Sus manos se deslizaban por su rostro detallando cada facción de su perfecto cutis, podía sentir la calidez de la piel de Krystal sobre su rostro, un leve sonrojo se apodero de sus mejillas y no pudo evitar soltar un leve jadeo. Definitivamente el alcohol le había hecho mal y ahora estaba jugando en su contra

-Sonrió con suficiencia Krystal y se apartó bruscamente de la bajita- Creo que ya has bebido suficiente Jessica –dijo en un tono autoritario arrebatándole de la mano la copa, ese simple cambio de actitud le enervo completamente la sangre a Jessica

-¿Quién te crees que eres? ¡Mierda! Puedo hacer lo que se me dé la puta gana… –totalmente ofendida Jessica le dio un empujón a la pelinegra haciendo que esta se tambalease debido a la fuerza ejercida

-Tu padre no estaría orgulloso si te oyera hablar de esa forma, cuida esa lengua Jessica, no beberás mas, ya bastante tomada estas –soltó firme Krystal y volvió a acercarse a Jessica esta vez tomándola fuerte de los brazos

-Suéltame ahora mismo o g-grito!! –logro decir finalmente Jessica sus ojos empezaban a llenarse de lágrimas, Krystal al notar esto la soltó de inmediato arrepintiéndose de su reciente acto

-yah!! Esto fue un mala idea, vámonos.. –molesta krystal tomo sus cosas y salió del lugar dejando atrás a una muy ofendida Jessica

Jessica tomo su bolso y salió de igual forma estaba totalmente cabreada con aquella situación, se sentía ofendida, ¿acaso la había llamado borracha? No se lo permitiría jamás, las lágrimas ya se asomaban pero trato de contenerlas no le daría el gusto de verla llorar. Una vez afuera Jessica se detuvo en medio del estacionamiento observando con una mirada asesina a Krystal

-¿Que haces ahí? Vamos estoy cansada.. –Dijo Krystal quitándole el seguro al auto y abriendo la puerta trasera para colocar ahí sus cosas- Vamos Jessica apúrate, que mie.. –Volteo hacia atrás para ver a Jessica y está ni se inmutaba

-No me iré contigo.. –finalmente dijo Jessica cruzándose de brazos

-Como te de la gana. –la morena abrió la puerta y subió al auto introdujo la llave y lo encendió, estaba totalmente dispuesta a dejarla sola en aquel lugar sin embargo al ver por el retrovisor pudo notar las lágrimas que ya brotaban de los ojos de la más baja. Aquello de alguna u otra forma la hizo sentir culpable apago el auto y bajo de el para acercarse a ella

-Oye.. ¿Por qué lloras? –pregunto Krystal, tomando del mentón a Jessica para poder observar mejor su rostro estaba totalmente húmedo por las lágrimas y sus hermosos ojos color miel estaban incendiados de pura furia, por un momento pensó que la golpearía pero la castaña solo se limitó a darle una fugaz mirada de odio

-Te odio.. -Jessica ignoro la pregunta de la morena y de mala gana quito la mano de ella para que la dejase de tocar, gruño para sus adentros y camino en dirección hacia el auto sin embargo sus zapatos de tacón alto no le dieron la estabilidad necesaria logrando que se doblara el tobillo, contando con la presencia de Krystal que logro sostenerla de la cintura antes de que tocara el piso y pasara la peor vergüenza de su vida –ahh, maldición duele!! –exclamo adolorida la castaña, Krystal la tomo con fuerza de la cintura y coloco uno de sus brazos alrededor de su cuello para llevarla hasta el auto, abrió la puerta del copiloto y con cuidado la ayudo a subir

-Ves lo que te pasa por ser tan malhumorada.. – dijo Krystal luego de haberse montado en el auto, lo encendió nuevamente y acelero en el hasta desaparecerse entre las oscuras calles de la ciudad, le preocupaba enormemente el estado del tobillo de la mayor pero no cargaría con la culpa de ello, su mente solo registraba una frase “Te odio” ¿en serio la odiaba? No le gustaba en lo absoluto esa idea

-Salir contigo no fue buena idea, mierda mira todo lo que me ha pasado en tu presencia -Gritó enojada Jessica mientras gemía de dolor

-¿Ni siquiera agradeces el que te haya ayudado? De haber sido otra te hubiese dejado ahí tirada a tu merced... además ¿no ves tu estado? Pfff ¿por qué te gusta buscar culpables? si en todo caso la culpable has sido tú. –apretó fuerte el volante Krystal, no comprendía como una mujer podía ser tan soberbia y déspota. Tampoco comprendía como la había soportado tanto si de por si ella aborrecía a ese tipo de personas, en ese caso.. ¿Qué hacia ella tratando de ayudar una chica que lo único que había logrado hacer era traer puras molestias?: Sin embargo Krystal sabía que dentro de esa hermosa mujer se escondía una persona cálida  tierna y humilde solo debía darle tiempo para comprender mejor su forma de ser, bueno si es que la castaña le concedía el tiempo suficiente

El semáforo cambio a rojo y la morena bajo la velocidad del auto deteniéndose un momento acaricio el volante con nerviosismo y volteo a ver a la castaña, sonrió al ver como dormía plácidamente, sus labios entreabiertos le daban un semblante tan tierno que por un momento Krystal sintió fundirse en ellos. Sus pensamientos se vieron frustrados por la constante insistencia de un auto que les avisaba que la luz ya había cambiado a verde, bufó con desgano y aceleró nuevamente- ¡Mierda! –exclamo la menor, sintiéndose jodidamente enferma por sus pensamientos, tomo su celular y marco rápidamente el número de su hermano, espero un momento y al tercer tono una ronca voz adormilada inundo sus oídos

-Joder Soo Jung ¿dónde te has metido? Mama estaba hecha una furia y ni se diga el padre de la Srta. Jung, estas con ella cierto? –Pregunto preocupado el chico al otro lado de la línea

-Ya me lo esperaba, nada nuevo. –Murmuro cansada la morena -y si está conmigo, necesito que me prestes tu apartamento esta noche, pasare por la casa para que me entregues las llaves, por favor espérame afuera y que no se enteren nuestros padres

-A ver Krystal no entiendo nada, como esta ella? Su padre se veía muy enojado.. –el chico se sentó en la cama y busco las llaves que estaban en la mesita de noche

-Luego te explico, ¿vale? Solo te diré que está bien, pero carga una borrachera de muerte y ahora está dormida, tampoco sé dónde vive y no creo que sea correcto que su padre la vea en este estado. Ya estoy cerca apúrate –dijo finalmente la morena tras colgar y cruzar la última esquina antes de estacionarse enfrente de su casa, busco con la mirada a su hermano quien se acercaba corriendo hacia el auto, con rapidez bajo el vidrio del auto y le regalo una mirada inexpresiva al chico quien le retribuyo el gesto con una mueca de confusión

-Por Dios, te matarán! –dijo el chico en voz baja asomándose por la ventana para observar mejor a la chica que en ese momento se encontraba dormida- No debiste permitir esto, mierda, sabes lo peligroso que es el Sr. Jung?? Podría demandarte por acoso, maltrato y violación, Dios estas jodida –observo a su hermana y luego le entregó las llaves del apartamento

-Vaya que cuento con gran apoyo de tu parte, hermanito. Solo cúbreme por la mañana ¿está bien?  Ya veré que hago con ella.. Cuídate y se discreto –luego de regalarle una dulce sonrisa a su hermano, hecho a andar el auto a toda velocidad dejando atrás a un muy preocupado Minho

Deseaba llegar rápido, estaba cansada y su mente no dejaba de divagar porque sin estar consciente esa noche había traído el mejor regalo, un regalo que no solo cambiaría su mundo y su forma de ver las cosas si no que definitivamente le devolvería la estabilidad y el brillo total a su vida..

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Aqui les dejo el capitulo, disculpen la tardanza pero repito que esta historia esta en edición, Por lo cual les pido paciencia con las actualizaciones Gracias a cada uno por las suscripciones, algo mas no hay nada mejor para un autor que la opinión y criticas de quienes leen sus trabajos, nada les cuesta dejar un simple comentario, me harían muy feliz dejándome sus opiniones sobre la historia. Sin mas me despido <3