Al llegar a la biblioteca Jessica notó la presencia de Yuri, una compañera de Taeyeon, Tiffany sin dudarlo dos veces se sentó al lado de la chica y comenzó a hablarle.

- ¡Qué coincidencia, Yuri! ¿Cómo estás hoy? – Le dedicó una leve sonrisa – Creo que nos encontramos muy seguido.

- Empiezo a creer que propicias los encuentros, Tiffany – Susurró – Sin embargo, me alegra verte, también me alegra que traigas de compañía a Jessica.

- Guárdate tu discurso melodramático para otra Yul – Gruñó Jessica sin cuidado – No me interesas, en lo absoluto.

- Caerás en mis garras muñeca, te lo aseguro – Admitió confiada la contraria – En fin chicas, ¿Qué las tiene por aquí?

- Heechul nos ha dejado afuera del salón de clase, nuevamente – Intervino Tiffany – Creo que le caemos mal.

- A mi tampoco es que me caiga muy bien – Espetó Jessica sin cuidado alguno – No es un chico con el que quiera estar al lado todo el día, no sé como esa tal Taeyeon se lo aguanta.

Y como si la hubiese invocado, Taeyeon apareció detrás de Jessica, todas pusieron su mirada en la mayor, quien aunque no era realmente alta, generaba respeto entre todos. Como las chicas no querían que Jessica se metiese en problemas ambas carraspearon al mismo tiempo pero como si la contraria fuese estúpida, siguió haciendo más comentarios.

-  Además, no entiendo por qué son tan consecuentes con esa tal Taeyeon si ella no es amable con el noventa y ocho por ciento de la población estudiantil – Continuó Jessica sin reparar la actitud de sus compañeras – Es decir, no es como si Taeyeon fuese una especie de celebridad.

- Bueno señorita Jessica, no creo que sea una celebridad, tampoco sabía que los estudiantes me tenían en un pedestal, supongo que debo agradecerle por tal información – Dijo la mayor apoyando su mano sobre el hombro de la contraria ya que se encontraba sentada – Mejoraré mi actitud si eso es lo que sugiere usted.

- Taeyeon – Susurró Tiffany, se sentía anonadada al escucharla decir esas palabras de forma tan fría – Si quieres puedes quedarte.

Esta le dedico la sonrisa más cálida que pudo, quería remediar la actitud que había tenido ayer al no quedarse, ni mucho menos despedirse de ella.

-  No, muchas gracias – Hizo una ligera pausa para mirarla fijamente – Tiffany.

La contraria sin pensarlo dos veces se sonrojo y sonrió torpemente a lo cual Taeyeon sólo la miró un tanto extrañada y se dio la vuelta, sin pronunciar otra palabra. Se dirigió hasta la última mesa de la biblioteca y se sentó a leer, de la nada, miró de reojo y se encontró con los ojos de la castaña mirándole fijamente quién de una forma u otra consiguió cambiarse de mesa y llegar a la que se encontraba la contraria, Taeyeon optó por bajar su libro y mirarla fijamente de la forma más fría que pudo, y como acto seguido subió un poco más el libro y se lo acercó aún más a su rostro.

“¿Tengo tan mala suerte?” – Pensó Taeyeon – “¿De todas las personas de esta biblioteca tiene que interrumpirme mi lectura esta extraña que le dicen tornado?”   

- Eso fue descortés ¿Sabes? – Pronunció Tiffany sin miedo a lo que dijera la otra.

- Estoy leyendo, no me gusta que me molesten – Contestó sin levantar su mirada del libro – Además, te mencioné que no quería estar con nadie. ¿Te consideras nadie?

- No. Me llamo Tiffany Hwang, soy alguien.

- ¿Entonces por qué sigues aquí? – Cuestionó mientras bajaba su libro – ¿Te parezco un ser sociable?

- Nuevamente, estás siendo descortés. No pareces a la chica que me ayudó ayer.

- ¿Ahora cuestionas mi actitud frente a las cosas? – Cerró su libro de mala gana y se levantó de la silla – Me dijeron que eras un tornado, d