ㅡNo fuiste capaz de decirme nada ¿Ni siquiera el que te ibas?

Zi Tao guardaba su compostura. La depresión, aquella en la que cayó al saber que Kris se había ido para dejar el grupo, le había cambiado casi por completo. Inexpresivo y reservado, con un preciso control de sus sentimientos.

ㅡNo pensé, solo actúe ㅡcontestó Kris, sin voltear a verlo- pensé que lo entenderías.

ㅡ¿Creíste que yo te entendería cuando ni siquiera tu pensaste en mí? ㅡmantuvo su tono a raya, viendo hacía el frente, derecho cual soldadoㅡ Eres un traidor.

ㅡ ¿Traidor? ¿Es todo lo que puedes decirme? ㅡse giró para mirar fijamente y notablemente molesto al menorㅡ Eres un hipócrita, mírate en donde estás, tu también dejaste el grupo.

ㅡNo es el grupo, era yoㅡTao aguantó las pequeñas lágrimas que le amenazaban con salir de sus tristes ojos color negro­ㅡ Me traicionaste a mí y yo te eh pedido disculpas de manera pública ¿Y aún te atreves a seguir molesto conmigo?

ㅡNo lo entiendes Tao.

ㅡEntiendo que para ti la culpa es mía y creo que así seráㅡmurmuró dándose la vuelta, no sin antes dedicarle una mirada de reproche al rubio, tomo el pomo de la puerta dispuesto a girarlo pero la profunda voz contraria lo detuvo.

ㅡNuestro amor era a prueba de balas... ㅡDijo en un tono calmado, más sin embargo se torno seco al final de la oración, como si las palabras se estuviesen degradando de poco a poco.

El ambiente después de esas palabras se volvió aún más pesado, tanto que Tao comenzó a sentirse asfixiado, abriendo rápidamente la puerta para salir corriendo. Yi Fan simplemente le vio ir, no queriendo dejarlo, pero era difícil, Tao era una persona difícil, que difícilmente trataba de