"Lo sé"

-¿Estas bien? – Tiffany tomo la mano de Hayeon - ¿Quieres que entre contigo? –

-Si, por favor. – Ella asintió y volvió a mirar a su casa a través de la ventanilla del coche.

-Vamos. – Tiffany abrió su puerta y salió del vehículo, dio la vuelta a este y abrió la puerta del copiloto. Hayeon salió despacio, cuando escucho cerrarse la puerta del coche se agarró a ella con fuerza – Tranquila, estoy segura de que tu hermana habrá recapacitado.

-Tú no le conoces. – Hayeon respondió con dolor.

Era cierto, ella nunca llego a conocerle, ni siquiera pudo imaginar quien era realmente y lo que quería. O más bien lo que no quería. Subieron las escaleras de la casa y llamaron al timbre, el ama de llaves abrió la puerta.

-Señorita, su hermana la está esperando. – Hayeon se dirigió deprisa hacia las escaleras.

-¿No te ha dicho Jisil que te estaba esperando? – Taeyeon estaba apoyada en la puerta del salón, mirando a ambas.

-Yo, estoy cansada. – Hayeon bajo la vista al suelo.

-Si no hubieras salido de fiesta no lo estarías. – Su confesión fue seca.

-Suficiente. – Tiffany corto la conversación y miro a Hayeon – Sube a descansar a tu habitación. – Le sonrió con cariño – Nos veremos en la noche. –

-No. – Taeyeon respondió con fuerza – Hayeon está castigada, esta noche no ira a la fiesta. –

-Pero… - Hayeon la miro con los ojos llenos de lágrimas.

-Pero nada. – Taeyeon la miro fijamente y la adolescente subió las escaleras corriendo. Taeyeon se irguió y miro a Tiffany desafiante.

-Estas amargada. – Tiffany respondió furiosa, salió de la casa dando un portazo. Bajo las escaleras al coche y se paró ante el ¿Y se iba? Ah, no, aun no se iba. Hoy Kim Taeyeon iba a conocer a la auténtica Tiffany Hwang. Se giró, subió las escaleras abrió la puerta y entro, la ama de llaves la miro atónita. Ella levanto la cabeza con decisión - ¿Dónde está Taeyeon? –

-En el despacho. – La mujer señalo el salón.

-Gracias. – Sin esperar a que la mujer la guiara, entro a la sala, miro la puerta de madera corredora que había al fondo y se dirigió a ella. En lugar de llamar la abrió de golpe, Taeyeon se sobresaltó y la observo sorprendida desde el sillón tras su escritorio, entro cerrando la puerta, dio unos pasos parándose ante el escritorio – Te estas equivocando con tu hermana. –

-¿Vienes a decirme eso? – Tiffany la miro con una ceja levantada - ¿Eres un ejemplo? Tu padre ha tenido que ponerse enfermo para que regresaras. –

-¿Es que acaso tenía que regresar por algo? – Ella le miro con rabia – Mi vida estaba en los Ángeles y mi padre iba a verme cuando quería. –

-Me ha desobedecido, nos ha engañado. – Taeyeon se levantó de su asiento y camino nerviosa por el despacho - ¿Quieres que lo ignore? –

-No, lo que quiero es que te preguntes porque lo ha hecho. – La miro a los ojos – Porque no se atreve a mirarte a los ojos y decirte lo que siente, lo que quiere. –

-Solo es una pequeña por dios, ¿Cómo va a saber lo que quiere? – Taeyeon la miro como si estuviera loca.

-Yo tenía su edad cuando te conocí. – Noto como Taeyeon se ponía tensa - ¿También pensabas eso de mi entonces? –

-Era distinto. – Taeyeon trago saliva despacio.

-¿Por qué era distinto? – Sonrió con dolor - ¿Por quién era mi padre? –

- ¡Ya basta! ¡Tú no lo entiendes! – Se puso nerviosa - ¡Quiero lo mejor para ella! ¡Solo trato de protegerla maldita sea! –

-¡¿Protegerla de qué?! – Tiffany estallo - ¡¿De la vida?! ¡Ella tiene que vivir su vida Taeyeon! ¡Tiene que caerse, tiene que levantarse, enamorarse, sufrir, llorar, reír, conocer, divertirse, tiene que decir quien es! –

-¡¿Para qué se equivoque