La ráfaga de viento se retira totalmente del lugar, el calor de la luz tenue hace relajar a los jóvenes presentes, mientras miran calladamente, Meisa muy tranquila se levanta del asiento del piano en dirección hacia los jóvenes, inclina su cabeza en señal de reverencia y se reincorpora.

 

Meisa – Soy Meisa Kuroki, pianista asignada a este establecimiento, gracias a los dos por ayudarme, gracias por salvarme, joven Jin, Detective Jun, estaré siempre agradecida por lo que han hecho, no tengo palabras para expresarles este milagro que ha sucedido conmigo, todo el tiempo y dedicación será recompensado.

Detective Jun – mostrando su placa que lo acredita como detective- Señorita Meisa, detective Jun, aunque no me explico como han sucedido las cosas debo llevarla a la delegación de policía a confirmar su ubicación

 

 

Meisa - Estoy dispuesta a ir a la delegación, a que las cosas se aclaren, pero antes quiero ver a mi madre.

Jin - ¿Qué hacemos con el piano?

Detective Jun – Hay que destruirlo.

Meisa – ¡NO! El piano es solo un instrumento, lo que hice fue abrir una especie de entrada a ese mundo, es solo el himno que no debemos cantar.

 

El Detective y el pianista se miran sin entender, Meisa explica que al siempre tocar el piano el Aura reconoció que era ella y no le molestó su presencia, pero el Aura no va a molestar si no tocamos ese himno, las teclas rotas fueron una advertencia, que a su vez era la parte de la melodía que tenía que perfeccionar. Ahora hay que arreglar las teclas del piano, y buscar una explicación coherente para las personas.

 

Detective Jun – Diremos que alguien te secuestró todo este tiempo, y no volvió mas a buscarte y lograste escapar, buscaremos algún lugar abandonado como evidencia, y dirás que tenías una venda en tus ojos por lo que no sabes quién era, y que te tenía atada y encerrada, lograste zafarte y sacarte la venda de los ojos al pasar los días y no traerte comida como acostumbraba. Vamos a buscar una casa abandonaba, Jin, quédate acá a seguir practicando hasta sea que tu hora de terminar, esperá mi llamado para tomar declaración en la comisaría.

 

 

Meisa y Jin asienten y el Detective y la pianista se dirigen a la salida del salón mientras el pianista se alista para seguir tocando el piano. Jun es el primero en salir, mientras Jin se alista a tocar Meisa va detrás del detective, al estar en la puerta se detiene lentamente y agarra el borde de la puerta, en una actitud pensante, y serenamente mira al pianista, al mismo tiempo Jin pensante dirige su mirada hacia la puerta y ve a Meisa en la puerta, las miradas cruzadas reflejan serenidad y pensamientos de cosas aún sin respuesta.

 

 

Detective Jun – Señorita Kuroki.

 

 

Meisa voltea la mirada al detective, que le abrió la puerta del auto para ir a la delegación. El Detective sonríe cortésmente mientras espera. Meisa suspira calmadamente, no parece ser una persona recién liberada de cautiverio, y se alista a entrar al auto.

 

Detective Jun- mientras está cerrando la puerta- Hay algo  que le tengo que decir respecto a su madre.

 

 

Meisa mira serenamente confundida al escuchar eso, obviamente tiene que saber como está su madre antes de confirmar su aparición. El auto es encendido y se dirigen a la ciudad.

 

Fin.