-Bueno, es que ella…- Acaso Soyeon se había burlado de ella en su cara y ni siquiera lo había notado – ¡Demonios!- Gruño golpeando el escritorio con su puño.

-Pero Hwang la primera vez que nos vimos estaba fuera de mi cuarto en el toque de queda- Le dijo alzando una ceja como diciendo “Hello, razona” –Además te advertí de los cambios de guardia

-Sí, bueno… es que no pensé que tu… Hay, ¡soy una tonta!- se regañó la castaña tomando el lápiz que había estado usando en el ensayo.

-Además llegue tarde a la reunión con la presidenta… No lo notaste llegue veinte minutos tarde- agrego sonriendo, mientras apoyaba su cabeza en sus manos.

-Soyeon dijo que…- Ok se había molestado, parece que todo el mundo se había burlado de ella, y ni siquiera lo había notado –Hija de puta.

Taeyeon comenzó a reír, mientras se paraba y se recostaba en la cama de Tiffany.

Pero que le pasa, no comprende que me siento engañada por todo el mundo.

Solo falta que de mi armario salga un camarógrafo y me diga que soy parte de un reality show.

Un camarógrafo… quizás fuera una buena opción podría ver a un chico, o por lo menos a un hombre diferente del jardinero.

-Tranquila Hwang…- Comenzó a decir la rubia que ahora estaba recostada de lado, con la cabeza afirmada en uno de sus brazos y una pierna flexionada.

Era una posición bastante informal, y conseguía que su cabello se viera más revuelto de lo normal.

Si debía admitir que era una chica hermosa, con unos hermosos ojos color ónice…

Un momento… cabello rubio… ojos lindos… atleta…

Ok no debía gritar, se tenía que calmar.

Imaginar a tu chico perfecto con las mismas características que la chica que odias no era algo tan raro, es decir no cuando la chica era guapa.

Muy bien si era raro…

Quizás el ambiente hormonalmente contaminado de feromonas la estaba afectando.

Ahora sí que estaba convencida que necesitaba un muchacho cerca, sino terminaría mal.

-¡Ey! Vuelve a tierra astronauta… Concéntrate- Le decía la rubia haciendo chasquear sus dedos –Cielos, creo que tienes un grave problema de déficit atencional- Bromeo la rubia.

-¡Eso no es asunto tuyo!- Chillo Tiffany cruzándose de brazos –Fuera de eso, si eres una chica problemas ¿Por qué eres una opekun?- le pregunto intrigada.

Es decir sabia ¿Quien en su sano juicio pone a una chica problema a cuidar a otra chica problema?

-Es una larga historia…- Dijo suspirando Taeyeon –Pero se resume a que ser una Opekun no es un honor… es una especie de castigo manipulador…

-Explícame- Exigió Tiffany.

-Veras, Si tienes malas calificaciones te asignaran a otra persona que también las tenga, a modo que ambas se esfuercen por mejorarlas- Comenzó.

-Eso es ridículo- Afirmo la castaña mirándola con más atención –Seria todo lo contrario, no estudiarían

-Ahí es donde está tu error… se asignan a dos perezosas para estudiar, pero se les da el ultimátum. Si no suben sus clasificaciones la presidenta tomara cartas en el asunto- Sonrío –Y créeme eso es más que suficiente para que comiencen a estudiar como desesperadas

-Pero porque no una perezosa con una de buenas calificaciones

-Por qué polos opuestos se atraen- Sonrío –existen dos posibilidades, una que la perezosa realmente estudie, y salga adelante con su Opekun. O que la que es estud