Kim Taeyeon 1/3

Taeyeon Omma (Full Version)

Kim Taeyeon 1/3

 

Las manos alisaron la falda oscura antes de acomodarse el saco de igual color, pues el frío estaba empezando a levantarse. Alzó el rostro hacia el cielo, contemplando el alto edificio en el que Sooyoung le había citado para su "cita".

Soltó un bufido y regresó la mirada al reloj en su muñeca, por quinta vez en los pasados 3 minutos.

Daban las 7:00 p.m., cuando una figura enfundada en un vestido blanco, que terminaba en un pico en diagonal, apareció caminando a lo lejos. El ruido de las zapatillas hizo que Taeyeon se despegase de la pared en la que se encontraba apoyada.

A unos cuatro pasos de ella, la otra persona se detuvo, moviendo su sombrero límpido para mostrar su rostro.

 

-"Hola."

 

Taeyeon ladeó la cabeza a un lado, confundida ante el cordial saludo y la gentil sonrisa. No queriendo ser descortés, aceptó la mano que le era ofrecida.

 

-"Tiffany."

 

-"Taeyeon. Kim Taeyeon."

 

-"¿La madre de Irene, me supongo?"

 

-"Sí. Ya tuvimos el… um, placer, de conocernos antes."

 

 

Taeyeon sonrió de lado, con ironía.

 

 

Sin embargo, la pelirroja al frente suyo pareció ignorar el gesto, pasándola de largo y asomándose en vez a la entrada del lugar. Después, giró sobre sí misma para verla, sonriente.

 

-"¿Entramos?"

 

Todavía confusa por la amabilidad –y peor aún, confundida porque ahora no tenía motivo para ser defensiva con quien la había atacado días atrás-, asintió despacio.

La rubia caminó sin prisas, no molestándose por dejar a la otra ir siempre a la delantera. Unos cinco pisos después, arribaron al restaurante donde Sooyoung había reservado la cena.

Los ojos ónices recorrieron el lugar, aprobando la elegancia, mas cuestionándose si realmente podían darse el lujo de gastar en algo así. Los cafés, por su parte, viajaron a todos los rincones con embelesamiento, no pudiendo evitar ser atraídos a los altos ventanales que fungían como paredes y permitían ver la ciudad allá abajo.

 

-"Es hermoso."

 

-"Sí, lo es."

 

-"En verdad que estoy sorprendida."

 

El comentario, aunado a la mirada de reojo que Tiffany le lanzó, hizo que Taeyeon alzara la ceja en modo de pregunta.

 

-"Tiene que acordar que nuestro primer encuentro no es muy memorable, Taeyeon-Ssi. Honestamente, me la vi difícil en imaginar que haría tiempo para recibirme; imagínese ahora mi sorpresa con semejante lugar que ha elegido para traerme…"

 

-"Yo no lo elegí –respondió normal, apoyando las manos también en el vidrio para contemplar la ciudadela-. Sooyoung lo hizo."

 

-"Sooyoung, debí suponerlo."

 

Los ojos ónices se viraron a verla, sólo para encontrar los párpados cerrados de la otra. Enseguida, Tiffany le pidió que tomasen su asiento para ordenar la comida de una vez, a lo cual ella aceptó en silencio tras quitarse el saco negro, dejando a la vista la camisa blanca que llevaba debajo.

 

Los menús vinieron y se fueron, así como el mesero anotó sus órdenes mientras uno más les servía algo para beber.

 

No fue hasta que se quedaron solas, que Tiffany decidió entablar conversación.

 

-"Mirándola más de cerca –añadió, mientras daba un sorbo a su vaso-, no parece una persona muy ocupada."

 

-"Las apariencias engañan" –Taeyeon sonrió con malicia.

 

-"¿No eres muy joven para ser madre?"

 

-"¿No eres muy joven para ser maestra? –Taeyeon devolvió, a lo que la pelirroja alzó la ceja divertida-. Oh, espera, eso no sonó muy convincente."

 

-"Me he dado la cuenta –rió bajito-. Adoro enseñar, adoro a los niños; es todo lo que puedo decir."

 

-"Bieeeeen –arrastró la palabra, delineando el contorno de su vaso con sus dedos-. Al menos una de nosotras adora su trabajo."

 

-"¿Cuál es el tuyo?"

 

-"Papeleo de oficina –Taeyeon suspiró para hundirse en su silla-. Nada del otro mundo, reportes por aquí, informes por allá; control estadístico, escaneos terrestres, sincronización de dispositivos, seguimiento de… Ya sabes, etc., etc."

 

-"Se oye interesante."

 

-"Lo es… Si te agradan esas cosas."

 

-"Entonces –Tiffany se aventuró a preguntar-, ¿qué te agrada a ti?"

 

Taeyeon alzó la mirada de la mesa para mirar a la pelirroja, y la estuvo mirando así durante un largo rato, sin decir ni una palabra. Ante eso, la profesora se preguntó si habría hecho mal en preguntar aquello; y estuvo a punto de disculparse, cuando un mesero arribó con sus platillos.

Los alimentos fueron dispuestos en la mesa y las dos comenzaron a comer. El ruido de los tenedores tintineando, el cuchillo cortando, las voces de los demás comensales alrededor haciendo eco.

 

-"Solía estar en campo activo."

 

El susurro al otro lado de la mesa captó la atención de Tiffany, que no dudó en parar de comer para observar a la rubia que jugaba sin ánimos con su comida.

 

-"No tenía mi propio escuadrón, normalmente me asignaban diferentes. Lo mío eran las misiones; salir, pelear, patear a los tipos malos –una risa suave escapó de sus labios aquí-. Ya sabes, toda una maga de combate."

 

-"Y… -Tiffany titubeó-… ¿qué pasó? ¿Por qué no seguiste siéndolo?"

 

-"Cosas… Cosas pasan, Tiffany."

 

La aludida no presionó más, intuyendo ligeramente el motivo por el que la rubia delante suyo había cambiado de puesto. Vio a Taeyeon retomar su comida, despacio y casi desganadamente.

 

No había pretendido en un principio llevar las cosas a este punto. La verdad es que la primera impresión que se había llevado de Kim Taeyeon, era la de que lidiar con ella sería todo un dolor de cabeza.

 

Para Tiffany había sido la típica mujer prepotente que jamás se equivoca ni acepta tener errores.

 

Así que había ido preparada hasta las amarras para confrontarla si era necesario. Y sin embargo…

 

 

Aquí estaba. Con una rubia tan calmada e inofensiva.

 

 

No había nada que enfrentar. Al menos, no aún.

 

-"Y… -quiso aligerar el ambiente-. ¿Dónde está el Señor Kim?" –bromeó.

 

-"¿Disculpa?"

 

-"Hazte”- Tiffany le sacó la lengua-. Anda, Taeyeon, que te estoy preguntando por el marido."

 

El entrecejo de la nombrada se alzó todavía más, con una sonrisa entre divertida y sarcástica formándose entre sus labios.

 

-"Vale, ¿es que jamás te tomaste la molestia de preguntarle a Taeyeon?"

 

-"Me lo dices como si tuviera pinta de entrometida."

 

-"Ohh, así que vienes reclamándome sobre mi hija, pidiendo una cita conmigo y encima me dices que no eres una entrometida."

 

-"Taeyeon-Ssi, ya. Deja de voltearme la pregunta y responde."

 

-"No sé de qué estás hablando –la rubia cerró los ojos y llevó un bocado a su boca-. Soy soltera."

 

-"Espera –la pelirroja se detuvo de golpe-, ¿no estás casada?"

 

-"Irene es mi hija, no biológicamente, claro. Pensé que lo sabías. ¿No se supone que las maestras saben todo sobre sus alumnas?" –cuestionó con diversión.

 

-"Wow, me has tomado desprevenida."

 

-"Cielos, realmente me haces reír" –acotó, negando con la cabeza y materializando sus palabras.

 

El comentario hizo que Tiffany sonriera atrevida, alzando el ceño y mirando de forma entretenida a la otra. La rubia, sin embargo, se dedicó a tomar el pañuelo en su regazo para limpiarse los restos de comida de sus labios.

 

Taeyeon se tomó su tiempo, disfrutando ser el centro de atención. Apenas hubo terminado, apartó lo que le quedaba de comida, o eso intentó hacer cuando una mano se lo impidió.

 

-"¿Me disculpas?"

 

-"Tienes que estar bromeando” –en este punto, el acto en sí tomó el poco enojo de la aludida como para siquiera darse cuenta que su nombre había sido pronunciado, confianzudamente, por una extraña-. ¡Ni siquiera has comido la mitad de tu porción!"

 

-"Mira, Tiffany, agradezco tu preocupación y todo, qué lindo detalle –quitó con delicadeza aquella palma de su camino-, pero ya no quiero."

 

-"Ta-…"

 

-"Tengo antojo de postre, ¿vale? Anda, cero palabras, ya."

 

La pelirroja suspiró en derrota, reclinándose hacia atrás en lo que su compañera llamaba a un mesero para que retirara su plato; el cual fue reemplazado al poco tiempo por uno más chico con una bola de helado en él.

 

-"Entonces… basta de rodeos –Taeyeon dejó de jugar con su cucharilla, que había estado delineando su postre-. ¿Para qué querías hablar conmigo?"

 

El tono ligeramente triste, así como la mirada que se mantenía baja, hicieron que las facciones de Tiffany demostrasen preocupación. Un poco incómoda con el cambio de ambiente, pasó la lengua por sus labios para después respirar con calma.

 

-"Me agrada Irene –comenzó suave-. Es una buena niña, y puedo ver que no eres una mala madre, Taeyeon. El asunto es… ya verás, sus notas han bajado y tú casi nunca te involucras con ella."

 

-"¿Cómo puedes saber eso?"

 

-"No vas a buscarla ó llegas tarde a hacerlo, faltas a las reuniones y ni siquiera asistes a los festivales de Jung-Gu. ¿Por qué?"

 

-"Tengo mucho trabajo, señorita Hwang –los ojos ónices la confrontaron, haciendo a la otra estremecerse por el repentino cambio de actitud-. Alguien tiene que hacerlo."

 

-"Yo en…"

 

-"¡No, no lo entiendes!"

 

Las palmas que se aferraron a la mesa junto al cuerpo que se puso de pie de súbito, obligaron a la profesora a reclinarse atrás en su asiento. Sorprendida, sus cafés observaron a los otros ojos cerrarse con fuerza, los labios siendo mordidos en lo que probablemente los dientes se encontraban unos contra otros.

 

Los nudillos blancos sujetaron el mantel, hasta liberarlo poco a poco. Muy despacio, las pupilas ónices fueron reveladas mientras una lengua repasaba su propia boca, en signo de contención.

 

-"No lo entienden –repitió más tranquila-. Y joder, no espero que lo hagan."

 

-"¡Taeyeon, espera!" –quiso detenerla al verla tomar su saco de la silla.

 

-"Le agradezco por preocuparse por mi familia, y esto lo digo en serio. Pero basta, no tiene que liarse en cosas ajenas" –dijo al voltearse.

 

-"No es ajeno –Tiffany rebatió, no agradándole el trato de "usted" al que la rubia había cambiado de repente-. Míralo como quieras, mas ahora sabes mi nombre de pila y yo el tuyo. Puedes decir, somos amigas."

 

-"Por favor, disfrute de la cena, profesora –Taeyeon la miró por última vez-. Sería una lástima que se desperdiciara comida tan exótica."

 

Sin mediar una palabra más, la madre se dio la media vuelta y salió de allí, alcanzando a colocarse su saco al entrar al elevador. Tiffany no apartó la vista hasta que las puertas se cerraron y el aparato tintineó, indicando movimiento.

Con un suspiro de fastidio, se llevó las manos al puente de la nariz mientras cerraba los párpados. Cuando los hubo abierto, lo primero que vio fue la bola de helado de vainilla enfrente suyo, intacta.

Derritiéndose lentamente sobre la cuchara a su costado.

 

 

"Serás una mula."

 

 

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Comments

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alexghastly #1
Chapter 10: gracias por esta historia tan bonita
ailyn2111 #2
Chapter 10: Waa me gusto mucho esta adaptacion que lendooo y sooyong es una loquilla jjjaja es demasiado gracias por terminar de adaptarla :3
Taechi_s #3
Chapter 10: Oww que bonita adaptacion :3
Esa sooyoung es una loquilla jajaja xD
Gracias por adaptarla y saludos :)
Certified #4
translate in english please
kimtaeny1110 #5
Sigh.. if only there is an english version of this. Seems interesting yet i cant understand a damn thing huhu..