Capítulo 25 - Minseok (8)
I've been there.CAPÍTULO 25
Minseok despertó a las 9:30 de la noche, sin sol, sin luz, sin frio. Miró por la ventana, entraba la luz de los postes, su reflejo pálido chocaba con el buró de Luhan. Estaba tan callado que lo ponía tenso.
Apoyó una mano en el colchón y se enderezo para despabilarse, con quitarse el sueño los recuerdos regresaron. El parche, Luhan y su aroma agrio y corrosivo que gritaba pertenencia. Se pasó una mano por la cabeza.... ¿Qué debía hacer ahora?....
Nunca había tenido problemas para estar lejos de Kris, pero jamás había hecho algo como eso. El vínculo que compartían se empezaba a desvanecer y en unos cuantos meses no tendría nada más que una herida en el cuello con forma inidentificable, nadie sabría que se trata de una mordida....
Se levantó de la cama, la pata de Luhan rodeaba su cadera, pero logró moverla con el suficiente cuidado para no despertarlo. Tomó su ropa del suelo, incluidos los botones de su camisa....
Calzó sus zapatos y salió, haciendo el menor ruido posible. No tenía la fuerza para enfrentarse a Luhan y sus posibles preguntas, o silencio o rostro... solo no estaba en posición de tener una pelea con nadie....
Caminó calle abajo, hasta llegar a una parada de autobús donde se sentó bajo un pequeño toldo, a esperar la ruta que lo llevaría lejos de ahí...
Mientras subía al camión y pagaba la cuota, no dejaba de pensar en lo extraño que era no estar…aterrado. La idea de engañar a Kris...de realmente hacerlo, nunca le sentó bien, había muchas emociones en su estómago y todas lo revolvían. Todo termina en que Minseok tenía la capacidad de hacerlo, hasta el deseo algunas veces, pero no la fuerza para lidiar con las consecuencias.
Miró las casa pasar alrededor de su autobús, casi solo y en silencio, podía ver su reflejo en la ventanilla. No lucía diferente, seguía siendo el mismo hombre a finales de sus veintes, el cabello menos pulcro de lo normal, pero seguía siendo el mismo Minseok salió esa mañana de su casa....
Bajó del camión poco tiempo después y revisó alrededor, estaba en la estación del metro....
---
Llegó a casa de su hermano una hora después. Sin sentido de orientación y pésima capacidad para entender la intrincada enredadera del mapa del metro de Seúl de alguna forma estaba ahí, con frio en los brazos y un zumbido en los oídos.
-¡TIO!!! tio tio tio tiiooo!!!... Chanyeol le abrió la puerta antes de que tocara, debió haberlo reconocido cuando se paró fuera. Lucía feliz, muy grande aunque no habían pasado ni 7 días desde la última vez que lo vio.-
-Estás enorme, Yeollie...- comentó felizmente mientras cargaba al niño y lo llevaba dentro.
El cachorro apretó su camisa y nuca y se escondió en su cuello, Minseok no se dio cuenta de como Chanyeol respiró del parche. Habían nuevas marcas que Chanyeol era muy pequeño para reconocer, pero su tío olía diferente, no sabía que significaba, pero abrazó a Minseok y lo miró con cariño inocente.
Junmyeon estaba parado en la sala, viendo la interacción entre su hijo y su hermano, se acercó un paso para abrazar a su hyung, pero el aroma que llegó a su nariz lo detuvo. Se le quedo viendo, demasiado shockeado para hacer o decir nada. Minseok lo miró de regreso, pero bajó la vista rápidamente, ocultando sus emociones con un gesto para sentarse y pedirle a Chanyeol que se acomodara al lado de él.
-Hyung... - dijo Junmyeon con una exhalación. La verdad…no tenía más palabras.... Sabía que no daba la mejor imagen, pero ahí estaba su cachorro y no quería hablar de eso con el ahí.
-Pensé que dirías algo...- Junmyeon nunca dejó pasar una oportunidad para insinuarle que le atraía su enfermero, Luhan. Verlo tan callado cuando tenía una oportunidad de oro no solo era extraño, también incómodo...un poco atemorizante.-
-Y-yo.... No tengo... no se.....- no podía acomodar sus pensamientos.- creo.... que estoy feliz.... por ti...- estuvo distrayéndose viendo otras cosas, los pies de Chanyeol, los botones de su camisa, o los juguetes que dejaba tirados en el suelo, pero al terminar de hablar enderezo el cuerpo y puso los ojos en los de su hermano, sorprendido por las últimas palabras que el mismo dijo.
Le dio una nalgada suave a su cachorro.- ve a tu cuarto, Yeollie. Appa tiene que hablar con tu tio Mingsok...-
Chanyeol se levantó y obedeció, más por el aroma de los lobos (confundidos y asustados) que por un verdadero deseo de hacerle caso a sus padres.
Minseok no había dejado de verlo, Junmyeon lo sabía sin tener que voltearse,-
-¿Por qué estarías feliz por mi?....- preguntó seco y defensivo, casi enojado.-
El omega más joven se reacomodó en el cojín.- Tu sabes porque.... solo…me alegra que hayas sido Luhan hyung, él es una buena persona.- lo recordaba por sus sonrisas, su amabilidad y dedicación para que Junmyeon estuviera bien en ambos partos.- Desde que te emparejaste con Kris no has sido el mismo de antes, estas siempre tenso y a la defensiva. Todo empeora cuando Kris ge esta contigo.- puso las manos frente a él y jugó con sus dedos, su desesperación por tener algo que hacer además de ver a su hyung a la cara evidente- desde que mojaste a Luhan sabía que algo podría pasar...o eso esperaba-
Junmyeon tuvo el descaro de sonreír, Minseok sintió que podría golpearlo en la cara, pero se contuvo porque había un cachorro en la habitación aledaña. Apretó los puños y tomó aire.
-Me siento feliz por ti, hyung... Al principio será difícil no tener la marca de Kris ge...- recordaba no tener manada, un tipo de sufrimiento parecido a estar perdido; desesperación y estrés, más de lo que alguien pueda imaginar, ojalá no fuera así para su hyung.- pero eres fuerte y podrás superarlo...- tomó la mano de su hermano, a unos cuantos centímetros de la suya.- tal vez madre te deje sin manada... Debes hablarlo con Luhan, si te muerde los efectos pasarán más rápido...-
Minseok no se contuvo un segundo más, separó la mano violentamente. Sus pupilas enfocaban a Junmyeon, pero temblaban, estaba enfermo, agobiado por el estrés. La ira se acumulaba y hervía, llegaría a la superficie y Minseok ya no podía contenerla.
-¡¿De qué demonios hablas?!!...- dijo con un gruñido, la garganta de lobo a medio hacer.- ¿Piensas que voy a dejar a Kris?!!... - la realidad lo golpeo en la cara.- Tu esperabas esto... ¿verdad? Tu querías que algo pasara entre el enfermero y yo...-
-Lo estás entendiendo mal, hyun...-
-¡¿Entendiendo mal??! ¡Mi propio hermano quería ver como echaba todo a perder!! ¡MI VIDA SE ACABÓ, JUNMYEON!!-
Junmyeon se hizo hacia atrás mientras Minseok se inclinaba hacia él, sus pupilas habían cambiado de color, si lo atacaba tendría que convertirse en lobo y...!!!...
-¡No tienes la menor idea de...!- las palabras quedaron atoradas en su garganta, Minseok finalmente contempló todo lo que estaba en juego.- Si lo descubre, Kris me va a dejar y Madre, ¡oh dios... MALDICIÓN!!!... ¡Todo se fue a la mierda, Junmyeon!!! ¡TODO!...- se levantó y miró sus manos abiertas y temblorosas. Todo se escapaba de entre sus dedos y Minseok tenía que encontrar la fuerza para evitarlo.
-Hyung, no es así.... luce así pero...-
-¡Cállate!!...- Pasó las manos por su cara, en un intento de calmar su gesto de repudio.- ¡Tu pudiste decir algo, pudiste advertirme o... Aconsejarme como se supone hacen los hermanos. ¿¡Esto te divierte, Junmyeon??! ¿¿Te divierte ver como tu hermano toma la peor decisión de su vida? ¡¡¡¿Querías que fuera tan patético COMO TU?!!!...-
Junmyeon estaba frente a él en un segundo, ambas manos arriba pero solo una con la velocidad para romper el pómulo de Minseok, un chasquido que el omega escuchó en su cabeza y que aturdió todos sus demás sentidos por una fracción de segundo. Casi cae, pero la pared lo detuvo, tocó la piel herida y miró sus dedos ensangrentados... sanaría pronto, estaba más aturdido por Junmyeon golpeándolo en la cara por primera vez.-
Escupió sangre y saliva en el piso, sin quitar los ojos de encima a su hermano menor.- Todo esto es tu culpa, nunca debí acercarme a ti de nuevo....-
Chanyeol comenzó a llorar por el aroma de los lobos, pero Junmyeon no se movió para calmarlo, siguió mirando a su hermano. Minseok giró y salió, bajó corriendo por las escaleras hasta el primer piso, su mente estaba en enfrentamiento masivo y no vio a Jongdae antes de chocar contra el.
El beta llegaba del trabajo y tenía su maletín. Jongdae observó a Minseok, le tomó solo una pequeña olfateada para saber la mitad de lo que tenía a Minseok tan asustado. Olía a apareamiento, el aroma de sal y musgo hablaba del alfa enfermero que Jongdae también conocía... y lo demás, la frustración e ira....
-Hyuung…!! ¿Estás bien?..-
Iba a tomarlo de los hombros, pero Minseok lo empujó hacia atrás, el pesado maletín de Jongdae escapo de sus manos y gran parte de sus papeles terminaron en el pavimento.
-¡¡¿Cuál es tu problema?!..- gritó Jongdae mientras se sostenía el hombro, Minseok había enterrado el puño debajo del hueso, donde el dolor se expandía como la sangre en sus venas a través de su brazo.-
-¡Ustedes son mi problema!!.-
Era tan claro ahora, le costaba creer no haberse dado cuenta antes. Todo empezó a desmoronarse cuando Junmyeon entró a su vida y había sido muy tonto, enceguecido por cachorros y pláticas, como para ver. Junmyeon ERA la causa de sus problemas, el y Jongdae....
El beta se enderezó, aún con la mano en el hombro lastimado, su gesto de mirada fija revisaba a Minseok, buscando algo de... lógica, en sus palabras. Entrecerró los ojos y bajó la mano, apenas un instante, un solo segundo de calma antes de que Jongdae tomara a Minseok del cuello de la camisa con la fuerza suficiente para ponerlo en puntas de pie.
-¿¡Crees que no me doy cuenta, ah??!! ¡Apestas a Luhan por todos lados, el parche se te ve bajo la camisa!- tomó aire tan violentamente que Minseok escuchó como chocaba dentro de los pulmones de Jongdae.- ¡¿¿Ahora que, Minseok?!!. Vienes a nuestra casa día tras día con tus estúpidos problemas y solo le complicas la vida a mi pareja. Junmyeon no tuvo nada que ver con que te acostaras con Luhan o que estés casado con el tal Kris. ¿Tienes la más mínima idea de lo feliz que ha sido desde que regresaste??..-
Minseok tomó las manos de Jongdae, en un intento de quitárselo de encima, pero Jongdae no retrocedió.- ¡El lo sabia y no dijo nada!!... ¿Cómo puede llamarse mi hermano...?...- no quería ser consciente de las lágrimas en su cara, pero ahí estaban, y no sabía a qué se debían...-
-¡Todos lo sabían, Minseok!!! ¡¡¡TODOS!!! ¡Todos saben que no te casaste por gusto! Tu madre te vendió como un bonito regalo y esa es la verdad. Junmyeon no ha hecho más que ayudarte en todo lo que puede, pero ¿Tu que has hecho por el? ¡Mandaste a esa mujer a nuestro departamento!! ¡Dejaste de hablarle por 3 años aun cuando sabías que se había quedado sin manada!! ¡¡Y NO TE HAS DISCULPADO NI UNA SOLA VEZ!!...-
Entonces la espalda del omega impactó contra la pared, luego su nuca y Minseok gritó en silencio cuando sus dientes y ojos resintieron el impacto. Las hormonas de Jongdae decían el... desprecio que sentía por Minseok y el omega sentía miedo sin poder evitarlo.... Jongdae se acercó a su rostro para verlo de cerca, reducir a un omega a un manojo de nervios no lo hacía sentir bien, Minseok y Junmyeon eran hermanos... era casi como hacerle lo mismo a su omega.
-No vengas aquí buscando culpables para tus estupideces, si metiste la pata aprende a sacarla, y no te atrevas a regresar si no es para disculparte por ser el hermano más mierda que haya visto. Tu y tu madre son....- bufó, pero compuso una sonrisa que no alcanzó sus ojos. Todo era absurdo, porque no habían palabras para describirlos.- ¡Te dejé entrar, los deje solos, les di espacio para que se pusieran al corriente!, pero no más, así que grábalo en tu cabeza, Minseok. Estás solo a partir de ahora...- tal vez así comprendería, aunque fuera un poco, lo difícil que fue para Junmyeon pasar esos años sin su familia, porque por mucho que Jongdae estuviera ahí, un lobo joven resiente la pérdida de su manada, en especial con la llegada del primer cachorro.-
Lo soltaron y Minseok resbaló hasta que sus rodillas tocaron el suelo. Jongdae se acomodó la ropa y metió los papeles en su maletín. Subió las escaleras tan rápido como pudo, su lobo no estaba tranquilo y podía sentir a su pequeña manada llamándolo.
Minseok tardó unos instantes en levantarse, para cuando lo hizo sus rodillas dolían y le costó recuperar la fuerza para enderezarse. Tomó aire mientras miraba la calle con aprehensión...
Estaba muy confundido, no sabía que sentir, que pensar, a donde ir o en quien confiar…Estaba solo, como dijo Jongdae...
Observó alrededor y decidió que, al menos, no podía seguir parado ahí. Tenía que moverse.
---
Esperó hasta que el metro volviera a operar a las 5 de la mañana. Estuvo sentado fuera de la estación, con frio en todo el cuerpo, aún usaba el ridículo short deportivo, en general se veía mal...
Bajó al subterráneo y pagó en efectivo con los wons que le quedaban, cuando estuvo en el asiento del metro espero otros 10 minutos a que diera la hora del primer viaje del día. Con la cabeza apoyada en la ventana y la mirada clavada en el techo del vagón. Minseok finalmente dejo que el cansancio lo alcanzara.
Para Minseok el viaje fue como un largo sueño, placentero y silencioso, el único sonido en su cabeza era el que hacía el metro mientras avanzaba. Durante el transcurro se quitó el parche del cuello y espero a que la esencia de la mordida de Kris lo cubriera de nuevo...
Una pequeña sensación de calma llegó con el aroma, si aún la tenía todo estaría bien, su vida estaría ahí, regresaría a la vieja calma que conocía, sin consecuencias, sin Junmyeon, sin Jongdae (sin Chanyeol) y sin Luhan. Como debía ser y como había sido por años.
Pensó eso, pero Minseok se quedó fuera de la estación del metro por 4 horas, los choferes que recorrían sus rutas lo miraban raro y hasta se acomodaban en círculo para hablar de él y señalarlo con la mano “discretamente”, Minseok escuchó la idea de llamar a la policía para que viniera “por el omega perdido o malo de la cabeza”.
Ambas descripciones lo resumían bastante bien.
----
Llegó a su casa cerca de las 12, el calor quemaba su nuca, mojaba su espalda y pegaba la camisa a su cuerpo, iba tan lento como podía pero eventualmente visualizó el perfil de su casa a la distancia....
Minseok no prolongaba lo inevitable, no huía del conflicto; enfrentaba los problemas como venían y salía bien parado, Madre lo preparó para ello, mucho más de lo que Junmyeon habría tenido que pasar, porque Minseok era el primogénito y llegó a un mundo donde su crianza eran demasiadas pruebas e incontables errores... pero lo hicieron el omega que era y no iba a huir más...
Cerró los ojos unos segundos para calmarse y retomar el ritmo de su respiración, no entró hasta que las manos dejaron de temblarle.
Abrió la puerta siendo extra lento y cuidadoso. Pero no sirvió de nada su mesura, Kris estaba sentado en la entrada, los pies apoyados en el camino de piedra que daba a su casa. Miraba al frente con un gesto que Minseok nunca le había visto.
Cerró la puerta tras él y no se atrevió a recorrer el tramo que los separaba. Minseok no iba a pensar en Kris como lo suficientemente tonto para no notar el aroma de otro alfa en él, tan penetrante que no podía deberse a otra cosa además de o.
Kris no le apartó la vista de encima, lucía pensativo con los codos apoyados en las rodillas, las manos unidas frente a su boca. Detrás de él, casi escondida por la puerta de vidrio y la falta de sol, estaba la cesta con la ropa que madre había traído.
-Minseok...- pronunció Kris con voz ronca, mientras el omega recordaba porque no había querido regresar a casa, porque quedarse con Luhan parecía una excelente idea.
Kris se levantó y caminó hasta la mitad del sendero de piedra, Minseok no dio un solo paso al frente, incapaz de ver al alfa a la cara, no sabía que decir o como reaccionar, estaba solo y desorientado entre tantas emociones y respuestas que podían ser la correcta, jugando con el cómo una hoja de papel lanzada violentamente por el aire de una tormenta.
-Está bien... No estoy enojado...-
Sus ojos se abrieron a toda su capacidad.- ¿Qué...?...- preguntó, porque no había otra oración que tuviera más sentido.-
-Dije que no estoy enojado... - miró el piso, no sabía si sería capaz de sostenerle la mirada cuando lo dijera.- lo sabía desde hace mucho...-
Kris y sus largas piernas llegaron a Minseok en tres pasos y sus largos brazos lo atraparon en un abrazo donde se sentía seguro, pero ajeno..... Percibía la mano de Kris, caliente y grande, acariciando su cabeza mientras lo acomodaba discretamente sobre su pecho.- No estoy enojado, yo.... solo.... solo dejémoslo atrás... -
Las palabras quemaban dejando una marca dentro de Minseok, Kris lo sabía desde hace mucho.... aún con toda su angustia e intentos de separar a Luhan del resto de su vida, ¿Cómo había podido descubrirlo?...
Kris lo separó para verlo a la cara, fue en su gesto que Minseok se dio cuenta que había dicho en voz alta sus dudas. Kris no respondió, bajó la vista y volvió a abrazarlo, se escondió en el cuello de Minseok, volviéndose pequeño y endeble, un débil castillo de arena.
No iba a decirle, porque Kris no quería remembrar los momentos cuando olía en su Pareja el aroma de otro alfa, diferente y peligroso porque solo era un alfa. Minseok trabaja en una oficina y trae de regreso cientos de aromas diferentes que dan como resultado un solo tono, un lienzo de un solo color que Kris podía ignorar, pero este alfa es una explosión de aroma y siempre es el mismo, resaltando sobre los demás, un rojo intenso en un mar de azul.
En su celo, Minseok había dicho su nombre tantas veces entre gemidos...
Kris, sin desearlo, enterró los dedos en la espalda de su pareja y apretó los párpados queriendo borrar la voz de Minseok de sus recuerdos.
-Haré cualquier cosa para que seas feliz, Minseok....-
Faltaba tanto aire dentro del omega que comenzó a ver puntos negros, cada vez más amplios y largos, la fuerza se le fue de las piernas, pero Kris lo sostuvo. Minseok estaba fatigado, deshecho como un trozo de tela roto a la mitad por la mera fuerza de dos puños desgarrando los hilos.
Cerró los ojos para no llorar, pero fue inútil, lágrimas copiosas recorrieron sus mejillas por minutos. Kris no se movió, lo sostuvo con todo su cuerpo mientras decía palabras de aliento en su oído y lo arrullaba lentamente de un lado al otro.
Había tanto cariño en el aire y Minseok lo sentía atrapado en su garganta, tapando sus pulmones. Abrasivo y hermoso, pero Minseok se estaba ahogando entre sus lágrimas y Kris, pensó por unos instantes que se desmayaría, no lo hizo, logró sostenerse del brazo del alfa y enderezarse con un tembloroso empuje.
-No....- dijo Minseok, mirando el piso pero sin enfocar nada.- ya no puedo, Kris.... estoy cansado...- un segundo más, solo un instante más y enloquecería. - ya no puedo...-
Kris estaba confundido.- Entremos a la casa para que descanses entonces...-
-No... no puedo.... Estoy cansado... no puedo...- no importaba si lo que decía tenía sentido, decía lo que llegaba a su cabeza de la forma en que llegaba. La verdad sin filtro saliendo de Minseok.- no puedo, ya no puedo...-
-Minseok, no te entiendo.- Kris lo tomó de los hombros, apoyándolo de regreso en ambos pies.- entremos a la casa...-
-¡No... no!... no más, por favor.- dio un paso atrás, zafándose del abrazo.- ya no más, no puedo entrar ahí, no me obligues...-
-Ok... no te preocupes, está bien....-
Kris lo detuvo nuevamente de los hombros, pero esta vez no intentó regresarlo a la casa, se quedó con el en medio del camino de piedra y poco a poco llevó a Minseok de vuelta al suelo, hasta que terminaron en cuclillas, semi apoyados uno sobre el otro.
-Ya no puedo, Yifan, no puedo...-
Kris se puso rígido. Minseok solo decía su nombre real cuando hablaban de algo importante o quería tener una plática seria.... Minseok no pensó bien en eso antes de abrir la boca...
-¿Qué tienes?... ¿Qué puedo hacer?...-
Minseok clavó los ojos en los del alfa y se perdió en ellos unos segundos, encontrando las respuestas que buscaba, olvidando las que creía saber. Tomó la mano de Yifan entre las suyas y apretó suavemente, esperando que lo que dijera les trajera paz.-
-Quiero quitarme la marca, Yifan...- dijo Minseok con desesperación y al mismo tiempo esperanza, Kris solo pudo abrir los ojos y separar los labios para pedir que no dijera eso, que no bromeara, no tenía gracia... el momento no era oportuno….- Ya no puedo ser tu pareja, no puedo con Madre... no puedo con todo esto. Ya no puedo más...-
Se sentía.... increíble finalmente decirlo, aunque se arrepintiera en unas horas o mañana, no importaba, solo decirlo destapó el filtro emocional del omega. Minseok se tornó más ligero que el aire y ya no importaba si Kris estaba ahí para sostenerlo. Porque Minseok respiró largamente, rodeado del eco de sus palabras....
-Minseok...-
El omega no levantó la cabeza. Tomó la mano de Kris y miró sus dedos entrelazados sin la fuerza del agarre. No recordaba la última vez que tomó su mano, aunque eran pareja, esos toques suaves y fortuitos nunca se dieron.- No te merezco, nunca lo hice...-
Tenía tantos arrepentimientos y estaba asqueado de la persona que había resultado ser bajo esas capaz de normalidad y logros académicos. Pero ahora era libre y respiraba....
Había mentido y engañado, ocultó tantas cosas y lo hizo con una sonrisa y una imagen segura. Ya no se reconocía y el miedo a perderse a si mismo finalmente ganó.
Luego de largos minutos, Kris finalmente habló.- Por favor no me hagas esto...- el omega no reunió el coraje para verlo, sabía que estaba llorando por el tono de su voz.- te amo. Por favor no digas eso....-
-Estuve con otro alfa, Kris... Y lo volvería a hacer...- había sido la peor decisión, lo más estúpido que pudo hacer y lo haría de nuevo porque le trajo una dicha que su moral no le había dejado reconocer.- Vete, Kris, tan lejos de aquí como puedas...- y que no regresara, porque Minseok era lo peor que pudo pasarle en la vida... y su único tormento era el tiempo que le tomó darse cuenta.-
En un parpadeo las manos de Kris apretaban el cuello de la camisa de Minseok, el enfocó a Kris finalmente, lloraba del coraje y la decepción... los nudillos blancos hablaban de cuanto lo odiaba en ese instante. Minseok no titubeó cuando el aroma a alfa enfurecido llegó a su nariz, su cuerpo de omega tembló de pánico, pero en el exterior el no hizo nada.
-Kris... por favor...- su fuerza se iba, no podría mantener la máscara de seguridad y fuerza por más tiempo, solo le quedaba rogar en voz baja...-
El labio de Kris tembló, su rostro normalmente calmo era una mezcla de colores pasando del rojo al naranja, la punta de su nariz, los párpados y pómulos rojos. Miró a otro lado un segundo y Minseok sintió las manos en su camisa titubear por un instante.
-Yo habría dado todo por ti….- dijo su mejor amigo, con un nudo en la garganta.
Minseok lo sabía, más allá del fondo de si, su lobo sabía. Y ahora estaba en silencio, ni siquiera el instinto ayudándolo a salir de esa situación. No soportó más, sus ojos se calentaron y llenaron de lágrimas, si giraba la mirada o parpadeaba estas caerían por sus mejillas, se aguantó el deseo de hacer cualquier cosa aunque las lágrimas yacían pesadas sobre su párpado inferior.
Las sostuvo tanto como pudo pero estas cayeron, Minseok rompió en llanto sin mirar a Kris, queriendo decir que lo sentía, porque lo sentía tanto, quemaba la vergüenza y la decepción de si mismo, saber que era incapaz de amarlo como Kris se merecía… eso que intentaban construir cayó sobre Minseok. Todo había sido arruinado gracias a él.
Kris lo soltó y vio a Minseok perder el equilibrio brevemente antes de caer de rodillas. Limpió sus lágrimas con la manga de su camisa y caminó a la casa que debieron haber compartido por los próximos años. No tomó ropa, solo sus llaves y cartera de la mesa, su maletín y su cepillo de dientes y salió de ahí, pasando de largo a Minseok que seguía en el piso, exactamente donde había caído.
El alfa tocó el porte de las puertas que daban a la calle y se detuvo, esperando escuchar un “quédate”, pasaron 30 segundos y abrió la puerta y salió, consciente de que jamás volvería a esa casa ni al lado de Minseok.
-----
Solo quiero decir que me gustó mucho escribir este capítulo, pero fue muy dificil editarlo.
Gracias por leer y tomarse el tiempo de dejar un comentario, se que no es una lectura ligera o siquiera feliz, por eso les doy las gracias por seguir aqui . ^^
Comments