Golpees y gritos, así como intentos por abrir la puerta, aunque también risas y burlas, eso escuchaba. Desde que Tae llego y le dije que era rara me persiguió y ha estado golpeando mi puerta por casi diez minutos, así como gritando.

-¡Sal ahora Baekhyun!- grita una vez más.

-No quiero morir a manos de una enana rara.-

-¡Deja de llamarme rara y enana!-

-Bien saldré pero deja de golpear mi puerta.-

-Está bien.- dijo ya tranquila y dejando de golpear, al salir me di cuenta de que se veía muy cansada por lo que ha hecho. –Dime ¿Qué sucedió en la oficina?-

-No lo sé, no fui.-

-¿Por qué?-

-Mi madre llamo y además de decirme lo de mañana me pidió no ir, ya que mi abuelo lo pidió.- dije mientras la dejaba pasa y nos sentábamos en la cama.

-¿Él lo ha pedido? Baek eso se me hace cada vez más extraño, comienzo a pensar que el sospecha algo, si es que no lo sabe ya.-

-Tae sé que la actitud de mi abuelo es extraña pero estamos casados de manera legal y vivimos juntos, además nuestra relación de amigos es muy buena que muchos piensas que tenemos algo y no me refiero a mi familia, sino a los chicos de la universidad.-

-En eso tienes razón.-

-Ahora que te has calmado, cuéntame ¿Qué tal estuvo la cita? Y no quiero oír otra vez que bien o divertida.-

-Para empezar conocí a una amiga de ella, se llama Jessica y es muy atractiva, aunque Tiff es aún más…-

Por los próximos cuarenta minutos vi a mi mejor amiga contarme tan feliz y llena de emoción su cita con una chica que estoy seguro que puede hacerla muy feliz y llena de esperanza de que el amor no es algo asqueroso y sin sentido. Esta Taeyeon solo la había vista una vez, aunque si las comparo quizás no sea lo mismo ya que ahora se veía más feliz. Desde que la conozco ha tenido un semblante serio y aunque había veces que sonreía no era lo mismo que en este momento, deseo que Taengo y Tiffany puedan tener una buena relación.

-Así que ¿vieron una película de terror?-

-No sabía que era de terror.-

-Supongo que no leíste la trama.- ante mis palabras la veo hacer un gesto donde mostraba que yo tenía razón. –La próxima vez que ella elija.-

-Lo hare.- dijo mientras se levantaba. –Por cierto, cuando la deje en su edificio, creo que vi a ese chico Park.-

-¿Park?-

-Sí, el chico que vimos cuando comimos en el puesto.- ¿Chan Yeol?

-¿En verdad?-

-Vive en el mismo edificio que Fanny, que extraña coincidencia.-

-Sí, muy extraña.-

-Te dejo necesito dormir.- asiento y la veo irse.

Aun no entendía como es que podía ser posible que Chanyeol y Tiffany vivan en el mismo edificio, más importante aún, porque eso me inquietaba. Tiff es una chica amable y hace buena paraje con Taengo y Chanyeol, él es algo diferente y me inquieta su forma de ser. Aun con los pensamientos en mi cabeza dando vueltas quede dormido.

-Baek, despierta es hora de irnos.-

-Ya voy.- como cada día que visitamos a mi familia Taengo es la primera en despertar, ya que prepara de comer para los dos y algo para darle a mi madre y abuelo, quienes aman la comida de Tae, y como no hacerlo y es buena cocinando principalmente haciendo postres.

Después de darme un baño y arreglarme baje a la cocina para encontrarme a una Tae muy tranquila y centrada en la preparación de un pastel, por el dulce aroma sé que era de chocolate, demonios ya quiero comerlo, pero si entro a la cocina sé que me sacara a patadas.

-Si vas a entrar hazlo.- dijo viéndome, ya que me encontraba en el umbral de la cocina. –Hice muffins para desayunar ya casi están, así que podrás comer eso.-

-Taengo te amo y más cuando me preparas de comer.- dije en tono de broma.

-Deja de decir tonterías.-

-Pero es cierto, Tae casate conmigo.- dije aun en broma. –Espera ya estamos casados.- comente con mi tono sin modificar para lo que Tae me golpea con una cuchara en mi frente. –Eso dolió.-

-Lo mereces por estar molestando.- no dije nada pero no dejaba de sobarme.

Me acerque al refrigerador y tome la jarra llena de jugo de naranja, Tae me paso un par de vasos y en ambos deje verter el líquido, coloque la jarra en un espacio de la ocupada mesa. Tome uno de los vasos y se lo ofrecí a Taengo, ella lo tomo y se senté en una de la sillas, yo hice lo mismo. Con un gesto me señalo una canasta cubierta con un trapo, al quitarlo vi varios muffins de chocolate recién hechos.

-Hice suficientes para hoy y mañana.- sonreí en forma de agradecimiento y tome uno de ellos, ella hizo lo mismo.

Después de diez minutos disfrutando de muffins, así como del jugo y de un hojuelas azucaradas y leche, una campana suena, Taengo se levante y del horno grande saca una bandeja de muffins recién hechos, los coloca en la mesa y dos minutos después suena otra campana, esta vez saca del horno chico un pastel de chocolate, al ver tanto postres me sorprendió.

-¿Por qué has hecho tantos?-

-Me ha sobrado masa.-

-Eso no creo que sea posible, siempre haces la masa exacta.-

-No molestes ya te dije que hice masa de mas, ahora come o ya no te daré más muffins y no tendrás una rebanada de pastel.-

No dije más solo la vi preparar el pastel con la decoración adecuada, después lo coloco en una caja de cartón y la sello con cinta. Los muffins los decoro y después los puso en cajas ideales para ellos, e igual que el pastel los metió en una caja. Una vez que termino con su labor se fue y pasados diez minutos regreso ya bañada y con ropa limpia e ideal para la junta.

-Llevate el pastel.- me pidió, asentí y lo tome, al llegar a la cochera abrí la puerta cajuela dejando ahí el pastel, Tae hizo lo mismo con los muffins.

La oficina de mi abuelo se encontraba cerca de la mansión solo que siempre había juntas en la casa, lo cual me sorprende ya que esta vez se decidió que fuera en la empresa. Durante el trayecto vi a Tae muy nerviosa, podría jurar que algo le inquietaba, incluso jugaba con sus dedos.

-¿Todo bien?-

-Sí, todo bien.- dijo volteando a ver por la ventana. Seguíamos en silencio algo muy raro para nosotros. –Baek detén el auto, quiero algo de beber.- dijo, pare y en el momento que ella bajo se acercó a la cajuela, la abrió y saco la caja de muffins, eso me ha dejado sorprendido. La vi entrar a una tienda, ahora que me doy cuenta es el edificio donde vive Tiffany.

-Así que le has hecho algo a tu nueva novia.- aunque ella no estaba solté mi pensamiento, para después bajar del auto y entrar, encontrándome una escena algo graciosa para mí. Tae se veía muy nerviosa esperando en la caja, mientras repetía su dialogo.

-Hola Fanny, pasaba por aquí y quise pasar a verte y dejarte algo que hice hoy.- dijo y después dejo ir aire que retenía. –Eso no funcionara.-

-Estoy de acuerdo.-

-Baek, ¿Qué haces…?-

-Te ayudare con tu idea, así que relajate.-

-¿Idea? No sé de qué hablas.- detrás de mi escucho abrirse una puerta cerca de los refrigeradores de las bebidas.

-Perdón por tardarme.- era Tiffany que salía. –Baek, creía que solo era Tae.-

-Hola Tiffany, ¿Cómo has estado?-

-Bien ¿y tú?-

-Igual.- Taengo se queda paralizada eso me ha hecho reír. –Tae me comento que vieron una película de terror, ¿era buena?-

-La verdad no la vi bien, había escenas horribles y… la verdad no me gustó mucho.-

-Lamento lo sucedido con la película.- dijo Tae en tono sincero.

-Tranquila, ya no importa.- comenta Tiffany. – ¿Qué llevas en esa caja Tae?- pregunta mientras se acerca a ella y le da un beso en la mejilla, aunque parece que lo hizo casi en la boca.

-Son muffins.- le dice mientras se los da. –Son de chocolate, como me dijiste que desayunabas hasta el restaurante te traje unos muffins que hice.-

-¿En verdad? ¿Los has hecho tú?-

-Sí, ella buena cocinan, pero si se trata de repostería ella es excelente.- Podía ver la forma de ser de Taengo frente a una chica que le gusta realmente, con cuidado y silencio empecé a caminar.

-Noona, ¿sabes dónde fueron Sica noona y D.O?- pregunta un chico.

-No Chan, preguntale a Soo.-

-Ella tampoco sabe.-

-¿Necesitas algo?-

-Sí Tiff noona, quería que me ayudaran con unos trabajos de finanzas de la tienda.- aun no veía al chico pero esa voz me parecía familiar.

-Buenos días Taeyeon noona, me alegra verla.-

-Igual Chan Yeol.- ese nombre y esa voz, era el chico de China.

-Tae espera iré a buscar lo que necesita Chan.-

-Claro, no te preocupes.- Le dijo. –Chan Yeol hace unos días te vi en un puesto de comida cerca ¿cierto?-

-Oh es cierto, eres la amiga de Byun Baek Hyun.-

-Exacto, así que tú eres amigo de Tiffany.- me encontraba escondido entre uno de los estantes.

-Por cierto ¿Cómo se encuentra?-

-¿Baek? Bien, creo que deberías de llamarlo.-

-No tengo su número, no te preocupes por eso, yo te lo doy.- Tae si haces eso te matare.

-Gracias.-

-No hay de que, solo llamalo y salgan.- quería salir de ese lugar pero no podía ya que la puerta estaba cerca de donde se encontraba él. –Te recomiendo que lo llames ahora, y no te preocupes no está ocupado.-

-Bien lo hare.- Pocos segundo des pues mi teléfono comenzó a vibrar.

-¿Quién habla?- aunque sabía que era él, fue lo primero que dije y de hecho lo susurre.

-¿Baekhyun? Soy Chanyeol.-

-Ah, hola.-

-Lamento no interrumpir nada.-

-No pasa nada.-

-¿Por qué susurras?-

-Es que…-

-¿Qué hace ahí oculto?- pregunta una chica usando un chaleco verde supongo que es la empleada del lugar. –Le he preguntado ¿Qué hace ahí oculto?- creo que es la chica que Tae me conto de carácter frio.

-¿Baekhyun? ¿Qué haces ahí?-

-Yo…bueno…- veía a Taengo reírse de mí, mientras que yo no sabía que decir o pensar. Juro que me la pagaras Kim Taeyeon.