Antes de salir de la casa voy hacia la sala de estar, observando el sillón donde ayer dejé a Dara dormida, viendo que no hay nadie. Al parecer Dara si se despertó en la mañana y se fue a su habitación.

Salgo de la casa sintiendo el frío viento de la mañana, dirigiéndome hacía mi auto, bostezando un poco llego hacía el, subiéndome y arrancándolo. Normalmente no suelo despertarme temprano, pero tenemos que irnos pronto a la zona sur y antes de irme de la zona norte he decidido ir a un lugar, el cual debí de hacer visitado desde hace mucho tiempo.

En el camino me detuve en una florería y compré un ramo de claveles rojos. Llegando al cementerio, dudo si bajarme del auto. Mientras iba conduciendo tuve la tentación de regresarme o desviarme y no llegar a mi destino, pero si no lo hago ahora, nunca lo haré y esto siempre me atormentará. Debo de dejar de ser una cobarde y enfrentar mi realidad. Bajo del auto, viendo hacia la entrada del cementerio, tomo aire y entro.

Mientras camino saco el lindro 21, el cuál registra la ubicación de tu presa aunque ya esté muerta. Abro la carpeta de presa, presionando el primer nombre que aparece “Durami”, observando la ubicación, confirmando que estoy en el lugar correcto. Sin embargo no sé dónde está su tumba, así que intento encontrar al encargado, viendo a lo lejos a un señor bastante mayor de espaldas y cavando en la tierra un agujero, entonces decido acercarme a él.

-¿Disculpe?- El señor sigue excavando, sacando tierra con la pala. Al parecer no me escuchó -¡Disculpe!- Esta vez hablo un poco más fuerte, así que el señor se sobre exalta, haciendo que la dirección hacía donde estaba tirando la tierra cambiara de rumbo hacía mí, sólo veo como la tierra cae en mis pies

-Me ha asustado señorita

-Lo siento

-No esperaba que alguien estuviera aquí tan temprano, normalmente las pocas personas que vienen suelen llegar en la tarde- El señor es bastante agradable, suelta la pala y se agarra la nuca, se ve un poco cansado

-¿Mucho trabajo?

-Bastante, aunque ha disminuido en los últimos años, ya no hay tantas personas muriendo a diario como lo fue cuando empezaron con el sistema de cazadores, eso es bueno. Pero no creo que estés aquí para escuchar a un hombre mayor contar viejas historias y menos en un cementerio. ¿Qué se te ofrece?

-Es sólo que estoy buscando a alguien, su nombre es Durami Palme

-Durami Palme… Durami… o sí, ya lo recordé, sígueme- El hombre comienza a caminar y yo lo sigo

-¿Era amiga tuya?

-Digamos que fuimos sólo conocidas

-Ya veo. Recuerdo el día que la enterraron, su familia estaba desconsolada, al parecer la mató un cazador- Escuchar eso hace que sienta un hueco en el estómago –Es bastante triste cuando llegan personas que son asesinadas por cazadores, pero no los culpo a ellos, ya que la mayoría de los cazadores no quieren matar personas, sin embargo tienen que elegir entre su vida o la de su presa y no les queda otra opción- Lo estoy escuchando, analizando sus palabras y me doy cuenta que ha descubierto que yo fui el cazador que mató a Durami –Hemos llegado, te dejaré sola con ella

-Gracias por traerme hasta aquí a pesar de saber que fui yo quien la mató

-Como dije antes, ustedes los cazadores no tienen la culpa, además eres una buena chica, veo en tus ojos que no hay maldad a pesar del destino cruel que te ha dado la vida- El señor comienza a caminar alejándose en el horizonte

Volteo hacía la tumba de Durami, la cual tiene grabado su nombre, día de nacimiento y día de muerte. Mi mirada se detiene por más rato en el día de su muerte, viendo que es exactamente una semana antes de mi cumpleaños. Observo que tiene unas flores ya secas, así que las quito y pongo las nuevas que he traído, antes de empezar a hablar con ella, rezo un poco, mis padres son creyentes de un Dios, así que se me han inculcado estas creencias y tradiciones; termino de rezar y solo me quedo observando su nombre.

-Hola… tal vez no debería iniciar así, después de todo ¿Qué persona cuerda le saluda a alguien que no sigue vivo? Creo que después de todo no estoy tan cuerda como pensaba… visitando la tumba de la persona que maté, realmente me he vuelto loca- Escucho como el viento sopla, haciendo sonar las hojas de los árboles –Sabes ha sido difícil después de que te cacé, algunas de mis noches tengo pesadillas, con tus últimos momentos y los gritos de tus padres cuando descubren que moriste. Cada vez que recuerdo los rostros de las personas que he cazado, sé que soy una escoria; sin importar si se merecían o no la muerte, yo fui quién terminó con sus vidas, aunque Harin diga que no soy una asesina, sé que si lo soy- Mis lágrimas empiezan a salir –Vaya, ahora estoy llorando. Después de que te cacé- Muevo la cabeza hacia los lados –Después de que te maté, eso es lo que realmente hice, matarte. Me prometí no volver a llorar, pero en serio las cosas se han puesto bastante difíciles últimamente…- Dudo si hablar de esto, pero no hay nadie y sé que las palabras se las llevará el viento –Ahora tengo una presa, su nombre es Dara… Sandara Park, he intentado alejarme de ella, he intentado ser de lo más desagradable con ella pero, logra hacer que me olvide a veces de que ella es mi presa y saca a la verdadera persona que soy; tuve la oportunidad de cazarla, sin embargo no pude y he dejado que las cosas empeoren, ya que… Dara me gusta, pero no quiero que me guste, porque podría enamorarme de ella, no puedo permitir que eso suceda. Sin querer me enamoré de ti y sufrí mucho cuanto te vi morir en mis brazos, diciéndome que no me culpabas, después de eso caí en depresión y casi muero en ese accidente de moto. Por eso mismo no me quiero enamorar de Dara, no quiero volver a sentir que me muero, no quiero llevar la carga de haber matado a dos personas que amé, no lo soportaría- Limpio mis lágrimas con la mano -Esa fue la razón por la que tardé tanto en venir a visitarte, simplemente no soporto el hecho de haber matado a alguien que amé, no lo quería aceptar, además de que toda la zona norte me recuerda a ti pero, Dara me hizo darme cuenta que debo de tomar valor y enfrentar el pasado, es algo que siempre va a vivir conmigo y tengo que aceptarlo. Por eso estoy el día de hoy aquí, aceptando que estás muerta, que fui yo quien te mató y nuevamente te pido una disculpa, sabes que no tuve otra opción, si la hubiera tenido, la habría elegido mil veces antes que matarte. Tal vez es estúpido el haber venido solo a contarte mis problemas, a pedirte una vez más disculpas pero, espero que me hayas escuchado y en verdad puedas perdonarme.

XXI

-¿Por qué la dejaste salir?- Le pregunto a mi madre

-Dara es alguien mayor, no tenía por qué pedirnos permiso

-Mínimo ¿Sabes a dónde fue?

-Dijo que tenía que visitar a alguien y que no tardaba, tranquila Chaerin, estás un poco alterada. Mejor ven y siéntate a mi lado, que te quiero decir un par de cosas, aprovechando que Dara no está cerca y Harin está arriba preparando su maleta para irse a vivir contigo- Le hago caso a mi madre y me siento junto con ella

-¿Qué me quieres decir?

-¿Segura que Dara no es tu novia?

-No puede ser ¿Tú también?, ayer Harin me preguntó lo mismo y te responderé lo mismo que le dije a ella. Dara NO es mi novia, es sólo mi vecina

-Yo realmente supuse que sí lo era, ya que aquel día que llegué a tu departamento estaba ella, no creo que una simple vecina esté en casa tuya tan temprano y sobre todo desayunando

-No puedo creerlo, llegaste toda alterada ese día a mi departamento, pero ¿Pudiste observar que estábamos desayunando?

-Nunca subestimes a una madre, después de todo tenía que ver qué clase de vida estaba llevando mi hija y cuando vi a Dara ahí supuse que era tu novia

-Mamá en verdad Dara no es mi novia, es más, hace un par de semanas que se mudó al edificio, no llevo mucho de conocerla y ese día estaba desayunando en mi casa porque no tenía nada que comer en la suya, así que muy amablemente la invité- Mi madre entrecierra los ojos

-Mira tú, que buena vecina eres, un ciudadano ejemplar- Muevo mi cabeza de arriba hacia abajo, afirmando lo que dijo mi madre –Chaerin, esa ni tú te la crees, a mí no me engañas, te gusta Dara. Chaerin ¿Tomaste mi consejo de conseguir unos cursos para aprender mentir? Porque sigues sin saber hacerlo

-Mamá en serio no me gusta Dara

-No lo creo, he observado como tus ojos la miran, es obvio que te gusta, además de que sería una nuera bonita- A mi madre no se le escapa ni una

-No niego que es hermosa- Muy hermosa –Pero simplemente detesto su actitud y nunca me gustaría alguien como Dara

-Pues no creo que la detestes tanto como dices. En fin, síguete mintiendo a ti misma diciéndote que no te gusta Dara, cuando es totalmente lo contrario- Mi madre suspira -¿Por qué tenías que ser como tu padre? Nunca quieren admitir nada cuando son más que obvias las cosas. Chaerin cuando alguien te hace mejor persona, debería estar esa persona en tu vida. Y es obvio que eso te sucede cuando estás junto a Dara, ella te hace una mejor persona, deberías de admitir que te gusta- Cuando a mi madre se le mete algo en la cabeza y sabe que tiene razón, no hay nada que pueda contradecirla

-¿Es de lo único que querías hablar?

-No, también quería hablar contigo de Harin. ¿Estas segura de que puede irse contigo a vivir? Si no lo estás, tu padre y yo podemos detenerla e intentaremos que cambie de opinión

-Para serte sincera, no estoy segura, sin embargo ya es hora de que empiece a ser una buena hermana, estos dos años que no estuve con Harin los perdí, pero ya no perderé más años. Pensaba que Harin estaba segura lejos de mí pero, ella tiene razón, estará siempre en peligro, ya sea cerca o lejos de mí y creo que a mi lado estará un poco más segura porque así podré protegerla. Y no creo que Harin cambie de opinión sobre irse a vivir conmigo.

-Tienes razón, Harin difícilmente cambiará de decisión- Mi madre tiene una cara triste y preocupada

-Madre no tienes nada de qué preocuparte, cuidaré a Harin, incluso con mi vida si es necesario

-Chaerin no digas eso

-No madre, tengo que decirlo, es una posibilidad que no podemos ignorar…- Antes de poder decir algo más, tocan la puerta, así que mi madre se levanta, pasa a un lado de mí y escucho que abre la puerta

-Dara, que bueno que ya estás aquí. Chaerin estaba preocupada por ti- Al escuchar eso me levanto y doy media vuelta

-¡Yo no estaba preocupada por ella!- Camino rápido hacía donde se encuentra mi madre y Dara –Pero ¿Dónde estabas? ¿Por qué te fuiste?

-¿Y a eso le dices no estar preocupada por Dara?

Mi madre pregunta con una sonrisa divertida y antes de poder decirle algo se va. Entonces Dara y yo nos miramos a los ojos, para después mi vista dirigirse a sus labios, pero antes de hacer algo de lo que me pueda arrepentir decido hablar.

-¿Y bien?

-¿Recuerdas que te había dicho que antes vivía en la zona norte?

-Sí

-Solo fui a visitar a una persona- ¿A quién fue a visitar Dara? Pero, no quiero saber nada más de su vida, así que intento someter la curiosidad que tengo dentro de mí

-Ya veo, está bien

-Entonces ¿No estabas preocupada por mí?- Realmente si lo estaba

-Para nada, sólo estaba preocupada por el tiempo, temía que no llegaras y me viera en la penosa necesidad de irme sin ti

-¿Te hubieras atrevido a abandonarme?

-Sí- No

-Entonces si estabas tan preocupada por el tiempo ¿Por qué no lo hiciste? ¿Por qué no te has ido?- Buena pregunta

-Porque Harin y mis padres no me lo hubieran permitido- En cierta forma esto es parte de la verdad

-Chaerin ya estoy lista para irnos- Harin interrumpe nuestra “pelea” y viene bajando las escaleras con una maleta

-¿Harin va a venir con nosotras?- Dara me pregunta

-Sí, ayer decidió irse a vivir conmigo

-Vaya, después de todo no eres tan mala hermana mayor como creías pero, eso no hace que cambie de opinión sobre ti

-¿Sigues odiándome?

-Sí, te sigo odiando tal y como la primera vez que nos vimos en los departamentos- No creo que lo esté diciendo en serio o ¿Si?... Aunque si lo dice en serio debería de alegrarme y no cuestionármelo porque eso significa que me importa lo que siente por mí

-Entonces el sentimiento sigue siendo mutuo, yo sigo sin poder soportarte

-Del odio al amor solo hay un paso- Dara y yo nos volteamos hacía donde está Harin -Es solo un dicho, pero creo que puede ser cierto- Harin se encoge de hombros -Deberíamos irnos ya, que después se nos hace tarde

-Tienes razón, se nos hará tarde, espero que Dara ya tenga su maleta preparada

-No te preocupes ya está preparada, después de todo no puedo esperar llegar a la zona sur y ya no verte la cara tan seguida

-Totalmente de acuerdo contigo, yo tampoco quiero ver esa fea cara que tienes tan seguido

-¡Ya dejen sus peleas de pareja para otro momento!, después tendrán mucho tiempo para pelear cuando estemos en la zona sur. Chaerin y Dara vayan por sus maletas, les doy cinco minutos para que vayan y regresen- Harin nos manda y como niñas pequeñas le hacemos caso

Voy por mi maleta, la cual deje lista antes de salir a visitar a Durami, la tomo y bajo las escaleras para encontrarme a Harin y a mis padres, viendo que se están despidiendo de ella abrazándola. Dara llega también y solo los ve con una sonrisa en su cara, para después verme y decirme con señales que me acerque a ellos. Creo que mi madre tiene razón, Dara me hace ser una mejor persona.

-Harin no le vayas a dar tantos dolores de cabeza a tu hermana

-No te preocupes mamá, intentaré no hacerlo

-¿Intentaras?- Pregunto

-Sí Chaerin, intentaré, pero no prometo nada- Se forma una sonrisa en el rostro de Harin

-Las extrañaremos hijas- Mi padre me abraza -Fue bueno verte después de tanto tiempo

-Yo también los extrañaba- Le correspondo el abrazo

-Chaerin, tengan cuidado en el camino. Maneja tranquila, despacio, no hay prisa por llegar a la zona sur

-No te preocupes madre, llegaremos con bien- Mi madre me abraza y yo le correspondo. Están por salir las lágrimas de mis ojos, pero las retengo. No quiero que Dara me vea débil. Mi madre y yo nos dejamos de abrazar, para después dirigirse hacia Dara

-Dara fue un placer conocerte

-También fue para mí un placer conocerlos, Chaerin tiene unos padres maravillosos- Dara le extiende la mano a mi madre para estrecharla, pero ella la abraza y Dara se sorprende

-Gracias por hacer que Chaerin tomara el valor y decidiera venir a la zona norte, gracias a ti, pudimos ver de nuevo a nuestras dos hijas juntas- Mi madre empieza a llorar

-No tiene nada que agradecerme. Chaerin es fuerte, así que en cualquier momento hubiera decidido venir, lo único que hice fue acelerar esa decisión