¿Estarás bien?

Invierno

Abrí los ojos, los débiles destellos de luz iluminaban parcialmente el interior de la habitación, aun llevaba puesto aquel traje negro que cargaba con mis pesares. El olor a arroz recién preparado navegó por la hendidura de la puerta conquistando mi sentido del olfato, inmediatamente el sonido del cuchillo sobre la tabla de picar me hizo tomar conciencia sobre donde me encontraba. Me senté al borde de la cama, miré mis temblorosas manos y respiré profundamente, después me impulsé poniéndome de pie sobre ambas piernas y caminé hacia el baño, me pare frente al lavabo y me miré al espejo, leves ojeras se dibujaban bajo mis ojos, abrí el grifo y mojé mi rostro con un poco de agua, lavé mis manos enérgicamente en más de una ocasión, como si el hecho de tallarlas fuertemente lograra que todo lo malo que había ocurrido desapareciera. Avancé pausadamente a la puerta de la habitación y antes de girar la perilla respiré profundamente, luego dibuje una falsa sonrisa en mi boca y abrí la puerta.

Jinyoung se encontraba preparando la cena, y Sandeul dormía sobre el único sillón de la casa.

-¡Buenas… tardes! –Dijo Jinyoung en tono bajo mirando al reloj de la pared - ¡Ya casi esta la cena!

-¡Solo beberé un vaso con agua! ¡Gracias! – Dije mientras tomaba un vaso del estante y servía agua en su interior.

Caminé hacia donde Sandeul se encontraba, me senté en el suelo y encendí la televisión, el volumen era realmente alto y en lo que tardé en encontrar el control remoto y bajar el volumen, Sandeul ya se había despertado.

-¡Ahhhhhhmmmm! ¡Buenos días! – Dijo Sandeul estirándose y bostezando.

-¡Tardes! ¡Ya casi noches! – Le respondió Jinyoung desde la cocina.

-¿Dormí tanto?... – Pregunto Sandeul sin esperar respuesta y después añadió – Y bueno… ¿ya está la cena? ¡Muero de hambre!

-¡Solo dame media hora más y estará lista! – Dijo Jinyoung sonriéndole, mientras revisaba el contenido de las cacerolas.

-Entonces ¿qué puedo comer mientras terminas de cocinar? – Pregunto Sandeul.

- Mmmm… Si no recuerdo mal, debe haber yogurt en la nevera - Le respondí poniéndome de pie y sentándome a su lado en el sofá.

Sandeul se puso de pie y fue directamente a la nevera, la abrió y saco una natilla, un pedazo de pastel que aún quedaba de mi cumpleaños y por supuesto el yogurt.

-¡No te comas el pastel, probablemente ya caducó! – Le advertí.

-¡Ya veremos! – Me respondió Sandeul mientras buscaba una cuchara – Mmmmm…  Todavía sabe bien – Dijo mientras saboreaba el pastel.

Jinyoung y yo lo veíamos divertidamente mientras devoraba aquel pastel.

-Por cierto… Yul ¿Cómo te…? – Sandeul comenzó a decir.

-¡¡¡¡Ya casi esta la cena!!!! – Jinyoung interrumpió a Sandeul mirándolo a los ojos moviendo la cabeza de un lado a otro indicándole que aún no era prudente hacer ese tipo de preguntas.

Lo anterior paso desapercibido para mí ya que simulando ver la televisión mi mente comenzó a recordar lo que hacía algunos días había ocurrido.

-FLASBACK-

Los doctores y las enfermeras comenzaron a correr en dirección a la habitación de mi madre. Los segundos comenzaron a avanzar rápidamente y aun no sabíamos que ocurría adentro. Por un momento mi padre se olvidó de su resentimiento hacia mí y me permitió permanecer afuera de la habitación mirando lo que ocurría en su interior. Suspire preocupada y mire a mi padre, su rostro lucia pálido y sus ojos habían perdido  la expresión, poco a poco perdió la fuerza de sus piernas y en un instante lo detuve entre mis brazos, en ese momento sentí como mi mundo comenzaba a desmoronarse poco a poco.

Jinyoung se acercó a ayudarme y juntos dirigimos a mi padre hacia los asientos más cercanos. Mire nuevamente a mi padre como tratando de encontrar a aquel hombre que parecía inquebrantable, pero había desaparecido, entonces me senté a su lado tomándolo fuertemente de las manos. Permanecimos en silencio por algunos minutos.

- ¡Te traeré algo de beber! – Le dije poniéndome automáticamente de pie y soltando sus manos.

Y aun sin dar el primer paso, mi padre sujetó mi mano impidiéndome avanzar, sin decir una palabra me senté nuevamente a su lado, aun podía sentir la desesperación y angustia que lo dominaban, yo sostenía firmemente sus callosas manos mientras el estrujaba con fuerza un pequeño relicario.

Sandeul, Baro, Gongchan y Jinyoung permanecían de pie frente a la puerta de la habitación 359. Después de algunos minutos aquella puerta por fin se abrió. Inmediatamente mi padre se puso de pie y a continuación un doctor se acercó a nosotros.

- ¡Lo lamento! ¡Hicimos todo lo que pudimos! El cáncer deterioro su salud y no pudo soportar un paro cardiorrespiratorio! ¡Mis condolencias! – Expuso delicadamente el doctor.

La figura de mi padre se desdibujó frente a mis ojos, aquel hombre fuerte, imponente y temible había desaparecido, ahora los ojos de mi padre dejaban caer lágrimas de dolor mientras permanecía de rodillas sobre el suelo. Sentí una fuerte punzada en el corazón y poco a poco mi respiración se aceleró, provocando que mis ojos se humedecieran, pero al sentir las cuatro profundas miradas de mis amigos sobre nosotros, decidí que debía ser fuerte y no dejarme abrumar por mis emociones, así que contuve mi llanto y  endurecí mi corazón.

-FIN DEL FLASHBACK-

Hasta ese momento no había derramado ninguna lágrima, debía ser fuerte por mi padre y por mi madre, la mujer más grandiosa del mundo, la persona que siempre me apoyo y que ahora ya no estaba…

-¡Yul, Hey, Yul! – Me hablaba Sandeul parado frente a mí.

-¡Eh! Si, dime – Dije aun sumida en mis pensamientos.

-¡Ya está la cena! – Dijo Sandeul señalando la mesa llena de comida.

-¡Si claro, ya voy! – Le contesté, me puse de pie y tome asiento alrededor de la mesa.

La cena ocurrió con total normalidad, aunque eventualmente notaba las miradas compasivas de Sandeul sobre mí, Jinyoung llamaba su atención para que él olvidara un poco el tema y yo me sintiera menos incomoda. Después de la cena, Sandeul recibió una llamada informándole sobre la salida de su vuelo de regreso a Japón, solo había hecho una visita exprés y debía regresar al trabajo.

-¿Y bien Yul? Debo irme, todavía debo preparar mi maleta, pero debes prometerme que estarás bien ¿lo estarás? – Me dijo Sandeul alargando su dedo meñique en señal de promesa.

-¡Si, lo prometo! – Le respondí y entrelace nuestros meñiques.

-¡Muy bien, te creo! – Aseguro Sandeul abrazándome vigorosamente y después de despedirse de Jinyoung se marchó.

Jinyoung comenzó a almacenar la comida que había sobrado mientras yo recorría con la mirada cada parte de la sala, por un momento el silencio se volvió ensordecedor.

-¡Yul! De verdad ¿estarás bien? - Pregunto Jinyoung acercándose a mí.

-¡No lo sé! - Le respondí  mientras las lágrimas ya se desbordaban por mis ojos y en seguida lo abrace tan fuerte que podía sentir el palpitar de su corazón acelerándose.

 

 

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¡Hace mucho tiempo que no actualizo!

Así que los compensare subiendo dos capítulos.

Les dejo este y enseguida subo el siguiente...

 

 

 

 

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Comments

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Lisett #1
Chapter 6: Espero que todo se solucione!
Y como cambio su vida para siempre?
Lisett #2
Chapter 5: Espero que pueda arreglar esta situacion...
Lo bueno es que estan alli para apoyarla.
^_^
Lisett #3
Chapter 4: Ay no, que le va a pasar?
Me quede con ansias de seguir leyendo...
Vas muy bien!
Lisett #4
Chapter 3: Que ira a decir Gong Chan?
Lisett #5
Chapter 2: Que iba a decir Baro??? Quien era ese hombre?
Tendre que esperar hasta el siguiente capitulo...
Lisett #6
Chapter 1: Espero que Gong Chan no haya tenido nada que ver con la llamada...
Quiero saber que pasa despues!