Buenas tardes a todos, soy Tao de Exo M – Sentado en una silla, baja levemente la cabeza – Como se han dado cuenta, éste capítulo lo voy a relatar yo – Acomoda la postura, logrando una línea más armoniosa de la columna vertebral – Para empezar, pasaré mi lenguaje a un coeficiente intelectual promedio, así no será necesario googlear cada dos por tres, y la lectura pasará a ser más fluida – Choca las palmas de las manos – Primero que nada, y sin exagerar, yo soy una persona que lo sabe todo – Alza una ceja – Y lo veo todo. 

Siendo más especifico, comenzaré generalizando mis teorías. Dentro de Exo, y tal vez ya se habrán dado cuenta de que cada uno de nosotros somos muy distintos. Lo único que podemos compartir es el trabajo, el hogar y la cena. Se que en toda relación humana, las cosas son así. Bueno – Ladea la comisura de la boca – Si lo analizo mejor, el desorden y la falta de pulcritud, y no lo digo por todos, no voy a nombrar a nadie en particular, pero eso es algo que varios comparten y los destacan a simple vista – Mueve la cabeza, de manera negativa – Odio con todas mis fuerzas y energía el desorden y la suciedad, más aun las personas que ni notan por ejemplo – Mira fijo al frente, muy serio y sin expresión – La existencia de un pedo. Soy conciente de que somos humanos y por más que seamos Exo, o sea, jóvenes famosos, son, por así decirlo, acciones necesarias del cuerpo, no entraré en detalle de cómo y por qué los seres vivos nos tiramos pedos. Pero por respeto, pueden, o mejor dicho, deben evacuarlos en el patio o en el baño.

Principalmente eso, hay otras cosas que me hacen querer renunciar constantemente, para no convertirme en un asesino –Respira hondo y exhala lentamente – Cuando me levanto, y escucho esos gritos insoportables e inoportunos, o cuando discuten sin fundamentos, me transformo en un ser sin moral – Muerde su labio inferior – Es que... – Da un golpe a su mano, ésta con la palma al descubierto, y la que golpea con el puño cerrado – Ustedes me entienden – Vuelve a realizar la misma acción dos veces más, luego de ahorcar el aire con ambas manos y dejando a la vista una mirada de ira al rojo vivo – No se preocupen, no voy a matar a nadie – Chasquea la lengua – Siendo honesto, tengo un candidato, quien me saca da poca paciencia que me queda. Ese masoquista de mierda, de solo verlo se me revuelve el estomago, y me hace sentir como el desayuno regresa a su inicio – Acaricia su vientre -.

Para no irme más de tema, me dedicaré, a partir de ahora, a hablar individualmente de cada uno.

El nominado y ganador del premio al patético e intento constante fallido a la maldad, por resentimiento a la vida –Levanta el dedo índice –Tambores, por favor – Hace una pausa, generando suspenso - ¡LuHan! – Saca un puñado de papelitos y los arroja por el aire – LuHan cree que haciéndose el malo con los débiles va a lograr ser mejor que el resto, se nota que no tiene orgullo propio. Si su padre supiera que está embobado con un chico, se volvería a recrear el pasado, claro está, yo no lo voy a permitir. Pero bien por él, que por lo menos sabe mantener oculta la relación, aunque yo trabaría la puerta de la habitación antes de manosear al pequeño muchacho oscuro.

[Flash back]

SeHun se encontraba en reposo en la cama de LuHan, y éste recostado sobre él. Se besaban desaforada y torpemente. Mientras que SeHun succionaba el labio inferior de LuHan, el mayor introducía su mano dentro de la remera del coreano, acariciando el abdomen. SeHun dio un suspiro duradero al contacto de la lengua con su cuello.

[Fin Flash back]

Jamás se enteraron de mi descuido. Y no – Niega con la cabeza – No me traumo con esas cosas, ya que yo no participaba en esa escena.

El siguiente, no es un sujeto desagradable, ni me molesta, y es uno de los más maduros, a mis ojos. Me refiero al pequeño SeHun, aunque tiene sus cosas que arrastra de su pubertad, claramente me refiero a su look. Pero tiene tiempo de sobra para superar la adolescencia tardía.

Lay – Toma un vaso con agua, que se posa en la mesa enfrente de él, y bebe – Ese tipo me da escalofríos. Su “don” de adivinar el futuro o, mejor dicho, para inventar buenas paparruchadas y tener suerte de que sucedan, y sino, pase o no pase, todos le creerán, diga cosas insólitas.

A D.O le persigue la desgracia ¿Vida social? – Finge incredulidad – En mi diccionario no existe eso, al igual que la palabra “AMOR”, pero todavía falta para llegar a ese tema.
Lo único que me agrada de D.O es que se baña cinco veces al día, pobres criaturas marinas.
Y también ayuda a mantener el orden.

Ahora – Mira al piso y sonríe de lado – Me cuesta un poco hablar de mi líder, mas aun cuando es uno de los que se merece una patada en el culo y rompérselo gracias al envión posible de la pierna.
Kris es una persona que se irrita con facilidad, como cuando las mujeres sufren de menopausia, y eso puede llegar a ser contagioso. Además, cree que es perfecto, cree que es el único líder, y ser vivo en esta galaxia, eso es muy molesto de su parte. Yo espero que SuHo le quite el puesto, o bien, que haga su trabajo como corresponde. Yo le tengo fe.

Chen vive en un mondo mágico, para su cumpleaños le voy a regalar un carruaje de tomate y de esto lo van a tirar Pegaso con pelaje colorido. Le recomiendo un psicólogo, para que el aterrizaje hasta la tierra sea menos doloroso – Vuelve la mirada al frente – Chen, es mentira que vivís en Exo Planet.

BaekHyun no se – Se cruza de brazos – Trabaja bien, más que bien, yo diría. Pero cuando termina de utilizar el baño (después de tres horas), lo deja en un estado catastrófico, similar o peor que cuando un tornado arrasa con una ciudad.
Y ni hablar con los – De su garganta brota una arcada – pelos en la rejilla del lava manos – Se toma del pecho – No lo resisto, la próxima vez voy a hacerle tragar sus productos caros de belleza que tiene bajo su poder. Es una promesa, y yo soy hombre de palabra.

XiuMin es un degenerado. Si, si, eso opino de él.

[Flash back]

Tao leía en los sillones de la sala, un libro de física quántica, bajo la luz de un foco tenue que titilaba y perdía fuerzas a medida que los minutos corrían. Unas voces lo distrajo de la lectura.
- ¡No Min! Acá no da – Las siluetas de SuHo y XiuMin comenzaban a visualizarse en la espesa oscuridad de la cocina – Está Tao en la sala y nos puede ver – Dijo por lo bajo SuHo.
- ¡Tao no ve nada! Esta leyendo, ni se da cuenta que estamos nosotros.
Los besos eran ruidosos y húmedos, ambos se oían agitados.
Tao fijó la mirada al libro, con temor a ver algo indeseable. Ante la duda, se quitó los anteojos.
- ¡No! No bajes ¡Por favor! – SuHo ahogó un gemido - ¡Min basta ya!
- ¿No te gustan mis besos?
- Me encantan, pero... – Volvió a oírse un gemido ahogado - ¡MinSeok! Ya...
- ¿¡Qué!? – Un sonido seco dejó sin palabras al líder coreano. Tao, con la vista nublada, divisó a alguien sobre la mesa, por el formato anatómico supo que era SuHo, en cuanto a XiuMin, quien se encontraba con la cabeza entre las piernas abiertas del otro. Instantáneamente, Tao se paró, y caminó hasta las escaleras devoradas por la oscuridad, chocándose con todo lo que había a su paso.

[Fin Flash back]

Lamento decirte, mi querido Watson, yo lo se todo y lo veo todo, por desgracia, me tope con vos, asqueroso depravado ninfómana, ojalá te encuentre Kai de esa forma, que él tiene la mente más demencial que todos nosotros juntos, y te meta uno de sus armas de juguete (cuando hace cosplay) y que te salga violentamente por la boca – Agitado inhala suave y exhala entrecortado -.

Ya casi termino con este monologo. A ChanYeol no siempre le creo su sonrisa, pero no me voy a meter con él porque respeto su estilo de vida, y es el único quien no le hace mal a nadie, espero que mantenga eso siempre.

Como se darán cuenta, dejé lo peor para el final.
Créanme, es la persona más repugnante que he conocido en mi vida. Esa vida que se encargó de arruinar sin el permiso de nadie. Y esos traidores hijos de puta quienes lo incitan a que sea más imbecil todavía. Cada mañana escucharlo gritar, a ese pedazo de mierda infradotado.
¡Hijos de puta! Me condenaron con esa cagada humana.

[Flash back]

ChanYeol, Kai y Lay estaban sentados en los sillones de la sala, acurrucados mirando cada tanto a Tao, que estaba compenetrado en un libro viejo sin título, y amortiguaban las risas con las manos y/o almohaditas.
Kai dijo en secreto a Lay algo que ChanYeol, al parecer, ya sabía. La reacción del chino fue de esperarse: dio una fuerte risotada. Tao carraspeó.
- ¿En serio me decís? – Preguntó Lay a los gritos.
- ¡Shhh! Baja la voz.
- Déjenmelo a mi, yo te voy a dar un pie – Se puso de pie de un salto – Channie, seguime – ChanYeol obedeció. Tao levantó la vista a ellos, sorprendido y a la vez con incógnitas – Che, no te queremos joder, solo queremos saber qué opinas sobre Kai – Tao elevó una sola ceja y cambió el punto de visión a la bien tímida de Kai.
- Mierda maloliente – Volvió la mirada a los dos chicos parados en frente suyo - ¿Por qué?
- Es que... ¿Viste Kai? – Lay sonriente señalaba al morenito detrás de ellos – Él gusta de vos – Tao demostró asco en su rostro.
- Felicítenlo de mi parte – Volvió al libro. Kai saltó del sillón y se acercó a zancadas.
- Tao – Éste lo observó nuevamente, ya fastidiado, cerrando el libro con un fuerte estruendo – Dejame comprobar si realmente me gustas.
- ¿Cómo? – Kai parecía dudar de la respuesta. Entre dientes habló.
- Con un beso – Tao fingió reírse.
- ¿¡Estas loco!?
- ¡Dale! Tengo los dientes limpios – Mostraba sus dientes blancos perfectos. ChanYeol le apoyó la mano en el hombro.
- Deja, es un miedoso – Cuando se estaban por dar media vuelta e irse, Lay entro en acción.
- ¡Si! Es un puto cagon. Tenes miedo de admitir que te puede llegar a gustar los hombres – Su rap fue tan callejero como el de los chicos de Estados Unidos. ChanYeol intervino, temiendo por la vida de los tres.
- Solo te pide un beso, nada raro – Se inhibió con la feroz mirada del chino antipático, que rápidamente se puso de pie, enfrentando a Kai. Su mirada tras los anteojos de marcos gruesos serenaba. Inhaló mucho aire, sabiendo lo próximo que debía hacer, sin saber como lograrlo.
Ambos acercaron sus labios despegados entre si, para saborear mejor al introducir levemente las lenguas, que se acariciaban con suavidad.
Duró menos de lo planeado. Se distanciaron unos pocos centímetros, conservando los ojos apretados, y luego, para sorpresa de quienes presenciaban el momento, volvieron a acercarse. Al rozar nuevamente sus labios ya húmedos, Tao con el puño cerrado, impactó en el pómulo de Kai, sentándolo en el piso.
- Si... – Sonreía con la mejilla colorada - Me gusta ... Me encanta – Sus ojos llevaban un brillo especial - ¡Creo que lo amo!
- Kai ¡Callate! Me das asco, amorfo chupa pija – Gritó con voz chillona y trotó atravesando la sala, desapareciendo.


[Fin Flash back]

Sin palabras ¿No?. Y anoche terminaron de agobiarme.

[Flash back]

Tao lavaba los platos, Lay barría el piso de la cocina.
- ¿Y? No me podes decir que fue tan desagradable.
- Lay, te juro que fue horrible, no me jodas.
- Pero ¿Qué sentiste? – Tao le dio una descripción rápida - ¿Y qué sentís ahora?
- Nauseas.
- Mira que por un beso ni te embarazas – Dejó de sonreír al notar la mirada asesina del pequeño chino - ¡Era una broma! Sentís nauseas, pero yo te pregunté qué sentís con respecto al beso.
- Te dije que nauseas – Secó sus manos con un trapo colgado a la manija de la puerta.
- ¿No serán las famosas maripositas? Te hacen confundir de síntomas.
- ¿Maripositas? – Preguntó incrédulo, Lay emitió una carcajada sonora.
- O sea que te gusta, lo acabas de confirmar – Levantó la mano para no dejarle hablar – No me digas nada, no hace falta.
- ¿Te pensas que sabes todo? – Dio media vuelta y comenzó a irse.
- Tao, la definición de amor, o amar, no lo vas a encontrar en ninguno de tus libros – Dijo con un tono francés.

[Fin Flash back]

Tal vez esté equivocado en muchas de las cosas que diga, pero Yixing no tiene ni idea de lo estúpido que va a quedar frente a mi cuando se de cuenta de que yo nunca me voy a enamorar.