| SIETE |

¿Puedes con el silencio?

— Te dije que era verdad. — me susurra mi hermana con un tono que no puedo descifrar.

Trago saliva mientras intento asegurarme completamente que aquella mujer pelirroja, agachada y con el cuerpo lleno de tensión mientras recoge las trozos de copas rotas, es efectivamente Tiffany o no. Caigo en cuenta, en el momento que llevada por el obstáculo que ejerce su cabello en su visión, deja reposar parte de los cabellos rojizos detrás de su oreja, dejando apreciar una pequeña venda cubriendo el lóbulo de su oreja.

Miro a Baekhyun buscando alguna reacción de su parte, y para la buena suerte de Tiffany, solo se deja apreciar un mirada cargada de asombro por la torpeza que aquella camarera acaba de cometer. Aquel tono rojizo y la máscara que lleva, la mantienen en un estado de inestable seguridad.

Busco dar con la atención de Hayeon de manera disimulada, con el objetivo de que Baekhyun no mire en nuestra dirección. Logro mi cometido.

"Necesito que distraigas a Baek, por favor." son mis indicaciones para mi hermana.

Hayeon se saca la máscara que cubre su rostro, y puedo descubrir unos ojos vidriosos junto a una palidez mucho mayor a lo que normalmente suele utilizar. Con su mandíbula tensa y una postura inestable, asiente con la cabeza.

— Baek, necesito que me lleves a casa, por favor, no me siento bien. —suelta convirtiendo su voz en un tristeza pura. Si es fingido, es increiblemente realista, y si es cierto que toda ésta situación la está afectando, creo que tendremos que tocar ese tema en otro momento. En casa, preferentemente, después de escapar de ésta oleada de problemas.

Baekhyun aparta su mirada de Tiffany y descubre la imagen de mi hermana empezando lentamente a temblar. Quizás también deba ir con ella... Esto no parece una actuación.

— Hayeon... —se da un tiempo para mirarme en busca de mi aprobación. Asiento con la cabeza. — Claro, vámonos. Iré a buscar a la señora Kim, para que podamos irnos.

Él empieza a caminar hacia el salón, pero lo detengo sosteniendo firmemente su brazo. Mi mirada absorta en Tiffany, quien se empeña en recoger cada uno de los pedazos de vidrio esparcidos por el césped.

Obteniendo la atención de Baekhyun, le explico:

"Yo iré por mamá, lleva a Hayeon al auto y espera allá. Si se descompensa o algo parecido, yo no podré cargarla, asi que por favor, quédate con ella."

Duda, pero tras unos segundos de meditarlo bien, se voltea en dirección a mi hermana y comienza obedientemente a conducirla en dirección a la limusina negra que nos espera a las afueras de la mansión.

Espero que se alejen unos metros para ponerme de cuclillas junto a Tiffany, — cuidando que el vestido de gala que llevo no muestre más de la cuenta — y juntas, llevadas por el único sonido de mi respiración — ya que Tiffany parece haber perdido la capacidad de respirar de los nervios — es que terminamos de recoger cada resto de copa esparcido en el suelo.

Ella se levanta de golpe con la bandeja entre sus manos, hago lo mismo viendo que se queda estática, como si esperara por mi. Miro hacia Baekhyun y mi hermana, cada vez se ven más lejanos, caminando hacia nuestro vehículo.

Me pongo la máscara sintiendo que de alguna manera es necesario.

— Necesito que hablemos. — dispara. Deja la bandeja junto a una mesa de cóctel.

Frunco el ceño, sé que no puede ver ese gesto.

Le hago un ademán con mi mano derecha para que me siga. Entiende rápidamente y comienza a caminar detrás de mi hasta que llegamos a uno de los jardines más apartados de la casa. Asumo que esto se debe a que aquí la luz es escasa, y el personal encargado de ambientar la fiesta, es nulo en esto sector. 

La mano de Tiffany se aferra a mi vestido, buscando no perderme de vista en el momento que nos adentramos a la oscuridad del jardin, que tiene como única fuente de luz, unas pequeñas farolas con poca fuerza para iluminar.

Llevada por conocer este lugar, siendo varias veces las que vine a una fiesta de ésta familia, es que logro casi sin problemas, sentarme en una banca. Tiffany hace lo mismo, con suma delicadeza.

Hay un largo silencio, que yo a pesar de que deseo decirle muchas cosas, no puedo romper. Menos con la nula luz, que la priva de ver mis gestos.

— Yo sé que me equivoqué, y por eso quiero pedirte perdón. No supe como llevar las cosas y te besé. — dice con una dolor en la voz.

Empiezo a acostumbrarme a la poca iluminación, al igual así Tiffany, que desliza su mano izquierda hasta alcanzar la mia, sosteniéndola con cuidado.

— Sé que todo esto es mi culpa, y créeme que realmente estoy arrepentida de haber destruido esa amistad que teníamos. — hace una pausa donde presiona con más fuerza mi mano —  Y es que me da exactamente igual haber enviado mi carrera a la mierda, pero no puedo con la culpa de haber arruinado tu vida por un error que fue absolutamente mio. No sabes lo que me he desvelado pensando en todo esto, en esa mirada que me diste después de haberte besado, en lo que significó haber visto correr después de oirme cantar, en esa imagen que vi de ti llorando. Fuí una tonta, la peor amiga de todas, lo sé, y tienes todo el derecho del mundo de odiarme, pero tenía que decírtelo.

Termina de hablar con su voz decayendo poco a poco, yo suelo puedo soltar su mano.

Hay tantas respuestas que me gustaría poder darle, pero no puedo.

Pero es gesto de soltar su mano, sé que es suficiente para darle a entender que esto no es sencillo para mi, que no están fácil que yo pueda verdaderamente perdonarla de lo hizo. Y es que me desvivido hallando un modo de excomulgar a Tiffany de sus errores, pero no es algo fácil de hacer cuando cada maldito día que pasa mi vida avanza en un acantilado de problemas. Cada día peor, cada día teniendo que avanzar con Baekhyun en una relación que terminará convirtiéndose en la razón de un sin sentido en mi existencia. Cada día repitiéndose en mi cabeza ese «dime que no sentiste nada» que Tiffany osó proclamar, tan hiriente como el primer momento que fueron dichas. Cada día rememorando esa indiferencia que la mujer a mi lado pudo mostrar, cuando salí despavorida en medio de una especie de concierto en esa fatídica fiesta. Cada día pensando que recibí mayor comprensión de un desconocido, Noah, — quien resultó la única dicha dentro de mis desgracias — y no de la persona que supuestamente era mi mejor amiga. Quien habiendo tratado desde mi infancia conmigo, no fue capaz de darse cuenta de que necesitaba su apoyo; Noah me apoyó. Cada día dándome cuenta que no soy más que una muda sumisa incapaz de enfrentar a su familia o a la misma Tiffany.

Miro a Tiffany. Mis ojos perfectamente adaptados a la oscuridad descubriendo una mujer de mirada suplicante, rogando mi perdón.

Mi perdón.

— Taeyeon, por favor, hazme saber lo que piensas. Me estoy muriendo con esto. — dice.

Yo alzo ambas cejas regresándolas a su lugar en una fracción de segundo.

¿Cómo llegamos a esto? Si alguien me hubiera dicho que yo, la prestigiosa empresaria Kim Taeyeon, al volver a Corea a reencontrarme con ésta persona, acabaría en una humillación aterradora, hubiera pensado: «Tonterías. Tiffany jamás sería capaz de besarme, y menos de decirme tal barbaridad.»

Y es que me pregunto, ¿realmente llegamos a conocer a las personas?

¿Estuve en presencia de la verdadera Tiffany Hwang alguna vez en mi vida? Lo dudo.

Cuanto desearía decir... ¡Tantas cosas! Dolorosas, fuertes, desvergonzadas palabras para quien se hizo llamar mi mejor amiga.

Incluso anhelo poder desahogarme con una cachetada en su mejilla... Pero no, yo no soy así, jamás he tomado la violencia entre mis manos.

— Taeyeon. — mi nombre saliendo de sus labios casi como un susurro. En una voz que denota llanto, desesperación y un miedo infernal.

Me quito la máscara y luego lentamente quito la que Tiffany lleva puesta.

Inclino mi cuerpo hacia el suyo, ella se paraliza casi al instante en que nuestras respiraciones se acoplan y resguardo mi mano derecha en su mejilla. No hay palabras de su parte, sólo un pequeño tragar, una acción que no puedo hacer calzar. Resto todas las distancias entre nuestros labios, y para mi desconcierto soy bien recibida en su boca, de tal manera que rápidamente nos unimos en un beso carente de cualquier rastro de suavidad. Es excitante, sin duda, es mil veces mejor que aquel beso en la fiesta, donde ella de cierta manera estaba y no estaba allí. Ahora, con nuestras lenguas husmeando cada sector, es que me doy cuenta que está dando todo de sí para descubrir cada rincón de mi boca. El beso de prolonga, y sé que al igual que yo está necesitando urgentemente un poco de oxígeno, pero ambas nos rehusamos a separarnos. El beso sigue hasta que ambas nos obligadas a separarnos por la inexistencia de aire.

Respiraciones aceleradas, y una sensación quemante en cada rincón de mi cuerpo. Ni una sola palabra.

Y no quiero que hable. No cuando aún no le doy el gran final.

A pesar de que el beso ha terminado, mantengo mi postura acariciando su mejilla y dejando mis piernas siempre rozando las suyas. Dejo que la mano en su rostro empiece a descender lentamente por sus cuerpo, evitando los lugares prohibidos pero aún así obteniendo una respuesta acelerada de su corazón, sonrío por ésta gran victoria. Mi mano de detiene en su muslo desnudo, y con mi dedo índice empiezo a golpetear ligeramente su pierna. Tras obtener una mirada algo petrificada de su parte, le indico con mi mano libre que mire en dirección a su muslo. Así lo hace.

Siento su piel erizarse.

Empiezo a trazar el rastro de letras en su muslo, y para mi fortuna, Tiffany rompe el silencio cuando termino de escribir. Espero que entendiera.

— ¿Escribiste Naoa? — dice con confusión. No puedo evitar chasquear la lengua, irritada por su falta de eficiencia al no haber captado el mensaje.

Me acerco a ella de nuevo, lo suficiente para que pueda verme a pesar de la oscuridad. Nuevamente está sin respiración, molestándome de cierta forma, ya que debe jugando conmigo. Le apunto mis labios.

Los mira fijamente volviendo a tragar saliva y humedeciendo su labio inferior. ¿Qué clase de monstruo eres Tiffany?

"No sentí absolutamente nada. Nada." Le explico. Y por ese destello en sus ojos marrones, sé que ha entendido perfectamente el mensaje.

Aquella vez que preguntó si había sentido algo después de besarla, está siendo respondiendo de la misma manera desvergonzada que ella empleó en el momento menos oportuno.

Me levanto de golpe de la banca, sintiendo la adrenalina, o quizás la necesidad de no oir su respuesta, impulsándome a huir de ahí cuanto antes.

Pero ella pronuncia palabras antes de que sea imposible oírla.

— Eso lo veremos, Tae. — la coquetería impresa en su voz.

Dios... ¿Dónde está ese poder que tenía antes? ¿Por qué estoy paralizada, con los ojos increíblemente abiertos, intentando hallar un maldito sentido a sus palabras?

Ella... Ella, ¿ella sintió algo?

¡Taeyeon sal de ahí, ya!

Saco fuerzas de no sé dónde, y vuelvo a ponerme en marcha hacia la fiesta, a buscar efectivamente a mi madre. Pero como una ráfaga, directo al punto y sin detenerse demasia, Tiffany pasa a mi lado, susurrando unas palabras:

— Yo sí sentí algo.

Bien, es suficiente, acabo de perder toda confianza que tenía antes, y ahora estoy sujetándome de una milagrosa mesa con un jarrón de ponche, que para mi desgracia, cae en mi hermoso vestido de diseñador, un regalo de Hayeon.

No me quedo quieta, salgo de allí caminando como autómata hacia la limusina negra que nos espera afuera y haciendo caso omiso a las murmullos criticando el estado de mi vestido. Mi madre ya está en el auto, y si no fuera por como mi atuendo se encuentra, hubiera tenido que dar muchas explicaciones acerca de mi tardanza.

Gracias ponche.

°°°

Ya con el pijama puesto, y tras una ducha de agua fría de unos treinta minutos, me siento sobre mi cama, echando un fugaz mirada a la puerta ligeramente entreabierta de mi habitación. Diviso a Baekhyun, en su propio cuarto, leyendo un libro sobre lenguaje corporal. Lo observo por unos largos segundos, buscando el porqué de su insistencia en conocer en demasía acerca del lenguaje corporal, y ¿a quién engaño? Lo sé, es por mi. Con objetivo de hacer nuestra relación más que algo de palabras, quiere saber todo lo que me acontece. Suelto un gruñido algo extraño dejándome caer a la cama.

Alcanzo mi teléfono en la mesilla a un costado de donde duermo, necesito aclarar ciertas cosas. Necesito "hablar" con Yuri, me parece una estupidez que Tiffany se presentara en China así como si nada, exponiendo su carrera a críticas gratuitas.

Le envío un correo, escribiendo:

Tiffany Hwang está en Shanghái. Me encontré con ella ésta noche, y sin duda, su presencia me parece una ridiculez absoluta.

No debiste autorizarla a venir, ¿qué tienes en mente Yuri? ¿Estropear a Hwang y a mi?

Recapacita tus decisiones.

Después de minutos de releer, costumbre que he tomado en los correos electrónicos, presiono el botón de enviar, esperando con ansias una respuesta lo más pronta posible. Y conociendo a la CEO de la agencia, es probable que su respuesta sea mañana, como plazo mínimo.

Después de eso, reviso esa popular aplicación WhatsApp, en donde descubro que tengo alrededor de veinte mensajes repartidos en nueve personas diferentes. En gran parte personas de negocios, pero destaco a Jessica, con quien comparto una relación netamente amistosa y alejada de los negocios. Hay tres mensajes de Tiffany.

Trago saliva.

Reviso primeramente a mis socios, personas que no puedo perder, ya que son negocios netamente mios. Hechos clandestinamente debido a la petición-obligación de mi madre acerca de alejarme de la belleza de negociar. Después de quedar al día con ellos, analizo las palabras de Jessica, quien dice:

"Me declaro culpable de tu encuentro con Tiffany, espero que lograran amistarse de nuevo. Y tranquila, vuelve a Corea mañana mismo."

Ningún emoji, nada más que la perfección de escribir aquello. Conducta que también comparto.

Ahora, querida Jessica, prepárate para ver mi furia desatarse.

"¿Sabes? Sólo conseguí que mi vestido se manchara con ponche y sentir que las cosas entre ella y yo no pueden estar peor. Gracias, Jessica, eres la mejor."

Tras mi mensaje, y sabiendo que a éstas horas, 00:46 A.M,  Jessica debe seguir en la fiesta, ella es incapaz de responder.

Entonces es que con la peor que mueca que puedo poner, y tras un nuevo mensaje de Tiffany, avisándome que está en línea, es que me decido por ver lo que ha escrito.

Tres mensajes.

Primero: "Yo sé que estás enojada conmigo, y que me besaste para saldar cuentas, y lo acepto. Pero por favor, ponte la mano en el corazón y perdóname."

Segundo: "Haré lo que sea por tu perdón. ¿Quieres que me humille? Lo hago, te lo juro. Sólo dime algo T-T"

Tercero: "Taeyeon, haré lo que quieras, pero por favorrrrr, responde. Sé que estás en línea."

No hay respuesta de mi parte. Estoy shockeada, buscando saber donde está sacando tanto descaro para escribirme después de haber enviado mi vida a la mierda.

Es interesante, sí.

Y voy a aprovecharme de esto para jugar con sus sentimientos un poco. ¿Quieres mi perdón, Tiff? Retrocede el tiempo.

Cuarto mensaje.

"¿No hay nada que pueda hacer? No me dejes en visto. Por favor, por favor, por favor, te lo suplico, pérdoname."

Empiezo a escribir una respuesta sintiéndome en mi elemento, desde el accidente he preferido relacionarme vía escritura con las personas. De alguna manera, me hace sentirme normal, y con una ventaja inexplicable.

"¿Quieres mi perdón? Las cosas son así: resuelve el hecho de que tengo que casarme con Baekhyun, que mi familia me odia, y que he perdido ese prestigio que tenía en mis tratos."

Respuesta inmediata.

"Ahora mismo empiezo. Voy a hablar con tu madre, estoy afuera de la mansión Kim, necesito que me abras la puerta."

Palidezco, mi estómago siente un revoltijo de emociones.

Tiffany. Está. Afuera. De. La. Mansión. Kim.

Alguien máteme.

Escribo tan rápido como sé nunca antes lo he hecho.

"NO SE TE OCURRA. NO ESTOY AHÍ, REPITO, NO ESTOY AHÍ. VETE DE ALLÍ, AHORA. YA."

Tiffany parece estar fuera de línea, y eso me hace estar a punto de caer en un desmayo. Si pudiera hablar, sé que ahora estaría gritando.

Nuevo mensaje para la mujer arruina-vidas.

"VETE DE ALLÍ. SI HABLAS CON MI MADRE, OLVÍDATE PARA SIEMPRE DE MI."

Me aferro a las sábanas, rogando a quien sea, que se digne a responder.

Es un milagro cuando las palabras «en línea» decoran debajo del nombre Tiffany.

"No me gustan esas mayúsculas, Taeyeon. Por favor, no las uses más. Y está bien, estoy regresando al hotel donde me estoy hospedando."

Llevada por unas ganas inmensas de ponerla en su lugar. Vuelvo a escribir:

"Estaba bromeando, imbécil. No te voy a perdonar. O espera... quizás sí. Vuelve a Corea ahora mismo y lo pensaré."

"Sorpresa: me niego. Nos vemos muy pronto Taeyeon."

Desconectada, dejándome con ganas de responder, pero sabiendo que por su estúpido orgullo no responderá, quizás, ni leerá. Y eso que debería estar sumisa en busca de mi perdón, pero no, me desafía.

¿Quién te entiende Tiffany?

El timbre de la casa de Hayeon, resuena varias veces. Y la verdad, no me basta ni siquiera un segundo, para saber qué quien está tocando la puerta es Tiffany. Esa forma de tocar haciendo una melodía, es sin duda, de ella.

Me levanto de golpe, empujando a Baekhyun quien camina a abrir la puerta. Me gustaría que estuviera Hayeon para ayudarme a distraer a Baek, pero no está, se encuentra con mamá, discutiendo acerca de su estado depresivo en la fiesta.

Abro la puerta y descubro a una joven usando un gorro que deja pequeños destellos rojizos de su cabello, unas gafas oscuras y una bufanda de un color opaco cubriendo parte de su boca. Es Tiffany, lo sé. Me saluda con la mano y sé que está pronta a hablar ya que empieza a bajar aquella prenda que cubre ligeramente su boca. Me apresuro en voltear a ver a Baekhyun, y usando un lenguaje de señas muy extraño le digo: "Una clienta, ya se va, dame unos segundos. Ve a dormir, Baekhyun." Tiffany se quita las gafas alzando ambas cejas. Va a protestar, pero mi mirada suplicante, le retiene. Baekhyun se encoge de hombros y regresa, por obra de una divinidad, a su cuarto.

— Déjame hablar con Baekhyun, lo pondré en su lugar. — suelta con odio.

La única que se tiene que poner en su lugar, eres tú, Tiffany.

"Largo." Le hago leer mis labios. Ella niega con la cabeza, y con algo de brusquedad, me hace a un lado, pasando dentro de propiedad privada.

— Será sólo un minuto. — susurra.

Y me vale mierda que sean diez, cinco, un segundo, yo solo quiero verla fuera de mi casa. Lejos, en Corea, olvidándose completamente de mi existencia. ¿Para qué complicar las cosas? ¿De dónde saca ese afán por revolver mis problemas hasta niveles catastróficos? Es tan sencillo como dar la vuelta, irse, regresar a la estabilidad de ser un icono de la música en Asia.

Pero ella está aquí. En busca de poner en su lugar a Baekhyun.

La tomo de los hombros y con toda mi fuerza la empiezo a conducir hasta la puerta, pero ella, con el mayor silencio que nuestra pelea se puede ejercer, se rehúsa a marcharse. Es más fuerte, para mi desgracia. Pero aún así le sigo dando pelea.

— Te juro que regresaré todo a la normalidad, o quizás no. Pero todo será mejor, te lo juro. — un susurro casi inaudible, ronco, y. Usa toda su fuerza para apartarme, y es que he quedado fuera de combate con ese tono que erizó mi piel.

Empieza a caminar con la mayor gracia que una vestimenta de cuero completo le puede dar. Sensual, cautivador, la forma en cómo esa ropa se ajusta a su piel es una imagen única delineada por ese rojo intenso en su cabello, dándole cierta aura rebelde.

Taeyeon, ¿no estás harta de esos pensamientos acerca de Tiffany? ¿No tienes dignidad? Arruinó tu vida, y tu solo piensas en lo bien que se ve caminando hacia el cuarto de Baekhyun, lista para enfrentarlo.

Paren ahí, va a enfrentar a Baekhyun.

Corro hasta ella y me abalanzo enviándola bruscamente hacia el suelo. Mierda, Baekhyun nos oyó.

— ¿Taeyeon? — dice. Escucho como se levanta de su cama y sus pasos acercándose.

Tiffany se levanta de golpe, haciendo una carrera para presentarse en la habitación de Baek. Me levanto detrás de ella lo más rápido que puedo, y justo cuando la mirada de Baekhyun va a ver a Tiffany, la empujo hacia el baño, haciendo que caiga desgraciadamente fuerte contra la bañera.

— ¿Qué fue eso? — pregunta acercándose hacia el baño.

Miro a Tiffany, está absorta en una herida que está empezando a dejar ligeros rastros se sangre en su palma derecha. Me horrorizo, sabiendo que yo provoqué aquello, pero me concentro en interponerme entre el baño y Baekhyun.

"Fue mi ropa, me daré un baño." Resuelvo. Sabiendo que estoy en pijama y que mi cabello está mojado, anunciando que me he bañado.

— ¿Qué me estás ocultando? — se abre paso entre el baño y descubre una chaqueta de cuero sobre un banquillo, como ejemplo de mi ropa, y la bañera siendo cubierta por las cortinas de baño, estoy segura Tiffany se está escondiendo. Me está ayudando.

Baekhyun me mira extrañado.

— ¿Estás bien? ¿Bañarte dos veces? — se aleja del baño. Y tras mi insistencia de sentirme sucia, se aleja hacia su cuarto, dudoso.

Oh Dios, nos salvamos por poco.

Entro al baño y cierro la puerta. Abro las cortinas y descubro a Tiffany, mirando molesta su mano. Hago una mueca al ver la sangre corriendo por su mano.

"Encenderé el agua, y te lavarás la mano." Movimiento de labios, que anuncio, no leyó.

Está mirando su mano y con su mano libre quitando el parche de su oreja. Pronuncia casi imperceptiblemente las palabras: «tres accidentes.»

Por su poca atención, enciendo el agua, y alabo al cielo que solamente se sobresaltó, pero no gritó. O Baekhyun sabría de inmediato que alguien está conmigo en el baño.

Su ropa empieza a mojarse, pero no parece importarle demasiado. No así a mi, que estoy incansablemente mirando esa blusa blanca que empieza a pegarse a su piel, dejando en evidencia un brasier de color claro sumamente exquisito. Trago saliva, y en serio, agradezco que ella esté sumida en limpiar de la sangre su mano mientas inspecciona que tan profunda es la herida haciéndose de su palma.

Corta el agua por iniciativa propia. Mira su ropa, su blusa es pura agua. No así su pantalón, que no sufrió gravemente los efectos de la regadera. Su cabello rojizo más intenso que nunca por el agua.

Empieza a desabrocharse la blusa, y es entonces cuando abro la puerta del baño como una condenada y me lanzo a mi cuarto, cubriendo mi cabeza con mi almohada, y rogando, que de una maldita vez Tiffany Hwang se vaya. Me está confundiendo, me hace parecer débil.

Más débil de lo que soy.

Me levanto de golpe sabiendo que no hay forma de que actúe así cuando Baek puede descubrir a Tiffany cuando lo desee. Apago todas las luces de la casa, y con la alabada costumbre de cerrar la puerta del cuarto de Baekhyun, me despido de él con una sonrisa falsa. Me sonríe, extrañado.

Tiffany sale del cuarto de baño, y no puedo ver lo que hace debido a la nula luz.

Unas brazos se aferran a mi espalda, parece que su mano herida no resulta un problema para ella. Me paralizo en el instante que pequeños besos se hacen de mi cuello y su nariz comienza a husmear mi piel, cada rincón de mi cabello y mi ropa.

Me aparto de ella, y casi regalándome en bandeja corro hasta mi habitación para refugiarme bajo mi cama. Y tal como pensé, un peso se deja caer sobre mi, mirándome fijamente en una escena de oscuridad y la ligera luz de la luna filtrándose por mis ventanas. Sus ojos fijos en los mios, en una posición donde, imponiéndose, sus manos descansan a ambos costados de mi cabeza.

Estoy helada, y aún así, a la espera de algún movimiento de su parte. Anhelando.

Se acerca a mi oído, recargando su peso en mi. Se ríe, y santo cielo, todo el control que había ganado ante sus demostraciones de afecto anteriores, se ha ido a la mierda. Mi respiración haciéndose pesada y mi corazón palpitando como nunca.

— ¿Sabes? Ese segundo beso me dejó claro lo yo sentí. — se aleja de mí oído y empieza vagar con si nariz por mi cuello y clavícula — Me gustas, Taeyeon.

 

 

---------------------------------------

 

Cierta persona ya se decidió por lo que quiere. A ver que tal le salen las cosas a Tiffany.

Like this story? Give it an Upvote!
Thank you!

Comments

You must be logged in to comment
Skyth06
#1
Chapter 8: Joder buenisimo xD
Enssei #2
Chapter 8: Ahh mierrrr.....creo que vuelvo a querer a Fany(?)
Pero aún así TaeTae de mi ♥ a sufrido mucho por su culpa :(
Leyla_quiroz #3
Chapter 8: wooooooooooo esto se pone bueno igual tiff siempre estuvo enamorada de tae solo q recién se dio cuenta
asique ya se viene el taeny!!!!!!!!!!! woo!!!!! actualiza pronto!!!!!!!!!!!!!!!!
My_carttoon
#4
Chapter 8: wtf? porque ese cambio tan brusco?? tiffany tiene que sufrir por lo que hizo a tae
k0309_hwang
#5
Chapter 8: What?? Espera.... Queeee?? Más o menos Tiffany, qué demonios te sucede? Como pasas de luchar por su "amistad" y perdón pero terminas queriendo violarla?

Oh rayos!! >.< esto no me huele bien... Si es cierto todo que puede ser posible.. Eligió el peor momento y forma de decirlo..

Yo la verdad, entiendo la posición de fany, tae no podía pretender que fany supiera de sus sentimientos por arte de magia. Tenía que haber tomado valor cuando pudo y enfrentarla.. Así no habría sufrido tanto, total ya vivían separadas y sin hablar. Así que, aunque me duela decirlo, Tae está así por dejarse pisotear y controlar por su familia. Entiendo su incapacidad, pero a caso no podía contratar otro y ya? El no poder hablar la limita de mucho pero si puede negociar y llevar una empresa por qué diablos es tan sumisa con los que no tienen razón?

Estoy frustrada >.<
mamurayamaken #6
Chapter 8: Parece una persona queriendo jugar con sus sentimientos solamente .....pobre Tae debe estar muy confundida
k0309_hwang
#7
Chapter 7: Santa mierda :O ... He dicho ya que amo a Jessie en los dramas taeny? Bueno lo reitero c;
Excelente capítulo, a ver qué bomba explota ahora :O
My_carttoon
#8
Chapter 7: puta madre que asco ese baekhyun, ni en Los fics tae le corresponde, por maricotas, espero que Tiffany lo baje a golpes ;)
Leyla_quiroz #9
Chapter 7: esto me encantaaaa asi me gusta que sea tiff se dio cuenta de que ella quieres a tae
hasta dejo su carrera solo por conseguir su perdón. tiff esta luchando con todo ojala y esto no termine mal!!!!!
por favor yo ya quiero taeny!!!!!!!!!!! esta historia me encanta!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
actualiza pronto!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
key-k09
#10
Chapter 6: Tiffany está loca y solo mete en problemas a Taeyeon. ¡Decidete y para con tantas locuras!