“¿Wu YiFan?”

“Kris.”

“Ahh, lo siento mucho.”

“¿Eres chino?”

“Sí… ¿Cómo-”

“Tu pronunciación del coreano es rara.”

“Oh. Huang ZiTao. Estoy aquí para ser tu tutor de tu trabajo en Estado y Sociedad.”

“Sí, algo así me dijo la profesora.”

“¿Trajiste tus apuntes?”

“Te llamaré Tao.”

“¿Tao?”

“ZiTao es muy largo y formal, te llamaré Tao.”

La mirada de Kris había estado todo el tiempo sobre el chico de los cabellos negros que llegaban a cubrir ligeramente su rostro. Sus ojos se mantenían oscuros y Kris no estaba seguro si era porque el maldito niño llevaba un peinado tan raro, porque no dormía bien, o porque en efecto había nacido así.

Alto, ojeras, una nariz prominente, labios de gatito, ojos rasgados para arriba, piel algo más tostada que la del chico de cabello rubio  que yacía sentado al frente suyo, ese era Huang ZiTao. Había sido transferido desde China por sus buenas calificaciones y su continuo esfuerzo, cursaba segundo año y se encontraba estudiando Derecho Internacional, era… una “nueva adquisición”.

Sin una vida muy complicada, ZiTao solamente buscaba mantener a flote sus calificaciones, embebido en el estudio y deportes, el nuevo estudiante chino no había hecho muchos amigos en dicha Universidad, especialmente porque había comenzado hace poco. Cuando se referían al “anti-social” del segundo año en su carrera, la gran mayoría volteaba a verlo, ya que incluso los geeks o nerds tenían un grupo en el cual permanecer en los almuerzos o salir a pasear luego de clases, sin embargo, a pesar de todo, ZiTao no se consideraba un antisocial o un “underdog”.

En el momento en el cual su profesora le ofreció cambiar de aula con los de Relaciones Internacionales, bueno, pues… obviamente quiso responder con un rotundo “¡NO!” pero fue cuestión de segundos para que el chico chino con cuaderno de Kung Fu Panda, aceptara la propuesta dada por la profesora, luego de escuchar que recibiría un par de créditos por tutelaje.

“Oh, ya veo. Hm… Bueno ¿Quieres empezar ahora?” Una ligera sonrisa de lado se pintó en los labios del chico de las ojeras a lo que lentamente se sentaba frente al otro.

“No, pero ya qué.”

Eran las 03:15 p.m. para ser exacto, la tarde estaba fresca, sin embargo a pesar de ello había un sol realmente fuerte. Los asientos de la parte exterior de la Universidad eran perfectos para estudiar en la sombra y cercanos a aquella pequeña cafetería circular a unos metros de los mismos, definitivamente era una tarde hermosa.

Sin embargo, el rubio debía de admitir de que a pesar de que sabía que sus notas subirían, definitivamente no le gustaba pasar sus tardes sentado con un nerd y para colmo, estudiando.

“Kris ¿No?” Preguntó el más bajo mientras se relamía los labios nerviosamente, buscando la mirada del mayor, el cual mantenía una cara de frustración absoluta.

“¿Qué?”

“¿Empezamos?”

“Supongo.” Respondió Kris resoplando y mirando aquel cuaderno tan ridículo que el delgado chico de cabellos negros y piel oscura tenía sobre la mesa. “¿Kung Fu Panda?” Preguntó seguido de una risa algo burlona mientras estiraba su mano y tomaba aquel cuaderno, mirando el mismo.

“¡Ah, sí, lo sé! Es una película genial, mi madre dice que soy Kung Fu Panda”

“¿Sabes Kung Fu?” Los ojos de Kris volvieron al rostro de Tao y… ¿A caso el chico estaba sonriendo? Un segundo… ¿Estaba orgulloso de eso? ¿En verdad no había captado su burla?.

“Sí, soy chino, sé Kung Fu, mis ojeras son como-”

“¿Las manchas de un panda? Es lo más estúpido que he escuchado el día de hoy.”

“A-Ah…” La mirada de Tao bajó y su sonrisa se volvió una un poco más incómoda mientras una de sus manos se dirigía nerviosamente a su cuello, frotándoselo cual niño inquieto. Vaya… en verdad lo había cohibido.

“¿Lo haces por tu mamá?”

“¿Eh?” Tao volvió a subir la mirada.

“Usar ese ridículo cuaderno.”

“N-No realmente…” A medida que hablaba su voz iba disminuyendo hasta terminar por murmurar un: “Me gusta mucho Kung Fu Panda…”

“…” ¿En verdad? De acuerdo, había algo MUY raro en éste chico, era como si en verdad no le importara en lo absoluto el que el otro fuera uno de los más populares en la universidad y pudiera destruirlo socialmente en cuestión de segundos, bueno, no era que Tao tuviera amigos, sin embargo… ¿Cómo se atrevía a admitir algo así en voz alta?. “¿Haces muchas cosas con tu mamá? Ya sabes, compartir momentos y eso.” Preguntó Kris mientras revisaba las anotaciones dentro de dicho cuaderno, vaya… todo estaba escrito en chino. Éste chico parecía escribir como si fuera una especie de computadora.

“Sí, vamos a ver películas, comemos juntos, hoy iremos al parque de las piletas, será emocionante.” Tao tenía la sonrisa más enorme del mundo, era como si su madre fuera su todo, en ningún momento se avergonzó de decir que le gustaba pasar tiempo con ella ni nada por el estilo… Y ahí fue cuando Kris lo envidió. Él no podía hacer nada más que estudiar (y aún así sus notas no eran muy altas) ¿Cuándo había sido la última vez que él había salido con su madre?...

“La quieres mucho ¿Verdad?” Preguntó entrecerrando un poco los ojos, fingiendo estar leyendo las palabras escritas sobre las hojas de aquel infantil cuaderno, sin embargo podía notar la sonrisa de Tao y sus manos que se movían bajo la mesa ansiosamente, jugando entre ellas como si en verdad fuera un niño de primaria. “¿Y no… tienes amigos?”

“Sí, ella… es mi única amiga en sí. No soy muy sociable.” Aceptó levantándose de hombros despreocupadamente. ”No todos somos populares y tenemos amigos por todos lados.” Bromeó estirando sus manos y cogiendo su pluma mientras lentamente le quitaba el cuaderno de las manos de una forma muy delicada.

“Há, qué gracioso, bueno, como sea.”

“¿Tú… por casualidad no te llevas bien con la tuya.”

Kris levantó una ceja mirándolo de pies a cabeza. Vaya que éste chico era raro ¿En verdad creía que podía preguntarle de cosas así tan abiertamente? De acuerdo, entendía que no tuviera amigos y por ello no estuviera consciente de cómo tratar a alguien de su clase, sin embargo… respondió a su pregunta, y ni siquiera supo por qué.

“Sí me llevo bien con ella, pero no tengo tiempo de estar con ella, tengo que estudiar esta estúpida carrera y terminarla para trabajar como heredero de mi padre y así sustentar a mi madre, repruebo un curso y todo se va a la mismísima mierda y pierdo el apoyo económico de mi padre. Por eso no tengo tiempo en sí.”

“Oh… eso, es feo.”

“Pero por lo menos tengo amigos.” Tao arrugó la nariz y entrecerró sus ojos, moviendo sus labios como si estuviera repitiendo la misma frase del otro (pero sin palabras, por supuesto), en forma de burla o más bien… piconería.

“Ñe, ñe, ñe…” Murmuró repitiendo por lo bajo.

Ese gesto tan infantil hizo que Kris soltara una carcajada y se cubriera los labios mientras miraba a otro lado, intentando mantener su imagen de ‘chico frío’ a pesar de sus estruendosas risas, sin embargo aquello no fue ignorado por Tao. El chico-panda sonrió ligeramente de lado y mirando al mayor reír y luego bajando la mirada nuevamente, algo apenado, se atrevió a hablar.

“Ya, bueno, entonces… supongo que debo de esforzarme para hacer que apruebes.”

“Es tu obligación, sé lo de los créditos.”

“¡Ah, lo sabías!” Se quejó Tao, haciendo que su voz se escuchara como la de un niño consentido mientras se tiraba para atrás y apoyaba su espalda contra el asiento y luego empezaba a pasar las hojas de su cuaderno hasta llegar a una donde había apuntado algunas cosas a cerca de la monografía que Kris debía de realizar. “Bueno, entonces… ¿Empezamos?”

Kris sonrió de lado y alzó una ceja, de acuerdo, el chico era peculiar, un perdedor más, pero peculiar. Interesante.

“Empecemos.”

***

“Yah, hyung, debiste haber almorzado con nosotros.”

“Ya lo sé, ya lo sé, sólo que estaba-”

“Ocupado, ya lo sé.” Bromeó Chen a lo que reía un poco y arrugaba su nariz echándose en su cama estirando sus brazos. “Debiste haber visto a esa chica, era reaaaalmente bonita. Además ni se enojó cuando choqué mi bandeja contra la de ella y le derramé leche encima.”

“Oh qué interesante.” Bromeó MinSeok a lo que nuevamente se colocaba su camiseta encima y así empezaba a caminar hacia la propia cama, prendiendo la televisión y dejándola en volumen sumamente bajo, sólo para que éste fuera una buena música de fondo al estar el canal en MTV-Corea.

“Yaaah ¡MinSeok, no te burles! Si la veo la invitaré a salir.” Chen yacía sentado en el medio su cama con sus piernas cruzadas y dando ligeros saltitos sobre ella, hablando en un tonito sumamente infantil. MinSeok sólo le dirigió una mirada más y rodando los ojos negó con la cabeza.

“No me burlo, de hecho, creo que debes de invitarla a salir. Si te gusta hazlo.” Terminó por decir con su aguada voz mientras se levantaba de hombros y luego de ello llevaba sus manos hacia su bolsillo de pijama donde se encontraba su celular.

“Hyung, últimamente estás muy distraído con ese celular.”

“Ah, un segundo, JongDa-”

“¡CHEN!”

De: Número Desconocido
[Recibido 9:43 pm]
BaoZi <3 La pasé muy muy bien hoy, gracias por
almorzar conmigo, tenemos que repetirlo, ihh <3
Te quiero mucho~ㅋㅋㅋ Nos vemos después!!!
Descansa, BaoZi.

“¿Hola? ¿Tierra llamando a MinSeok?”

“¿Ah…?”

“Te quedaste sonriendo como idiota mirando esa pantalla por dos minutos o más.”

“A-Ah, ya… Lo sient-“

“¡¿CON QUIEN HABLAAAAAS?!”

“¡AAAAAAH!”

De un momento a otro, Chen se le había tirado encima a MinSeok, sí, había saltado desde su cama hasta la otra y había aterrizado sobre MinSeok a lo que reía divertidamente y buscaba quitarle el celular. Por otro lado, MinSeok hubiera terminado sumamente preocupado por aquella búsqueda de leer dicho mensaje si es que no hubiera sido porque no había guardado el número de LuHan, bueno, una preocupación menos. Los dos mejores amigos forcejearon, se dieron un par de golpes y al final, el más bajo terminó por empujarlo de la cama.

“Ah… en verdad eres más fuerte de lo que pareces, hyung.” Dijo un agitado Chen con una sonrisa enorme en sus labios.

“Tú no te quedas atrás.” Respondió MinSeok con su respiración también agitada a lo que se sentaba nuevamente en la cama y rodaba su teléfono hacia su bolsillo nuevamente.

“¡¿POR QUÉ NO ME DEJ-“ Y antes de que Chen terminara de gritar aquello entre risas, el mayor ya le había tirado su almohada a la cara.

“¡Vas a quemar todo el edificio con tu voz, hombre!” Exclamó MinSeok soltando una aguda carcajada mientras se abrazaba el estómago y dejaba que Chen se parase arrugando un poco su nariz  y (por supuesto), devolviéndole el almohadazo.

“Eres un malvado, Kim MinSeok.” Bromeó nuevamente y se sentó en su cama. “AAhh.. creo que es hora de ir a descansar ¿No lo crees~? Ha sido un laaargo día.”

“Lo sé.” Sentenció MinSeok apagando el televisor con el control remoto que había dejado en su mesita de noche a lo que dejaba que su mejor amigo apagara la luz de la lámpara que iluminaba la habitación.

“Descansa, hyung.”

“Y tú, ChenChen.”

“Oh, cierto, mañana iremos a desayunar juntos, así que no te salvas.”

“Ya ya~ Nos vemos, buenas noches Chen~”

“Duerme bien, hyung~”

Mensaje Nuevo a: Número Desconocido
[Enviado 9:57 pm]
Duerme bien, LuHan-ah. Gracias por el día,
lo disfruté mucho. Nos vemos~ -BaoZi <3

***

“No hay forma de que imprima esto…”

“Sólo hazlo, ChanYeolie, si no lo haces, todos creerán que eres uno de… ellos. Ya sabes, que te gusta que te den por detrás y esas mierdas.”

“SeHun, yo… no… no creo que sea correcto.”

“Hazlo, ChanYeolie, si no fuera porque te conozco de años… juraría que sientes algo por ese asqueroso homoual.”

“¡NO! ¡A-A mí me gustan las chicas!”

“Entonces demuéstramelo e imprímelo.”

“Y-Yo…”

“Ya, cualquier cosa, si los profesores se enteran diré que es mi culpa, no pueden tocarme ¿Recuerdas?”

“Hm…”

“ChanYeolie.”

“No estoy seguro…”

“Bien, tú eliges, sólo te digo, es momento de que aportes con el grupo.”

“Yo…”

“Nos vemos mañana, veré en los periódicos cuál fue tu decisión, Yeolie. Sólo recuerda que… nuestros padres son muy unidos y… como que… hay una mutua dependencia para el desarrollo de sus negocios ¿No? Toma la decisión correcta, Yeolie, nos vemos mañana.”

***

Martes 13.

Martes en la mañana.

Era un día soleado como de costumbre, fresco en la mañana, como siempre, totalmente tranquilo, sin apuros, y los chicos se dirigían a la cafetería ¿Por qué? Pues por el simple hecho de que ese día darían Waffles con chantillí o fudge de chocolate. Claro, SuHo siempre tenía que estar pendiente de los desayunos para invitarles a sus amigos, y era el simple hecho de que disfrutaba de comprarles esa clase de cosas.

“¡Buenos días~!” Exclamó a lo lejos BaekHyun caminando al lado de KyungSoo mientras todos los demás yacían en medio del pasillo principal de la universidad.

“Creímos que no llegarían.” Dijo YiXing con una sonrisa amplia.

“¡Siempre llegaré si hay waffles para comer, hum hum!” Exclamó el chico de cabellos color miel mientras se cruzaba de brazos y se acomodaba un poco mejor su gorra roja, BaekHyun llegaba a ser un tanto fan de las gorras