luego me escapo un rato, y de paso, te saco a ti, que tienes una cara de necesitar un respiro –comenta pasándole la mano por el cuello, mientras Chanyeol asiente y saca la lengua como si fuera un perro.

 

-Yunho es muy exigente en los entrenamientos, creo que se piensa que somos un escuadrón del ejército –dice Chanyeol.

 

-Bueno, él estuvo en el ejército, era el líder, el Alfa, es normal que para éstas cosas nos trate así, pero no se lo tengas en cuenta, hace todo lo que puede para no aburrirnos y hacerlo más divertido –explica Jaejoong, el otro asiente con la cabeza y se dirigen a las habitaciones -¿Qué tal todo? –pregunta entrando en su habitación, invitando a Chanyeol a entrar.

 

-Bien, mis poderes van mejorando, ya sé controlarlos y usarlos cuando quiero, lo que me falta es ajustar la intensidad –contesta sonriendo mientras se sienta en la cama al lado de Jaejoong, quien con una palmadita en el colchón le ha hecho saber que quiere que se siente a su lado.

 

-Entonces van muy bien –dice mientras le corresponde la sonrisa –Y con Kris… ¿qué tal? –pregunta curioso ladeando la cabeza.

 

-Oh… Kris… bueno… bien, nos llevamos bien, creo que confía en mí, aunque siento que todavía hay cosas que no me ha contado, pero esperaré a que él quiera hacerlo –Chanyeol sube los pies a la cama mientras juega con las manos.

 

-Eso es bueno, seguramente en el futuro te pueda confiar más cosas, solo necesita tiempo –Jaejoong le sonríe.

 

Se quedan un rato en silencio, Chanyeol lo rompe con una pregunta.

 

-¿Llevas mucho tiempo aquí?

 

Jaejoong se queda unos segundos en silencio antes de responder.

 

-Si –contesta finalmente.

 

-¿Cuánto? –pregunta de nuevo Chanyeol.

 

-No lo sé con seguridad, ¿importa acaso? –le responde mirando hacia el infinito.

 

-Era simple curiosidad, Amber me dijo que llevabas bastante aquí –Jaejoong asiente y se vuelven a quedar en silencio.

 

-¿Volvemos? –pregunta Chanyeol señalando hacia la puerta, refiriéndose al entrenamiento de resistencia.

 

Jaejoong mira hacia arriba, como si se lo estuviera pensando, pero en realidad no tarda mucho en responder.

 

-Nah –dice, provocando que se rían, haciendo eco por el pasillo, expandiendo la alegría que desprendían esas inocentes risas.

 

 

*

 

 

“Ponte de pie, hoy es el día.

Muévete a una velocidad cegadora,

no te pares ante nadie.

Todo el mundo de pie,

nuestros héroes volverán mañana,

cuenta regresiva de los días que faltan”

Hero’s Comeback – nobodyknows+

 

 

Chanyeol estaba preparado, listo para defenderse, en ese instante, el silbato sonó y le empezaron a llegar proyectiles que fue derribando con pequeñas bolas de fuego que dejó suspendidas en el aire, moviéndose también alrededor de la sala, porque no solo le llegaban proyectiles por un lado, de pronto paró, y Chanyeol se sintió como un depredador que se queda en silencio con el oído puesto para saber cuando atacar a su presa, segundos después, una llamarada sale disparada en su dirección a la vez que los proyectiles han reiniciado la marcha, y solo tiene que girarse y dejarse envolver por el fuego para luego guiarlo a su antojo, pero le cuesta un poco, porque tiene que parar los proyectiles a la vez que tiene controlar ese fuego, de pronto, con un grito y como si de él sacase fuerzas, Chanyeol extendió los dos brazos y el controlo el fuego del todo a la par que derribó los misiles que le llegaban, formando, sin saberlo, un fénix con el.

 

 

Jaejoong había estado viendo el entrenamiento de Chanyeol con sumo interés, sobretodo cuando vieron esa figura salir de las llamas, al lado de Kris, Henry y Amber que, aunque no le fuesen a oír ni ver, aplaudían fascinados.

 

-¡Os lo dije! –chilló ella emocionada.

 

-¿Sabrá que lo ha hecho? –pregunta Kris.

 

-Seguramente no, pero si lo sabe, madre mía, menudo control de sí mismo y su poder en tan poco tiempo –comentó Henry asombrado –En solo un año…

 

Jaejoong, quien también había aplaudido al verlo, se quedó mirando la figura de Chanyeol, que respiraba agitadamente y sonreía porque había superado el ejercicio con creces. En un susurro tan bajito que no le oyó nadie, dijo:

 

-Ya es la hora…