Capítulo 14: Perdidas.

Jessica POV

Al final, todo se acabó, todo por lo que he luchado…lo deje ir.

Después de tanto tiempo, que para mí se sintió como si fuera mucho menos que eso, Tiffany y Taeyeon se convirtieron formalmente en pareja, nunca creí que este día llegaría, después de todo, estaba trabajando para evitar eso, ¿No?

Aun no sé cuáles son mis verdaderos sentimientos, y no quiero saberlos, por alguna razón, siento que la respuesta no será que la que esperaba. Siento que si pierdo mis ideales a este punto, sería como si todo lo que hice hubiera sido en vano, pero…al ver a Taeyeon y Tiffany, tan felices, simplemente no puedo hacerlo.

Ellas son almas gemelas, es imposible separarlas. Tiffany demostró que es digna de estar con Taeyeon…está dispuesta a sacrificar todo, al igual que ella, eso es lindo a decir verdad, su relación no será la más conveniente, nunca lo será.

Las pequeñas cosas y acciones de Taeyeon hacia Tiffany hacen que recuerde el porque me enamore de ella, pero a decir verdad, ahora quiero apoyarlas, aunque me esté contradiciendo, no puedo mentirme a mí misma, quiero que estén juntas, quiero que Taeyeon sea feliz.

Sin embargo, lo que siento por ella no es amor, creo que lo he logrado comprender después de verlas, tal vez sea cariño y admiración, o algo parecido, Taeyeon es algo a lo que me apegue, pero al final, la termine adorando. Un sentimiento claro, pero confuso. A veces me pregunto… ¿Cómo sabe una persona cuando está enamorada?, me pregunto si alguna vez podré descubrirlo, si alguna vez podre encontrar a mi alma gemela también. No siempre se logra encontrarla, pero cuando lo logras, es algo tan hermoso, o al menos eso dice la gente.

-Señorita Jung… ¿Se va a quedar aquí todo el día?

Salí de mis pensamientos y miré a la persona que me hablaba, era el profesor de turno, cierto, ahora que lo pensaba ya era el primer receso y aún seguía en mi asiento pensando sobre estas cosas, no tenía por qué hacerlo para empezar, pero adoro reflexionar sobre las cosas que me pasan y observo, solo quiero tranquilidad, ¿Es mucho pedir?

-No hay alguna regla que me obligue…

-Si lo hay, por favor retírese – Dijo tímidamente el profesor.

-Uhm, viejo verde y amargado… - Y me fui con una calma, sorprendente a decir verdad.

-¡Espere un momento señorita Jung, vuelva aquí en este instante! – Replico molesto.

Solo le hice un gesto con la mano, diciendo que no me importaba, y me fui, no tenía ganas de estar en la escuela, de hecho, en mi mente solo había una persona en este momento, Yuri, y no sabía porque. Últimamente, ella invadía mis pensamientos, la veía en cualquier lado y me la quedaba mirando más de la cuenta, pensaba en ella, e incluso me quedaba viendo los mensajes que nos mandamos de celular, con una cara tan boba, eso no era normal…al menos no en mí. Ella no vino a la escuela hoy…me preguntó cómo estará, después de todo, fue rechazada por Tiffany, la persona que amo por tanto tiempo.

Sin darme cuenta, me salí del colegio, total, ¿Qué pasará si me saltó las clases por esta ocasión?, nada. Mis pasos, por arte de magia, me guiaron a la casa de Yuri y sin darme cuenta ya estaba en la entrada de la misma, era grande, una casa grande, ocupaba una cuadra entera después de todo, ¡Aunque la mía es mejor por supuesto!, pero era simple, típico de los Kwon.

Un momento… ¿Qué rayos estoy haciendo?, ¿Por qué me siento nerviosa de solo tocar el timbre de su casa?, ¿Por qué…tengo la necesidad de hablar con ella?, ¿Por qué quiero verla?

No entiendo...y de verdad no quiero entenderlo.

Pero, si hay algo en lo que nunca fui buena, fue mintiéndome a mí misma.

Yuri, en verdad te odio, por hacerme pasar estas cosas.

Yuri POV

-¡Señorita Kwon baje a desayunar por favor! – Gritó una mucama detrás de la puerta de mi habitación.

-No tengo apetito…bajaré más tarde…

La mucama de turno iba a replicarme, pero no dijo nada, después de todo soy la única y heredera legítima a la herencia de los Kwon, es decir que en cualquier momento todo esto será mío, soy su jefa, no puede contradecirme aunque lo intente y quiera. Realmente no me gusta causarles problemas por mis actitudes infantiles, pero en esta ocasión simplemente no puedo evitarlo.

Hoy ha sido un día terrible, para empezar aún no puedo recuperarme del rechazo de Tiffany, aunque sabía que me iba a rechazar y me había preparado mentalmente para eso…no puedo evitarlo, cuando alguien te rechaza siempre es triste, sobre todo si es alguien a quien amas, aunque las personas digan que soy fuerte en ese aspecto, la verdad es que no lo soy, y para colmo, desperté con una gripe y tos del demonio.

Ha… ¿Esto es a lo que llaman karma?, ¿Fue por ser demasiado cruel con Kim?, tal vez lo sea.

Desde la mañana había estado encerrada en mi habitación, entre mis sabanas, me sentía segura en ellas.

Realmente no me gusta como estoy actuando, pero me es inevitable, de todas maneras si no hubiera estado enferma hubiera faltado a la escuela, no tengo el valor para ver a Tiffany y a Kim a los ojos. Hasta ahora me he dado cuenta de lo cobarde que soy, el hecho me saca una sonrisa, después de todo, es normal, soy humana.

El hilo rojo del destino...Tiffany dice que vio el mío, pero nunca me dijo la persona a la que estaba conectada, ¿Debería saberlo?, creo que no. No quiero unirme por esas cosas, nunca lo quise, quiero encontrar a mi alma gemela, algún día, por mí misma.

-Señorita Kwon, una chica ha venido a visitarla…¿Desea que la haga pasar?

-No estoy de ánimos, dile que no estoy – Dije acurrucándome más en mis sabanas.

La mucama no dijo nada más, supongo que se retiró a cumplir mis órdenes, cerré los ojos esperando tranquilidad, pero no duró mucho.

-¡Oiga señorita!, ¡No debería hacer eso! – Gritó la mucama nerviosamente.

-¡Dile a esta que me deje pasar Yuri!, ¡Abre la puerta maldita sea!, ¡Sé que estás ahí! – Gritó una voz conocida en el pasillo, Jessica.

Suspiré, ella no se iba a ir tan fácilmente. Era tan insistente, pero no me molestaba, en este momento, creo que es la única con la que puedo hablar sin tener que preocuparme de nada. Me levanté, le quité el seguro a la puerta y la abrí con lentitud, para mi sorpresa Jessica ya estaba enfrente de ella, entro rápidamente y la cerró con la misma velocidad.

-Mucamas…las odio – Dijo Jessica mirando rencorosamente hacia atrás.

-Nunca cambias, ¿Algunas vez dejarás de ser tan racista? – Dije mientras volvía a entrar a mi cama.

-Un día tal vez, quien sabe.

Ahora que la veía con más atención llevaba el uniforme del colegio, se supone que tenía que estar haya, además traía una bolsa muy grande de compras con ella.

-¿No deberías estar en la escuela?

-Estaba, pero me aburrí y vine a verte… ¿Cómo esas llevando lo de Tiffany?

-No muy bien a decir verdad…pero es mi problema, a ti no te interesa.

Ella solo sonrió, maliciosamente, como siempre.

-Me interesa, después de todo, eres alguien muy interesante.

Nunca podría entenderla, siempre decía cosas extrañas, era insistente y muy molesta, es desesperante, una idiota por completo, ignorante, racista y puedo seguir haciendo una larga lista de sus defectos. Pero…

-Supongo que de lo que estás pasando no has querido bajar a desayunar – Buscó algo en su bolsa – Ten, compre esto para ti en el camino, galletas y café negro, ¿Te gusta esto no?

Aun así, era una buena persona. Ella me ha enseñado en cierta manera, que las personas no pueden juzgarse por la primera impresión.

Por alguna razón, que se preocupe por mí, me hace feliz.

-¿Y tú como estas llevando este asunto de Taeyeon?, no te ves tan triste – Dije comiendo lo que me había dado, no era el mejor desayuno y el más nutritivo que se diga, pero al menos lo trajo pensando en mí.