IV. Necesitamos hablar

TaeYeon había tratado de llamar a Tiffany, pero esta no le contestaba las llamadas, la bajita había llegado al punto de desesperación. Ya habían pasado dos semanas desde aquel encuentro que ambas chicas tuvieron. TaeYeon se sentía avergonzada, pero no iba a mentir al decir que no le había gustado, le había encantado, sus labios se amoldaban de una manera tan perfecta, el sabor de Tiffany era tan exquisito.

Era un sábado por la tarde, las chicas habían organizado una cena en la casa de HyoYeon. TaeYeon estaba nerviosa, vería a Tiffany y era el momento de hablar, tenía que aclarar las cosas con ella. Todos los chicos estaban hablando y vio como Yuri se acercaba a ella lentamente. Al llegar con ella, la morena besó la mejilla de la bajita.

— ¿Cómo estás? —la bajita suspiró pesadamente.

—Veo que te ha ido bien —la morena sonrió.

—Creo que he jodido mi amistad con Tiffany —Yuri miró a TaeYeon y esta tomó un sorbo de su copa.

—Y eso es ¿por qué? —TaeYeon miró a Yuri.

—El día que te fuiste y la dejaste en mi camerino, la besé y por casi nada, íbamos a tener relaciones —Yuri abrió sus ojos completamente y soltó una carcajada. En ese momento todas la voltearon a ver y ella solo les sonrió. — ¡Dios, Yuri! Además tú tuviste la culpa —la morena la miró.

—Yo te dije que tuvieras o con una mujer, en ningún momento te dije que tuvieras o con tu mejor amiga, enana —la bajita solo se sonrojó.

—Es que estaba tan cerca, no me pude contener —Yuri miraba a la castaña, en verdad estaba preocupada por la bajita, jamás la había visto de esa manera, ella sabía que tenía sentimientos por la rubia de eyesmile, pero jamás pensó que algo así pasaría entre ellas.

—Eso te pasa por caliente —TaeYeon la miró seriamente. —Lo siento, ¿y qué paso después del beso?

—Nada, no pasó nada. Tiffany no me responde las llamadas, ni los mensajes. No me quiere ver —dijo TaeYeon pesadamente. —Con decirte que ayer fui a su casa y no me abrió la puerta. Estropeé mi amistad con Tiffany, Yuri.

La bajita en verdad estaba desconsolada, nunca antes le había pasado eso con nadie, ni siquiera con ninguno de sus novios, ni siquiera con Joy, y se suponía que ella le gustaba. TaeYeon estaba al límite, tenía que hacer algo, necesitaba hablar con Tiffany

Tantas cosas pasaban por la cabeza de la bajita que no se estaba divirtiendo. Mientras los demás bailaban y conversaban entre ellos, la bajita solo posaba su vista en la puerta, esperando que la chica eyesmile apareciera. Y como obra de magia, Tiffany aparece por esa puerta. TaeYeon al verla, sintió como su corazón comenzaba a latir tan fuerte que casi se salía de su pecho. Sus sentidos comenzaron a cobrar vida y la misma sensación que tuvo cuando estaba besando a Tiffany, apareció otra vez.

—Hablando de rubias con eyesmile con la que casi tienes o —le dijo Yuri a TaeYeon al oído y esta se sonrojó. TaeYeon sonrió, pero sin mirar a Yuri, su mirada se concentraba en esa pequeña mujer.

— ¡Hola, Tiffany! —Yuri corrió a abrazar a la rubia.

—-Hola, Yul —Tiffany besó la mejilla de la alta y después al resto de las miembros, se acercó a saludar a la chica de ojos marrones. TaeYeon quiso acercarse, pero supuso que Tiffany inventaría una excusa para no hablar con ella, por lo que se quedó mejor en su lugar.

— ¿Estás peleada con Tiffany, Tae? —la bajita se sobresaltó un poco, Jessica le llegó de sorpresa por la espalda.

—Casi me da un paro cardíaco —TaeYeon tocaba su pecho mientras Jessica la miraba.

—Lo siento, ¿estás peleada con ella? —la bajita de pelo castaño la miró.

—No, ¿por qué dices eso, Sica? —Jessica sonrió.

—Será porque todos fuimos a saludarla, menos tú —TaeYeon mordió su labio y miró a Jessica.

—No, es solo que nos vemos a diario y no quiero atosigarla —Sica negó con la cabeza.

—Eres muy mala mintiendo, Tae. Cualquier problema que tengas con Tiffany lo van a solucionar, ustedes son tan unidas, que su amistad puede resolver todo —la bajita le sonrió a Jessica. —Bueno te dejo porque iré a regañar a Yuri, prometió que no bebería —y en efecto, la morena estaba bebiendo unos tragos de tequila. TaeYeon asintió y miró la escena de cómo Jessica regañaba a la morena, la cual solo asentía a las cosas que Sica le decía.

TaeYeon desvió su mirada hasta una esquina de la casa donde se encontraba Tiffany, la bajita tomó el valor suficiente y lentamente se fue acercando a la rubia. Sentía que en cualquier momento su corazón saldría por su boca, pero supo cómo controlar esa sensación. Tiffany miraba como la castaña se acercaba, trató de correr, pero fue demasiado tarde ya que la bajita ya había llegado hasta ella.

—Hola —le dijo la castaña tímidamente a Tiffany.

—Hola —respondió de la misma manera la rubia. Después de ese tímido saludo, ninguna de las dos dijo nada. La situación estaba desesperando a la bajita. Esto no podía seguir así, por lo que dejó su bebida en la mesa cerca de donde ellas estaban y tomó la mano de Tiffany.

— ¡¿Qué carajos, TaeYeon? —le recriminó la rubia una vez que se habían internado en unas de las recamaras de la casa de HyoYeon.

—Necesitamos hablar —le soltó la bajita a la rubia.

—No hay nada de qué hablar, TaeYeon —la rubia se cruzó de brazos y TaeYeon se acercó un poco más a ella.

—Oh, créeme que