Arcángel
My AngelATENCIÓN, ESTO ES POV DE SUNNY !
No pude hacer nada, ni siquiera tenía derecho de quejarme. Lo único que pude sentir fue el fuerte empujón que me dio Tiffany, cosa que me hizo caer al suelo. La miré a los ojos con seriedad, estaba bastante enojada conmigo.
-¡Tiffany! Detente por dios – Dijo mientras la empujaba hacia atrás con todas sus fuerzas, su respiración era agitada, me enderecé.
-¡Que hiciste! ¿Cómo se te ocurre hacer eso? – Gritó Tiffany mientras las lágrimas salían de sus ojos.
Miré hacia la calle, el cuerpo de Taeyeon estaba ahí, sin movimiento alguno, sin reacción alguna. A su lado había otro cuerpo, esta vez real, tocando la fría acerca… Jaejoong.
La gente comenzó a acercarse al lugar del accidente corriendo a socorrer a los dos cuerpos, cuando tomaron el pulso de Taeyeon pude ver que estaba respirando, Tiffany se acercó rápidamente a ella dejando a Jessica atrás.
-¡Por dios Sunny! – Dijo Jessica mirándome, en sus ojos se veía el odio puro. Pero ya estaba acostumbrada a esa mirada - ¿Qué acabas de hacer?
Desvié mi mirada hacia Taeyeon, quien estaba siendo atendida por la gente que se acercaba a ver que sucedió. Había un cuerpo completamente muerto en la fría acera, el chofer paro de manera sobre-humana lo que lo hizo salir disparado del auto. Otra vez había cambiado el destino, otra vez había muerto alguien inocente. Pero logré salvarla, suspiré con alivio, mi plan había funcionado.
Me puse de pie de manera débil, definitivamente debo mantenerme alejada de Tiffany. Ellas nunca entenderán mi punto de vista. Nunca.
-¡Este chico apenas respira! – Gritó una persona refiriéndose a Jaejoong – Llamen a la ambulancia
Miré a Jessica y Tiffany quienes estaban junto a Taeyeon revisándola, la ambulancia llegó, y comenzaron a llevarse a los cuerpos.
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-¿Qué tal el mundo humano? – Pregunté al ver a Jaejoong despertar, me miró asustado y sorprendido.
-¡No puede ser! – Gritó mientras tocaba su cuerpo, luego se quejó de dolor.
-Lo siento, fue un poco extremo – Murmuré al ver su dolor.
-¿Un poco? ¡Estamos todos muertos!
-¿Qué dices?
-Me ha enviado el arcángel
Fruncí el ceño.
-¿Arcángel?
-Si, ellos son los que nos mandan a nosotros
-¿Y?
El suspiró.
-Los arcángeles – Murmuró mirándome - Seres superiores, pueden viajar entre el mundo humano y el normal sin traer consecuencias
Lo escuché atentamente.
-Ellos eligen quien se convertirá en ángel, y… No están muy felices con lo que está sucediendo ahora
-¿A que te refieres?
-Ellos te dieron ese don para que lo aprovecharas
-¿Cómo se puede aprovechar un don así? – Me quejé rápidamente - ¡Es imposible! Si no quieren que el destino cambie, ¿Para que me dieron el don?
-No lo se – Me respondió con un poco de enojo – Yo solo sigo órdenes
Necesito hablar con un arcángel. Ahora mismo mi mente era solo una co
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