CAPITULO 15: FINAL

VIERNES

 9:00 am.

Jessica entró a la oficina de su padre con tal determinación y entusiasmo que emitía de ella. Al entrar, ella vio a su padre sentado en una silla de cuero hablando con alguien por teléfono y a su lado estaba su asistente. Michael Jung sonrió y saludó a su hija indicándole que se sentara en el sofá. Ella le devolvió la sonrisa y según lo dicho, tomo asiento. Jessica tenía la mirada perdida en una maceta de flores colocada encima de una mesa y cuidadosamente pensaba en las repercusiones de lo que iba hacer o decir después de que su padre acabara la llamada telefónica. Podría ser algo inesperado o tal vez parecer egoísta, pero para Jessica esta decisión era la más correcta que tenía que hacerse, así  él o ellos pensaran lo contrario.

“Asegúrate de tenerlo para mañana. No acepto ninguna demora o excusa.”, Michael dijo seriamente por teléfono.

Él  colgó el teléfono y lo coloco sobre la mesa. Su mirada se desvió hacia su hija quien estaba sentada en frente de él. “¿Café?” él le preguntó a su hija, que se limito a sacudir la cabeza en respuesta.

Él se dirigió  hacia su asistente y le pidió que se retirara. El chico hizo una reverencia  y rápidamente salió de la habitación dejando a los dos Jung a solas.

“He estado preocupado por ti últimamente. No has asistido a ninguna de las cenas que fije o a algún ensayo de la boda.”, su padre comenzó, señalando las acciones de su hija en los últimos días.

“Yo-… he estado ocupada en estos últimos días también.” Ella respondió, manteniendo la cabeza hacia abajo

Su padre se levantó y se acercó a un dispensador de agua. Tomo dos vasos y los lleno, luego procedió a regresar a donde estaba su hija.

“Por lo menos acepta un poco de agua.” Él se sentó a lado opuesto de ella mientras le entregaba el vaso.

Jessica lo tomo en sus manos y dio las gracias a su padre con una sonrisa.

“La boda será en una semana. No puedo creer que el tiempo pase tan rápido.”

Jessica sonrió débilmente manteniendo su mirada lejos de su padre.

“Yo nunca  imagine que conocería  a alguien como Tiffany.”

“Y yo tampoco…” Jessica susurró en voz baja, suficiente para que su padre no la escuchara.

Él continuó. “Para ser honesto, cuando la conocí, en realidad pensé que ella se ajustaba a la descripción de la chica de quien siempre me hablabas. Seria irónico si ella resultara ser tu primer amor, ¿No te crees Sooyeon?” Él comentó inocentemente mientras reía. Jessica mantuvo la mirada fija  hacia otro lado y rió débilmente junto con él.

“Yo estaba realmente muy nervioso cuando le propuse ser mi esposa y cuando ella dijo que sí,  me sentí el hombre más feliz sobre la tierra. ¿Quién diría que un  simple sí tendría tan dulce y cariñoso sonido.” Él dijo entusiasmado para consternación de Jessica. Pero esto no debería ser tan amargo, su padre no quería hacerle daño de esta manera. Para empezar, él no sabía nada. Él es solo un hombre enamorado y feliz diciéndole a su hija sobre su vida amorosa. “Tiffany es-…”

“Abeo-ji.” Jessica intervino, haciendo a su padre mirarla un poco sorprendido.

Ella apretó sus manos sobre sus rodillas tratando de ganar coraje. Ella respiro profundamente dentro y fuera, y habló sus siguientes palabras seriamente. “Hay algo que tú necesitas saber…”

SÁBADO

3:30PM

Un hombre de cabello negro corto continuó pintando una pared con una brocha. Él gimió un poco para acompañar su insatisfecha mirada antes de salpicar a la pared con pintura. La mujer detrás de él al instante espetó su inmadura acción y golpeó al hombre con su propia brocha.

“¡¡Umphff!!” su cabeza fue hacia adelante golpeando la pared por lo tanto haciéndole caer de nuevo al suelo.

“Te dije que pintaras correctamente, Taecyeon!” la enfurecida mujer le dio una mirada de muerte  al caído trabajador mientras ella estaba de pie junto a él.

“¡Eres una malagradecida, Nana-ah! ¡Acepte venir contigo esperando algo diferente!!”

-Escena retrospectiva-

“¿Estas libre?” ella dijo de la nada.

“¿Qué?”

“Te estoy preguntando si tienes algo que hacer  hoy.”

“¿Me estas pidiendo una cita? ¿Una chica me está invitando a salir?”

“Si, te estoy invitando a salir Taecyeon. Y si sigues sonriendo de esa manera, te juro que te voy a golpear con mi bolso.”

“De repente  dejaste de ser linda.” Él comentó. Sonrió y continuó. “Está bien, pero me gustaría que sepas que mi horario está muy ocupado, tienes suerte de pasar algún tiempo conmigo.”

“Oh, sí, puedo ver muy bien lo ocupado que estas.”

Nana acompañó a Taecyeon dentro de su apartamento. Ella abrió la puerta y lo llevo dentro. El corazón de Taecyeon estaba realmente latiendo locamente en ese momento. ¿Quién no sudaría y estaría nervioso si una mujer de repente te invita a su apartamento? Por supuesto, que lo harías si tú supieras que algo como esto llevaría a una sola cosa y tenía que conseguirlo. Y en su mente, esto tiene que ser eso, su primera vez en tocar carne,  su corazón palpitante, su alma entrelazando con la experiencia.

Nana entró en su habitación y Taecyeon la siguió con una amplia sonrisa plasmada en su rostro.

“¿Crees que deberíamos hacer esto? Quiero decir…”

“No tienes que preocuparte de nada. Soy más o menos experimentada en esto. Y tengo material suficiente para durar tanto, al menos por un par de días.” Nana respondió.

La sonrisa de Taecyeon simplemente se hizo más grande al escuchar eso. ¿Quién imaginaria que alguien como ella podría sugerir algo así de rápido y podría incluso decirle estas traviesas cosas. “Estoy listo, Nana-ah” dijo él seductoramente.

“Bueno”, respondió ella mientras se giraba para enfrentar a Taecyeon.

Él estaba a punto de inclinarse cuando Nana decidió caminar hacia un lado y prender las luces. El cuarto oscuro se ilumino al instante y  mostro un cuarto casi vacío a lado unas latas de pintura, pinceles, brochas y periódicos esparcidos alrededor. “Es realmente genial que aceptaste venir conmigo. Yo quería pintar mi habitación desde hace mucho tiempo,  pero hacerlo todo por mi misma es realmente agotador. Tenemos suficiente pintura y otros materiales. Gracias por la ayuda, Taec!” ella sonrió con admiración.

Taecyeon se quedo allí parado sin habla después de lo que acababa de oír.

-Final de la escena retrospectiva-

“¿Qué estabas esperando?”

“¡Algo mucho más diferente que esto!”

“¿Estabas esperando que hiciera algo mas contigo?” ella bromeo mientras se inclinaba hacia abajo, con la cara a pulgadas de distancia de Taecyeon.

Él se sonrojó y se levantó del suelo. “Ni en mis sueños, Nana-ssi.” Él agarro la brocha del piso y continuó pintando la pared correctamente otra vez.

“¿Por qué tú no puedes solo ser honesto?” ella presiono aun molestándolo mientras se unía de nuevo a Taecyeon  a pintar la pared.

“¿Por qué no puedes tratarme bien?”

“Te estoy tratando bastante bien.”

“Me golpeaste con las brochas tres veces, nunca me ofreciste una bebida, y ni siquiera consideras si necesito descansar un poco.” Enumeró con los dedos mientras Nana lo quedo mirando uno por uno en el horror. “He estado aquí por tres días y todos los días ha sido lo mismo.”

“Te dije que había una mosca refugiándose en tu cabeza una vez. Y te ofrecí una rebanada de melón.” Dijo ella en defensa que fue tomada fácilmente por Taecyeon.

“Después de que te comiste casi todas ellas.”

La tensión en la habitación solo creció enormemente como Nana  mantuvo golpeando  su pincel contra la pared mientras Taecyeon hacia lo mismo. Ninguno de los dos quería romper el silencio o incluso intentarlo. El sonido del timbre de un teléfono hizo eco en la habitación sorprendiendo a los dos. Nana lo buscó dentro de su bolso y  contestó la llamada.

“¿Jessica?” Nana pronunció a través del teléfono llamando la completa atención de Taecyeon.

“Hey”

“¿Estás bien? Suenas diferente.”

“Solo pesque un resfriado.”

“¿En verano?” ella pregunto con recelo.

“¿Cuándo comenzaste a interrogar a las personas que te llaman?” Jessica se burlo y rio. “Acabo de ir a casa de Taecyeon y él no estaba allí. ¿Él está contigo?”

“Ah, sí. Él esta ayudándome a pintar mi habitación.”

“Bueno entonces,” la castaña pronuncio en voz baja. “Gracias.”

Nana rio ante la seriedad en el tono que uso Jessica y replico, “Eso fue inesperado.”

“¿Lo crees? He hecho un montón de cosas inesperadas en estos últimos días. Me las arregle para cocinar una comida decente por una vez. Me desperté muy temprano y dormía muy tarde. Rechace una cita.” Ella rió y continuó en voz baja una vez más “Y… me voy del país.”

“Eso sin duda es inesperado…” ella rio con cada palabra que Jessica le dijo. Hizo una breve pausa tan pronto como su mente procesaba  lo que Jessica había dicho. Sus ojos se agrandaron y lo único que pudo hacer fue jadear. “¡¿QUÉ?!”

“¿También es algo inesperado?”

“¡Sí, y ciertamente algo ridículo! ¡¿Cuándo?!”

“Esta noche.”

“¡¿Y por qué estas diciéndomelo esto solo  ahora?!”

“Si te lo hubiera dicho mucho antes ustedes me detendrían para entonces, ¿No es verdad?” Jessica sabiamente acuso.

La acusación golpeo duro  a Nana a lo que ella respondió en un tono suave y un poco avergonzada, “Sí… Pero aun…”

“Espero que respeten mi decisión si no, al menos  lo hagan por mí.” Interrumpió Jessica.

“¿Dónde estás?”               

“Adiós, Nana.”

Jessica colgó antes de que Nana siquiera podría responder de nuevo. Ella se quedo mirando su teléfono en la incredulidad, mientras Taecyeon se quedo allí parado esperando a que Nana dijera algo.

“Jessica… ella… se… va…  esta… noche.” ella pronunció palabra por palabra, aun en shock.

Taecyeon suspiró y regresó a pintar la pared como si él esperaba que algo como eso pudiera suceder con el tiempo. Los ojos de Nana al instante estallaron de ira por la forma despreocupada como Taecyeon reacciono, lo que la hizo enojar.

“¿Tú solo te vas a quedar allí parado  sin hacer nada?” ella gritó. “¡Jessica se va, y esta noche! ¡¿Sabes lo que eso significa?!”

“Sí. Eso significa que no podemos detenerla.”, él respondió; su mirada aun centrándose en la pared que estaba pintando.

“¡Taecyeon!"

“Ella acaba de decirnos su decisión solo ahora, y ni siquiera nos dijo en donde está. ¿No es razón suficiente para probar que ella no quiere que nadie la detenga?”

“Pero  como sus amigos, nosotros no deberíamos dejar que tome decisiones precipitadas.”, ella argumentó.

“Y como su amigos, nosotros deberíamos, por lo menos, respetarla  incluso si no nos gusta su decisión, Nana.”. Él la miraba serio que hizo que la chica diera unos pasos hacia atrás y mirara avergonzada el piso alfombrado.

SABADO

4:00 pm

Ella se quedo mirando la ventana de su apartamento, y viendo como las luces  brillaban radiantemente desde abajo. Luces que poco a poco le recordaban  la vez que  brillaron sobre una cierta castaña mientras tocaba el piano. Un brillo, su brillo, cual sin duda tiene un hermoso y notable esplendor, verdaderamente apasionante, un cautivamente clase de brillo que  no puedes evitar mirar las maravillas que ella realiza.

Completamente dibuja su frio, impredecible y aun encantador lado; especialmente su lado dulce y cariñoso; su actitud ingeniosa, divertida y despreocupada, una personificación de muchos, pero reunidas en una sola entidad… en ella… dentro de ella.

Ahora, ella se encontraba buscándola sin saberlo, su corazón latía locamente mientras lo hacía y en sus labios se dibujaba una clase de sonrisa que ella nunca pensó que tendría; algo único, genuino y espontaneo; algo increíble, vibrante y estimulante… algo nuevo… algo maravilloso…

Entonces ella se preguntaba si eso era real… si tal vez, esto es solo un simple enamoramiento, una atracción, lujuria, pero no más allá de ambos. Lo que a él le falta, ella lo tiene… lo que anhela, ella lo tiene… lo que busca para ella, ella lo tiene… lo que ha soñado tener, ella lo tiene… Llevándola a un mundo al que ella nunca  espero estar, invitando a los sentimientos que ella nunca pensó que podría sentir, abriendo sus ojos a la posibilidad de una vida que vale la pena descubrir, experimentar y vivir.

Pero considerando todo… ese sentimiento hacia ella como algo mas grande y más fuerte que surgió en solo un corto espacio de tiempo era absurdo. Una sensación que carece de  tiempo de crecimiento es algo que no es real…

Una chispa momentánea, una atracción temporal, y un romance de corta duración… Quizás solo quizás, era mejor considerarlo de esta manera…

No es una forma de cobardía el alejarse de esto; no es  debilidad especular con lo que tiene tan cerca; y no es egoísmo  buscar algo más duradero, más seguro…

Pero aun así,  recordar sus palabras en ese entonces…

Si   solo…

“Te amo, y probablemente te amare por mucho tiempo.”

Entonces ¿Por qué mi corazón no puede dejar de latir tan fuerte?

¡Riiiiing!

Ella salió de sus pensamientos tan pronto como un sonido repentino resonó en sus oídos. Se dio la vuelta y se alejo del cristal de la ventana hacia el teléfono en su escritorio y hablo con rapidez.

“Yeoboseyo”

“Buenas noches, Tiffany,” esa familiar voz la saludo, en su dulce y feliz tono.

“Michael...”

“¿Estás lista, querida?” él preguntó.

“Ah… Neh, lo estoy…”

“Suenas decaída. ¿Estás enferma?”

“No, estoy bien. Yo estoy… bien.”

“Ya veo. Bueno, la limosina llegará dentro de poco a recogerte. El conductor te acompañara hasta el lugar. Voy a estar allí esperándote.”

“Si. Gracias.”

“Nos vemos allí.”, él se despidió

“Sí, Te veo allí.”

SÁBADO

11 AM.

Jessica se iba del país esa noche. Su padre estuvo muy sorprendido cuando ella se lo dijo, pero felizmente él apoyo su decisión. Eso era lo que a ella le gustaba de él. Él no le preguntaba que o por qué. Él simplemente aceptaba todo sin preguntar o quejarse. Era por eso mismo que Jessica tomaba esta decisión. Su padre era un gran tipo. Un tipo maravilloso; amable, dulce e inteligente una vez que lo conocías mejor. Él  es el mejor padre que cualquiera podría desear y el mejor marido que alguien podría tener. Él merece a alguien tan genial o mejor que él.

Jessica pensaba que no lo merecía como padre y tampoco Tiffany lo merecía como su futuro esposo. Mintieron. Ella lo engañó. Jessica salió lastimada. Pero su padre parece amarla y ella parece quererlo mucho. Así que es por eso que se iba; para poner fin a eso. Puede que parezca una decisión precipitada, pero  es para mejor, para ella  y para ellos mismos.

“Hey, ¿Necesitas ayuda?” ella de repente entró.

Jessica sonrió y ella se sentó a su lado. Ella tomo una blusa suya y comenzó a colocarla en la maleta. “¿Estás segura acerca de esto?” ella preguntó en medio de una silenciosa atmosfera que crearon hace un minuto.

Jessica asintió ligeramente y le sonrió. “Sí.  Esta es la única manera.”

“Hmmm…”, ella murmuró, “¿A qué hora sale tu vuelo?”

“Alrededor de las 9 pm”, Jessica respondió “Gracias por dejar que me quede, Yoona.”

“Tonterías. Sera controversial tenerte aquí. La heredera de Jung Corp y la súper modelo, pasaron la noche bajo el mismo techo, Kyaa!! Me encanta que eso salga a la luz. Te imaginas lo fantasiosos que podrían ser mis fans!!” ella bromeo, sus ojos brillando de alegría.

Jessica rio un poco antes de volver a empacar sus cosas.

Ella se ha estado alojando en secreto durante los últimos  días en el apartamento de Yoona. Ambas se han hecho amigas después de decidir que la relación no estaba funcionando después de la primera cita. Yoona la dejo quedarse después de escucharla e incluso prometió no dejar que alguien se enterase de ello. Ella nunca dijo nada. Incluso los medios de comunicación no saben que Jessica se encontraba ahí. Ella fue de mucha ayuda para Jessica y  estaba agradecida de tener a Yoona en ese momento tan crucial de su vida.

“¿Qué es esto?” su voz surgió una vez más.

Jessica la miro y la vio sosteniendo una foto en su mano.

“¿No es ella Tiffany-ssi? ¿Y quiénes son estas personas a su lado?” pregunto ella mientras giraba en torno a la fotografía y señalaba a la gente uno a uno.

Jessica se inclinó y tomó la foto. Su cara se suavizo tan pronto como la foto le recordó el tiempo que pasaron en ese alejado pueblo donde estuvieron un fin se semana.

-Escena retrospectiva-

El ultimo baile del día finalmente término. Tiffany bajo de los pies de Jessica mientras ambas mantenían sus miradas la una  a la otra y sus manos aun intactas. Una sonrisa al instante se deslizo en la cara de las dos mujeres, que poco a poco se convirtió en risa pues solo ellas sabían las razones de eso.

“Muy bien, reúnanse,” una mujer expresó rompiendo el momento lleno de diversión  tanto de Jessica y Tiffany y voltearon en su dirección.

Ambas vieron a Victoria ansiosa haciendo un gesto a los aldeanos para que se reunieran alrededor de la hoguera.

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