-           Buenas tardes Srta. Hwang, Srta. - el portero abrió permitiendo la entrada a las chicas, quienes le sonrieron mientras entraban, cuando Jessica había ido por Tiffany salió por el balcón, y la primera vez que vino a casa de Tiffany estaba inconsciente, por lo que ahora todo le parecía novedoso. Cuando Tiffany se detuvo frente al ascensor quedo mirándola extraña,  y cuando entro no sabía que hacer

-           ¿Vienes?

-           ¿Qué es eso? - susurro Jessica mirando con desconfianza la maquina

-           Un ascensor

-           ¿Para qué sirve? - pregunto con curiosidad 

-           Para subir a nuestro pent-house - Tiffany recién cayo en algo importante - ¿Cómo llegaste a la universidad?

-           Volando, no te preocupes, nadie te vio 

-           ¿Cómo me encontraste? - pregunto curiosa

-           Por tu aroma - susurro mientras ponía un pie dentro del ascensor dando golpecitos como si tuviera miedo de que el suelo fuera a caer

-           ¿Cómo que por mi aroma? - pregunto Tiffany un poco molesta, quizá algo ofendida, que te digas que tu olor es tan fuerte que sirve de rastro te deja dos opciones, es bueno o es malo - ¡Yaahh! - le dio un palmetazo - ¿Qué quieres decir con eso?

-           Hueles a fresas… puedo sentir el aroma desde lejos - se defendió - además de seguir la huella de energía ¿acaso piensas que podrías esconderte de mí? Además te dije que con el pacto intercambiamos recuerdos, no fue muy complicado seguir la ruta

-           Ya entendí, ya entendí - sonrió - lo sabes todo y no hay manera de escapar de ti

-           Exacto, ahora soy tu peor pesadilla - ambas rieron

-           ¿Vas a entrar o tendré que arrastrarte?

-           No me gusta esa cosa - dijo frunciendo el ceño y haciendo un puchero - parece una jaula, no me gusta

-           Es un ascensor… pero ahora que lo dices es una caja de muchos kilos que solo es sostenida por unas cadenas - rio Tiffany - de esa manera no sueña tan seguro

-           ¡Menos me subo! ¡Ni loca! - Jessica intento salir corriendo, pero Tiffany la sujeto y como no quería lastimar a la niña dejo de forcejear - ¡Suéltame!

-           No hagas escándalo, estas llamando la atención

-           ¡No me subiré en esa trampa!

-           ¡Te subes y te callas!

-           ¡Suéltame!

               Luego de unos minutos de lucha entraron al departamento, Jessica finalmente se rindió ante los ojos de cachorrito. Tiffany estaba contenta, había doblegado a Jessica, lo sentía como uno de los tantos triunfos que acumularía, quizá Jessica era una criatura divina, pero estaba lejos de ser el monstruo que supuestamente debía ser, su personalidad era tierna y detallista, además de infantil, curiosa y dormilona.

-           ¡Bienvenida Jessica! - Tiffany grito mientras abría la puerta de su departamento y permitía la entrada

-           Ya conozco este lugar Fanny, he vivido aquí durante más de un mes

-           Pero no como humana, sino como zorro - Tiffany tomo a Jessica de la mano y comenzó a jalarla tras ella - primero la sala, mis sofás están llenos de pelos, pero pronto los limpiare

-           ¡Yo no pelecho! - se quejó Jessica cruzándose de brazos

-           Eso es lo que tú crees - rio mientras tiraba nuevamente de Jessica - la cocina, aquí está todo lo necesario para cocinar, pronto te enseñare, espero seas buena

-           Se cocinar algunas cosas

-           ¿Cómo qué?

-           Bueno… - Jessica se cruzó de brazos mirando el techo - quizá sea mejor que actualice mis recetario interno

-           ¿Cómo quieras? - Tiffany sonrió antes de tirar a Tiffany por la escaleras - en este piso hay tres dormitorios, el mío que ya conoces, uno para cuando viene cualquiera de mis hermanos y finalmente uno de invitados - ambas entraron a la habitación de invitados en silencio, Jessica nunca había entrado en ella y estaba curiosa por el lugar - esta es la habitación de invitados, tiene un closet y un baño así que creo servirá para ti, debemos comprar cosas para hacerla más personal y…

-           ¿Qué? - Jessica la interrumpió mirándola confundida

-           Claro, eres una chica ahora, necesitas tu cuarto - sonrió antes mirar sus ropa - ¿de dónde sacaste esa ropa?

-           Una facultad mágica para no quedar desnudas en cualquier parte, generalmente es un traje tradicional, pero si usaba eso destacaría demasiado

-           Tienes razón en eso - sonrió Tiffany mientras corría a su cuarto y regresaba, pero solo asomo la cabeza por la puerta - te estaré esperando en el salón para salir, apúrate

-           ¿Dónde vamos?

-           ¿De compras?

-           ¿Compras?

-           Si, crearemos un guardarropa para ti, si usas siempre lo mismo la gente sospechara, además no puedo prestarte la mía, la gente se dará cuenta aún más rápido, mejor te esperare frente al ascensor

-           ¡No quiero volver a usar eso!

-           Pues te aguantas, ahora debes llevar una vida normal - sonrió bajando las escaleras  

               Jessica pasó al baño y se refresco un poco, antes de volver a bajar y encontrar a Tiffany sonriendo frente a la puerta.

-           ¿Cómo nos iremos? - pregunto Jessica deteniéndose junto a la chica

-           Espera y veras, algo me dice que te gustara

               Cuando terminaron de bajar Jessica quedo confundida, no era la sala donde estaba la puerta principal del edificio, este era un gran cuarto abierto lleno de esos extraños medios de transporte que había visto por las calles de la ciudad.

-           ¿Qué son estas cosas? - pregunto acercándose a un modelo antiguo - he visto muchos por las calles

-           Son autos, medios de transporte

-           ¿Auto?

PDV Jessica

-           Sí autos - dijo Tiffany antes de caminar hasta un “auto” rojo que estaba en el otro extremo de ese lugar, era lindo a la vista, bastante atrayente debo admitir - ¿Qué pasa? Entra de una vez

-           ¿Cómo se usa eso?

-           Tienes que entrar dentro y manejar - respondió abriendo una puerta y entrando - ¡vamos!

-           ¿Puedo manejarlo yo? - pregunte emocionada, tengo muchas ganas de intentarlo

-           Quizá más adelante

-           ¡Pero quiero ahora!

-           Tienes que tener licencia para hacerlo y para eso necesitas papeles - sonrió, creo que con eso me gano - así que después de que Hyoyeon arregle esa parte podríamos llegar a considerarlo

-           Como quieras - me queje mientras me acercaba a la puerta, quede examinándola con cuidado hasta que se abrió por si misma - ¿Qué ha pasado?

-           Abrí la puerta por dentro

-           Es un carruaje bastante extraño, de acero ¿Cómo puedes moverlo?

-           Con caballos - sonrió mirándome, busqué a nuestro alrededor, pero no había nada  - ¿estás buscando los caballos?

-           Tú has dicho que habían

-           Pues no encontraras nada, luego te explico, sube de una vez - sonrió tirando de mi mano - no tenemos muchas horas antes de que cierren el centro comercial, tenemos muchas compras que hacer y muy poco tiempo

               Subí al “auto” y era bastante cómodo, había varios asientos y luces, además de música, definitivamente ha pasado mucho tiempo desde que vine, estoy completamente atrasada con los descubrimientos humanos. Cuando salimos a la calle y nos movimos en medio de los demás autos  estuve muy nerviosa al principio, el miedo de que alguien se estrellara en contra nuestra o que esta cosa dejara de moverse de la nada no me dejaban estar tranquila en mi asiento.

               Tiffany fue muy tierna, me hablaba constantemente