CAPITULO 6 - Lo que está sucediendo

Solo fue un sueño

 

El día afuera anunciaba una bella tarde de martes, fría y húmeda. El reloj en la pared marcaba las dos y media de la tarde, y a esa altura ni la ventana del cuarto había sido abierta. Para decir verdad, una joven con el pelicorto cabello alborotado, descansaba sobre la alfombra observando la luz que venía de la rendija de la puerta y de la ventana. El ambiente ahí era pesado, la habitación obtuvo un olor de lágrimas, si es posible, y un aire triste. Eunjung se sentía muerta, apenas obtenía respuestas de los músculos del cuerpo, todo lo que podía era mover los ojos, y aun así, lo hacía para expulsar pequeñas lágrimas que aún insistían en nacer ahí. Ella no recordaba cuando había estado así tan triste por última vez, e incluso pensó que nunca conocería ese tipo de sufrimiento. Pero, ella estaba ahí. Débil, emotiva, con los pensamientos regresando a Jiyeon, podía sentir punzadas en la cabeza de lo tan enfocada que estaba su mente.

 

No era justo, o sí? Esperar dos años para que un cáncer se manifestara, esperar que ella se convenciera a pasar un tiempo en seúl para tal desgracia. Y al recordarse del pequeño cuerpo en la cama, Eunjung también recordó cómo extrañaba a Jiyeon, y cómo eso la estaba afectando, pues no era normal. Recordó haber dormido sólo cuatro horas durante la madrugada, y haber soñado con la pequeña dino. Ella cantaba. Una canción conocida, pero olvidada en la mente de la pelicorta. Reuniendo fuerzas, quién sabe de dónde, Eunjung se levantó ya sintiendo una pierna dormirse debido a la posición en la que había dormido. Dejó el diario –que dudaba en leerlo cada segundo que lo miraba- sobre la cama y encendió la luz de la habitación. Podía jurar que casi quedaba ciega. Se quitó el resto de la ropa y entró al baño, abrió la ducha y se metió bajo el agua tibia, todo su cuerpo se estremeció con el choque eléctrico que recibió. Los recuerdos de la tarde pasada nuevamente la invadían y se dejó caer por la pared de la cabina hasta que su cuerpo desnudo tocara el suelo helado. Ella no podía dejar de llorar.

 

Se puso una ropa cualquiera y escuchó sonar su celular. Inmediatamente corrió para atenderlo, hasta ver el nombre en la pantalla.

 

“Lee Jang Woo”

 

Su pasado de tres días la invadió como una granada y recordó toda su trayectoria en UND y con su profesor. Y ahora, sentía asco de sí misma.

 

Dejó el celular en la cama junto al diario y decidió que era hora de encarar a Taeyeon.

 

Bajó las gradas y, como se lo esperaba, Taeyeon estaba en la cocina preparando algo. Eunjung se detuvo en la baranda de la escalera y miró a su amiga que aún no notaba su presencia, las dos se parecían ahora, por motivos diferentes, pero ambas poseían grandes ojeras y una tristeza plantada en la mirada, y Eunjung insistía en preguntarse cómo pudo llegar a ese estado por Jiyeon, que era su amiga…

 

-Hola. –si no estuviera viendo fijamente a Taeyeon, podía jurar que era otra persona que hablaba con ella. La pelicorta balanceó la cabeza con una media sonrisa, por lo visto la discusión había sido dejada atrás.

 

Eunjung se sentó en la primera grada y abrazó sus propias piernas, Dios, como estaba lastimada y frágil, sentía como si sus pulmones hubiesen sido arrancados. Taeyeon se acercó viendo fijamente a su amiga con preocupación, le extendió una taza azul y se quedó con la otra. Era chocolate caliente.

 

Kim Taeyeon había preparado chocolate caliente para ella?

 

Tae se sentó al lado de su amiga, viendo el mismo punto fijo en el suelo que la pelicorta parecía querer preguntar algo, pero nada salía. Eunjung suspiró fuertemente y después de un trago de chocolate, sintió el llanto silencioso subir nuevamente por su garganta. Taeyeon balanceó lentamente la cabeza hacia atrás y hacia adelante, como tomando confianza.

 

-Qué está pasando, Eunjung?

 

Y la chica supo, por el tono de voz de su amiga, que no era una pregunta sobre el estado de Jiyeon, pues ella ya sabía. Tae quería saber qué estaba pasando con la propia Eunjung, y eso la asustó, pues ni ella misma sabía. Eunjung recostó la cabeza en el hombro de la bajita pidiendo fuerza, ella necesitaba sentirse segura en ese momento.

 

-No acostumbro a decir estas cosas, y espero nunca más repetirlo porque lo encuentro algo extremadamente gay, pero, -Taeyeon tomó una pausa para que Eunjung pudiera sonreír en su hombro y volver a sentarse normalmente para terminar su bebida.- yo no huiría si fuera tú. Algo está mal, Eunjung, desde que llegaste aquí y te enteraste del accidente, todo lo que haces es llorar. Tal vez estas dejando salir todo lo que sufriste en silencio estos dos años, -Eunjung notó a Taeyeon intrigada, la veía con una expresión grave.- es momento de que pongas al día tu cuenta, Ham.

 

Eunjung se levantó incómoda, odiaba que le tiraran en la cara su estilo de vida, aún más Taeyeon. Dejó la taza sobre la mesa y se volvió hacia su amiga:

 

-Discúlpame, Tae, pero no sé de lo que estás hablando. –Taeyeon arqueó una ceja, y la chica continuó.- Jiyeon y yo nos volvimos muy amigas el último año, tenemos una conexión muy fuerte, es por eso…Dios, Taeyeon, ella va a morir!

 

Taeyeon bajó la mirada tristemente.

 

-Y no quieres aprovechar este tiempo para descubrir cosas que tal vez el tiempo reservó para ti?

 

-Estás bien? –el cambio del asunto fue tan rápido que Taeyeon abrió y cerró la boca varias veces pensando en una forma de hablar con su amiga. Eunjung le sonrió y le extendió la mano para que se levantara, las dos fueron hasta la cocina.

 

-Ya no sé lo que es bien… -la voz de Tae salió baja, y Eunjung sintió algo en su pecho apretarse.- Cuando no estoy pensando en ella, estoy pensando en mil formas de sabotear el auto de ese metido de mierda!

 

Una vez más, sintió el dolor de su amiga.

 

Ellas estaban realmente acabadas y muy sentimentales para dos chicas que eran populares, y un tanto perras como ellas.

 

-Ven, salgamos. –pronunció Eunjung tomando a Taeyeon del brazo.

 

-Qué? Por qué?

 

-Vamos Taengoo, No podemos pasar el resto de las vacaciones encerradas en casa lamentándonos, hasta podríamos matarnos.

 

Taeyeon sonrió y concordó con la cabeza. Ellas abrieron la puerta de la sala y recibieron una ráfaga de viento y, viendo atentamente hacia fuera, fue posible ver los pequeños copos de nieve que caían, y la pequeña capa blanca que se formaba en el suelo. Eunjung sintió una buena sensación al entrar al auto de Taeyeon, todo aquel ambiente malo desapareció en el momento en el que pensó en que solamente faltaban tres días para navidad, la primera navidad que pasaría lejos de las preocupaciones y Daegu.

 

-Ya sabes en dónde pasar navidad? –preguntó la pelicorta iniciando una conversación mientras las dos compraban regalos en una tienda cerca de la casa.

 

-No sé. Hyomin insiste que vaya a la fiesta de navidad en su casa, pero no sé si esté prepara para ver a Tiffany…

 

Taeyeon se detuvo un instante frente a una vitrina con anillos de todos los tipos, y Eunjung vio un leve suspiro salir de la boca de su amiga.

 

-Ella también quiere que vayas, dice que navidad debe ser celebrado en familia y nosotras somos una familia y bla, bla, bla.

 

-Me parece genial, eso es, si está bien para ti. –afirmó Eunjung escogiendo un gran árbol de navidad, ya que se dio cuenta que la casa de Tae ni siquiera estaba decorada.- No nos veo asando un pavo solas.

 

Taeyeon se encogió de hombros y llevó el carrito hasta la caja, seguida por Eunjung.

 

-No le vas a dar nada de Navidad a Jiyeon? –la pregunta salió rasgada, y la pelicorta fue obligada a arquearle una ceja a Taeyeon que la desafiaba con una mirada.

 

-Cuando encuentre el regalo correcto, sí.

 

Taeyeon rodó los ojos y pagó con la tarjeta de crédito toda la compra, las dos se mantuvieron en silencio mientras guardaban las compras en el maletero del auto y Eunjung sabía que había algo malo, y que Taeyeon procesaba algo en su cabeza. Aquello no era bueno.

 

-A dónde quieres ir ahora? –preguntó la bajita mientras se ponía el cinturón de seguridad.

 

-No lo sé, qué tienes en mente? –Eunjung sabía que ella ya tenía un lugar en específico.

 

-No veo a Jiyeon desde un día antes del accidente… qué dices?

 

El estómago de Eunjung dio un vuelco con tan solo pensar en ver a Jiyeon otra vez. Dejando el malestar de lado, decidió hacerle caso a la razón.

 

-Por mí está bien.

 

CONTINUARA......

 

 

 

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Disculpen la demora u.u no volvera a suceder(?) o tal vez si xD ... Muchas gracias a l@s nuevos por suscribirse al fic c:

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Comments

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pia_msachgon #1
Chapter 9: Porfa la continuación espero que la dino no muera jiyeon♡forever
AnonimaNaMas #2
Chapter 9: 9 : Por lo que mas quieras que el persona que muera no sea La Pequeña Dino
Eunyeon forever <3 TnT
Briterri2
#3
Chapter 4: Respuesta Para Aleph18: Eso lo sabrás en los próximos capítulos xD gracias por leer ;)
Aleph18 #4
Chapter 3: Wow me pregunto quién morirá, espero que ninguna de las taeny o eunyeon... Pero creo que eso es mucho pedir :/