Capitulo 3: La Ajumma ertida.

Una semana ya había pasado  y esta era el final de la segunda semana. El sol se levanto en lo alto para señalar el comienzo de un nuevo día. Pero para Tiffany era el comienzo de otra pesadilla. Todavía recordaba cuando ella no logro conseguir la exacta temperatura que su señora le había pedido y la rubia le obligo a comer ratas. Vacilante ella comió la carne mientras Jessica se echo a reír fuertemente al ver la expresión de Tiffany, cuando la criada realmente pensaba que ella estaba comiendo ratas.

“¡Deberías haber visto la expresión de tu cara!” la rubia rió más fuerte, mientras que la criada estaba confundida por la situación.

“¿Realmente pensaste que era una rata de verdad?” Jessica borraba las lágrimas de su rostro ya que se había reído demasiado.

Tiffany se quedo allí sin saber cómo reaccionar.

“¡Eso es solo pollo! ¿La carne no tiene mucha diferencia cuando son cocinadas, no es así?”  La traviesa adolescente  dijo casualmente mientras la mandíbula de la criada cayó una vez más, la rubia había logrado su travesura infantil.

Tiffany agarró otra pieza de carne que Jessica había preparado para ella por su fracaso y se la comió con rabia.

“Wow, no sabía que eras una glotona.” La rubia dijo en broma aun riendose

Tiffany se limito a seguir comiendo, ignorando a la rubia. Esto de alguna manera habia logrado que la rubia se molestara. Jessica nunca había sido ignorada antes y nadie había echado a perder su ego. La rubia frunció el ceño.

La rubia tiro del  brazo de la pobre criada y la miro directamente a los ojos con rabia después de que ella había logrado bloquear el movimiento de la criada impidiendole  agarrar otra pieza de  carne de ‘rata’.

Ella susurro con un tono irritado. “¡Maldita sea, Cuando yo digo algo, tienes que hacerme caso!”

Tiffany escupió la carne masticada en la cara de Jessica. “Responderé si realmente merece una respuesta.” La criada dijo con un tono severo que de alguna manera hizo que la rubia sintiera un poco de miedo.

“¡Callate!” ¡Tu no eres  mas que una simple criada!” la rubia soltó su agarre y salió de la habitación completamente furiosa. Olvidando  la escupida en su cara mientras ella estaba demasiado ocupada procesando el hecho de que una persona se atrevió a ‘insultarla’, de acuerdo a su ridículo diccionario.

Este último incidente había causado que el pequeño diablo tratara a Tiffany de peor en peor. Ella suspiro mientras agitaba el wok.

No debería haber hecho eso…                                                              

Ahora, siento como si realmente estuviera viviendo en un infierno…

Ella estaba en la cocina preparando algo de comida para el almuerzo cuando de repente sintió que alguien estaba tocando su trasero.

¡¡Yahhhhhhhhh!!!”

Ella inmediatamente sujeto la sartén más cercana, lista para asesinar a quien quiera que estuviera propasándose con ella. La criada se dio vuelta y vio a una mujer pequeña con cara inocente y mayor vistiendo lo que parecía ser uno de esos antiguos trajes de jardinero. Se detuvo una pulgada cuando se dio cuenta de no era más que una pequeña mujer mayor.

“¡Hola chica caliente! ¿Estás sorprendida por mi encanto?” Dijo la Ajumma  orgullosamente.

“¿E-eh?” Tiffany parpadeó para confirmarse a si misma  lo que la ertida Ajumma acababa de decir.

“Erm… ¿Se puede saber quién es usted?”        

La pequeña Ajumma ignoro la pregunta. “¿Así que tu eres la nueva criada, eh? Bonito culo el que tienes allí. Podrías seducir a cualquiera.”

Tiffany se sonrojo por el contundente y ertido comentario. “Er… uhm…” ella no sabía cómo responderle a esta rara Ajumma.

¿Es una jardinera aquí?”

“¿Entonces, qué hiciste para conseguir el trabajo aquí?”

Se ve como una….con ese traje.

 “Er… fue porque yo no tenía ningún lugar en donde quedarme y necesitaba el dinero en primer lugar…” Ella suspiró. Tiffany no sabía por qué pero ella sintió que podía confiar en esta rara mujer. Después de todo, ella no parecía ser parte de las bromas de Jessica.

“Oh … ¿Así que no es por el dinero?” la mujer parecía tener un hambre voraz mientras miraba la comida en el wok, así que la criada puso la comida sobre los platos.

Ella asintió. “Prefiero renunciar si es solo por dinero. Además, estoy segura de que podría quedarme en algún parque o estación de tren hasta que pueda encontrar un lugar para quedarme…” la doncella deseaba contarle toda la pesadilla que había experimentado desde que su señora empezó la tortura.

“Luces como si necesitas de alguien con quien hablar. No es común oír a una criada que podría soportar trabajar aquí por más de una semana. Por cierto, ¿puedo tener un poco de ese kimichi?” la pequeña mujer estaba babeando como Tiffany le dio un plato lleno de comida  y su sudor cayo.

La Ajumma empezó a comer mientras Tiffany se sentó y puso sus manos debajo de la barbilla, descansando sobre la mesa antes de que ella mirara a lo lejos. “Bueno para empezar,  soy huérfana y acabo de ser expulsada del orfanato. Trate de buscar un trabajo porque vivo sola y necesito el dinero, pero también un lugar donde quedarme. Es difícil encontrar un buen puesto de trabajo en la ciudad en estos días y me sentí muy afortunada cuando me aceptaron aquí, pero…” ella suspiro. La criada rara vez se encontraba con alguien a quien pudiera pedir consejo y de alguna manera sintió que la Ahjumma ertida podría ser una buena consejera, ya que los ancianos son conocidos por ser sabios.

La Ahjumma había terminado su plato y pidió más. Sin pensarlo, Tiffany le dio otro plato y de alguna manera pensó que la Ahjumma realmente no le estaba prestando atención a su discurso, y en su lugar prefería   la comida.

“Hmmmm… plash to  bhoono esh” Ella masticaba como si nunca hubiese comido antes en su vida. “horry… eshtabaw di hhendo alwo…” dijo con la boca llena de comida.

“La señorita de la casa sigue haciendo todas esas travesuras infantiles y una sola vez, yo no pude aguantar más, así que estallé… Con el tiempo, las bromas fueron de peor en peor… pero lo que es peor, es que ella continúa tentándome con su gran atractivo ual…” ella se dio cuenta de que no debería haber dicho eso y rápidamente se cubrió la boca mientras se sonrojaba,  la Ahjumma se dio cuenta del desliz, pero decidió ignorarlo. “Incluso si quisiera renunciar. No sé que  voy hacer después de eso… Yo nunca podría ser capaz de conseguir un trabajo decente con solo un diploma de escuela en estos días y solo tengo 100 wons en la cartera, así que…” ella se detuvo al recordar como Jessica insulto su música. “Siento que estaré huyendo si renuncio… Además, no me gusta perder…” ella sonrió débilmente. De alguna manera sintió un poco de alivio después de decirle sus problemas a la pequeña Ajumma ertida. Tal vez la Ahjumma le hizo recordar a un abuelo que solía  trabajar en el orfanato donde ella estaba; él murió un poco después que Tiffany empezó a asistir a la escuela secundaria. Él era el único trabajador que la trataba como si fuera una nieta.

La Ahjumma había terminado su segunda plato. “Ya veo… Buena suerte  entonces, esa mocosa es la persona más terca que jamás podrías encontrar.” Tiffany fue a colocar los platos en el lavavajillas y la pequeña Ahjumma desapareció misteriosamente, al igual que la forma en que llegó, cuando Tiffany estaba a punto de contestarle.

Jessica estaba durmiendo plácidamente en su cama, ya que era fin de semana, lo que significaba que podía torturar a su doncella más adelante al mediodía, ya que no tenía necesidad  de ir a trabajar los fines de semana. Por desgracia, un determinado huésped ertido acababa de llegar a molestar su precioso día libre.

huésped salió de uno de los pasadizos secretos. Se inclino para que pudiera susurrarle a la rubia.

“Soo-ye-on-ah…. Vamos a jugar…” susurro con un tono lúdico aunque sonaba mas como la forma de un viejo ertido diría a causa de su voz.

Jessica no parpadeó. Ella abrió los ojos de inmediato, no necesitaba de saber quién era y salto de inmediato que se cayó de su cómoda cama.

Se puso de pie tan pronto como le fue posible. “¡¡¡Yahh! ¡¡¡ Ajumma!! ¡Deja de despertarme usando ese tono desagradable!”

“Oh… ¿y por qué no? Trate de hacer mi voz tan linda como me fue posible porque sé que siempre sueñas con ser despertada por chicas lindas.” La Ajumma respondió casualmente con una sonrisa. “Además, ¿cuándo dejaras de gritar como un delfín?”

“pfff. ¡¡ ¿Acaso, eres una chica linda?!” Jessica estaba exasperada. Ella siempre se había frustrado a si misma cada vez que discute con esa Ajumma ertida.

Kim Taeyeon, 63 años, Ceo de Kim Company, que es también uno de los conglomerados más influyentes de Corea.  Ella había sido amiga de los padres de Jessica y trataba a la rubia como si fuera su propia hija. Aún sola, después del fallecimiento de su esposa, ya que era difícil de encontrar una nueva pareja que no se le acerque por su dinero, sino mas bien  por amor. Había ayudado a Jessica, más cuando ella estaba devastada por la pérdida de sus padres a una edad tan joven. Ella era quien se hizo  cargo de la  Jung Group cuando Jessica aun estaba en la escuela, aunque la rubia a veces iba a las reuniones como ella pensaba que tenía que aprender las cosas más rápido que la mayoría de niños desde que ella había sido criada para hacerse cargo del Imperio Jung.

“No, ya no lo soy, si me hubieras conocido cuando tenía tu edad. ¿Quieres ver mi secretito?” sonrió mientras le preguntaba, mientras la rubio puso cara de asco,  pero pronto pensó en otra cosa para molestar a la rubia. “O… ¿Te gustaría que llame a Tippany-ah para que te despierte? Ella se ve tan deliciosa con esas curvas.” La anciana tenía una mirada como si estuviese desnudando el cuerpo de la mucama y eso de alguna manera molestó más a la rubia que  la sarcástica broma anterior.

Jessica levanto una ceja cuando escucho el último comentario. Había un poco de rabia cuando se dio cuenta que la Ajumma ertida había acosado con la mirada a la criada, pero por supuesto ella no quería admitirlo. “¿Cómo sabes que tengo una nueva criada?”

“Leeteuk me  dijo que  has estado dándole unos duros momentos a la pobre criada y él no quiere contratar una nueva criada para ti otra vez. Así que, estarás rodeada por puros monos si esa chica renuncia.”

Jessica miro con horror a la Ajumma ertida como se imaginaba como seria eso; rodeada de monos. Ella se estremeció. “¡No lo hará!”

En ese instante, Leeteuk apareció vía un pasaje secreto. “Podría  ser, si se mantiene dándole a ella esas tontas órdenes.” Él se detuvo de empujar el carrito donde traía ciertas bandejas cerca de Jessica.

Jessica puso mala cara mientras trataba de defenderse a sí misma. “¡Y-yo simplemente no confió en la gente que no conozco!  ¿ok? ¡¡Además, ella fue grosera conmigo!! ...Bien… una vez…” ella se sentía como un niño siendo intimidado por dos adultos.

Taeyeon entrecerró los ojos y miro a la rubia adolescente con tristeza. “¿No fuiste tú quien empezó primero? ¿Y… tu aun estas torturándola de esa manera?”

Jessica miro hacia abajo para ocultar su deprimida expresión cuando la pequeña  Ahjumma había dado en el clavo.

Leeteuk continuó. “Han pasado más de cinco años. Eso te va destruir si no puedes s