La lujuria y el amor combinados son la peor traición, si le sumas el jugar a callarlos es una torre de naipes imprecisa que en cualquier momento caería dejando en el suelo corazones rotos.

Camino al café donde se iba a encontrar con Chaerin, Jessica pensaba en las palabras que iba a usar. Quería ser directa, pero no agresiva; lo importante era hacerle entender que la amaba pero que inexplicablemente se había enamorada perdidamente de otra persona. Cupido les jugo una broma a ella y su reciente bailarina.

Habían pasado dos meses desde que Kim Taeyeon llegase al grupo y aunque al principio Jessica se lo había negado, alejándola, tratándola con indiferencia. La bailarina se había convertido en un espejismo de mujer que deseaba tener. ¿Cómo era posible que en tan poco tiempo una extraña se le hubiese metido tan dentro, una estaca en el corazón? ¿De verdad existía el amor a primera vista?.

Para Jessica, una persona de carácter templado, era difícil de creer, pero lo peor era todo lo que le había costado conquistar a Chaerin, conseguir que la amara, curar sus heridas una por una.  No fue una cosa sencilla, pero lo consiguió. Ella sabía lo mucho que la quería la platinada, nunca se lo dejo de demostrar,  la defendía, le daba su lugar, la acogió en su vida rodeándola con sus brazos y mirándola a ella, pronunciando su nombre cuando hacían el amor.

Aun así, al parecer esto no le bastaba a su corazón que constantemente exigía la presencia de Taeyeon y esos ojitos que le daban ganas de arrancárselos a besos.

A pesar de todo, Jess no había intentado nada, su mente había sido infiel, pero no su cuerpo; sabiendo que en el fondo ella era correspondida con la misma intensidad, en silencio. Para la novia de CL el pacto que tenían ambas era más importante que sus deseos, sin embargo, no sabía cuánto tiempo podría aguantar y no quería cerrar la puerta de una amistad por culpa de un resbalón.

Al llegar al café se encontró con la platinada y sus enormes gafas de lectura, estaba clavada en uno de esos tantos libros que le gustaba a Jessica regalarle para relajarla y controlar su ataques obsesivos –compulsivos.

-Hola – le dijo y le deposito un beso en la frente

“Este podría ser el último beso que podría darte”

-¡Amor llegaste!, que lenta eres. Siéntate por favor. ¿Qué vamos a tomar?... hace mucho que no salíamos.

Era verdad, las grabaciones y la agenda de la cantante parecía en su vida un cinturón de castidad.

-Sorpréndeme, siempre lo haces –

Chaerin sonrió sonrojada.

-¿Qué te parece si pedimos un café y unos deditos de queso para llevar y nos sentamos en el parque a charlar? – le pregunto CL con emoción.

Jessica sonrió de medio lado y aceptó, amaba el lado infantil de Chaerin… también le gustaba el de Taeyeon.

Después de recibir su pedido Chaerin tomó la mano de su novia y caminaron al parque, la platinada la notó  silenciosa, distante. Pero espero a estar cómodamente sentadas para charlar.

-¿Qué sucede? – preguntó Chaerin después de un rato

-Cuando te vi la primera vez, supe que siempre serías mi amor platónico – dijo con nostalgia Jessica y observo como CL la miraba extrañada – pensaba que estabas tan lejos de mí. Poco a poco, me dejaste entrar a tu vida y fue tan perfecto, porque eres todo lo que siempre soñé, mi ideal y cuando ocurrió lo de Dara sentí miedo…

-Jess…

-Shhh – la callo s