Perdon por tardar tanto, estaba en evaluaciones. Los proyectos, tareas y estudiar para los examenes finales fue horrible, a penas y se donde tengo la cabeza. Afortunadamente ya estoy de vacaciones, espero actualizar más seguido y que  les guste la actualizacion.

 

Gracias por sus suscripciones, comentarios y votos. Cada uno me anima a seguir escribiendo.

 

 

 

 

 

Si esto era todo un reto y si el estar en esta situación me hacía sentir algo extraño, por no decir excitada, pero estaba mal, no podía sentirme así, por lo menos no en este momento.

 

Lo que me preocupaba era lo que venía a continuación, tenía que deslizar la única prenda que quedaba sobre su cuerpo.

 

-Estas muy tensa –dijo Taeyeon –Creo que esta parte la puedo hacer sola, no tienes por qué preocuparte.

 

-¿Estás segura?

 

-Si, sigo algo débil pero con el agua fría mis músculos y mi cerebro se reanimaron… aunque te puedo dar la opción de quedarte y mirar.

 

-Creo que mejor te dejo, estaré detrás de la puerta por si necesitas algo.

 

-Ya te he molestado bastante, pero creo que necesitare ropa.

 

-Oh, claro. Casi olvido esa parte.

 

Ella tomo el dobladillo de su ropa interior y antes de que lograra mostrar más de su piel que aun se encontraba cubierta salí disparada de ahí. Mi corazón palpitaba tan rápidamente como nunca lo había hecho, era extraño. Sentía miedo por estas nuevas sensaciones, pero sobre todo excitación y ansías por más de esas sensaciones.

 Regrese a la habitación central y todas seguían dormidas pero estoy segura de que queda muy poco tiempo antes de que las alarmas comiencen a sonar. Me acerque hasta la cama de Taeyeon y busque entre sus cosas las prendas que iba a necesitar, eso incluía todo. Mi cara ardía y estaba completamente roja cuando tuve que tomar su ropa interior.

 

Llegue hasta al cuarto de baño y Taeyeon me estaba esperando afuera con su cuerpo envuelto en una tolla, su cara y su mirada parecía tener de nueva esa chispa vivaz y de vitalidad.

 

-¿Necesitas ayuda para vestirte?

 

-Ya me has ayudado demasiado, será mejor que regreses a tu cama antes de que todas despierten y nos metamos en problemas.   

 

-Bueno me voy.

 

Confiaba plenamente en que ella podía hacerlo sola, pero aun así estaba preocupada, aun cuando lucia mejor, ella no será capaz de hacer todas esas actividades que el instructor indicara. Está muy débil, necesita dormir y alimentarse bien.

 

Me recosté en mi cama pero me fue imposible siquiera cerrar los ojos. No pasaron ni treinta minutos cuando la alarma comenzó a sonar, unos instantes después las chicas se comenzaron a mover, la mayoría quejándose de lo adolorido que estaba su cuerpo. Jessica comenzó a gritonear indicándole a todas que tenían que estar en veinte minutos en el comedor.

Antes de que llegara Jessica a mi cama me levante y tome mis cosas para vestirme.

 

Todas parecían asombradas de ver a Taeyeon lista y sobre todo aseada. No cruzaron muchas palabras, y solo dos de ella fue tan valiente para preguntarle como estaba, pero nadie quiso saber qué fue lo que le hicieron en ese lugar. Quizás la mejor opción era ignorarlo.

 

En el comedor estábamos todos, comíamos y era como cualquier otros día como en cualquier comida, nadie hablaba solo nos limitábamos a ingerir los alimentos.

 

Mi mirada siempre se desviaba a donde se encontraba Taeyeon, notaba que estaba mejor pero seguía pálida, estaba preocupada por ella y también por mí. Estaba preocupada de que ella empeorara y por mí por todo lo que estaba sintiendo.

 

-Apresúrense, su entrador lo espera en cinco minutos en su formación –dijo Jessica.

 

Todos nos levantamos y tuvimos que dejar algunas porciones sin probar, en lo particular no había saciado mi hambre pero tenía más miedo de lo que ese tipo me fuera hacer si llegaba tarde.

 

Desafortunadamente el día no mejoro, los ejercicios eran cada vez más duros, al igual que sus humillaciones. Sabía que no duraría mucho aquí si esto seguía así y mucho menos podría soportarlo si se pusiera peor.

 

Taeyeon había descansado, bueno por así decirlo, en realidad la única consideración, si se puede llamar así, fue el darle pausas de cinco minutos adicionales entre cada ejercicio.

 

Estaba devastada, tenía miedo. Lo único que quería era regresar a casa, pero por momento me preguntaba si eso sería mejor que estar aquí. Ahí estarías mis padres repudiándome por algo que ni siquiera yo sabía que era, amistades que en su mayoría desaparecieron.

Ahora no estaba segura de cuál era el lugar más deprimente.

 

Termino el día y regresamos a la cabaña y mi autoestima no era la mejor en estos momentos, jamás me había sentido tan humillada. No sé cómo puede aguantar esta misma mierda todos los veranos. Y hablando de mierdas creo que tengo excremento en mi cabello, apestaba tanto que ni yo misma soportaba el olor. Bueno creo que todas están en las mismas que yo.

 

Arrastre mis pies hasta el baño, moverme era toda una hazaña y cuando mi cuerpo por fin tuvo contacto con el agua fue como entrar al paraíso, trataba de concentrarme únicamente en disfrutar del agua refrescándome, pero me mente volvía a todos los acontecimientos de este día y fue imposible reprimir mi llanto. Era demasiado para que una persona pudiera soportarlo.

 

Todas decidimos saltarnos la hora libre que nos otorgan y fuimos directamente a la cama a dormir, la mayoría de las chicas apenas se había recostado cuando ya estaban profundamente dormidas. Para mí es otra historia estaba jodidamente cansada pero se repetía la situación de la noche anterior, mi mente cuerpo estaba cansado pero mi mente se reusaba a dormir.

   

-Shush

Casi salgo disparada de mi cama cuando escuche ese chisteo, afortunadamente mi memoria es rápida y sé muy bien de que se trata. Me gire para estar del otro lado de la cama, y justamente, ahí estaba Taeyeon.

 

-Estás loca, si te ven levantada y sobre todo si nos ven hablando estamos muertas –le dije entre susurros.

 

Entre la poca luz que entraba por la ventana podía ver ese rostro cansado y algo afligido que me dedicaba una pequeña sonrisa. Mentiría si dijera que eso no me hizo sentir mejor.

 

-¿Eso es lo único que te preocupa?

 

-Bueno no exactamente que nos atrapen, sino lo que nos van hacer si lo hacen.

 

-No es tan malo.

 

-¿Me estas tomando el pelo?, acaso olvidaste como llegaste aquí.

 

-No es tan malo. Pudo ser peor, no se talvez pudieron arrancar mis extremidades o algo así.

 

-Que graciosa.

 

-No te preocupes nadie nos va atrapar, están tan cansadas que podría estar gritando aquí y ni siquiera se moverían.

 

-¿Tu no estas cansada?

 

-¿Te refieres de forma física?

 

-Naturalmente.

 

-Mentiría si dijera que no, pero mi cansancio mental es aún peor. ¿Y tú?

 

-Apenas y puedo mover los labios ja, pero mis pensamientos me atormentan.

 

-Bienvenida al club, la mayoría de los “graduados” de este lugar se van no por los castigos físicos, la mayoría se van por el lio que nos crean aquí –dijo señalando su cabeza.

 

-¿Prefieren “volverse” heterouales?

 

-Una pequeña parte, la mayoría… se suicida.

 

-¿Cómo no pueden darse cuenta de la mierda que este lugar? ¿Por qué nadie hace nada?

 

-Nunca se menciona este lugar cuando se da el motivo del suicidio, siempre dicen que es la presión escolar. Todo lo que apunte a este lugar es ignorado.

 

-Hijos de p**a.

 

-Es exactamente lo que yo opino.

 

-Estaba pensando que tal vez la mejor opción sea seguir el plan de Jisil.

 

-¿Quieres fingir ser hetero?

 

-Aun lo estoy considerando, después de todo solo sería un par de años, quizás antes si logro conseguir un financiamiento para la universidad.

 

Ella se recostó apoyando sus manos y cabeza en mi cama, parecía que el tan solo hablar de eso la cansara. Estábamos aún más cerca, pero lo suficientemente alejadas si habláramos de algo prudente.

 

El ambiente se tornó raro, de pronto pasaba mi saliva con dificultad y podía escuchar claramente el golpeteo de mi corazón, cerré fuertemente los ojos como si de esta manera la sensación fuera a desaparecer. Los abrí y ella estaba en la misma posición, con la misma mirada que conectaba tan fuertemente conmigo.

 

-¿Aun sigues creyendo que eres hetero?

 

-¿Por qué preguntas?

 

-Curiosidad.

 

-¿Por qué haces preguntas tan raras?

 

-No es nada rara. Bueno… considerando el lugar en el que estamos si es rara. Pero como antes me habías dicho que estabas aquí por una confusión de tus padres.

 

-Mis padre creyeron que era lesbiana porque mi madre me atrapo en mi cuarto viendo o de lesbianas.

 

-¿Estas bromeando?

 

Sabía que ella estaba conteniendo una enorme carcajada.

 

-No, eso fue lo que paso.

 

-No puedo creerlo.

 

-¿Cuál parte?

 

-Toda. Te ves tan inocente, pareces del tipo de chica que lo más ográfico que ha visto es un video de Nicki Minaj. Y demonios el ver o lésbico no te hace lesbiana.

 

-Díselos a mis padres.

 

-Oye, estas evadiendo mi pregunta inicial.

 

-Para que lo quieres saber.

 

-Ya te lo dije, curiosidad…  y también para saber si tendría alguna oportunidad.

 

-¿Ehh?

 

Ella se inclinó más cerca de mí, demasiado cerca.

 

-Si me dices que no, me alejare, de lo contrario me temo que te besare.

 

Se inclinó un poco más, las palabras estaban atoradas en mi garganta, mi mente estaba nublada, mi corazón y mis sentidos trabajan al cien por ciento.

 

 

 

Ella, ella estaba a punto de besarme

 

 

 

 

 

 

 

Y yo quería que lo hiciera.